-Hey, Kookie... -llamé sujetándolo del brazo, él me miró mordiendo su labio inferior. Se notaba lo incómodo que esto era para él, suspiré y tiré de su brazo para que me siguiese y ambos caminamos en silencio hasta llegar al baño de la agencia-. Necesitamos hablar

-Hyung... es que yo no... -se detuvo solo y tragó saliva-. No tengo nada que ver con esto, yo. Eish, es que ¿Cómo decirlo? No me interesa que pase entre ustedes, yo no hablaré acerca de lo que vi hyung

-¿Hablas en serio? ¡Kookie eres genial! -sonreí asombrado y me lancé a abrazar al maknae.

-Sin embargo... -habló de pronto, sin dejarme llegar a su cuerpo, sin dejarme completar aquel abrazo-. Hyung, nosotros somos amigos ¿Por qué no me habías dicho nada de esto antes?

-Yo... -ouch, golpe bajo.

-La palabra "amigo" es algo que realmente me ilusiona y lo sabes, pero entonces ¿Por qué me ocultas las cosas? -las lágrimas se agolparon en sus ojos y entré en pánico, hace mucho que no veía a Jungkook llorar y no quería ser el culpable de sus próximas lágrimas. Como él dijo, somos amigos.

-Kookie, lo lamento mucho y lo lamento en serio. Realmente nunca he tenido la intención de ocultarte las cosas, es sólo que... pues Suga hyung me pidió guardar el secreto, y un secreto entre él y yo es importante para mí ¿Puedes comprenderlo? Por favor, acepta mis disculpas, te quiero demasiado 

-Hyung, no tengo ánimos para esto, pronto debemos subir al escenario, no pienso tener mala cara frente a Armys -asentí mordiéndome el labio inferior y alguien comenzó a tocar la puerta.

-¡Hey, mocosos! Tienen cinco minutos para aparecer en los escalones -se escuchó decir con la voz del manager, Jungkook tosió y abrió sin cuidado, alejándose de mí.

El concierto dio inicio y creo haber visto al maknae llorar mientras cantábamos Born Singer, maldición.