10° Cada uno vueve a su casa; los verdaderos sentimientos de Isogai




× En Nayoga:



Había llegado el día en el que Isogai volvía a su casa, después del beso no había vuelto coincidir con Hiroto.



Antes de marcharse Isogai se acerco a la habitación de Hiroto y golpeó en la puerta; al no obtener respuesta, golpeó la misma con la cabeza.



Isogai - muy triste - adiós Hiroto - golpeando la puerta con la mano suavemente - perdóname... por favor... - suspirando - nos vemos.



Hiroto estaba al otro lado de la puerta sujetandose el pecho, su corazón latía a cien por hora escuchando la voz lastimera del rubio, no sabía porque pero no podía fiarse de ese chico.



A la noche volvería su otro compañero, así que tal vez saber si su amigo había avanzado algo con el hombre que le gustaba tal vez le animase un poco.



Cuando oyó como se cerraba la puerta se deslizó hacia abajo quedando sentado en el suelo con una sensación de vacío intensa, pero ¿porque sentía eso?



Llegó la noche ya era tarde, justo antes de salir de casa dirección de su trabajo llego Souchi y como tenía prisa casi no pudo hablar con él ya se pondrían al día en otro momento.



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× En Hamamatsu:



Un contentísimo Tetsuhiro regreso al apartamento que compartían con un par de compañeras de clase.



Los dos estudiantes que siempre le molestaban le estaban esperando en la puerta y ambos se pusieron a un lado cada uno.



Como siempre le hicieron insinuaciones de que debía dejar a ese viejo y empezar algo con ellos, que no les importaba compartirlo.



Tetsuhiro les miro algo enfadado por su insistencia, se deshizo de esos dos y entro en la habitación, se tumbo en la cama para recrear todo lo que había pasado con Souchi esos días.



Soltó un gran suspiro al recibir un mensaje de él diciendo que ya había llegado a casa a salvo.



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Los días siguientes se debía centrar en los estudios y en un trabajo que le habían mandado, esperando que hubiese una próxima visita de Souchi eso hacía que estuviese más animado de lo común.



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× En América:



Después de la época de exámenes un exhausto Tomoe se centraba en recuperar sus energías y esperar sus calificaciones.



Mientras Kurokawa terminaba de prepara la sorpresa que tenía preparada para él un viaje de novios.



Cuando ya lo tenía todo preparado se lo dijo a su marido que se emociono al saber que tendrían un viaje los dos juntos y solos.



Así que preparo las cosas para el viaje, mientras Kurokawa pedía los días libres para poder hacer dicho viaje.



Cuando ya estuvo todo listo ambos realizaron ese viaje de novios que tenían pendiente.



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× En Shinjuku:



Un entristecido Isogai llegó a su casa, tenía una desagradable sensación; le había gustado mucho besar al peli rojo, pero ¿porque? ¿no era que le gustaban las chicas?



Así que decidió aceptar por fin una invitación que le había echo una colega unos meses atrás.



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El día de la cita él estaba algo ansioso, fueron a dar un paseo por la ciudad, la llevó hasta un bar a tomar una copas.



Cuando ella se colgó de su brazo tubo ganas de quitársela de encima, pero se contuvo ¿que le pasaba? nunca antes le había pasado esto.



La acompaño hasta su casa, en la puerta fue ella le que le dio un beso en la boca, pero en vez de seguir con el beso como siempre, la aparto con cuidado, al mirarla vio la cara del peli rojo y hay supo que es lo que debía hacer.



Isogai - lo siento - mirándola - pero no puedo seguir.



Chica - triste - hay otra persona ¿vedad?



Isogai - la miro triste - lo siento... - desviando la mirada - no es tú culpa - soltando sus manos - yo... - mirándola - necesitaba aclararme - sonriendo sin ganas - así que te doy las gracias, por eso - dándole un beso en la mejilla - nos vemos.



Al salir del apartamento supo que debía pedir a su jefe un contrato de más tiempo en ese lugar, debía conseguir ver de nuevo a ese chico.



Tal vez pudiese tener algo con él y averiguar si eso era lo correcto.



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Al día siguiente su jefe le dio una cuenta de un cliente que necesitaba tenerle en el mismo sitio por tres meses, casualmente era en la ciudad del peli rojo.



Lo bueno fue que él no lo tubo que solicitar ahora solo tenía que decírselo a Souchi, para poder estar cerca del peli rojo.



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× En Fukuoka:



Mientras estos dos cada vez pasaban más tiempo juntos, tenían más citas y hacían el amor casi a diario.



Un día Masaki consiguió por fin cambiar el turno en la tienda así podría pasar más tiempo con Kunihiro.



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Después de un largo día de trabajo en la tienda Masaki llegó al apartamento para preparar la cena de ambos.



Cuál fue su sorpresa al ver que la llave no estaba echada ¿seria que Kunihiro había salido antes? mejor así podrían hacer la cena juntos ya que no lo podían hacerlo a menudo.



Al entrar en el apartamento se quedó muy sorprendido había una fila de velas que iluminaban el lugar, las empezó a seguir hasta el salón que estaba decorado igual.



De repente visualizo a su pareja sentado en el suelo enfrente de la mesa.



Masaki - aún sorprendido - ¿que es esto Kuni?



Kunihiro - siéntate anda.



Masaki se sentó muy nervioso y degustaron la cena mirándose de reojo de vez en cuando, sonrojados.



Masaki recogió las cosas, mientras Kunihiro puso algo de música.



Masaki entró de nuevo al salón fue entonces cuando Kunihiro puso una rodilla en el suelo y sacó una cajita.



Kunihiro - carraspeando - en este tiempo te has convertido en alguien muy especial para mi - abriendo la cajita - ¿te casas conmigo?



Masaki - con los ojos como platos - kuni... - sonrojado hasta las orejas - yo... - sonriendo ampliamente - si... quiero...



Kunihiro le coloco el anillo en el dedo correspondiente, luego se levanto rodeo a su pareja con sus brazos y le beso en los labios suavemente.



Ambos se miraron amorosamente, sonriéndose, acariciándose tiernamente, poco a poco fueron yendo a la habitación donde se demostraron su amor.



Ambos abrazados en la cama.



Masaki - mirando el anillo - es muy bonito.



Kunihiro - acariciando su mejilla - no tanto como tú.



Masaki - mirándole muy sonrojado - idiota... - sonriendole - me haces tan feliz.



Kunihiro - con una pequeña sonrisa - ¡umh! - mirándole serio - ya puedes ir cogiéndote rápido varios días libres para ir a Canadá.



Masaki - mirándole - ¿y cuando quieres ir?



Kunihiro - en su oído - cuanto antes mejor.



Masaki - acariciándole el pelo - si... mi amor...



Cuando Kunihiro escucho esas dos palabras se lanzó a la boca de su prometido iniciando un beso demandante.



Ahora solo les quedaba preparar todo para su enlace.



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× En Nayoga:



Un día un compañero de la universidad le propuso a Souchi un proyecto que no pudo rechazar.



Profesor - oye profesor Tatsumi, me acaban de llamar de la universidad Hamamatsu para pedirme a alguien que vaya a dar un curso de tres meses de agronomia - dándole los papeles - ¿le interesa?



Souchi - cogiendo los papeles - leeré la propuesta y le daré mi respuesta lo antes posible.



Profesor - ¡oh! me alegra oírle decir eso, necesito su respuesta la semana que viene.



Souchi cogió los papales y se fue al apartamento; en ese momento coincido con Hiroto y se lo contó.



Hiroto - ¡oh! es una buena oportunidad - mirándole de reojo - tal vez así puedas aclarar las cosas con Angel-kum.



Souchi - cuando oyó ese nombre {tum-tum} - ¿a que te refieres?



Hiroto - bueno... - jugando con sus dedos - vosotros no habéis definido vuestra relación ¿no?



Souchi - sorprendido - no...



Hiroto - mira voy a ser sincero - rezando para que no le mate - Angel-kum es un buen chico - desviando la mirada - por ahora él va a esperar por ti - sudado - pero eso no será eternamente - arrastrándose en el sofá hacia otro lado - se puede cansar de esperarte.



Souchi se le quedó mirando sorprendió era lo que le había dicho Isogai; ambos tenían razón.



Souchi - tienes razón - suspirando - lo hablaré con él - mirándole - y tú que me dices ¿has vuelto a saber de ese chico que me contaste?



Hiroto - menos nervioso - no, no le he vuelto a ver.



En ese momento el teléfono de Souchi empezó a sonar y cuando el peli rojo vio de quien se trataba no pudo evitar ponerse un poco rojo.


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