Eren estaba en su última clase del día, ordenando sus materiales.

-Recuerden que la próxima semana van a necesitar a una persona que les ayude a crear los diseños que hemos hecho hoy, ¿Si?-hablaba la profesora.

-¡Si, señorita Riko!-contestarón todos.

La profesora abandonó la sala de clases.

-Eren, ¿Crees que esta falda se me ve bien?-Preguntaba su compañera.

-Si, te ves muy hermosa con esa falda, Mina-le sonrió-Aunque yo le pondría esto-sacó un broche de metal en firma de mariposa y se lo puso en el cabello, recogiendo un mechón.

-¡Mina!¡Aah!-Gritarón unas chicas-¡Te ves hermosa!-se le acercaron para observarla más de cerca.

-M-muchas gracias-respondía tímida.

Le pidieron su instagram para comenzar a seguirse.

Eren abandonó la sala, iba a ir a comprar comida para su loro.

Muchas personas lo saludaban y el respondía con una bella sonrisa.

Todos lo miraban con admiración y Eren sabía de ello.

Al llegar a la tiendita, compró la comida de loro de mejor calidad.

Sacó una paletita de sabor a piña y comenzó a disfrutarla.

-¿Mmh?-Sintió una vibración, le había llegado una notificación.

Al verla se quedó extrañado, era una cuenta de instagram que no conocía.

-¿Qué es esto?-

-Tome-el dueño de la tiendita le pasó una bolsa.

-Gracias-salió de la tienda.

Estaba etiquetado en un video que tenía muchas reproducciones y seguían aumentando.

Decidió verlo.

-¿Eh?-Se detuvo.

Palideció al ver de que video se trataba, no era nada más ni nada menos que un video de él cuando era apenas un bebé, cuando fue participante de un comercial para pañales.

"Eren sigue teniendo esas bellas nalgas", decía la descripción del video.

-¡Aaahh!-Soltó un gritillo.

Se fue corriendo con dirección a su cuarto, entró rápido y cerró la puerta.

-¡Aaah!¡No puede ser!-Gritaba preocupado y avergonzado.

Nadie sabía de ello, que en su infancia fue protagonista de comerciales infantiles.

La cuenta de instagram siguió subiendo videos.

-¡¿Qué es esto?!¡No puede ser!¡¿Quién lo hizo!¡¿Quién?!¡Aaahhh!-Siguió gritando.

-¡Jean, hijo de puta!¡Aahg!¡Bastardo!¡Pium!¡Pium!-Gritaba el loro alterado por los gritos de su dueño.

-¡¿Qué sucede?!-Jean entró al cuarto, venía cerca pero al escuchar los escandalosos gritos de Eren corrió.

-¡No puede ser!¡No puede ser!-Lanzó su celular lejos-¡Esto es horrible!-

-¿Eh?-Se acercó-¿De que hablas, bastardo?-tomó el celular-¿Mmh?-ladeo su cabeza confundido.

"Si quieres que tu bebé este siempre seco, usa nuestros pañales osito. Osito, lo que prefieren madres y padres del país".

-¡Uhhh!-Cubrió su boca con la mano, tratando de aguantar la risa-¡¿Ese eres tu?!-

-S-si...-Apoyaba su rostro sobre la almohada.

-¡Ajajaja!¡Bastardo!¡Eras un bebé que se mea!¡Aahg!-Tocía por reírse demasiado.

-¡No te burles de mi!-Mordía sus labios por la frustración que sentía.

-Es divertido-

-¡Aahg!¡Jean, bastardo!¡Caballo de carreras!¡Aahg!¡Hijo de puta!-

Jean dejo de sonreir al escuchar al loro de Eren.

-¡Maldito pajarraco de quinta!¡Bastardo!-Le respondió.

-¡Ahg!-Lo miró-Jean... ¡BASTARDO!¡AJAJAJA!-imitaba una risa malvada.

-¡Maldito!-Dejó el celular de Eren y salió del cuarto.

York voló hasta donde estaba Eren y le mordió la oreja.

-¡Ah!-se quejó-York-acarició el colorido plumaje de su querida mascota.

-Eren es bello y hermoso, ¡Ahg!
¡Hermoso!-Movía sus alas.

-Tu eres hermosa-Le sonrió-Mmh...-tomó su celular.

Los videos tenían muchas reproducciones, eso lo tenía preocupado.

No sabía que hacer.

Al otro día, Levi revisaba la cuenta de instagram que creó sólo para subir los videos.

-Mira, Hanji-le mostró el celular a la castaña-Más de veinte mil reproducciones y más de mil corazones-

-Si, lo lograste-Ella miraba hacia todos lados-No quiero estar lejos de mi departamento, tengo miedo-temblaba.

-Eres una maldita ermitaña-guardó su celular-Ahora me siento satisfecho, ese mocoso verá lo cruel que pueden ser las redes sociales-sonrió con satisfacción.

-¡Levi!-Erwin llegó corriendo-Ahí viene, va por su amiga de contabilidad-

-¿Si?-cruzó sus brazos-Veamos como lo destruyen-

El castaño apareció, no parecía estar preocupado ni avergonzado, pero a Levi no le dio importancia.

-Mira, es él...-susurraban unos grupos.

Eren se detuvo y se dedicó sólo a sonreir.

-¡Aaah!¡Eren!-Gritaron unas chicas y se le acercarón.

-Hola-saludaba.

-¡Te ves tan tierno siendo bebé y un niño!¡Eres famoso!-Gritaban emocionadas.

-Es un poco vergonzoso para mi...-se sonrojó levemente-Pero ese soy yo-

-¡Que lindo!-chillaron.

Las personas se le acercaban para saludarle y pedirle fotografias e incluso autógrafos.

-¿Se supone que debía pasar eso?-preguntó Hanji, abrazando a Erwin al ver tantas personas cerca.

-...-Levi frunció el ceño-Se supone que debía ser humillado...-

Eren se libró de las personas, sus ojos se posaron sobre el azabache y se acercó.

-Hola, dinosaurio-Dejó una mano en su cintura-Señor Pikachu, señorita-hizo una pequeña reverencia-Se que tu subiste esos videos, pero no te preocupes. No estoy molesto ni nada por el estilo- sonrió-Mira-mostró su celular.

Levi abrió ampliamente sus ojos al ver que Eren tenía ahora cerca de cincuenta mil seguidores.

-Muchas gracias por todo, Dinosaurio-Guardó su celular-¿Mis nalgas son igual de bonitas?-le dió la espalda y tocó sus nalgas-Si, siguen igual de perfectas... ¡Ajajaja!-Se alejó riendo.

A Hanji le brillaban los ojos de lo entusiasmada que estaba, Erwin no sabía como reaccionar ante eso.

Levi ardía en ira, su plan había fallado.