Un dia aburrido si no estas ahi

Jirou llego a su salón, ve que todos sus compañeros están en sus lugares, mira su asiento y camina hacia el

Deja sus cosas y suspira, ¿Por qué ella soñó con ese chico?

Ella no creía en cosas del destino ni nada de eso, concluye que solo fue un sueño tonto y trata de olvidarlo, ni siquiera sabe porque le pareció lindo un chico que creo con su mente


-¡Ey!, ¡Jirou!— Le llaman a su costado


Jirou voltea hacia la persona que le llamó

Primero vio un pelo rubio, pero después solo vio a Kawari Yatsuda, su compañero de al lado


-Te estaba llamando desde que entraste, ¿todo bien?

-S-si, solo tengo algo de sueño

-Te entiendo, yo anoche me desvelé jugando The legend of Zelda hasta las dos de la mañana

-Idiota

-Lo soy

-Si— Bosteza -¿Que clase tenemos primero?

-Biología

-Mierda, una clase aburrida

-Si... oye, ¿hiciste la tarea?

-¿De biología?

-Si

-Si la hice, ten— Le pasa su cuaderno

-Gracias Jirou, sabia que puedo contar contigo

-Es la única tarea que te pasaré en la semana

-Rayos, también te iba a pedir la de matemáticas

-No seas irresponsable y piensa un poco

-Lo intento, pero si pienso mucho se me funde el cerebro

-Se te nota


Kawari Yatsuda es hijo de unos empresarios; su habilidad para hablar es inigualable, ha ganado concursos de oratoria y exposición desde que tenia 8 años, su extroversión opaca al introversión de Jirou


-Oye Jirou— Mientras realiza la actividad asignada por el profesor

-¿Que pasa?

-¿Cual era la teoría de la panspermia?

-La teoría del polvo espacial

-a

-Oye, ¿y el profesor?

-Tuvo que ir a la sala de maestros

-Oh...


Ella estaba cansada, sus ojos le pesaban

Recoge su libro y cuaderno y cruza los brazos, se acuesta en su mesa y se relaja, iba a descansar un poco...


-Jirou, ¡Jirou!

-¿Mm?— Despertando -¿Que pasó?

-Ya todos se fueron, solo quedamos tu y yo

-Oh, entonces va...


Ella esperaba ver a Yatsuda, en ves de el vio a un joven rubio con sonrisa angelical


-¿Que pasa?

-N-nada... creo que estoy soñando

-¿Porque?, ¿Por qué ves al hombre de tus sueños enfrente tuyo?

-Idiota— Le golpea el hombro

Jeje... me alegra volver a verte

-No esperaba volver a verte

-¿Porque no?

-Es raro volver a soñar algo que ya habías soñado

-Tal vez yo sea un caso especial

-No creo, solo es una casualidad

-Mala

-Si claro, lo que digas, ¿nos vamos?

-No se, yo no controlo el sueño

-Yo si, ven, vámonos... oye, ¿Qué pasa si abro la puerta?

-No se, yo nunca he cruzado esa puerta

-...En mi sueño pasado ya había cruzado puertas, no creo que este sea diferente

-Si quieres inténtalo, yo no me moveré de aquí


Jirou abre la puerta, una luz la ciega, pocos segundos después ella abre los ojos y vuelve a su salón de clases


-¿Que...?— Adormilada

-Buenos días bella durmiente

-¿Yatsuda?... ¿cuanto...?

-Toda la clase de biología y civismo

-Mierda... ¿Qué clase sigue?

-Deportes

-Carajo... ¿me cubres?

-No mentiré por ti

-Eres bueno mintiendo

-Soy bueno improvisando, es diferente, y no lo haré por ti

-Por favor... te lo suplico...— Sobreactuando

-NO

-¿Ni por una Scooby-galleta?

-Ni por un país entero; ya no insistas y ve a los vestidores de mujeres, te veo en el gimnasio

-Malo


Jirou se puso su uniforme de deportes y salió al gimnasio, después del calentamiento y ya agotada, fue a las gradas, hoy tocaba practicar basquetbol, deporte en el que ella no era buena, en ninguno en general

Encontró una banca cómoda y se recostó, estaba cansada; empezó a cerrar los ojos y por fin pudo dormir en paz...


-Jirou

-¿Mm?— Despertando -¿Kaminari?

-Me da gusto volver a verte

-¿Que hacemos en el gimnasio?

-No se, supongo que aquí te dormiste

-Creo que si, recuerdo estar en clase de deportes, hasta tu traes el uniforme de deportes

-Es lindo, azul con líneas blancas

-Es horrible

-Es lindo

-No es cierto


Jirou le da un tour a Kaminari por el gimnasio


-...Y esta es la cancha de basquetbol, aquí se supone que tendría la clase de hoy

-Pero te dormiste

-Si

-¡Vamos a jugar!— Dice mientras sostiene un balón de básquet

-¿De donde sacaste el balón?

-Eso no importa, ¡vamos a jugar!

-Esta bien, pero te advierto que no soy tan buena jugando

-No pasa nada, nadie nace sabiendo todo

-Ok, ¿Cómo jugaremos?

-A 21 puntos, el primero que logre esos puntos gana

-Ok, como el póker

-Algo así, yo no soy de apuestas, soy mas de las que traes puestas

-¡¿Q-QUE?!

-Nada, ¡atrápala!


Kaminari le lanza el balón a Jirou, esta la atrapa como puede e inmediatamente el le quita el balón a Jirou y encesta tres puntos


-Easy

-Presumido, yo no soy buena en los deportes

-Es un sueño, tu puedes ser Madonna si quieres

-Mmm... un sueño...


Jirou aprovecho su imaginación y pudo sacarle un poco de ventaja a Kaminari al crear unos cables jack que salen de sus orejas, así pudo robarle el balón a Kaminari para después convertirse en LeBron James y hacer una canasta de tres puntos  

Kaminari no desaprovecho la poca limitación en la realidad de ensueño y logró que su cuerpo produjera electricidad para así correr rápido y robarle el balón a Jirou


-¡EY!, ¡tu no puedes hacer eso!

-¿Porque no?

-Porque es mi sueño... oye es cierto, ES MI SUEÑO 


Jirou aprovechó la localía y amarro a Kaminari con cadenas para que no se moviera y así ella ganó el juego 


-Así no vale

-Solo admite que te derroté

-Así no tiene chiste ganar

-¿Como?, ¿aprovechando que esto es un sueño?

-Solo en tus sueños ganas

-Eres malo

-O tu eres mala y solo en tus sueños puedes ganar

-Cállate fue divertido

-Eso si

-Por fin disfruté un deporte

-Son entretenidos, solo que practicarlos es un martirio para los que no son buenos

-Si... me alegra haberme dormido en clase de deportes

-Que rebelde

-Un poco


En cuestión de segundos, el cuarto se iluminó totalmente, Jirou abrió lo ojos


-Jirou, ¡Jirou!

-¿Mm?— Despertando -¿Que pasó?

-Ya todos se fueron, solo quedamos tu y yo

-Oh, entonces va... ¿Eh?


Deja vú


-¿Estas bien?

-Si... vámonos

-¿Y eso que te dormiste otra vez?

-Tengo sueño, es lunes y no quería venir a clases

-Vaya... o-oye, ¿tienes algo que hacer hoy en la tarde?

-No

-¿Quieres ir al centro comercial?

-Si, ¿Por qué no?

-Genial— Comenta emocionado

-¿A que hora?

-Paso por ti a las 4, ¿te parece bien?

-Si

-Bien, entonces vámonos

-Si


Ambos caminaron hasta la estación de metro, subieron juntos y después de unos minutos hasta que Yatsuda bajo en su estación, Jirou siguió en el tren hasta que llegó a su estación, se compró un bento y llego a su casa con hambre






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