Pov ARMY.

Estaba encerrada en mi habitación escuchando el nuevo MV de BTS, Butter. Después de una larga semana haciendo stream, logramos conseguir nuestra meta, aunque fue un poco díficil.

Durante toda esa semana no salí de mi cuarto nada más qué para comer e ir al baño, parte de eso fue porque estaba haciendo stream, pero otra parte fue porque no quería escuchar a mis padres decirme lo mismo.

Cada vez que me veían me decían que esos chinos gay me estaban volviendo más rebelde, que dejara de escucharlos. Muchas veces tuve que aguantar que criticaran y se burlaran de BTS, pero un día me cansé y les grité unas cuántas verdades en la cara.

Miré el póster en una esquina de mi habitación y sonreí, en mi familia no teníamos mucho dinero por lo que no me podía dar el lujo de comprarme cosas de BTS, pero eso no quería decir que no las hiciera. En mi habitación tengo varios pósters hechos por mi, imprimí unas cuantas fotos de ellos e hice mi magia. También tenía dos sudaderas y no fue porque las compré, sino que le pegué el logo y el nombre del a cada una. Mi teléfono y laptop están llenos de pegatinas de los pequeños de BT21 y de Tiny Tans.

Cómo estamos en cuarentena descargué varios Doramas y apps para aprender a hablar coreano. Mi mayor sueño es cuando cumpla la mayoría de edad viajar a Corea del Sur y conocer a mis idols, por eso llevo ahorrando dinero desde hace un año.

La canción que se reproducía en mi teléfono paró y a los segundos empezó a sonar por toda mi habitación mi canción favorita, We are bulletproof: The Eternal. La primera vez que escuche la canción me enamoré y cuando vi el significado de la letra me gustó mucho más, si es que eso era posible.

Comencé a cantar, cuando me llegó una notificación de Twitter. Desbloqueé mi teléfono y me alegré al ver que BTS había actualizado. Abrí la app y enseguida le di un corazón la publicación, guardé las fotos y luego lo compartí en todas mis redes sociales.

Desde que conocí a BTS esos 7 chicos se han convertido en mi mundo entero, en mi razón de ser. Me han dado algo a lo que aferrarme, me han dado un sueño, el cuál voy a cumplir a toda costa.

Mi vida social ya no es cómo antes, muchos de los que consideraba mis amigos se han ido de mi lado, pero ya no me importa. Al principio me dolió mucho. Me di cuenta que ellos no eran mis amigos de verdad, sin embargo, los que se quedaron a mi lado los tengo en un pedazo de mi corazón.

Miré la hora en mi teléfono y vi que era un poco tarde, estos días me estoy acostando más temprano para reponer energías y poder disfrutar desde el inicio del Festa.

Me acosté a dormir, no sin antes subir el volumen de las notificaciones en mi teléfono y en mi laptop, por si BTS actualiza o hacen algún live, poderme despertar.

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Unos murmuros a mi alrededor me despertaron. Abrí los ojos de a poco para acostumbrarme a la luz.

-¡Mamá ya despertó!-Escuché el grito de mi hermano a mi lado y luego unas pisadas que venían hacia mi habitación.

Me senté en la cama y miré hacia mi hermano y hacia mi mamá quién acababa de llegar. Miré a mi alrededor y no vi ninguno de mis pósters, cosa que me molestó porque pensé que mi mamá los había botado. Miré mi ropa y no tenía puesta mi sudadera de BTS, sino que llevaba puesta una pijama azul, con algunos detalles en morado.

-Mamá-Me miró-¿Dónde están mis pósters y mi sudadera de BTS?

-¿Qué pósters? ¿Qué es un BTS?-La miré incrédula y molesta.

Tomé mi teléfono para ver la hora y vi que no tenía ninguna de los stickers, ni la laptop tampoco. La rabia empezó a apoderarse de mí, si querían castigarme o darme una lección debieron de haberme quitado el teléfono o la laptop cómo hacen todos los padres, no tenían porque llegar a este estremo.

Escuché cómo cerraban la puerta de mi habitación, señal de que habían salido. Eso fue lo mejor que pudieron haber hecho. Encendí mi teléfono y lo desbloquee para escuchar música, pero al abrir la carpeta de BTS estaba vacía. Decidí no molestarme más y descargar las canciones otra vez, pero cuando busqué BTS no salía nada. Traté de buscar en varias apps, pero nada. Abrí Facebook, Twitter, Instagram y no había nada, no tenía ni una sola cuenta y cuando las hice de nuevo busqué BTS, no había absolutamente nada.

Decidí buscar en Google, pero me salía que no existía ninguna banda coreana llamada BTS y ninguna empresa llamada BigHit Entertainment o Hybe Labels.

Fue ahí que entendí, todo fue un sueño. BTS nunca existió. Sentí cómo mis ojos comenzaron a humedecerse, pero no hice nada por detener las lágrimas que luchaban por salir.

Sentí cómo mi corazón se rompió en mil pedazos y cómo mi pecho se oprimía de forma dolorosa.

Todavía no lo creo. Todo fue un sueño. BTS no existe. Ni Namjoon el destructor, ni Seokjin el WorldWide Handsome, ni Yoongi el gatito, ni Hoseok la esperanza, ni Jimin el lachimolala, ni Taehyung el Alien, ni JungKook el maknae de oro. Todo fue producto de mi imaginación.

Mi llanto se intensificó y no tenía indicios de parar. Este día lloraré cómo nunca antes lo he hecho, pero no me arrepiento de este dolor. No me arrepiento de haber soñado con una banda que aunque para todos sea ficticia, para mí es real. Para mí siempre serán siete chicos que lucharon hasta conseguir sus sueños de ser idols. Siete chicos que apesar de las críticas y de los prejuicios lograron salir a delante y convertirse en la banda más famosa de todo el mundo. Para mí siempre serán Bangtan Sonyeondan.

7 chicos a prueba de balas.

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Hola☺️.

¿Cómo están?

¿Qué les pareció este One Shot?

Este mini-fic se me ocurrió porque hay veces que me pregunto qué pasaría si todo fuera un sueño y BTS no existiera😔. Entonces me puse a hablar con una personita y comenzamos a hablar de eso, así que decidí hacer la historia.

La historia representa a tod@s l@s L-Armys cómo tal.

Espero estén pasando bien el Festa BTS😍.

Sin más que decir me despido😘.

Bye💜.