Emi y Evelyn llegaron juntos, en el mismo auto, a la casa de De Paul esa tarde. No se molestaron en disimularlo, pero por suerte, nadie estaba prestando suficiente atención como para darse cuenta. Excepto Leo.

A él no le gustaba Evelyn. No propiamente dicho. Quizás le tenía ganas, eso lo podía admitir. Pero no era por ese motivo que estaba observando: estaba observando porque algo le olía mal. Después de lo sucedido en el cumpleaños de Evelyn hace una semana, Leo no había oído más nada de la pareja, por lo que verlos llegar juntos le provocó un extraño cosquilleo en el estómago, como si estuviera formando parte de una historia de la cual solo sabía la mitad.

Aunque quiso, no se le acercó a Evelyn de inmediato, ya que ella pasó la primera media hora pegada a Emiliano, y éste de vez en cuando le lanzaba miradas asesinas, por lo que se inhibió de dirigirse a ella personalmente. Sin embargo, a dado punto, Emi se dispuso a ayudar a Rodrigo con el asado y Evelyn se metió en la casa. Apenas tuvo la oportunidad, Leo se levantó y la siguió. Se la encontró la cocina.

"Eve, ¿estás bien?" preguntó de inmediato, buscando en su rostro evidencia alguna del dolor que él le había visto tan solo unos días atrás.

Evelyn lo miró por sobre su hombro, algo sobresaltada ante su preocupación, pero pronto, le cayó la ficha. Habían pasado ya unos días desde el incidente y Eve la había estado pasando tan bien al lado de Emi que se había olvidado por completo que Paredes aún no sabía nada.

"Estoy bien," aclaró ella de inmediato.

"¿Por qué llegaste con él?" Leo negó con la cabeza, confundido.

"Porque estamos bien. Lo perdoné. No te preocupes," dijo ella de inmediato. Sin embargo, sus ojos pronto encontraron la venda que yacía envuelta torpemente alrededor de los nudillos de Leo. Tomó su mano y frunció el ceño. "¿Qué te pasó?"

"Me lastimé."

"¿Haciendo qué?"

"Pegándole a tu novio," confesó él sin vergüenza alguna, apretando la mandíbula.

Los ojos de Evelyn casi se salen de sus órbitas cuando los abrió. "¿Le pegaste a Emi?"

"¿A Emi?" burló Leo, todavía confundido pero además, ahora algo molesto. "Sí, se lo merecía. Te faltó el respeto. ¿Cómo que lo perdonaste?"

"Solo lo perdoné, Leo. Estaba borracho y–"

"–y no lo dijo en serio. Eso te dijo él, ¿no?" Leo negó con la cabeza. "Evelyn, te recuerdo que es así como empiezan todas las relaciones tóxicas."

Evelyn frunció el cejo, sintiendo un poco de enojo ante aquella declaración. "Emi no es tóxico."

"No, solamente te tiene bajo su control. Te puede hacer lo que quieras y vos lo vas a dejar."

"Escúchame, te voy a recordar nomás que que me hayas besado no implica que tengas algún derecho sobre mí, ¿me escuchaste?"

"¿Qué? No, Evelyn. Yo no dije eso. Ese beso fue solo una calentada del momento, no me gustás." Leo se pasó una mano por el pelo, frustrado. "Estoy haciendo lo que cualquier persona cuerda haría. Es que no entendés lo mal que se ve esto desde afuera. Solo estoy tratando de cuidarte."

"Puedo cuidarme sola. No te preocupes," lo interrumpió ella, su voz fría. Igualmente, no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa y tocarle el hombro. "En serio, Leo, no te preocupes. Conozco mis límites y si algún día él me lastima, voy a dejar que me digas 'te lo dije'. Pero hasta ese entonces, no inventes un problema donde no lo hay."

Leo la miró a los ojos. Seguía preocupado, pero no podía continuar aquella discusión sin sentido, sabiendo que Evelyn seguiría mintiéndose a sí misma si aquello la protegía del dolor. La miró a los ojos una última vez antes de dirigirse de nuevo al patio con la cabeza gacha. Al mismo tiempo que él se iba, Emi entraba, y cuando se cruzaron, se lanzaron miradas tan frías que podrían haber hecho añicos las ventanas.

Emi lo observó irse y después la miró a Evelyn, arqueando una ceja. Ella respondió al gesto de manera estoica.

"No fue nada," dijo de inmediato, tratando de calmar los celos entrantes que podía ver en sus ojos.

"Te digo que no te quiero con otros y lo primero que hacés es irte con el pelotudo que te tiró la boca. Es algo," expresó él, acercándose hacia ella y separando las piernas para bajar a su altura. "Cómo te gusta hacerme calentar, eh."

"Él me siguió, ¿okay? Solo está preocupado. Y no seas celoso," reclamó ella.

"Yo solo cuido lo que es mío."

Evelyn se mordió el labio y negó con la cabeza. "Si querés una relación conmigo, vas a tener que confiar en mí. Sino no vamos a funcionar nunca."

"Yo confío en vos, amor," dijo él inmediatamente, agachándose para besar sus labios con suavidad. "Y no es por lo que vos puedas hacer. En realidad, es más por lo que otros puedan hacerte a vos."

Evelyn sonrió tímidamente, pero después apartó la vista, afligida. Emi notó esto, por lo que la tomó de la barbilla, obligándola a mirarlo a los ojos.

"¿Qué?" preguntó.

"Siento que te estoy dando mala fama," dijo, y se rió. La idea le sonaba casi ridícula.

"¿De qué hablás?"

"No quiero que todos te odien por mí. Ya casi te agarrás a las piñas con Lautaro y con Leandro. No quiero generar rivalidades entre ustedes, quiero que vos y ellos puedan ser amigos como siempre lo fueron," explicó ella.

Emi sonrió, enternecido. 

"Evelyn," dijo. "Ya se les va a pasar. Que yo sea un posesivo de mierda no implica que odie a todos los que se te acercan. Solamente quiero que se alejen. Pero además, yo solo protejo a la gente que quiero. Si sé que ellos pueden lastimarte, o si ellos te lastiman, yo no voy a dudar ni un segundo en protegerte. Sin importar si son mis amigos o no: él que hace algo malo, recibe lo que merece."

Evelyn se encogió de hombros. "Solo tratá de arreglar las cosas con ellos, ¿sí? Si el grupo se separa por mi culpa, no me voy a perdonar. Y tratá de no agarrarte a las piñas con nadie, si es posible."

Emi tragó saliva, asintiendo con la cabeza y agachándose para besar sus labios nuevamente. "Lo que digas, mi amor."

a/n –
dejen sus opiniones sobre la historia, siento que a nadie le gusta jaja

y dejen recomendaciones o cosas que quieran ver en la historia! quiero saber su opinión así me doy una idea de a dónde dirigirme con esta novela

alsoo, saludos a todos los lectores silenciosos <3