La tumba llevaba una corona triple de flores rosas y blancas. Gran  parte de los ninjas más reconocidos se encontraban presentes, Lee con las Kunoichis lloraban silenciosamente entre ellas abrazándose. Los demás ninjas se encontraban parados en silencio.
Pero el sostenía a su hijo Ryuu de 9 meses en los brazos y Keiko su hija de casi tres años se mantenía parada frente a él aceptando con una inclinación las condolencias mientras gruesas lágrimas pasaban por sus ojos.

Toda la familia Hyuga sostenía velas y mientras transcurría el tiempo estas se derretían. Los invitados se comenzaron a retirar y los más cercanos reiteraron sus condolencias a Neji. Entre los ancianos que iban saliendo podía escuchar sus comentarios.

"Pobre muchacho, apenas tan joven y viudo"
"Apenas tres años de casado y pasa esto"
"Aún le queda mucho por vivir"
"Fue demasiado pronto"
"Ojalá pueda con la responsabilidad"
"El más pequeño tiene meses, ¿Que sabe el de pañales?"
"No durará mucho tiempo solo, después de todo alguien debe criar a la pequeña Keiko"
"Las nuevas generaciones se toman hasta el matrimonio a la ligera"

Sujeto con firmeza a sus hijos, sintiéndose orgullosos de ellos y la familia que había logrado formar y aunque ella ya no estuviera no se iba a dejar caer por simples comentarios. Tanto Tenten como el  siempre estuvo conscientes de sus actos, y si se pudiera lo volverían a hacer.
Después de todo esa fue última
conversación con su esposa.

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— El día está hermoso afuera.— Neji recorrió la ventanas de la habitación de su esposa para que entrara la luz de la mañana— Keiko hizo esto para ti,— dijo sacando un dibujo de su familia y mostrándole a la kunoichi que se encontraba recostada en la cama.

— Mira todos esos colores...— ella sonrió.

— Me dijo que le gustaría ponerlo ella misma en tu pared.

Ambos miraron a dicha pared que estaba hasta el tope de dibujos.
Ambos sonrieron.

— Asegúrate que su vida siempre tenga color Neji.— su esposa lo sostuvo de la mano.

—Ambos lo haremos...

—No, Neji.— le interrumpió.— voy a morir pronto, pero si pudiera hacer todo otra vez lo haría exactamente igual.

Neji se quedó mudo ante las palabras de su esposa.

— Tú y yo sabíamos que esto iba a suceder.

El asintió dándole la razón.

~~~

Sintió la presencia de su prima a su lado.— No les tomes en cuenta— Hinata con el vientre inchado por 3 meses de embarazo de sostuvo al pequeño Ryuu en sus brazos.

No tenía porque explicarlo Neji sabía que se refería a los ancianos.

—No lo hago.

–Sabes que somos familia y la familia se mantiene unida, puedes venir a nuestra casa con los niños cuando quieras.–Ryuu comenzó a Refunfuñar para comenzar un llanto que fue incrementándose —ya ... ya... soy la tía Hinata...Ryuu...

El Hyuga lo considero.
Su matrimonio con la maestra de las armas fue alegria sin embargo algunos miembros aunque no se oponían como tal no estaban muy de acuerdo.
Tenten solía sentirse incómoda, pero trataba de no expresarlo, jamás haría que Neji eligiera abandonar su responsabilidad como representante principal del bouken para estar con ella, vivieron unos meses así hasta que Neji se enteró del trato no debido de su esposa.
Por lo que el joven matrimonio se terminó mudando a una casa apartada, donde desde ahora solo vivirían el y sus hijos, por otra parte Hinata y Naruto también habían decidido vivir fuera de la casa del clan Hyuga, no sabía sus motivos porque respetaba la privacidad del matrimonio.

Ya con el llanto desconsolado de su hijo no lo resistió más y lo quitó suavemente de los brazos de Hinata.—Lo voy a considerar. —Ryuu comenzó a dejar que su llanto se volviera más tranquilo.

—Estoy segura que eres un gran padre Neji, Tenten estaría muy orgullosa de como manejas la situación. –Dijo para después inclinarse levemente hacia Keiko.— Eres una niña muy fuerte, igual que tú madre.

Keiko agradeció secándose lágrimas y con una inclinación.—Gracias.

Hinata le sonrió para avanzar de
regreso con  Naruto y su hijo Boruto de casi dos años.

El lugar se quedó vacío en poco tiempo y era hora de que Neji se despidiera cerró los ojos aquel triste día nublado. Y recordó, cuando la vio por primera vez, sus primeras interacciones donde el era muy cerrado y egocéntrico, cuando comenzó a sentir curiosidad por su compañera, los exámenes, promesas, sentimientos, extrañar su compañía casi al mismo tiempo que se habían separado, conoció los celos, la preocupación pesada y agotante, la felicidad en su sola compañía y el arte de vivir la vida, hasta el deseo de compartir la para siempre, le había dado dos hijos y no pudo haber pedido más felicidad que esa.

—Gracias Tenten.—sintio una gran masa de tristeza y deseo de llorar en su garganta pero lo retuvo con mucho esfuerzo. Dio una ligera inclinación para no molestar a su hijo menor y abrío los ojos. Miro a su hija que parecía muy concentrada. —¿Listo?

Abrí los ojos y miro a su padre.—Si

—Volvamos a casa.

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Como prólogo es un asco pero una buena manera de justificar un capítulo chikito.

Espero que les vaya a gustar :,)

Avisen errores plox✨