Capítulo 13.
Capítulo 13. Mundo de los sueños
Akutagawa corría por Yokohama llevando a Atsushi de la mano, el albino seguía si entenderle pero no lo abandonaría, habían pasado 3 días más buscando — Akutagawa ¿a donde vamos?
— buscó una salida de esto
— tenemos 3 meses, puedes relajarte
— No, tú tienes 3 meses, yo tengo una vida por delante
— Akutagawa ¿por que crees que yo soy el mismo? ¿No dijiste que esto es un sueño? ¿Puedes confiar en mi? Estoy confundido...
— Jinko, estoy seguro que eres el mismo, el mismo qué pasó 3 meses conmigo
— ¿como puedes estar tan seguro de eso? ¿Y si solo me están controlando?
— estoy seguro... Por qué me dijiste que no querías estar lejos de mi
— E-Eso podría decirlo cualquier sueño
— Antes de dormirte, me dijiste "en las buenas y en las malas, te acompañare" — Atsushi se sonrojó — Creo que tu deseo es tan grande, tu memoria no me recuerda... Pero tú corazón si... — Akutagawa reaccionó — cierto, Suishi dijo que no podía meterse en los sentimientos, pero... que podía ver hilos, que el primero era el más importante
— ¿Eso significa algo bueno?
Akutagawa tomó al albino y lo abrazó — Seré buen chico, te protegeré — con ello el color de Atsushi era rojo.
— Vaya... e-eres muy
Akutagawa lo tomó nuevamente y volvieron a correr — ¿do-donde vamos?
— a saltar
— oh si... ¡¿QUE?!
Akutagawa llevó al albino a lo alto de un edificio — Jinko
— no, no, no
— Es un sueño. Todo estará bien
— ¿y si no?
— te veré del otro lado
— no, no — Atsushi lo tomó — no se, no lo sé. Akutagawa no quiero perderte
— Es lo mejor que puedes decirme...
Tomó al albino y sin preguntar, ni esperar, lo besó. Atsushi se sorprendió en grande, Akutagawa lo envolvió — ¿A-Akutagawa?
— hagamos feliz a Dazai-san
— ¿eh?
El azabache corrió con el albino entre sus brazos. Saltaron del edificio, Atsushi se aferró a Akutagawa. Cerró fuerte sus ojos
Los abrieron. Akutagawa en el suelo y medio cuerpo estaba sobre la cama y Atsushi abrió sus ojos, se miraron — Ryu...
— Jinko... — reaccionó — ¿cómo estás? ¿Puedes moverte? ¿Recuerdas algo?
Atsushi lo intentó pero nada — N-no — bostezo — tengo sueño...
— no te duermas, — dijo dándole palmaditas y cargándolo — debo recuperar tu energía, ¿pero como?
— ¿no dijiste que fue Suishi?
— ¿lo recuerdas?
— S-si
Akutagawa sonrió — Perfecto. — llevó al albino en sus espaldas
— Ryu, eso me da sueño
— ahorita todo te da sueño. Quieto. No duermas
Habían salido de la casa, corría lo más rápido que podía, — Jinko, Jinko. No te duermas
— Eso intentó, lo intentó — mencionó bostezando.
Llegó al edificio de la agencia y trago saliva — bien. Aquí vamos
Fue hasta el último piso encontrándose de primera con el presidente — ¡Por favor necesito ayuda!
Atsushi bostezo y miró al presidente — Por favor, presidente
— ¿Que está pasando? — preguntó — ¿Tiene algo que ver con tu desaparición por 5 días?
— un loco demonio esta tras de Atsushi, quieren matarlo para obtener mi alma
— ¿porque?
— por que... yo... le di mi alma y mi vida... a... él
El platinado se sorprendió, pero sabía que ese era Atsushi podía sentir lo débil que estaba — bien. Vengan.
— Primero hay que darle un café cargado para tenerlo despierto
Akutagawa le explicó todo con lujo de detalle al presidente de la agencia. Atsushi solo podía estar recargado en Akutagawa por lo menos el sueño se había esfumado — entonces son 3 meses
— es lo que creo, si no ¿por que me planeaban retener 3 meses?
— No Ryu, fueron cinco días
— ah si
— Ya veo, aún no han llegado los demás. Esperemos
— pero Atsushi
— estará bien, está débil pero no mal. Tiene 3 meses ¿no?
Akutagawa bajo la cabeza y se puso de rodillas frente al mayor — perdóneme, haré todo en mi y
— Ryu — El azabache giro a mirarle. Atsushi estaba acostado en el mueble
— Jinko, perdón
Akutagawa lo acomodó, el presidente sonrió ligeramente — no tienes que disculparte. Nada es malo. El único malo es el ser que te engaño. Es bueno verte así; me recuerdas a alguien de mi pasado...
Akutagawa se sonrojó, Atsushi le sonrió.
Los miembros de la agencia fueron llegando poco a poco, Yosano fue la primera en revisar a Atsushi; no mencionaría nada sobre lo qué pasó entre ellos, pero si que todos sus signos estaban bien — Ranpo ¿tienes algo en mente? — preguntó Fukuzawa
— bueno, ya que quieren el alma de Akutagawa solo hay que matarlo, ¿no? — mencionó Tanizaki
— ¿Quieres morir Niño? — preguntó Akutagawa molesto
— No, eso no funcionaría, por que aquí el perro de la mafia le entró su vida a Atsushi. Además dices que tiene la energía de Atsushi colgando de su cuello. Así que no importa si muere, no puede hacer un trato con Sátanas
— pero Atsushi-kun podría
— Ya veo por donde vas Dazai — mencionó Ranpo — de acuerdo, Atsushi, harás trato con esos demonios; Perro rabioso, necesito tu firma aquí, garantiza la seguridad de Atsushi — decía Ranpo. El azabache se acercó a dejar su firma en el papel
— ¿eh? — Atsushi los miró con sueño. Sus ojos se cerraban, fue cuando Yosano le inyectó adrenalina — ¡AH!
— Que salvaje. Quiero hacerlo — dijo Akutagawa con la pluma en la mano
— tenemos un plan, Atsushi mantente firme
— e-eso hago, gracias Yosano-sensei — mencionó parándose — Entonces... ¿solo haré un trato con ellos?
— si, confía en nosotros
— Akutagawa llamalos en el parque, que sea amplio
— Si Dazai-san — tomó la mano del albino — vamos Jinko
— voy, voy — se quejó, — no me jales como trapo
— se ven lindos — dijo Kenji mientras ambos chicos se iban.
Pasaron al departamento del mafioso, tenía que tomar aquella campana. Una vez en el parque, el azabache tomó la mano del albino — Ryunosuke, ¿Que pasa?
— Jinko... — apretó su mano — se que te metí en esto, haz el trato que sea con ellos, dales todo de mi si es necesario para salvarte; pero... por favor, no dejes que me hagan dejar de amarte
Atsushi se sorprendió, sus ojos comenzaron a lagrimear — ¿Que estas diciendo? — preguntó entre llanto, abrazó al azabache — no, tu no puedes dejar de amarme. Eso jamás...
Tomó las mejillas del albino para besarlo, cerraron sus ojos y después se miraron con gran devoción — ten cuidado
— Lo haré
La campana sonó. El humo negro apareció y con el, Sora, es decir, Sátanas
Atsushi se sorprendió y tragó saliva — Sora
— Atsushi, Akutagawa, que alivio verlos bien.
— No quieras engañar a Jinko, Sátanas
— ¿eh? ¿Sátanas?
— Lo siento Atsushi; siempre fui el mismo Sátanas
— Ya veo...
— pude escuchar que estas dispuesto a hacer un trato conmigo, devuelve el alma y hablaremos del trato
— No, necesito mi energía, entonces les daré el alma
— ¿desconfías de mi?
— Claro, eres un demonio. No puedo hacerte daño, ¿me equivoco? Dame mi energía y te daré el alma
— Bien, eres inteligente. — chasqueó sus dedos y Suishi fue quien llegó
— Atsu, cuanto tiempo sin verte — le menciono alegre
— Ese día... ambos fueron tan amables..
— si, bueno, ya sabes; soy un ángel caído. Se ser amable — respondió sonriente
Atsushi trago saliva solo de verlos juntos; Suishi mientras se quito el collar con su energía y la abrió. Ella cálida y linda luz fue directo a Akutagawa este se sorprendió — suele ir a quien la tomó. — le dijo Suishi para resolver su sorpresa — tienes que dársela.
Atsushi lo miró y Akutagawa le sonrió. — lamentó haberla tomado — mencionó el mafioso devolviendo la energía a Atsushi. Este le sonrió
— puedes quitármela cuando quieras
— regresando a nosotros — interrumpió Suishi
— Queremos el alma de Akutagawa
— Si, — respondió Atsushi — ¿Que debo hacer?
— Bueno, eres un humano con el alma de otro. Haciendo trato con Sátanas... es algo muy sencillo realmente. Solo di que me la entregas
— Yo te entrego el alma de Akutagawa — Un cable salió de la nada, llegando a la espalda de ambos menores y electrocutándolos
Ambos cayeron mientras Sátanas miró alrededor — Querido Sátanas, cuanto tiempo sin verte
— Dazai, cuanto tiempo. ¿Haz planeado esto?
— Así como siempre te he engañado, hoy solo vine a ver lo que hacías con mis discípulos; esto no se quedará así — mencionó serio
— ¿electrocutándolos para que no vean tu verdadera cara? Eso es muy de ti — comenzó a reír — tengo el alma que quería, ahora tu eres el perdedor
— amor, vámonos, ese tipo no me agrada — dijo Suishi
— claro. Adiós, Osamu Dazai
Ambos demonios desaparecieron, Dazai les miró — ¿como están?
Akutagawa se levantó — me duele todo y — miró a Atsushi — Jin... ¿que? — le miró sorprendido, a su lado estaba Tanizaki
— eso dolió muchísimo — se quejó Tanizaki
Atsushi llegó por atrás abrazando al mayor — Akutagawa, estas bien
— ¿y tú? ¿Y el?
— cambiamos de lugar justo antes del trato — le sonrió el albino
— mi habilidad es la mejor de las mejores — dijo Tanizaki
Akutagawa sonrió ligeramente — es la primera vez que me alegro de ser engañado
Atsushi y Akutagawa se abrazaron, a ellos llegó la agencia — ahora, tomemos el tema de esto — dijo Fukuzawa para ambos menores
— oigan — interrumpió Kenji — ¿entonces que alma se llevaron?
Todos miraron a Dazai y este comenzó a reír — aaay tengo ganas de un buen sake — mencionaba mientras se iba
— DAZAI VUELVE AQUÍ — le siguió Kunikida
Fukuzawa volvió a ver a los menores — como sea, la agencia habló. Mientras no te entrometas en asuntos de la agencia, eres bienvenido a amar a quien tu corazón quiera
Akutagawa sonrió, se levantó y se inclinó — se lo agradezco. — Atsushi se levantó también y se inclinó dando gracias.
Quedaba mucha vida por delante.
...
La realidad era realmente que: quedarían atrapados en el mundo de los sueños, Atsushi moriría, y Akutagawa también; su alma iría directo al infierno donde serviría a Sátanas... pero creo que ya les he dado mucho dolor en otros fanfics
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top