Pedido anónimo: Órdenes de la suscriptora.

¿Cómo reaccionaría Stray Kids estando en un momento subido de tono, pero en ese momento tienen que irse a ensayar pero al llegar terminan la acción?

«Yang Jeong In»

Se frustró al momento de los dos haber quedado con las ganas del todo. Claro, todavía más frustrante era tener que esperar hasta la noche para poder continuar con lo que una vez empezaron, y diría él, con un simple juego inocente.

Al llegar a casa no dudaría dos veces en hacerte saber que había estado esperando el momento durante todo el día y que tanto él como tú, estaban deseando que este momento llegara.

—Ven aquí, tenemos asuntos pendientes..

«Kim Seung Min»

Se sintió tan pesado e incómodo tener que pararte todo porque tenía que volver a su trabajo. Lo que restaría del día pasaría extrañándote y lamentándose por haberte hecho parar. En fin, un día que faltara no sería mal, pero sabía que igual lo harías irse.

Cuando llegó a casa, lo primero que hizo fue buscarte, quiso volver a tocarte y sentirte, así que una vez que te encontró te besó profundamente, haciéndote saber lo mucho que te extrañó durante todo el día.

—No tienes ni idea de cuánto me arrepiento al haberme ido.

«Lee Felix»

Siendo sincero, ninguno tenía intenciones de parar y de hecho estaba dispuesto a faltar a sus ensayos para estar contigo, pero su teléfono no paraba de sonar con llamadas de Changbin, preguntándole donde estaba, así que tuvo que irse.

Su humor durante el día no sería el mismo, puesto a que realmente quería estar contigo, por eso cuando llegó, por primer instinto te buscó y continuó con aquello que dejaron inconcluso y que los dos esperaba desde que comenzaron.

—La próxima vez no habrá quite, no le responderé a Changbin.

«Han Ji Sung»

Odiaba el hecho de tener que dejarte así, y por supuesto que a él también. Estuvo furioso por tener que dejar aquel trabajo incompleto para seguir con sus prácticas. Anhelaba sus días libres todo para pasar tiempo contigo y jugar un rato, como a los dos les gustaba.

Tras asegurarse de que estaban los dos solos nuevamente no dudó en continuar su acción. Por eso te tomó por sorpresa cuando estabas duchándote, no le importó y quiso seguir contigo.

—Escucha, tenemos algo pendiente y ya no resisto, tu decides.

«Hwang Hyun Jin»

Si bien es cierto, él tenía dos pasiones, la primera, el baile y la segunda estar contigo, pero odiaba cuando tenía que elegir entre las dos. Obviamente te escogería a ti, pero su trabajo, bueno, Jeong In, le harían básicamente dejar todo ahí y esperar.

Una vez estando solos no dudaría un segundo en ir por ti. Si había alguien o no, realmente no le importaba, sólo quería estar contigo y se aseguró de que lo supieras en cada beso que te daba, así que estaban dispuestos a terminar aquello que empezaron.

—Prometo no volver a dejarnos así, la próxima llegaré unos minutos tarde.

«Seo Chang Bin»

Odiaba con toda su alma tener que esperar más tiempo del que ya tenía para poder estar contigo, deseaba detener el tiempo para que se quedara congelado en ustedes dos. Pero su trabajo lo llamaba a todas horas y era casi imposible no responderle.

Al llegar a su departamento se las cobraría por haberlos dejado así. Sus besos seguían siendo cálidos, justo como los que habían parado en la mañana por culpa de su arduo trabajo, pero no le impidió continuar con aquellas cosas.

—Por esto esperé todo el día, ahora no te salvas.

«Lee Min Ho»

Detestaba la idea de irse, sin necesidad de estar haciendo nada, lo detestaba. Quería pasar todo el tiempo contigo y la horrorosa idea de tener que dejarte a media locura, lo mataba. Según él, pondría una carta de queja diciendo que merecen más tiempo de descanso.

Cuando estuvo de nuevo contigo, primero optó por preguntarte si querías continuar con aquello, a lo que claramente aceptaste así que se puso en marcha y comenzó de nuevo, justo donde quedaron más temprano.

—Ahora sí, ¿dónde estábamos?

«Bang Chan»

Aquel día se encontraban en su estudio, pero habían empezado algo y estaba seguro de que no le importaba mucho en donde se encontraban, él quería hacerte suya en ese momento, así que no paró.

Al escuchar su alarma diciendo que era hora de seguir con el trabajo, maldijo una y otra, y otra vez, por tener que dejar una pausa ahí. Lo que les constó fue que al llegar a casa continuaron y silenciosamente agradeciste por no haber hecho nada allá.

—La próxima vez, apagaré la alarma y no tendrás escapatoria.

Volví.

Pregunta: ¿Ustedes hubiesen parado?

Disculpen errores.

Pedidos cerrados. ^^