Eran aproximadamente las cinco de la tarde, pero recién Matthew se encontraba de camino a casa.

Había tardado más de lo habitual por estar leyendo en la biblioteca, probablemente no se hubiese ido pero la bibliotecaria le había dicho que ya iban a cerrar, por lo que tuvo que recoger e irse.

Algo que había observado mientras estuvo en la biblioteca, era que el equipo de baloncesto se encontraba practicando, y que a Jiwoong le gustaban las moras.

Por ello se había desviado de su camino, y en vez de ir a casa se encontraba siguiendo a Kim, esperando a que este notara su presencia para poderle entregar la malteada.

-¿No piensas dejar de seguirme? -preguntó ya harto el chico.

A todo esto él se había detenido, pero nunca se volteó a verle.

Él siempre había evitado hacer contacto visual.

-Ahora sí, luego de que tomes esto. -le extendió la bolsa. -Ahí hay una malteada, y no te preocupes, no es de fresa. -pareció pensarlo mucho, pero dijo algo más. -Lo hiciste bien en las prácticas.

Matthew dejó la bolsa a su lado antes de darse la vuelta e irse.

Kim por su parte se sintió un poco decepcionado al no recibir una despedida alegre como suele hacer Matthew en muchas ocasiones, pero no le dió mente y observó la bolsa.

Desde su lugar pudo observar que aunque el chico de cabellos rubios había dicho que no era de fresa, esta sí lo era.

Pero a pesar de la confusión, se sintió alegre al leer la pequeña nota.

❝Ya, ya, sé que dije que no era de fresa, ¡pero la cajera había dicho que no había de mora! Así que ahora te debo una malteada de moras ^^❞

att: Seok Fresita <3

Guardó la nota en su bolsillo, y con una sonrisa siguió su camino a casa.