Capitulo 14
Semanas después...
El tema del matrimonio había quedado atrás, o eso yo creía, puesto que no se volvió a tocar en la casa.
Me había vuelto a sentir tranquila y hasta creía que tanto mi madre, como Juan Pablo habían aceptado el que yo tendría un bebe.
Había cumplido dos meses de embarazo y aquel día tenía hora con el médico, lo que me tenía muy ilusionada y también un poco ansiosa, ya que anhelaba saber cómo iba mi embarazo y mi hijo querido.
Tomé con amor el corazón del mar y me lo coloqué frente al espejo solo pensando en mi amado Joey.
Miré mi vientre aún plano y me lo acaricié.
_ Nuestro bebe Joey. Solo faltan siete meses más y tendremos a nuestro preciado hijo mi amor
El ginecólogo revisándome, mi corazón latió fuerte y rápido todo el tiempo. Solo anhelaba que mi bebito querido estuviera sano y fuerte.
El ginecólogo me miró y yo temí de su mirada.
_ ¿Pasa algo malo doctor? ¿A caso mi hijo no está bien?
_ El bebe está bien Stephanie, pero hay un problema – el miedo me invadió –
_ ¿Qué problema?
_ Por tus últimos exámenes de sangre, descubrimos que sufres de la presión alta
_ ¿Presión alta?
_ Así es y en tu estado es un poco peligroso. Deberás tener el mayor cuidado posible, tanto en comidas, y en no pasar malos ratos. Tu embarazo es de alto riesgo – pensé en Joey –
_ ¿Qué? Pero, no puede ser
_ Lo siento mucho, pero te mantendremos lo más cuidada posible. Lo primero que debes hacer es reposo los siete meses que te quedan de embarazo y tomarte todas las pastillas y vitaminas que te demos
_ Ok. Haré todo lo que usted me diga...
Triste por mí bebe, temía que le pasará algo y a punto de llorar, salí de la consulta y el ginecólogo llamó rápidamente a Joey.
_ Estaba esperando su llamada doctor ¿Cómo está mi mujer y mi hijo?
_ Su hijo está bien, pero a Stephanie le descubrimos que tiene problemas de presión alta – se preocupó de inmediato.
_ ¿Problemas de presión?
_ Así es
_ ¿Y eso qué significa?
_ Que su embarazo es de alto riesgo
Pensó de inmediato en mí y en nuestro hijo y más se alarmó.
_ No, no puede ser. Mi pequeña Stephanie. Ella ama a nuestro bebe doctor. No podría soportarlo si algo le llega a suceder
_ Solo hay que tener más cuidados con ella. Debe hacer reposo por el resto que le queda de embarazo y tomar todas las pastillas y vitaminas que yo le recete, además no debe pasar malos ratos
_ Comprendo. Yo me encargaré que así sea. Muchas gracias doctor. Estaré esperando su próxima llamada
_ Ok estimado
_ Por cierto, la transacción de su dinero ya fue depositada en su cuenta
_ Estupendo.
Cualquier cosa de mi mujer y de mi hijo me informa por favor
_ Así será Joey. Estamos hablando
_ Adiós doctor...
Más que preocupado por mí y nuestro hijo, añoró con todo su corazón irse de una vez por todas de aquel país y volver a mi lado para cuidarme, como tanto lo ansiaba.
_ Amor mío, nada de esto estaría pasándote si yo no hubiera sido tan egoísta. Si te hubiera llevado conmigo, ahora los dos estaríamos juntos esperando ese anhelado hijo, que los dos hicimos con amor
Las cosas se habían complicado y no podía viajar, ya que como cantante y líder de su banda, había firmado un contrato por millones de dólares por aquella gira de seis meses.
Destrozado y acabado, no tuvo otra que resignarse. A punto de llorar, vio que su sorpresa que me tenía, podría fracasar si a mí y a nuestro hijo nos pasaba algo. Reventó de tristeza y de ira.
_ Mi amor, mi bella Stephanie. Cuanto anhelo estar a tu lado y cuidar a nuestro hijo en tu vientre...
_ Tomás, ahora más que nunca debes vigilar y cuidar a mi mujer. No quiero que nada malo le pase...
Mareada, no me sentía nada bien. Ya había vomitado más de tres veces ese día y solo pensaba en Joey con todo mi amor.
Acostada en la cama, acaricié a nuestro hijo. Seguía temiendo que algo le pasara.
_ Oh mi vida. Cuanto desearía que supieras que si nuestro dulce acuerdo funcionó y estoy embarazada de ti...
Miré el corazón del mar en mi mano y tomé con cariño sus lentes. Los miré con nostalgia y los presioné en mi pecho.
Recordé nuestro último día juntos, cuando él me dijo que me amaba, pero que lo nuestro no podía ser.
Jamás entendí su actitud y solo volví a convencerme que solo se había reído de mis sentimientos.
Yo quería este bebe, pero nunca me imaginé que nuestro acuerdo se prolongaría por más tiempo y que él tendría ese "dulce trato conmigo", lo que me hizo enamorarme mucho más de él.
Aún recordaba sus últimas palabras y su triste mirada; luego cuando lo vi por última vez en la van, bajo sus lentes de sol.
Se me llenaron los ojos de lágrimas y me abrasé el vientre con amor.
_ Que daría por volver a verte Joey, porque estuvieras a mi lado y supieras de la existencia de este hijo tuyo que voy a tener.
Me volvieron las náuseas y no me pude aguantar y salí corriendo otra vez a al baño a vomitarlo todo.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top