Todo esté tiempo que he estado en peligro constante he aprendido una lección valiosa y es que; un buen polvo es necesario para aliviar el estrés. No bromeo, en este tipo de situaciones de vida o muerte, nunca se sabe cuándo va a ser la última vez que folles.

Así que hay que aprovechar cada momento que se pueda. Yo lo aplique, pero nunca creí que todos siguieran esa regla.

—Deja de mirarme así, Renata — Neytan me devolvió la mirada de enemistad.

—Mi amiga te odia, peludo, será mejor que la dejes mirarte feo a qué te ataque - Brand comentó y luego miró al lado de Neytan en dirección a Gil — ¿o quieres terminar como él?

Desvié mi mirada del perro sarnoso en dirección a mi estúpido, Gil se encontraba amarrado en una silla, amordazado con un trapo de cocina y con varios signos de tortura, bueno, no podría decir que pintar su rostro como payaso sea una tortura, pero... papá tiene métodos nazis.

Le hice un corazón con las manos, me se sentía mal al verlo así. Papá insistió en que era necesario castigarlo por su descaro y mala conducta, Brand, Lysander y Neytan lo apoyaron, cuando menos me di cuenta ya estaban todos sobre él y no pude hacer nada para ayudarlo.

Debo confesar que me divertí como nunca y eso era relajante en este tipo de situaciones.

—Bien, ¿qué sucedió cuando nos fuimos? — papá cruzo sus dedos y me miró atentamente.

—Fuimos atacados — cruce mi mirada con Gil, las palabras que estaba a punto de decir aún nos costaba creerlas, él desvió la mirada. Suspiré — por Leo y Jon.

— ¿Por quién? — papá preguntó con calma, pero no paso imperceptible como apretó sus manos.

—Por Leo y Jon — repetí, Gil esta vez asintió para reforzar mi palabra — Brand se levantó de golpe y agarró a Gil por la solapa.

— ¡No! ¡Mientes! — Cass también se acercó a él y lo enfrentó, confrontaron sus miradas por varios minutos, cuando Cass la desvió vi sus piernas doblarse y apenas alcancé a sujetarla en el aire y la senté en una silla — Ren, dime que no es cierto, por favor, dime que él no los ataco...

—Perdón, Cass, si te miento la verdad será más dolorosa después — mi amiga, gimoteó, cerró los ojos con fuerza y yo apreté sus manos como apoyo. Comprendo la dolorosa sensación de saber que uno de los tuyos te traiciona y no es lo que conocías. Cass, por lo que me ha contado Gil, es una de las más unidas a ellos, era la pequeña hermana que siempre han protegido y que aman con todo su corazón, y ella les correspondía, admirándolos y apoyándolos en todo lo que estuviera a su alcance.

— ¿Qué mierda están diciendo? — Brand, le agitó — habla, Gil. Despotrica toda la verdad de una vez.

—Brand, creo que si necesitas que diga algo, deberías quitarle la mordaza — Tina murmuró, el mencionado gruño y Gil alzo su ceja derecha y le dedico una mirada significativa, la cual decía idiota.

—Listo, habla ahora — quitó la tela bruscamente, el íncubo lamió sus labios para humedecer su boca, sentí un cosquilleo en mi entrepierna, ahorita no Renata, concéntrate.

Gil explico todo con lujo de detalle. Como peleó con Jon, como fui secuestrada por Leo y toda la osadía que vivió para rescatarme y lo que él descubrió:

—Deje que me capturara para llegar hacía Renata, me llevó al calabozo y me dijo muchas cosas, Jon, él... tiene mucho resentimiento hacia todos, en especial hacía la vieja oposición.

—Ese maldito de Leo... desde el inicio sugerí matarlo, pero el ego del rey lo creyó dominado — Lysander gruñó, el hastío era notorio en su ser, Van se quedó desconcertado, aún más que todos.

—Leo, independientemente de razas, es mucho más benevolente que muchos. Sé que debe de haber una razón tras de esto —Van defendió al vampiro.

—Yo también creo en él - coincidí. Gil me miró incrédulo — Leo es alguien que piensa en los demás antes que en sí mismo, como gobernante de la raza demoniaca debe traer muchas cosas tras su espalda, un motivo ante sus acciones desesperadas.

—Es un puto — Gil exclamo y se soltó de las cuerdas y del agarre de Brand para dirigirse a mí. Frente a frente, nos confrontamos. Estando yo sentada, la presencia del orgasmo andante, era aún más prominente —. No olvides que te secuestro y te acecho por tantos años, te mintió y utilizó para beneficio propio y...

— ¡Ay, por un carajo, Gil! — lo interrumpí, enfadada. Los celos eran evidentes en su rostro, pero sus palabras me resultaban incoherentes, y aunque decidí aceptar todo lo que sucedió entre los dos, no pude evitar que mi panza hirviese —. Cierra el pico, que utilizarme y engañarme es lo que han hecho todos conmigo.

Silencio. Pude ver como sus hombros temblaron y sus músculos perdían tensión. Gil volteó para otro lado y se sentó a un lado mío del sofá.

—Bien... ¿Conocen cuál es su objetivo? — preguntó papá, manteniendo una postura neutral, por mi imaginación paso la imagen de él como parte del ejército y me llene de orgullo.

Asentí.

—Venganza y poder.

— ¿Venganza? No me digas que Jon quiere... — Cass reconoció de inmediato las causas del accionar de su hermano, sabía que estaba relacionada a la muerte de sus padres — pero, ellos fueron claros. Nunca se arrepintieron de nada.

—No solo por eso, también sucedió lo de Nadia — el pecado andante añadió.

—Sí, lo supe. Intente evitarlo, pero cuando el rumor llegó a mí fue demasiado tarde — Van se lamentó en silencio.

— ¿Cómo fue? — pregunte, me sentí indiscreta, pero una parte de mi quería saberlo.

—No creo que sea el momento de contar una historia así, Ren — Brand negó acongojado —. Es momento de elaborar un plan.

Todos asentimos. Más no nos dio tiempo de planear nada más. Un gélido aire entró desde la entrada principal y allí, en un aspecto misterioso, un hombre encapuchado se encaminaba hacia nosotros.

—No necesitan otro plan más que su cooperación — murmuró el encapuchado.

Tina y yo fuimos cubiertas tras las espaldas de nuestros amigos, la mire y susurre; — ¿Hay sótano?

—Sí, pero no tengo la llave.

Mierda. Esta era la casa de Tina, se habían refugiado aquí cuando huyeron, pero me sentía indefensa. No había oportunidad de buscar la llave y asegurarnos allí. Necesito tele transportarnos rápido. Sujete su mano y la miré, sonreí: —Tengo una sorpresa que enseñarte — murmuré y concentré todos mis deseos en dirigirme hacia el sótano. Por favor, funciona...

— ¡Ah! — gritó mi amiga, segundos después llegamos a un lugar oscuro. Analice nuestro alrededor y por las cajas cerradas, el aroma a cartón mojado y la lobreguez del lugar me indicaban que me encontraba en el lugar correcto

¡Si! ¡Por fin puedo manejar las dimensiones a mi antojo! Grite internamente, emocionada, me dirigí a la esquina de la habitación, buscando algo con que defenderme.

— ¿Tienen armas aquí? — pregunte.

—En la repisa del fondo — contestó, acercándose a mí en la oscuridad. Buscando en la repisa, en una caja, se encontraban varias armas de cacería. Genial, sé cómo usarlas gracias a Cass, nunca lo he puesto en práctica pero nunca es tarde. Es hora de enseñarles a mis enemigos de qué lado masca la iguana.

—No planeas subir ¿o sí, Renata? — Tina me tomó del brazo con una ansiedad palpable.

—Tengo que hacerlo, Tina, es lucha de todos — murmuré con calma.

—Entonces yo también iré. Neytan me ha explicado que es lo que está sucediendo y no puedo ser indiferente. Esto afecta a todas las razas.

—Pero a ti no — la interrumpí —. Si piensas así es como decir que lo justo es que todos los humanos que viven su día a día ignorantes de lo que está sucediendo deben unirse a la lucha. Si fuese así no habría héroes y pelear con seres mágicos seria cosa normal y mi vida seguiría siendo aburrida. Me gusta defender a los míos, déjame protegerte, ¿sí? Ya vuelvo, iré por mamá.

No deje que me contestara. Abrí un portal de regreso, en la planta de arriba una batalla feroz se desarrollaba.

El sonido metálico del filo de las espadas chocando era fuerte y escalofriante. Nunca imagine ver algo sin igual, diferentes seres mitológicos estaban peleando enfrente mío. Hadas, demonios, elfos, todos batallaban arduamente. Busque rápidamente a mis amigos.

Papá y Van luchaban juntos contra un circulo de hadas que los tenían rodeados, Cass y Neytan atacaban a varios licántropos y Brand cuidaba la retaguardia de todos. Los ataquen mágicos eran brillantes y parecían fuegos artificiales, excepto por los de los demonios, que eran más lúgubres y negros.

— ¿Tú quién eres? Da igual, nos ordenaron matar a todos — tras de mí, apareció un elfo de cabello verde reluciente quien, sin terminar de hablar, me apunto con una katana. Mierda. Me prepare para esquivarlo o defenderme, lo que lograra primero, pero no fue necesario.

Una mano envuelta en un aura negra atravesó el estómago del elfo, segundos desoyes cayó al suelo dejando a la vista a Gil. Sonreí aliviada y me abrace a su pecho, él me abrazó protectoramente y pateó el cuerpo inerte en el suelo.

—Amigo, consíguete la tuya – dijo el incubo con la respiración entrecortada por el esfuerzo de la lucha.

Me reí entendiendo la referencia.

—Iré a buscar a mamá para llevarla al sótano junto a Tina — informe.

—Te cubriré la espalda.

Asentí. Prepare la pistola y nos dirigimos hacia la habitación donde la habíamos dejado dormida mientras charlábamos. En el camino varios enemigos cayeron.

—No sé cómo nos encontraron tan rápido — gruñó Gil, golpeando a un hada y arrancándole un ala.

—Saben todo de nosotros, lo raro seria que hubiesen tardado

Dimos la vuelta a la habitación y oímos un susurro antes de entrar. Me estremecí al recordar la voz. Mire a Gil angustiada. Adentro mi madre hablaba con alguien.

—La solución a todo esto es la exterminación masiva. Así ha sucedido todo el tiempo, cada guerra trae una nueva era.

—Leo... ¿estás seguro de ello?

—Lo estoy, pero para eso necesito tu ayuda. Renata aún es muy joven y no sabe controlar su poder, pero tú...

—Entiendo, lo hare. Terminemos de una vez por todas con esto.

Me asome, mamá y Leo estaban frente a frente, mirándose a la misma altura. Rebeca había regresado a su gorma adulta y supe de inmediato que la verdadera guerra había empezado.

¡Hola! ¿Cómo están criaturitas del señor?

¡He regresado! Hierva mala nunca muere, ya lo saben. Jajaja 

Traigo capitulo. Tuve bloqueo de escritor así lamento al demora, pero me esforcé y aquí tenemos el resultado, espero les guste. Espero volver pronto. Estoy editando más historias, pero son sorpresa, pero les daré una pista, a ¿ustedes les gustaría saber que paso con la pareja de Jon? ¿Quieren leer una historia llena de pasión, fantasía, amantes y tragedia? Dependiendo de su respuesta puede y venga historia nueva. Ya veremos, jejeje.

Les mando besos y abrazos. Cuídense. ¿Qué estarán planeando Leo y Rebeca?