Preámbulo: Sobre mí
Les doy la bienvenida.
Me he topado con que hay lectores que no saben de qué sexo soy, de dónde vengo o qué tan seria es mi incursión en la literatura. Traigo a la luz este blog wattpadiano para despejar esas inquietudes y publicar escritos sueltos. La recopilación, el género no ficción y el hecho de ser incompatibles con una unidad más grande, los une.
Conózcanme como Allis, una chica ecuatoriana que cruzó sus veinte y quiere mucho convertirse en escritora (formal). Es un placer. Pueden seguirme en las siguientes redes sociales con el mismo nombre de usuario que tengo aquí (safeterra): Instagram, Goodreads, Tumblr y Twitter. En Instagram subo noticias y publicaciones relacionadas con mis historias, mientras que en Goodreads notifico sobre mis lecturas y en los dos últimos me dedico mayormente a rebloggear/retwittear arte y fanarts. Si quieren enviarme alguna consulta vía e-mail, pueden escribir aquí: [email protected].
Estoy en Wattpad desde el 2014. Antes de eso no tenía experiencia escribiendo historias largas, así que no estaba segura de poder terminar lo que había empezado. Pero sucedió y en ese entonces estaba muy feliz.
En cuanto a lecturas, actualmente busco contenido sustancial y no solo entretenido. Tengo buenos recuerdos de mis experiencias con libros como El retrato de Dorian Gray, Kafka en la orilla, El perfume, El lenguaje de las espinas y Momo. La mayoría por razones distintas, pero seguramente algo tienen en común.
Según el MBTI mi personalidad es del tipo INTP, aunque bastante emocional. Soy una nerd a mucha honra.
Mi cumpleaños es el 11 de abril, por lo tanto soy Aries. Y de signo fuego tengo mucho. Chocas conmigo, sale una chispa, y ardo. Lo bueno para la persona con la que choco es que el incendio se queda en mí porque aunque mi naturaleza es peleona no me gustan los conflictos innecesarios.
Soy asexual y arromántica. Sí, suena absurdo considerando que escribo romance. Digamos que mi lado arromántico aplica en mí, pero no en los personajes que manejo. No obstante, si son observadores, se darán cuenta de que mis romances están más centrados en el crecimiento personal y en el fortalecimiento de la relación que en el auge romántico.
Demasiado perfeccionista para mi propio bien. Aunque no soy la más perfeccionista.
Fan de las historias de ficción. Anime y manga ocupan un lugar especial porque mezclan las cosas que más me gustan: escritura e ilustración. El anime tiene incluso música. Para alguien como yo, el buen anime es el cielo. [véase video en multimedia]
Tengo un historial escabroso de trastornos mentales. Las historias a partir de "E-mail" en adelante han sido escritas con mi cerebro en un estado de depresión mayor. Con "Enséñame algo más" retomé parte de la diversión de escribir y espero seguir recuperándome.
Hago playlists para todas mis historias y los ships que me gustan. Están en la cuenta de Spotify de mi hermano y pueden entrar directamente por el link en mi bio.
Tengo un título propio en escritura creativa. El "propio" es porque no fue una carrera y equivale a un diplomado, pero tampoco es formalmente un diplomado. Les diré las nuevas: sigo (casi) tan atascada y mediocre como antes pero fue una experiencia enriquecedora que agradezco.
Soy bastante crítica en el sentido narrativo, cohesión de trama y construcción psicológica. No juzgo tanto por el estilo o las elecciones del autor; como capítulos cortos, puntos de vista múltiples, uso de tópicos genéricos o historias llevadas por personajes; sino por cómo desarrolla la historia dentro de aquel estilo y elecciones. Por su puesto, una historia con elecciones únicas (distintivas y sobresalientes) es para mí una joya. Y las que exploran temas sociales, filosóficos, éticos y psicológicos las valoro como más sustanciales. No necesariamente mi anterior punto coincide con el último, El circo de la noche es un ejemplo de joya sin llegar a ser sustancial. El túnel y Los años de peregrinación del chico sin color son un ejemplo de sustancial sin llegar a ser joya.
Mi yo crítica desaparece cuando una historia o personajes de dicha historia me compran. Puede que porque sea joya, sustancial o una mezcla de ambos, o un poco de joya y/o sustancial de manera equilibrada, o esté demasiado bien construida y esa confluencia de elementos fuera lo que yo he estado buscando (quizá sin saberlo). En el momento en que una historia me compra, me vuelvo fan y defensora a muerte. Ejemplos de esto serían los libros de Leigh Bardugo, los cuentos de Samanta Schweblin, el libro El perfume y el manga Shingeki no kyojin. Incluso ahora un webcomic en WEBTOON llamado ExtraOrdinario. Ese cómic me tomó desprevenida por prejuzgarlo por su simplista y genérica apariencia y luego una noche me hizo llorar. Pocas historias para jóvenes juegan tan bien con la psicología y los sistemas de poder en una sociedad ficticia, logrando adaptar exitosamente personajes, trama y sociedad al world building.
Leo todos los comentarios que me dejan y aunque no esté activa publicando estoy revisando las notificaciones, editando borradores o corrigiendo capítulos publicados.
Mis capítulos están listos cuando mi mente me lo dice. Si siento que falta algo, no lo publico así parezca terminado, porque luego descubro qué faltaba. En otras palabras, trabajo con instinto e intuición cuando escribo, y no me arrepiento. Si me desespero y no me escucho a mí misma, el resultado es peor.
Y creo que eso es más que suficiente. Si tienen más preguntas, de cualquier tipo, déjenlas aquí y las responderé.
Allis fuera.
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