Había llegado el día.

Cómo era de esperar había una día tan sombrío de Octubre, el otoño daba su entrada con climas templados y vientos helados que hacían usar más de uno algún suéter, todos eran risas y diversión por la fiesta que se celebraría esa noche, los niños corriendo por disfrazarse y uno que otro habitante sacaba su lado más friki posible vistiendo cómo en una comicón. 

Para la mayoría un día de diversión y golosinas. 

Sin embargo para unos pocos, se podía oler el azufre del fuego infernal de ese día, las puertas del cielo, la tierra y el infierno. Podría tal vez estar exagerando su pensamiento, más la ausencia de un soñar, las veces que se levantó en la madrugada con angustia, malestar en su estómago, era un presagio. 

El día en que todo cambiaría. 

Mitsuya le había hecho el uniforme tal y cómo se lo pidió, a las medidas perfectas, una tela suave y un bordado tan divino y exquisito que juraba que sería de un profesional de años, esa habilidad con el hilo sin lugar a duda, era magnifica. No entendió por que fue tan modesto en no aceptarle un poco más de lo acordado, si era excelente.  Pero hombre, no era momento de divagar eso.

Se veía bien.

El uniforme negro de la ToMan con las letras doradas y ese símbolo un tanto controversial, pocos entenderían ese sentimiento tan ajeno que tenía en ese instante. Cómo el negro, esa ausencia de color podía quedarle tan bien, verse al espejo, usándolo. Todo aquello era completamente extraño, juraba que se enfermaría tan sólo ponerse algo relacionado con Mikey.

Draken también lo usaba, Baji, Mitsuya, Pah-Chin, Peh-Yan.

Takemichi también.

Si, eso era mil veces peor, se dijo así misma sonriendo pensando en lo patético que era Takemichi, pero no era una sonrisa de burla ni maliciosa cómo esperaba de alguien que miraba con cero interés a alguien con sus cualidades y defectos, más sin embargo eso no implicaba que no sintiera un respeto por Takemichi, un ronroneo cruzó entre sus piernas y un maullido exigiendo cariño a un completo extraño mirándose al espejo.

Morcilla era el nombre del gato de la Familia Castillo, es decir el gato de la madre de Masao y Masao mismo, un gato macho gordo y negro que al ver cómo Doña Salome le tenía mucho cariño donde cualquiera pensaría que fue ella quién lo llevo a casa, todo lejos de ello, ya que, pese a no ser fan de los gatos fue Masao quién lo robó, si esa era la palabra correcta. Morcilla no era un gato callejero por mucho que lo dijera, incluso con su poca interacción Morcilla era un gato muy sensible a las emociones de Masao.

Y justamente había aparecido en el mejor de los momentos, agradecida que pese a la poca interacción que ambos tenían Morcilla se dejaba acariciar y levantar por Ma-kun, era lo que le temía. Sus manos temblaban mientras tocaban el pelaje de Morcilla, lo que indicaba ese sentimiento tan espantoso cómo era el miedo.

Sin embargo, tal vez lo que mas lo que mas le molestaba de eso era que no era un miedo normal, no había un temor que conociera. 

Sonaría pretencioso de su parte pero mejor que nadie sabia que a pocas situaciones o cosas las podría catalogar cómo miedos, ansiedad quizá, era un sentimiento bastante común en ella aunque no se notará porque nunca lo permitiría. Lo controlaba. Pero esto no.

Y era el hecho de que sabía muy en el fondo que aquella pelea significaría más que una riña, que una pelea cualquiera y lo comprendía, ese lugar sería el testigo de algo grande, algo desconocido y catastrofico, cómo el aleteo de una mariposa. 

Ese uniforme negro con letras doradas y esa controversial sauvástica en medio, no era una señal cualquiera, era una guerra de calles en la que se estaban alistando. Porque fue hace mucho tiempo que todo dejó de ser un juego para si, para todos aquellos.

━━ Ya me voy Morcilla, cuida de la casa y de mamá mientras yo no este. -Dijo una vez poniendo al gato en su cama, buscando una más carilla para guardarla en su bolsillo, cogiendo su cabello en una torpe y diminuta moña. 

Pero también llevando consigo una pequeña mochila en caso de que las cosas dentro del depósito pudieran ponerse peor de lo que tenía esperado. Para su fortuna conocía ese lugar con anterioridad, necesitaba saberlo, un paso adelante. Se dijo a si misma y salió de su habitación con el gato familiar detrás suyo para despedirse. 

Sin contar con un último imprevisto.

━━¿Á donde vas vestido así?. -Masao se congeló en camino a la puerta, que ingenuo fue en no pensarlo antes, su madre, no se había ido todavía. Allí estaba sentada en el suelo de la sala viendo la televisión con una lata de cerveza en la mesita. 

Le miraba fijamente, esa mirada que uno sabe cuándo esta en problemas, esa mirada que sabes que es mejor no voltear la cara sino querías que tu mandíbula pasará a mejor vida, se quedó allí intentando inventar algo, pero era obvio que no iba a ser así. ¡Qué tonta! Debió haber escogido un lugar en la calle para cambiarse. Se hacía tarde, Takemichi y Chifuyu se supone que deberían estar allí abajo esperándole.  

━━ Voy con unos amigos. -Respondió a medias, ni verdad ni mentiras. Su madre entre cerró los ojos con una mirada seria, levantándose  de su comodidad con los brazos cruzados, Masao espero de todo. Cerró los ojos aceptando su destino con el pecho erguido. 

Salome se puso a la altura de Masao y le dio una advertencia mientras la abrazaba. 

━━ Ante todo, sé que lo que haces es importante para ti. Pero por favor comprende mi amor , que me da miedo que te pase algo. Por eso, siempre asegúrate de regresar a salvo a esta casa.

Fue un momento que necesitaba para saberlo todo, eso estaba bien, pensó recibiendo el calor de su madre. Con un nudo en la garganta que nunca tendría con nadie más que aquella hermosa mujer que la trajo al mundo, por eso, debía esforzarse al máximo.

Y así salió aquella persona corriendo por el pasillo del apartamento, el corazón rugiendo por pelear, las manos y piernas ardientes de probar la victoria y el espíritu de una fiera. Allí mismo, Chifuyu llevaba a Takemichi, no necesitaban presentaciones, Ma-kun había regresado a su forma original.

El comienzo de una nueva era daría inicio. 

━━¿Estás lista, Ma-kun?. -Pregunto Takemichi dándole la mano. Masao la sujeto con fuerza. Maldición había esperado ese momento. 

━━ Vamos a sacar a la plaga de la ToMan. Y haremos que que ese idiota de Baji regrese aunque sea por la fuerza. 

Los tres chicos de cabellos rubios que se adentraban al inicio de un fin, con los pechos erguidos, unos con miedo, otros buscando su salvación y el merito de haber hecho lo que estaba destinado a suceder. 

Takemichi iría inquieto todo el maldito camino hasta lo que se aseguraba era una buena idea, porque la verdad, no le había dicho ni a Draken ni siquiera a Mikey siendo este el mayor problema, sobre la intervención de Masao en la pelea. Y si antes de tocar a Valhalla ellos llegaban a rozarse estaba mas que seguro que perdería un chance de entrar. 

¡Tenía que arriesgarse!. Se dijo así mismo cuando llegaron a las dichosas puertas del infierno, allí estaban todos, Mitsuya levantó la mirada con sorpresa y luego una media sonrisa preocupada, realmente había llegado sin importarle nada. Esa loca idea de colarse aún bajo la prohibición de Mikey es algo que solo una persona o muy tonta o muy confiada de si misma podría hacer, sin embargo Mitsuya no necesitaba hablar con Masao para saber que no era ninguna de esas dos. 

Fue un encuentro extraño, Takemichi sintió todos los demonios encima suyo cuándo Mikey giro para saludarle de sonrisa abierta, aspecto que cambio repentinamente a una de molestia al ver a su acompañante, difícilmente no pasaría desapercibida, incluso con ese aspecto varonil le pudo reconocer. Mikey se miraba molesto, Masao ni una ni la otra, no lo miraba con desafío como si no respetará su autoridad, vaya que lo hacía.

Pero las necesidades y peticiones de Mikey no eran su problema. 

━━ Ma-kun. -Dijo el susodicho líder con un tono menos amistoso del normal, Masao se paró al frente cómo uno más.- ━━ Creía que habíamos dejado las cosas claras ese día, tú no puedes estar aquí. Vete a casa.

━━ Y yo también dejé en claro ese asunto. No hago esto por ti ni por tu pandilla, lo hago porque Takemichi es mi amigo y estoy aquí para que no me lo maten. Y si eso incluye desafiarte a ti en esto. 

Aunque Takemichi sintió unas profundas ganas de llorar por el simple hecho que alguien tan genial cómo Ma-kun le considerará un amigo, el miedo de sentir la mirada de Mikey ante tal declaración lo hizo perderse entre la cobardía y él miedo. Algunos miembros de la pandilla miraron desconcertados y atentos a lo que su líder haría ante tal desacató. Nadie sabía que estaba planeando ese tipo, pero si Mikey no lo quería ahí era por algo.

Incluso Kisaki no pudo evitar preguntarse quién era y porque hacía tanto escandalo metiéndose a un conflicto que no tenía nada que ver con él. Le parecía patético, e increíblemente audaz. 

Un tipo interesante. 

━━ Takemichi responde con la verdad. ¿Tú le pediste que viniera incluso si Mikey dio la orden de que no?. -Preguntó Draken, ya bastante molesto con tanto alboroto, ni siquiera el sabía el problema que había en ello y estaba seguro que eran cosas tontas de Mikey.

Pero ver a Mikey empeñado a algo era una señal de suma importancia al menos para su cabeza, ¿Cómo razonar con Mikey, el incorregible?. 

Takemichi rápidamente saltó diciendo que creía que Masao era una buena luchadora, que valía la pena traerla para que pudieran regresar a Baji de nuevo, una medida desesperada ciertamente dijo Draken, en cambio una verdad probable. Es cierto e innegable la fuerza con la que se maneja, no se podía cuestionar algo cómo eso. 

━━ Ma-kun. ¿De verdad vas a desafiarme en esto? Delante de mis hombres. -Preguntó Mikey imponente, eso le cabreó a Masao. ¿Sus hombres, eh?.

Maldito seas Manjiro, me muero cuándo llegué tu hora y pueda arrancarte ese orgullo. Pensó Masao haciendo que sus dientes castañearan de enojo, apretó los puños ya que no podía hacerlo, no iba a perder el control tan fácil.

Vamos Masao, sabes que eres mejor que eso. Tienes que justificar tu fachada. Aunque sea una mentira tienes que creértela y expresarla cómo si fuera tu verdadero propósito.

Un destelló vino a su mente, esa noche en el parque. Esa amargura que había sentido en ese instante, la terrible noche previa a esa pelea. Una cara alegre llena de sangre y fuerte olor a Yakisoba. 

En tu cabeza, viene un mal pensamiento.

━━ Baji.

Mikey arqueó una ceja, incluso había reflejado una mueca poco común entre otro. Con la cabeza baja, Masao esperaba desde su alma, si existía algún Dios que la oyera. La excusará de soltar una mentira tan grave.

━━ Sino sacan a Baji de ahí por la fuerza vivo, entonces la otra forma no será la más agradable.  

Entonces todo quedó en un violento silencio acompañado de rostros llenos de preguntas, Ma-kun había hablado tan bajo que sólo los tres cercanos, Chifuyu, Takemichi y por supuesto Mikey fueron capaz de escuchar y comprender. 

Por la expresión de su líder nadie estaba seguro si Mikey estaba furioso o disgustado por unas simples palabras. Chifuyu absolutamente desconcertado, Takemichi profundamente asustado de aquellas palabras, temeroso de lo que pudiera ser cierto. Ansioso de lo que pasaría a partir de esa linea. Masao, harta de la cantidad innecesaria que se le daba a algo menor miro a Mikey, esperando su veredicto. 

Mikey sólo cerró los ojos y suspiro pesadamente. No había de otra, pensó mirando alrededor y luego señaló a Mitsuya. 

━━ Mitsuya, por ahora Takemichi y Masao pasaran a tu división. Espero y esto no sea algo de lo que te vayas a arrepentir, Ma-kun. 

Masao sintió un alivio, Takemichi sintió el alma regresarle a la tierra lleno de gratitud intentó abrazar a Masao cómo viejos amigos, afortunadamente Masao se dejó y hasta incluso palmeo la cabeza de Takemichi un par de veces para que la soltará. Y cómo no, la delicadeza con la que Ma-kun traba a los otros era simple, de un empujón. 

━━¡Increíble, no había visto a alguien que pudiera hacer a Mikey retroceder en un decisión!. -Dijo Chifuyu emocionado, con Masao de parte suya, estaban seguros que haría su mayor esfuerzo para que la pelea fuera justa.

━━ Aunque no lo parezca incluso hubiese aceptado un no. Pero viendo la situación, ya estoy muy arriba de lo que espere. Maldita sea, ¿Y bien? ¿Hay algún plan para sacar al estúpido de Keisuke de este problema?.

Ambos rubios se vieron entre si, realmente no era un plan por donde lo vieran, sino más una estrategia de evadir al conflicto, tenían la esperanza que durante la pelea pudieran hacer cambiar a Baji de parecer. 

¡Es el plan más imbécil que haría escuchado en su vida!. 

━━¡Qué idiotas son! -Exclamó Masao propinándole un golpe en la cabeza a cada uno.- ━━¿Hablar? ¿Hablar con Baji Keisuke?. En que sentido eso lo hará volver. 

━━¿Y qué más querías de nosotros? Aunque tu y yo intentemos pelear con Baji ambos no podríamos hacerlo doblegar, y ya ni metamos a Takemichi en eso, Baji lo mataría en un segundo. -Dijo Chifuyu señalando cómicamente la inutilidad del chico en pelea. 

━━ Bueno eso es verdad, pero aún así. Debemos intentarlo Ma-kun, de lo contrario la ToMan puede entrar en un período oscuro si dejamos que estos malditos criminales nos ganen. -Takemichi giró a todas partes, él estaba cerca, luego hizo señales a los dos para que se acercarán.- ━━ Valhalla quiere absorber a la ToMan desde dentro, y para eso tienen que vencernos. No entiendo porque Baji estaría con ellos pero no podemos permitir que eso pase. 

━━ Hablando de eso, Takemichi. -Masao también lo había visto, ese tipo de la tienda con el que estaba hablando Hanma la otra noche.- ━━ Ese tipo el que copio tu peinado de mierda, dijo algo parecido a lo que tu dijiste. 

━━¿Lo conoces? -Masao negó con la cabeza, luego prosiguió. 

━━ Si dices que el es el problema. ¿Por qué no...

━━ Ustedes dos, dejen de estar parloteando. Estamos a punto de entrar, estén preparados para lo que sea. 

Llegó el momento tan esperado por todos los presentes, detrás de esas puertas metálicas estaba la nueva arena de pelea que pronto se mancharía con la sangre de muchos otros cómo ellos, tal vez dos o tres resultarían en el hospital aunque eso seria ir en contra de la realidad.

La verdad es que a comparación con el incidente en el festival. Masao era consciente de que esto seria muy diferente, se olía en el aire el hierro viejo del depósito, el olor de la sangre, la bandera de la ToMan cobra vida propia en las manos de su nuevo abanderado y por unos segundos Masao es capaz de contemplarla en su esplendor. Que hermosa pensó ella. Y luego miró a su costado una vieja bolsa que traía consigo, sabía que tenía que esconderla en algún rincón durante la pelea, tal vez era una mala idea. Más no podía arriesgarse.

Cuándo arrestaron a Pah a Masao le quedó la idea de que hubieran conseguido más tiempo, quizá Pah estaría con ellos en el conflicto de ahora, si tan sólo hubiera escapado, recapacitado. 

Es algo que no cometería dos veces. 

Pero ahora, daba las circunstancias y sabiendo que el enemigo real estaba a pocos centímetros suyos, se preguntaba si también le estaría dando una ventaja.  

Esos pensamiento cesaron al instante correcto, cuándo las puertas se abrieron y la presentación de las pandillas daba inicio, el "presentador" del encuentro quién supervisaría la pelea cómo si fuera un juego infantil. Malditos nipones que tenían normas incluso para lo más vulgar cómo eran las peleas callejeras, pensó en sus adentros Masao.

Cuándo fueron entrando poco a poco Masao barrió todo el lugar con la mirada, muchos de esos tipos se les hacía familiares, unos sujetos con lo que habría tenido algún roce, y otros cómo los dos monos extravagantes sentados juntos.

Incluso los extravagantes hermanos Haitani estaban allí para disfrutar una pelea de pandillas menores. Qué extraño no ver a nadie de Tenjiku cerca por esos lares, eso si era algo extraño sabiendo cómo era Izana. Mejor para ella, no tendría que dar explicaciones.

━━¡Tokyo Manji!.

Era le momento. Por fin estaba allí. La presentación oficial de las pandillas por el viejo de Hansen.

━━¡Valhalla!. 

Los murmullos no se hicieron esperar de varios hombres que estaban allí y repetían el nombre de Mikey cómo una especie de leyenda urbana, Masao arrugo el gesto viendo cómo Mikey caminaba en medio cómo un gran sultán.

━━ Hansen. Gracias por supervisar el combate de hoy. -Dijo Mikey al viejo líder, que pese a los años nunca cambiaría ese lado oscuro de las pandillas, Hansen se limitó a suspirar.

━━ Ja. Si nos aburren, acabaremos con ambos bandos. 

━━¡Representantes de ambos bandos, un paso al frente!. 

Ma-kun contuvo la respiración al volver a encontrarse con ese sujeto, entre Draken y él se sentía una clara tensión, por la forma en la que Kazutora lo miraba con tanta intensidad sin parpadear igual que un gato agresivo dejaba ver mucho del resentimiento de ese chico, poco sabía, pero empezaba a darse una idea. 

Baji era un amigo muy cercano de ese niño tigre, Kazutora detestaba a Mikey a profundidad por cosas que pasaron antes de conocer a Draken, y seguramente tenía que ver con este último ¿verdad?.

Aunque eso sonaba lógico, una parte de esa historia la estaba dejando a un lado. Kazutora odia a Mikey, pero Draken y Mikey se conocían desde niños al igual que Baji, pero fue Baji quién vio a Mikey primero.

¿Dónde quedó Kazutora entonces?.

━━ Ay no, no voy a pensar en tanta mierda. Primero me salgo de este quilombo y luego me meto a otro. Sencillito. 

Parecían empezar a hablar en silencio por un momento con el supervisor, de un momento a otro se pudo apreciar decir a Draken que si ganaban les regresarían a Baji, que tontería. Kazutora tenía un punto en decirlo, ¿Van a obligar a ese hombre a salirse de un grupo al que no fue obligado a entrar?. 

━━¡Mierda, lo golpeó!. 

Oyó decir a uno de los chicos, Kazutora nuevamente había perdido el control por completo, solo le tomó dos golpes dejar a ese sujeto en el suelo completamente inconsciente. Las palmas de Masao temblaron al instante, ese tipo. Kazutora en serio le causaba tanto rechazo. Por una simple negación, por palabras que solo eran eso sin ningún valor.

Kazutora perdía la cabeza con tan poco.

Pero eso, eso seguramente no era nada. 

━━ Dios...¿Qué me habría pasado esa noche si Baji no hubiera intervenido?. -Se dijo así misma con los ojos en blanco. Sacudiendo la cabeza de un lado a otro intentando no pensar más en ello. 

Kazutora empezó a hablar, diciendo las mismas cosas que solo una persona de su calaña diría a todo un grupo de pandillas reforzándose en sus tropas dando por entendido que el resultado era definitivo. 

━━¿Supervisión? ¿Condiciones?. ¿Creen que esto es un juego de niño?. ¡Nosotros venimos a matarlos a golpes!. 

━━¿Por qué no empezamos, Mikey?. 

Esto es malo, realmente podrá toda la ToMan contra estos sujetos. Fue el pensamiento compartido de Ma-Kun y Takemichi observando a Hanma iniciar la pelea y a Mikey mostrar un aura completamente diferente a la que tenía hace un momento. 

━━¡Vamos, ToMan!. 

El suelo empezó a temblar, era el momento de entrar en batalla y ver cual sería el resultado de todo, Masao se apresuro en esconder la bolsa en algún rincón cerca de la entrada para luego meterse a la linea que fue deformándose con los primeros golpes de ambos bandos, los golpes empezaron a sonar y retumbar.

Gracias a su tamaño pudo esquivar a algunos tontos que intentaron golpearle dado a su estatura, uno de ellos claro iba más despierto que otros que no pensaron a quién se estaban enfrentando, Masao no detuvo el puñetazo de forma directa, sino que agarro el brazo del oponente contrario con fuerza, girar en su propio punto de ataque para levantarlo y lanzarlo contra el suelo con todas sus fuerzas, para después rematar con una patada a pierna alzada en el estómago. Fue lo suficientemente fuerte para hacer que el sujeto le faltara el aire y algunos gallos se le salieran.

━━¡Maldito enano ahora verás!. 

Otro más en la linea derecha, otro a la izquierda. Eran unos montoneros por tamaño, bien podría manejarlo. Todo debía ser pensado y rápido pero sin perder la gracia y belleza.

Aunque no se mostrará su cara, el verdadero encanto estaba en la fuerza. 

Un rugido salió de su boca, similar al de un chico entrando en la pubertad mientras lanzaba una patada con giro al de la izquierda y al de la derecha lo recibía con dos puñetazos directos a la cara, estos no le harían demasiado afecto si no iba todo el peso en este, en un intento más por noquearlo con una patada semicircular y correr a ayudar a Takemichi. 

━━¿Á dónde vas, enano?. 

━━¡Mierda!. -Espetó Masao cuándo uno de ellos la golpeo en el rostro que hizo que la mascarilla saliera por segundos de su cara. Los ojos de Masao en ese momento debieron cambiar de color, el tipo que le había pegado de repente había hecho un rostro que conocía bien. 

La maldita arrogancia de los que por ley estaban debajo de ella.

Ser lo mejor de lo mejor. 

Con una felicidad maliciosa ante esa idea, de un rostro codicioso siendo golpeado por sus manos mestizas, repartía entre puñetazos en descuido del tipo, Masao empezó una pelea cuerpo a cuerpo con este, quién rápidamente despertó y trato de responder pero ella era más rápida, sin quererlo había motivado el deseo de ver sangre del chico en frente suyo.

━━¿Quién demonios te crees, para verme con esos ojos tan necios?.

Los golpes de Masao se movían cómo si fuesen de un profesional en artes marciales, no dudaba daba justo en lo puntos claves y ciegos que el tipo tenía hasta que eventualmente termino cayendo, con la cara adolorida y la nariz rota pudo apreciar la silueta de la chica iluminarse por los rayos del sol, siendo el puño de ella impactar con su cabeza para dejarlo noqueado.

━━ No eres más que una escoria a mis pies. -Dijo y escupió en la cara del tipo a quién aplastaba la cabeza con su bota.- ━━ No se te olvide mi cara. Porque estás viendo el rostro de una divinidad ¡El rostro de una Sukeban!.

Tal vez el tipo no le hubiera escuchado, no necesitaba de eso en realidad. Era algo que tenía que escuchar. Esos sentimientos de amistad, no se podían igualar a esa sensación.

La rabia.

Eso es lo mejor que hace.

━━ Demasiados hijos de puta. 300 de ellos contra 150 niños de preparatoria y secundaria. ¡Muy bien! ¡Demos lo mejor de mi!. 

Y si lo fue, lanzándose con brutalidad en medio de una pelea contra otro miembro secundario de la ToMan que tenían por debajo dos de ellos, Masao atacó directo a la cabeza después de arrojarlo al suelo lo tomó del cabello con tanta fuerza que seguro le arrancó unos cuantos pelos, lanzó una mirada asesina al otro, con la boca mostrando su enojo y la mirada de satisfacción.

Muchos se amontonaban aprovechando el número en desigualdad, a amontonándose de hasta tres contra uno, algunos líderes les ayudaban, buscó a Takemichi preguntándose si finalmente lo habían aniquilado, para su sorpresa no fue así, gracias a Mitsuya que lo había ayudado y lo sermoneaba. Mitsuya se volteó a su dirección abriendo los ojos. 

━━¡Ma-kun, cuidado detrás tuyo!. 

Masao acató, antes que el tipo la tocará tuco otro chance, usando una técnica de estrangulamiento sanguínea usada en varios tipos de combates mixtos , en la que se emplean las piernas para rodear la cabeza y un brazo del oponente en la forma de un triangulo, Sankaku-jime. 

Abrazando el cuello del oponente con las piernas con un brazo pasando por un hombro y la otra por la axila opuesta, enlazando por detrás para hacer presión hasta ponerse morado. El tipo trato de quitársela aún estando de pie, sin embargo la agitación solo provoco que este terminara sin fuerzas, cayendo al instante en frente de los dos chicos.

━━ Ma-kun.... (Es cierto, todos están aquí esforzándose al máximo mientras yo solo estoy llorando e intentando que no me maten. ¡Debo dejar de actuar cómo un cobarde!). ¡Maldición!. -Gritó el chico, lanzando su primer puñetazo después de un rato escondiéndose.- ━━¡Yo también voy a pelear!.

Notita: Hola mis amores, sólo venía a darles algunas cuantas pistas para que no pierdan un poco el hilo de algunas cosas y supongan ustedes algunas conexiones. 

La primera de ella es que cada canción que pongo hace referencia a un sentimiento o situación que es expresada tanto por el narrador cómo la protagonista, aunque habrán momentos en que estás no sean de ninguna de las dos sino de un personaje en concreto. 

Cómo por ejemplo la canción de hoy Nero forte expresa un de forma más abierta la actitud y cara de Masao ante la situación y conflicto con Valhalla, muchas veces las canciones expresarán más que la propia protagonista. 

Otra cosa es alguien que comentó por ahí el tema de si Masao es hombre o mujer por que a veces puede escribirse de ambas formas, Masao es una mujer de nacimiento peor muchas veces llega a usar formas masculinas para referirse a su persona. Aunque este escrito en español en japonés Masao usuaria términos masculinos cómo; Boku, Ore, Shosei autoritarios para referirse a si misma cuándo muestra autoridad ,y usando también el Atashi, Ware, Atai cuándo la situación lo amerita y quiere sonar mas femenina.

Masao cómo había explicado antes es arromantica aunque estos términos para el año y Japón no son reconocidos cómo tal y por lo tanto no sabe que significa, sólo sabe que le dificulta sentir amor romántico por otra persona aún si esta puede fingirlo por mero compromiso, sin embargo se llega a presentar la rara ocasión en la que Masao siente un cariño por alguien pero no tan fuerte para llamarlo amor. Este en el caso de Pah, que Masao no sabe porque pero quiere estar con Pah aunque él no lo quiera, porque ella lo ve cómo algo llamativo y entre más resistencia ponga los caprichos de Ma-Chan por tenerlo también. 

No obstante, Masao siente el cariño fraternal. Cómo es el caso de Draken y Takemichi a los cuales les ha cogido mucho cariño, llegando a ver a Draken cómo el hermano mayor que siempre soñó y a Takemichi cómo a ese hermanito al cuál puedes molestar pero que defenderías con todas tus fuerzas. En el caso de Baji, Masao siente mucho respeto y admiración por Keisuke aunque por fuera lo desprecie, llegando incluso a preguntarse si lo que sentía por Baji era una simple admiración similar a la de Draken o una rivalidad por sus coques de carácter.

Y para finalizar, las veces que Masao interactúe con personajes relacionados al la primera linea del tiempo irán revelando los orígenes la forma de Masao, siendo uno de ellos la principal razón por la cuál decidió convertirse en una Sukeban. 

Eso es todo mis cariños. Se me cuidan.