Jungkook y yo no volvimos a hablar después de esa noche, era obvio que ambos estábamos arrepentidos de que pasara, debido a lo que él sentía por mi y que yo no quería caer por él.

Además que lo había dejado solo cuando me pidió que me quedara con él, no fue lo mejor, pero tenía mis razones. Seguramente me odiaba.

–¿Cómo está, Jungkook? –preguntó, Sooah– Es raro no verlo en el bar, aunque supongo que aún lidia con lo de su hermano.

Ambas estábamos en una plaza sentadas en un banco de madera, ella estaba esperando a su novio y yo había salido a caminar porque necesitaba pensar y despejarme. Nos conseguimos de casualidad.

–No hemos hablado en los últimos días. –Apreté los labios.

–¿Por qué?

–Sooah... –Ella me miró preocupada.

–¿Qué?

–Él dijo que yo le gusto.

–¡¿Qué?! –Alzó la voz.

Sooah sabía del tipo de relación que teníamos, pero no le había contado que Jungkook se había confesado, ni lo que había pasado hace unos días.

–Fue hace días, hablamos y me lo dijo, yo le dije que no sentía lo mismo y por eso me estaba ignorando, pero luego murió Jongsun y ya sabes que estuve con él acompañándolo, la cosa es que nos acostamos de nuevo hace como tres días y ... –Chasqueé la lengua en frustración.

–Espera, espera –hizo un ademán con las manos– me estás diciendo que él se te confesó, tú lo rechazaste y luego se acostaron... –Parecía que su cabeza iba a explotar por tanta información. –¿Cómo es que no me contaste todo esto? Yo sabía que te pasaba algo, te conozco.

En el trabajo he estado más callada de lo usual y todos se habían dado cuenta. Yo no había querido hablar del tema y ella dejó de insistir para que le contara lo que me pasaba.

–Lo siento –recosté mi cabeza en su hombro– esa noche, luego de lo que pasó, me fui cuando él me había pedido que no lo dejara solo. –Suspiré pesadamente.

–Jiwoo, es obvio que te gusta y lo que hiciste estuvo mal.

–Fue un error y no quiero repetir la historia.

–Con Jungkook puede ser diferente. –Ella sabía a lo que me refería. No quería volver a sufrir

–Somos un desastre.

–Ya, pero ambos pueden intentarlo y esforzarse en hacerlo funcionar.

Estaba en un debate mental. Tenía miedo de iniciar algo con él y que todo se arruinara, y si eso pasaba me destruiría.

Yo estuve muy enamorada de Dae, mi ex novio, pero el muy imbécil me engañó y yo como estúpida lo perdoné y luego volvió a hacerlo, pero ya estaba cansada de como llevábamos la relación así que rompí con él. Me hizo mucho daño y no quería pasar por lo mismo.

–No lo sé, Soo.

–Creo que deberían darse una oportunidad, aunque es tú decisión, pero sería una pena que no lo intentaran. Podrías arrepentirte después.

Dejamos el tema porque llegó el novio de Sooah y yo quise despedirme para dejarlos solos, pero ambos me invitaron a ir con ellos ya que era evidente mi estado de ánimo, insistieron tanto que no pude negarme. Doyeon, era un buen chico y muy amigable, él y Sooah ya llevaban un año saliendo. Se notaba lo enamorados y felices que estaban.

Fuimos a comer a un lugar de parrillas, muy bueno, bebimos un poco, pude distraerme al menos y al anochecer ya estaba de camino a casa. Me daría un baño antes de ir a trabajar.

Cuando llegué al edificio pude ver a Jungkook afuera recostado del muro que daba hacia la calle, donde vivíamos quedaba en una colina y desde ahí se podía ver parte de la ciudad. Él estaba ahí, viendo hacia la nada, su moto estaba unos metros a un lado.

Yo no lo había visto desde aquella vez, no había ido al bar pero sus amigos si.

–Quiero preguntarte algo. –Me detuve al escuchar su voz, cuando me disponía a pasar junto a él y entrar.

Me giré para quedar frente a él, quien ya me estaba mirando inexpresivo. No hablé, sólo esperé a que prosiguiera.

–¿Te arrepientes de lo que pasó? –no respondí, me creí incapaz de hacerlo– Porque yo si, era algo que quería pero tuvo diferentes significados para ambos, para ti fue como otra noche normal donde follamos y ya está ¿no es así, Jiwoo? –un nudo se formó en mi garganta, pero retuve las lágrimas– te acostaste conmigo sólo porque creías que me hacías un favor, lo hiciste por lástima, calentura y nada más. –Escupió con rabia.

Quise negarlo en el momento y decirle la verdad pero simplemente no podía hablar, además de que me habían dolido mucho sus palabras, sentía un dolor agudo en el pecho. Estaba teniendo una batalla interna y no podía pensar claramente.

Él, al ver esto y que no pretendía decir nada al respecto, se giró, montándose en su moto y yo me acerqué pero no me miró.

–Jungkook... yo... –Pronuncié, con voz temblorosa pero él me ignoró por completo, el ruido del motor me interrumpió y sólo me quedé mirando como se iba a toda velocidad calle abajo.

Me senté en las escaleras sintiéndome muy frustrada conmigo misma, saqué mi celular y lo llamé pero sonaba apagado. Me quedé ahí esperando a que volviera, al pasar una hora y ver qué no llegaba tuve que entrar, se me iba a hacer tarde para ir al trabajo.

Quise decirle que estaba equivocado, que lo que decía no era verdad pero entonces pensé en Dae y en qué no quería pasar por lo mismo, que lo mejor sería dejar las cosas así.

¿Y si Sooah tenía razón? ¿Si no me arriesgaba y luego me arrepentía?

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Espero les haya gustado, gracias por leer💜