Casi 3000 palabras de capítulo, espero lo disfruten :3

Capítulo dedicado a:

@thequeen914

El reloj marcaba las seis en punto cuando Louis entró sonriente a la mansión. Saludó a Marie antes de pedirle que bajara a Harry.

Harry mientras tanto se encontraba en su habitación, hacía más de diez minutos que había terminado de arreglarse, aunque salió del baño hace veinte minutos y es que había pasado más de cinco minutos observándose al espejo con aquella braga rosa pastel en su cuerpo.

Le gustaba, fue muy raro al principio, pero después del minuto tres observándose, se dio cuenta de que no era tan malo, podía acostumbrarse a la sensación de dos nubes acariciando sus piernas a cada paso que daba, aquel material del que estaban hecho aquellas bragas era simplemente el cielo de sus muslos.

El conjunto que Louis eligió era bastante sencillo y cómodo, así que dedujo que no iban a ningún lugar muy lujoso.

—Harry, el señor Tomlinson ya ha llegado y quiere que bajes — Habló Marie detrás de la puerta cerrada después de dar unos golpecitos en la misma. Harry suspiró pesado tratando de calmarse.

—Ya bajo — Dicho esto dio un último vistazo a su vestimenta para asegurarse que todo estaba bien.

Caminó por los interminables pasillos de la mansión hasta bajar al primer piso, ahí lo esperaba Louis con la típica sonrisa triunfante que lograba desesperar a Harry.

—Bonito, bonito bebé — Fue lo primero que dijo Louis al ver a Harry bajar por las escaleras. Harry lo único que pido hacer fue retirar la mirada.

Louis caminó hasta Harry, el menor tuvo ganas de alejarse de aquel hombre, pero ya había tenido suficiente por ese día con el pequeño detalle de la ropa.

—¿Nos vamos? — Preguntó Harry fastidiado de la sonrisa de Louis.

Louis paseaba sus ojos por todo el cuerpo del mismo, le encantaron esos pantalones desde la primera vez que Louis los vio, y se encargó de pedirle a Taylor miles de ellos.

—Tranquilo, Gatito — Bromeó Louis tomando la cintura de Harry, definitivamente estaba enamorado de las pequeñas curvas del menor —Vámonos— Harry se soltó del agarre de Louis para caminar a la puerta, haciendo reír al mayor, le encantaba educar a Harry, era tan bueno para él verlo destruido.

Louis se despidió de Marie antes de salir por el mismo lugar que Harry.

Esa iba a ser una buena noche.

...

El camino a casa de Liam fue de al menos una hora, una hora en la que Harry pensó las mil maneras en las cuales podía escapar.

Pero sinceramente ninguna era lo verdaderamente buena como para arriesgarse a hacerla.

Había pensado lanzarse de la camioneta, pero era obvio que antes de que pudiera reaccionar y comenzar a correr, Louis ya lo tendría de vuelta.

Su vida seguiría siendo este infierno.

Una vez dentro del condominio Payne, Louis y Harry bajaron, la estructura era muy parecida a la de Louis solo que Liam tenía árboles en el jardín, Louis tomó a Harry de la cintura para guiarlo a la casa de los Payne.

Esto le recordaba tanto al día que llegó a la mansión Tomlinson.

Apenas llegaron a la puerta Liam ya los esperaba ahí con una sonrisa cómplice a Louis.

—¡Hey, Tommo! — Saludó Liam eufórico abrazando a su mejor amigo.

—¡Hey, Payno! — Respondió Louis de la misma manera antes de que ambos se soltaran a reír. —Gracias por invitarnos, por cierto, él es Harry, Harry él es Liam Payne, mi socio— Louis señaló al menor con la cabeza y Liam río.

—Mucho gusto, Harry — Y Harry solo asintió —Pasen, Niall y Zayn están impacientes de conocerte—

La casa de los Payne era igual o más grande que la de Louis, el pasillo principal estaba decorado con fotografías y retratos de Liam y otros dos chicos que suponía eran los que habían mencionado.

Apenas llegamos, vi a un chico rubio bastante delgado, dos enormes orbes azules cielo adornaban su rostro, ese chico trataba de consolar a otro Moreno, que lloraba desconsolado, ambos vestían un pequeño y ajustado pantalón corto rosa, que dudaba entre su era eso o un bóxer, aquello era extremadamente corto; y un suéter de lana blanca.

Los dos chicos notaron nuestra presencia ahí, al Moreno parece que no le importábamos en lo absoluto, se tiró al suelo, justo al lado de Liam.

—¡Daddy! ¡Por favor perdóname! — Sollozó el Moreno en la pierna de Liam —No me ignores más Daddy, por favor — Liam tenía la misma expresión que Louis cada vez que daba un castigo, diversión.

—Daddy te perdona, Cariño, ya no te ignoraré, pero espero que esto sirva de lección— El Moreno asintió frenéticamente antes de que Liam lo rodeará con sus brazos. —Ahora saluda los invitados, Zayn— No fue hasta que despegue me mirada de ellos dos cuando me di cuenta de que el chico rubio, que antes consolaba al tal Zayn, se encontraba a un lado de Louis, tampoco había notado cuando este dejo de tomar mi cintura, ahora tomaba la de aquel chico rubio.

¿Qué es está punzada en mi estómago?

—Hola, Daddy Louis — saludó el Moreno mientras le sonreía tiernamente al mayor.

—Hola, pequeño Zayne— Louis sonrió acariciando el cabello del antes mencionado —Ya veo que no te has estado portando muy bien —Zayn se sonrojó antes de esconder su rostro en el cuello de Louis, rodeándolo con sus delicados brazos y Louis correspondió tomándolo de la cintura. —Si sigues así tendré que venir yo a castigarte, y sabes que no tendré tanta compasión como Liam —Zayn asintió. ¿Por qué aquello sonaba ten cierto?

¿Y por qué la punzada sigue clavada en mi estómago?

—Bueno niños, él es Harry, mi nueva...compañía en casa — Habló Louis a ambos chicos mientras me señalaba —Harry, ellos son Niall—Señaló al rubio —Y él es Zayn —Dijo señalando al moreno. —Te quedaras con ellos algunas horas mientras Liam y yo trabajamos.

Fruncí el ceño y asentí.

Pronto Liam y Louis abandonaron la sala y solo nosotros tres quedamos en ella.

Zayn y Niall se sentaron en el suelo, a un lado de la pequeña mesa de centro.

—Zayn y yo estábamos pintándonos las uñas ¿Quieres? —Habló el pequeño chico rubio.

¿Qué tipo de chicos son estos?

Tan inocentes y a la vez no, obedientes, tiernos y femeninos.

¿Qué clase de gustos tiene esta gente?

—¿Por qué son tan raros? — y aunque quise evitarlo, las palabras corrieron de mis labios.

—¿Qué? —Contestó Zayn.

—Sí, ustedes son muy raros, son tan aniñados y femeninos, usan ropa femenina, son muy sumisos y dóciles —Suspiré ante su mirada confundida —¿No les parece raro llamar a un hombre "Daddy"? —Ellos se encogieron de hombros — Van de un lado al otro como niños, ruegan atención y cariño de un hombre que no vale la pena.

Estaba perdiendo la paciencia.

—¡Son como dos muñequitas de porcelana que usa para follar! ¡Y ustedes van y le hacen caso! ¡Eso hombre al que ustedes llaman "Daddy" los humilla! — Me acerque a ambos chicos, que me observaban totalmente sorprendidos — ¡SON COMO UN PAR DE PROSTITUTAS!

Dos lágrimas corrieron por el rostro de Niall, dos lagrimas que comenzaron una tras otra un llanto.

—Harry — Un escalofrío recorrió toda mi columna al escuchar la Voz enojada de Louis a mí espaldas, aun así, me giré a enfrentarlo —Te lo dije muy claro, Harry, si no te comportabas te castigaría, no te puedo dejar solo por cinco minutos porque ya estás metiéndote en problemas — Poco a poco él fue acercándose a mí, mis músculos se tensaron por completos, fue demasiado tarde para cuando quise reaccionar.

Louis tomó mi cabello en su puño y lo jaló mientras comenzaba a caminar.

Esto me recordaba tanto al cuarto negro, ¿Liam también tendría uno aquí? ¿Louis volvería a meterme a algo así?

—¡Suéltame!¡Por favor! ¡Me portaré bien, Daddy! — pronto estábamos en una habitación totalmente alejada de la principal, cuando soltó mi cabello ya me encontraba doblado sobre su regazo.

—Esta vez no tengo tiempo para los jueguitos, Harry, te daré quince azotes y quiero que te quedes totalmente callado, si haces algún ruido volveremos a empezar ¿Entendido? — No me dio tiempo de prepararme cuando el primer azote llegó, presione fuertemente los labios evitando cualquier sonido que quisiera salir de ellos.

A lo largo de todo el castigo me di cuenta que a Louis le gusta jugar conmigo, siempre me dejaba tocar el final del castigo, rozarlo, pero en el azote número trece todo se iba a la mierda.

Ya era la tercera vez que repetía el castigo.

—Harry, Contigo esto es literalmente imposible, así que tu castigo será otro — pude escuchar la maldad en sus palabras antes de algunos movimientos bruscos, de repente un tacto húmedo y frío se coló por entre mis mejillas, tanteando un poco mi entrada.

¿Qué diablos estaba pasando?

Esa sensación de paseo un poco más entre mis mejillas y pronto sentí al pequeño artificio hacerse espacio en mi entrada.

Nunca había tenido nada ahí, pero se sentía totalmente incómodo.

—¿Qué está ha-haciendo? — tartamudeé sintiendo esa cosa moverse en mi interior, ¿Cómo aquello lograba hacerme más sensible? Los dedos de mis pies se contrajeron, aquello era una sensación tan enferma y placentera.

Mi miembro sintió los tirones de placer con cada movimiento que aquello daba en mi interior, poco a poco comenzó a despertar y el estar rozando con las piernas de Louis no me ayudaba de nada.

Sentí las pequeñas bragas rosas subir por mis piernas al igual que el pantalón para acomodarse en su lugar.

—Este es tu castigo, Harry, recuerda que no puedes terminar hasta que yo te de permiso— Me ayudó a levantarme y al igual que la primera vez los muslos me ardían de tantos azotes, y con cada movimiento brusco el artefacto dentro de mí lo hacía de la misma manera —Ahora vas a ir ahí afuera, te disculparas con Niall y listo — Louis sonrió antes de palmear dos veces mi entrada por encima del pantalón.

Él sabía lo que me causaba.

Ambos salimos de la habitación después de eso, Liam consolaba a Niall y Zayn, acurrucándolos, Louis tenía razón, Liam es más dócil que él.

Trataba de no soltar ningún gemido mientras caminaba hasta ellos.

—Lo siento — Fue los único que salió de mis labios antes de que una vibración invadiera todo mi cuerpo, comenzando desde mi entrada, lo que me hizo caer de rodillas y antes de que alguien preguntara algo la vibración y le placer de esta paró.

—No te preocupes, Harry, todo esa bien, ¿Verdad, Amores? — Preguntó Liam a los dos jóvenes en su pecho, ellos asintieron antes de despegarse del mayor.

...

Y volvíamos a la misma situación, ellos sentados en el suelo pintándose las uñas, yo sentado en el sillón donde antes se encontraba Liam.

—¿Quieres que pintemos tus uñas, Harry? — me preguntó Niall antes de dirigirme la mirada. Asentí.

Me levanté del sillón tan rápido que me arrepentí, el artefacto que estaba en mi interior hizo un movimiento brusco haciendo mis piernas un par de gelatinas.

Respiré hondo antes de caminar a ellos, y cuando me senté lo hice con mucho cuidado. Pronto Niall comenzó a pintar mis uñas.

Comenzamos a hablar y al final no eran tan ratos como creía, eran divertidos y algo tiernos, Niall había probado cinco colores diferentes de esmalte para poder saber de qué color pintarme.

Al final se decidió por el rosa, y ahora ya tenía mis uñas con un perfecto esmalte rosa pastel.

Después de eso, decidieron que sería buena idea hablar y conocernos un poco más, Niall me había contado que antes de llegar con Liam él había sido un el prostituto del pequeño pueblo en el que vivía y por eso tenía un gran trauma con ese término, le recordaba todo lo que había ocurrido en su pasado y por eso había comenzado a llorar cuando les grite.

Zayn tuvo una historia más parecida a la mía, su padre era adicto a las apuestas y en una de esas lo apostó a él con el mismísimo Louis Tomlinson, desafortunada o afortunadamente su padre perdió y Zayn tuvo que vivir con Louis.

—Louis sinceramente fue quien me enseñó a ser más sumiso y delicado, él tiene una forma de educar un poco extraña, pero siempre ha demostrado que los castigos de él no te gustaran, recuerdo cuando me comportaba de una manera rebelde él me doblaba en su regazo y me azotaba muy fuerte al otro día dolía infiernos el caminar — Relató Zayn y todos reímos, eso era tan cierto.

Era mi turno de hablar cuando otra vibración recorrió mi espalda, el placer empezó a fluir por mis venas y los espasmos fueron a mi miembro, había pasado tanto tiempo que lo había olvidado.

Mi espalda se arqueó, los dedos de mis pies se contrajeron, el placer era tan grande, nunca había sentido algo así, poco a poco el ambiente era más pesado y me era más difícil respirar, los cosquilleos corrían desde la palma de mi mano hasta los dedos de mis pies.

Un gemido ahogado salió de mis labios y ambos chicos me miraban preocupados.

Necesitaba más de aquella vibración, mi miembro de asfixiaba dentro de mis pantalones y el suave tacto de la braga en mi piel no era de gran ayuda.

Mi cuerpo cayó al suelo, apretando el cojín que estaba en mis manos, estaba en el punto. A nada de terminar cuando las palabras de Louis cobraron sentido en mi cabeza.

—No puedes terminar hasta que yo te diga —

Mi cuerpo sufría de placenteras descargas, buscaba más contacto y a la vez no.

Las lágrimas nacieron en mis ojos tratando de no llegar al orgasmo, lo único que pude escuchar fue como Zayn y Niall comenzaron a reír y pronto todo paró.

Todas las sensaciones y sentimientos pararon, mi miembro fue el que sufrió las consecuencias.

Niall y Zayn me ayudaron a recobrar la postura mientras seguían riendo.

—¿Qué es tan gracioso? — pregunté ya un poco fastidiado.

—Daddy Lou puso un vibrador en tu colita— canturreo Niall riendo.

¡Maldito pervertido, Louis Tomlinson!

—¡No es gracioso!

—Es bastante gracioso, Harry, pero te entiendo, a Lou le encantaba castigarme con eso cuando me comportaba realmente mal— Habló Zayn consolándome un poco. —Ese uno de los peores castigos en mi escala —

—¿Escala? ¿Qué es eso? —

—Bien, Louis hizo una escala de castigos, cuales eran los que me hacían sufrir más y cuál menos, entonces según lo mal que me había portado era lo fuerte del castigo, teníamos un máximo y mínimo, el máximo era el peor castigo y fueron muy pocas veces las que lo uso, el mínimo es el castigo más leve y ese también lo uso muy pocas veces — Zayn río un poco.

—¿Cuál era tu máximo? — ¿Qué tanto era lo que Louis aún no me mostraba?

—Era, y lo sigue siendo, el ignorarme, había noches que llegaba a su habitación llorando y le rogaba de rodillas en la orilla de la cama, pero simplemente te ignoraba— Explicó mientras jugaba nervioso con el cojín. —¿Y el tuyo, Harry?

...

Tres horas.

¡Tres malditas horas aguantando el juego de un vibrador!

Cada vez que lo usaba me dejaba justo en el punto, justo cuando estaba a nada de terminar y de verdad quería llorar.

—Ve a tu habitación, Harry, en un momento subo — No me quedo más que asentir y subir.

Ya en mi habitación comencé a deshacerme de la ropa, quede solo en ropa interior cuando el vibrador se encendió, agradecía estar en la cama si no ahora estaría retorciéndome en el frío suelo.

El placer recorrió toda mi columna haciendo que esta se curvara, pero eso hacía que aquel artefacto entrará en mí, este placer se sentía tan bien.

Pequeños gemidos salían de mis labios mientras arañaba las sabanas blancas, sentí la intensidad del vibrador subir y no pude evitar soltar un fuerte gemido.

El pre-semen había manchado mi pequeña braga haciendo que la cabeza de mi miembro fuera visible, coloque mi palma encima de este para masajearlo un poco por encima de la tela.

—No te dije que te podías tocar — No sé cuánto tiempo estuvo ahí, pero el placer que aquel aparato me ofrecía me tenía extasiado y la voz de Louis no era de mucha ayuda, soltó su miembro y sus brazos los colocó detrás de su cabeza.

Todo se sentía tan caliente, una capa de sudor me cubría, mis labios estaban rojos al igual que mis mejillas y el respirar se hacía cada vez más difícil.

—Todavía no puedes correrte — Dijo antes de subir la velocidad del vibrador.

—¡Daddy!— grité, sentía el orgasmo tan cerca, en mi vientre se plantaba la horrible y placentera sensación del orgasmo, necesitaba correrme ya.

No pude controlarlo, eran muchas sensaciones y sentimientos.

Los dedos de mis pies se contrajeron, mi espalda se arqueo y un gemido nació desde lo profundo de mi garganta al correrme.

¡Oh no! Louis estaba muy enojado.

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Bueno! Esto se pone interesante :)

Al final he decidido poner ambos banner, díganme si está bien o es mucho.

LOS AMA

Solo_Una_Vida_Mas