Tomoyo tenía la mirada fija en el mago mientras este se distrajo con el sonido de la campana de la escuela, Eriol volvió la mirada a su acompañante cuando noto que no tenía planeado volver a clases sin escuchar lo que él tenía para decirle.

—No se como decirlo en palabras así que será mejor demostrarlo—dijo Eriol antes de acercarse a Tomoyo

El mago la miro a los ojos antes de  tomar su mano con el mismo impulso y un golpeteo incontrolable en el pecho se acercó para besarla. Era todo lo que podía hacer,  Eriol no se caracterizaba por ser un chico cursi ni tampoco muy expresivo,  su actitud misteriosa e impresionante inteligencia siempre le habían dado el papel de chico tranquilo y reservado, un papel que ahora había olvido casi por completo al actuar por instinto en lugar de razonar.

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El resto del día fue normal, sin presencia de una nueva carta ni nada fuera de lo común en las clases, solo lo habitual de no ser por dos razones.

La primera las miradas que Tomoyo y Eriol cruzaban cada vez que podían, ambos estaban nerviosos con la presencia del otro y no sabían cómo ocultarlo.

Lo segundo iba relacionado con lo primero y es que la actitud de ambos se debía a que no terminaron de hablar después del beso y tan solo con el recuerdo de aquel beso les ponía las mejillas de color ha ambos.

—El timbre de salida—dijo Sakura después de que sonará la campana

—Si—se apresuró a responder Tomoyo pero sin ser necesario

—Tomoyo vamos juntas

—Claro Sakura

—Iré contigo—decía Shaoran tomando su mochila

—Yo también iré con ustedes—Eriol se apresuró a ir también

Sakura asintió mientras Tomoyo intentaba no parecer nerviosa por estar cerca del mago, la verdad que no se sentía incómoda con su presencia pero si sabía que había una conversación pendiente entre ellos.

El grupo camino unas pocas cuadras antes de separarse en la avenida, Shaoran acompañaria a Sakura a su casa mientras que Eriol haría lo mismo por Tomoyo.

Los chicos se despidieron y por unos minutos todo entre Tomoyo y Eriol era silencioso, demasiado silencioso. Ninguno se atrevía a decir o comentar algo sobre el beso o un tema nuevo solo se dedicaban a caminar juntos por la vereda.

En ese mismo momento ubicado auto paso a toda velocidad amenazando con levantar el agua emposada en una de las grietas de la calle por donde Tomoyo y Eriol caminaban.

Eriol se movió rápido y atrajo a Tomoyo hacia él para resguardarla del peligro,  cuando el auto paso el agua cayo sobre él en lugar de mojar a Tomoyo.

—¡Cuidado!

—¡Eriol! ¿Estas bien? —dijo preocupada Tomoyo

—Lo estoy ¿Y tú estas bien?

—Si

Por unos minutos sus miradas se encontraron y no se separaron hasta que Tomoyo noto que la ropa de Eriol estaba mojada y debía cambiarse cuando antes para no pescar un resfriado.

Invitó a Eriol a su casa que estaba muy cerca del lugar y una vez ahí sus empleados los ayudaron buscando ropa seca y poniendo a secar el uniforme de Eriol con rapidez.

—Gracias—susurro Tomoyo al encontrar a Eriol en la sala de la casa y darle una toalla para su cabello

—No fue nada

Eriol recibió la toalla y no dijo nada más era claro que ninguno sabía como reaccionar a lo que había pasado antes pero Tomoyo decidio intentarlo.

—Dejame ayudarte, secaré tu cabello

—No es necesario—negó Eriol

—Pero quiero hacerlo—insistió Tomoyo tomando la toalla

Eriol asintió y Tomoyo se dedico a secar el cabello del chico con la toalla  ambos estaban frente a frente y pronto Tomoyo noto que Eriol solo se dedicaba a mirarla, ella dio un paso atrás pero entonces el mago tomó su brazo ahora ambos de miraban a los ojos.

Tomoyo cerro los ojos cuando pensó que Eriol la besaría pero algo inesperado sucedió.

—Me gustas—dijo Tomoyo cerrando los ojos

—Y tú a mi—Eriol se acercó a ella y le acomodo un mechón de cabello detrás de la oreja

Tomoyo lo vio a los ojos y ambos sonrieron,  en ese momento apareció su mamá.

—Buenas tardes querida ¿Cómo te fue en la escuela?

Eriol y Tomoyo se separaron rápidamente,  y la madre de Tomoyo saludo al mago.

—Oh tenemos visitas

—Buenas tardes señora—Eriol saludo rápidamente algo nervioso

Después de que Tomoyo le explicó porque había llevado a Eriol a su casa su madre lo invitó a quedarse y almorzar junto a ellas sin embargo Eriol rechazo su oferta al recordar que Ethan y Temara junto a Spi y Nakuru, lo esperaban en casa.

Se despidió de Tomoyo con beso en la mejilla y luego se fue,  esa fue la primera vez que el mago aceptó y se dio cuenta de sus sentimientos, pero aún había algo por resolver.

La presencia de Loid el nuevo estudiante,  Eriol estaba seguro que ese chico no llegó por casualidad a la escuela.

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Mientras Eriol analizaba la situación en su mente los juegos de los niños lo sorprendieron.

—¡Hey, más cuidado! —gritaba Spi

En ese momento un plato de comida callo encima de Eriol pero este solo se levantó y se fue a cambiar de ropa.

—Hay no,  ahora de seguro dirá que se vayan—murmurro Nakuru

—Si—decía Spi

—¿De qué hablan? Esto no fue nada,  deberían ser más comprensivos,  jajaja no hay de que preocuparse lo que tiene que pasar sucederá de todas formas, definitivamente hoy es un gran día—sonrió Eriol al irse

Tanto a Spi como a Nakuru les sorprendió la actitud tranquila y feliz que tenía el mago.

—¿Qué le habrá pasado?

—Quizá comió algo malo

—Será que... —susurro Ethan ha Temara

Los niños conocían muy bien a sus padres del futuro y el Eriol del futuro apesar de ser un poderoso y serio mago tenía un lado oculto que solo mostraba a su familia y a las personas cercanas a él,  en especial a Tomoyo ya que ella era la única que conocía su verdadera personalidad,  un chico bromista y amable.

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En casa de Akiho, celebraban la llegada de Loid el primo de Kaito sin embargo algo más se ocultaba tras la llegada de aquel misterioso chico.

Mientras Akiho se distrajo ambos chicos comenzaron hablar.

—¿Te encontraste con ellos cierto?

—Así fue—respondió Loid

—Su magia es muy poderosa, sin embargo... —decía Kaito refiriéndose a Eriol

—Lo sé—Loid le corto las palabras antes que Kaito terminará

—Recuerda que el amor no está en los planes—mencionó Kaito antes de irse

Pensamiento de Loid:
Demasiado tarde, me propuse no perder, menos contra él.

To Be Continued...