02: Sólo es tu imaginación

Asher comienza abrir sus ojos con dificultad, desvía la mirada al sentir los rayos de sol chocar contra su cara, ni siquiera cerro las cortinas, le dolía todo su cuerpo, en especial la cabeza, intenta levantarse pero cae de forma abrupta en el piso, siento un dolor en su espalda baja, su expresión cambia a una de terror.

No lograba recordar la cara de ese sujeto, ni su voz, pero es como si su peor pesadilla, corre a mirarse al espejo que tenía en su baño, observa las marcas de mordiscos, eran demasiados notorios, sus ojos se llenan de lágrimas mientras su puño impacta directamente contra el espejo rompiéndolo, no fue un maldito sueño, estaba seguro.

Siente tantas ganas de gritar, la noche anterior no recordaba mucho, solo esa silueta masculina que entro a su habitación y después.

-Carajo.

Iliana se despierta al escuchar objetos romperse en la habitación de al lado, llega a la conclusión de que su hijo se dio cuenta, pero aún así decide fingir.

-¿Estás bien, cariño?

-Maldición-Sale enojado de su habitación, de golpe abre la puerta, mira a su madre con rabia-¿Que pasó anoche?

-Te quedaste dormido temprano, así que aproveche para trabajar-Dice una mentira a medias-Descansaste como un bebé.

-No me mientas, Iliana, se lo que permitiste que pasará.

-No se de que hablas-Se hace la inocente-Te dormiste, listo, quizá solo tuviste una pesadilla muy real.

-Sí, por que las pesadilla te dejan mordidas.

-Seguro tu noviecito fue quien te las hizo.

Sabía perfectamente cuando la mujer mentía, justo como en este momento, así que decide darse la vuelta y salir de ese cuarto, se pone la primera ropa decente que encuentra, toma las llaves de la casa.

-¿A dónde vas? -Pregunta Iliana al ver a su hijo dirigirse a la salida.

El castaño ignora el llamado, su mano tenía unas gotas de sangre ya seca por culpa del espejo, pero tampoco le tomó importancia, comienza a caminar con una dirección en mente.

Quería solo llorar por la noche anterior, todo había sido tan real, su propia madre permitió que le pasara eso, no tenía pruebas más que sólo su palabra e intuición.

-Hey, idiota. Ten cuidado-Le gritó un hombre frenando su carro de golpe.

Asher solo ignora el llamado, termina de cruzar la calle, después de caminar unos minutos al fin llega a su destino, aun temblando entra al lugar, se acerca a una señora con el cabello canoso, ella lo mira al notar su presencia.

-Buenos días, ¿En qué te puedo ayudar?

-Quiero poner una denuncia-Responde decidido.

-Permítame un segundo-Toma un momento el teléfono, habla unos segundos con alguien-Mira, ves aquella puerta-Señala una puerta donde dice Ramírez-Nada más toca y entra, te tomarán tus datos y el motivo del porqué quieres denunciar.

-Gracias-Entra a la oficina, observa a una mujer de unos cuarenta años, se sienta frente al escritorio.

-Le tomaré su declaración.

-Lo que sucede es que yo-Toma un poco de aire-Estoy convencido de que me drogaron y de que abusaron de mí.

-Estabas drogado-La mujer alza una ceja, ríe negando-Niño, ¿Qué edad tienes?

-15 años, pero dentro de un mes cumpliré los 16-Se estaba comenzando a sentir incomodo-Yo, en serio quiero poner una denuncia, le estoy diciendo que alguien se aprovechó de un menor de edad.

-Mira, niño. Tengo cosas más importantes que hacer, no tengo tiempo para escuchar fantasías de un adolescente drogado-Asher agranda los ojos incrédulo-Y si en un lejano caso tu historia fuese cierta, aprende a ser un hombre y resuélvelo tú mismo.

- ¿No va a hacer nada?

-Por supuesto, llamare a tu madre para que venga a buscar al soñador que tiene como hijo-Toma un lapicero- ¿Cuál es su número?

Con una gran ira creciendo en su interior, solo se levanta de su asiento para dirigirse hacia la salida, se sentía tan enojado y roto, comienza a llorar sin darse cuenta, aun no podía creer lo que acababa de pasar, esa mujer simplemente lo ignoro, él estaba seguro de lo que ocurrió.

Una débil parte de él intenta convencerse de que realmente fue un mal sueño, pero exista evidencias, no podía ser un producto de su imaginación, su celular comienza a sonar, mira el número, su mejor amiga debería de creerle si le cuenta ¿no?

-Hola, me tenías preocupada, nunca faltas al colegio-Comienza a hablar apenas contesta-¿Estás bien?

-No, creo que necesito hablar con alguien.

-Haré un permiso falso para escapar de esta cárcel-Dice inmediatamente-¿Dónde nos vemos?

-En el centro comercial.

-Perfecto, te veo dentro de una hora.

Se sienta en una banca solitaria del parque, no podía parar de llorar, no le importaban las miradas de las personas, algunas expresiones eran absurdas, como si nunca hubiesen visto a alguien del género masculino llorar.

Intento calmarse un poco, necesitaba mantener su mente fría, Tina era una de los únicas personas en quien podía confiar en este momento, comienza a caminar en dirección al centro comercial, tendría que esperar en ese lugar casi una hora pero estaría más seguro que en su propia casa.

•••

-Odio tanto que Asher se parezca a ese hombre-Extiende las manos sobre la mesa esperando se secara el esmalte de uñas color rojo claro-Lo bueno, es que le puedo sacar provecho.

-Cuando me dijiste que min kattunge-Mi gatito-Recordó la noche de ayer, llamé inmediatamente a una amiga en la comisaría-Sonríe de lado-Lo ignoraron.

-Eres tan increíble-Lo halaga-¿Que significa min kattunge?

-Es solo un apodo-Se encoge de hombro-Tengo dos clientes para esta noche, así que será mejor que pienses como callar a tu hijo.

-Tranquilo, me aseguraré de destruirlo al punto donde va a ser la marioneta perfecta, el error que hoy me reintegrará el dinero que he utilizado.

•••
Observa a lo lejos a su amiga caminar, siempre transmitía esa aura de seguridad, no era que cumpliera con los estereotipos de belleza pero su personalidad había enamorado a más de uno, incluyendo a Jonathan, el mejor amigo de Saúl.

Para Asher todo era de un color blanco, puro, sin manchas, las personas que consideraba sus amigos eran buenos, pero aún era muy inocente en un mar lleno de tiburones hambrientos. La vida no era blanco ni negro, tenía una gran escala de grises, algunos más claros que otros pero gris después de todo.

-Me salte matemáticas por venir acá-La chica aun viste su uniforme de colegio-¿Que pasó? Cuéntame.

El ojiazul le tenía tanta confianza a su mejor amiga que nunca se había dado cuenta de la hipocresía de esta, de cómo siempre le había envidiado que la persona de la que ella se enamoro tuviese un amor platónico con él.

Si, al parecer un chico de nombre, Randal, ella se le declaró en un día de San Valentín y este la rechazo argumentando estar enamorado de un hermoso amigo de ella. Desde ese día lo ha odiado con todo su corazón, sin embargo no quería demostrarlo, la gente difunde muchos chismes y no quería ser tachada de homofobica, cuando solo era rencor hacia Asher.

-Tengo miedo, Ti- Sus ojos estaban levemente rojos e hinchados de tanto llorar-Anoche estoy seguro de que sucedió algo horrible.

-Puedes contarme lo que sea-Quizá pueda divertirme con tu sufrimiento, piensa en su interior-Para eso están los amigos ¿no?

-Creo que anoche un hombre abuso de mi.

Las palabras que salieron de su boca con vergüenza, fueron recibidas con un sentimiento de felicidad, así fue Tina estaba tan contaminada que se alegro por un delito que debería ser castigado con todo el peso de la ley.

-¿Como fue eso posible? -Pregunta sonando preocupada-Si es así, deberías denunciar inmediatamente.

-Creo que me drogaron-Responde no muy seguro-Cuando desperté, tenia marcas de mordidas en todo mi cuerpo-Siente náuseas de solo recordar su toque-Fui a la estación de policía, intente denunciar pero nadie me creyó.

-Debes entender que es difícil escuchar un caso como el tuyo-Tiene que morderse su lengua para no decirle lo que realmente piensa-Te aconsejo buscar otra solución, serias tan humillado si se enteran de tu historia.

Desde la perspectiva de Tina, si es que algo de verdad sucedió la noche anterior, estaba segura de que Asher lo disfruto.

-No puedo volver a casa, no hoy.

-Hagamos esto-La chica no quería que se quedara donde ella-Me quedo contigo en tu casa, cuando te des cuenta que es seguro, me iré.

-Pero...

-Vamos, no creo que vuelva a suceder.

El castaño estaba sorprendido por la actitud tan relajada de su amiga, no le importaba su sufrimiento, es más le pareció ver algo de satisfacción en sus ojos, niega levemente con la cabeza.

Imaginación, debe ser eso, no he podido dormir en todos estos días, me debo estar volviendo loco con este clima tan cálido en verano.

Se intento convencer que no volvería a pasar pero es algo poco probable, cabía la posibilidad de que estuviese perdiendo la cordura, quizá ingirió por accidente de la droga de su madre, salió por la noche y se encontró con alguien.

-No te preocupes, iré a dormir-Se despide el ojiazul rápidamente dejando a Tina confundida.

-Como sea-Saca su celular, con una sonrisa maliciosa marca el número de Saúl-Hola, perdido.

-Tuve que pedir permiso para ir al baño-Dice rápidamente-¿Que sucedió? Ni tú ni Asher vinieron a clases el día de hoy.

-Me surgió una emergencia familiar-Miente-Te iba a pedir un favor, cuando salgas, podrías ir donde Asher, estoy preocupada, no responde ni llamadas ni mensajes.

El chico al otro lado de la línea siente un vacío en su corazón, por supuesto que iría, el amor por su ahora ex novio seguía siendo igual de fuerte.

-Iré en cuánto salga.

La joven corta la llamada con una sonrisa en el rostro, si era verdad la historia de su castaño amigo, entonces Saúl notaría las marcas y se sentiría herido.

Debía admitir que el otro chico le caía bien pero su deseo por ver sufrir a Asher era aún más grande, el más bajito siempre había sido conocido por tener un carácter explosivo, ya podía imaginar su reacción.

•••
Cuando era pequeño tenía una creencia en esta vida existían tres amores que te iban a marcar.

El primer amor, ese que parece un cuento de hadas, donde deseas que todo sea para siempre como en las películas, es tan intenso que te aferras a el.

El segundo amor, ese que duele, deja una cicatriz en tu corazón. Es esa parte donde habrá mentiras, manipulación, engaños. Ese tipo de amor que te quita las esperanzas de volverte a enamorar.

El tercer amor es el que nunca habías previsto, dicen que suele ser tu verdadero amor, esa persona que saltará esos muros que construiste en tu corazón, que te enseñará una nueva manera de amar.

Por supuesto que Asher creyó fielmente que Saúl era esa persona, su amor verdadero, quizá aún no lo creía, el destino podía volverlos a juntar en algún momento.

No quería enamorarse de nadie más, comenzaría a crear un plan para en un futuro quizá volver a reunir con su amor, escaparía de las garras de su madre y de lo que sea que tenga ahora en esa mente tan podrida.

Cierra las llave del grifo cuando termina de bañarse, agradecía enormemente el hecho de que cuando llegó a su hogar su madre no se encontraba, no recordaba tampoco cuanto tiempo tardó bajo el agua.

Lo único de lo que está consciente es del timbre de la entrada, después de gritar un ya voy, se pone rápidamente unos boxers, estaba por buscar un pantalón y una camisa cuando vuelve a sonar.

Decide bajar las escaleras corriendo, si era uno de los estúpidos clientes de su madre, le cerraría la puerta en la cara, eran las tres de la tarde del día 23 de agosto del año 2014, cuando vería por última vez a Saúl antes de que se fuera al extranjero.

Sin preocuparse de vestir únicamente unos boxers, abre la puerta cometiendo el peor error de su vida. Saúl al comienzo estaba feliz de ver que estaba bien pero su expresión se borro al notar las marcas, era obvio que había pasado la noche con alguien más.

-No esperaba verte hoy...

-Eres un idiota-Le grita con los ojos llorosos, lo amaba, a pesar de que había dicho sobre terminar, tenía la esperanza de regresar en algún momento pero ahora-Creo que yo soy un idiota más grande, por creer que sentías lo mismo, no tardaste ni 24 horas en buscarme reemplazo.

-No es lo que tu crees-Se defiende, siente un nudo en la garganta-No podría hacer algo así, sabes muy bien que te amo.

-Estaba preocupado porque hoy no fuiste al colegio-Saca de su mochila un cuaderno, se lo tira en dirección a la cara pero el castaño logra atraparlo en su mano-Hasta conseguí esos estúpidos apuntes cuando ni siquiera somos compañeros de clase.

-Saúl, escuchame.

-Considere lo de una relación a distancia, me puse a investigar, sabes en algunos casos si funcionan, el amor sobrevive sin importar el obstáculo.

-Y nuestro amor puede superar esos obstáculos-Dice convencido-Podemos tener una relación estando lejos físicamente.

-¿Estuviste con alguien anoche?

-Si pero ya te dije que no es como tú piensas.

De pronto la figura de una mujer aparece en su campo de visión, está se acerca lo suficiente para escuchar parte de la conversación.

-Saúl, que gusto verte-Dice fingiendo un tono de voz suave-Pensé que tú y Asher habían terminado hace ya algunos meses.

-¿Meses?

-Mamá, esta bromeando.

-Lo he visto salir y besarse con varios hombres, uno diferente por noche-En ese momento el ojiazul quiere tanto gritar-Desde hace unos dos meses, pero bueno debí haberme confundido.

Dicho esas palabras entra a la casa tranquilamente, el color de la cara de Saúl podía ser comparado con el de un tomate, estaba rojo del enojo, desde que conoció a Iliana siempre le pareció amable y sincera, solo Asher conocía su verdadera naturaleza, por eso creyó sin dudar las palabras de esa mujer.

-No me vuelvas a buscar en tu vida-Un fuerte golpe llega a su mejilla izquierda-Ha sido suficiente.

-Le vas a creer a ella... ¿Y no a mi?

El más bajo solo da media vuelta para irse, no quería llorar enfrente de él, Asher pudo sentir su corazón quebrarse, deseaba tanto poder arreglar las cosas con Saúl pero ahora era imposible, todo había terminado tan mal.

Y todo por culpa de una persona, Iliana Williams, esa mujer parecía tener una obsesión con verlo sufrir.

Azota la puerta al cerrarla, se gira para encontrarse a su madre sentada en un sillón, como si nada pasará.

-¿Porque?

-Estoy harta de ti, me canse de fingir que podía ser una madre-Comienza a soltar veneno-Eres un maldito error que debí abortar, lo único que quiero es que me pagues lo que me debes.

-Pues debiste hacerlo, nadie te obligó a tenerme, ni mi padre te quiso-Un puñetazo llega a su mejilla derecha, ahora iba a tener dos marcas moradas en su cara-Si pudiera te daría todo el dinero del mundo si con eso me dejas en paz.

-Harás lo que te diga de ahora en adelante-Muestra su blanca dentadura-Conozco muchas amistades, puedo ser capaz de mandar a matar a tus amiguitos si no me obedeces. Así que agradece que Saúl me cae bien y lo aleje de ti.

-Lo de anoche...

-Si alguien pregunta solo fue tu imaginación.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top