Narra Max

- ¿Estás seguro de que era Dart?- 

- Sí. Tenía las marcas amarillas en el culo.-

- Pero hace dos días era diminuto.- Digo yo impresionada.

- Ya ha mudado tres veces.-

- ¿Mutado?-

- Mudado.- Rectifica Dustin a Steve.- Se desprende de la piel para poder crecer.

- ¿Cuándo mudará otra vez?- Pregunta ahora Jade.

- Debería de ser pronto. Cuando lo haga, tendrá su tamaño adulto, o casi. Y sus amigos también.-

- Y comerá más que gatos.- Finaliza Steve.

- Espera, ¿un gato?- Lucas paró la caminata poniéndose delante de Dustin.- ¿Dart se comió un gato?- Cuestiona enfadándose poco a poco.

- No. ¿Qué?-

- ¿De qué hablas? Se había comido a Mews.- Dice Steve confundido.

- ¿Mews? ¿Quién es Mews?- Steve me miró.

- El gato de Dustin.-

- ¡Lo sabía, te lo quedaste!- Acusa Lucas empujándolo un poco.

- ¡No!- Nos miró a Jade y a mí en busca de ayuda, pero al ver nuestras caras confundidas, dejó de mirarnos.- ¿No? No, yo...- Hizo una pausa y sus hombros dejaron de estar en tensión.- Me echaba de menos. Quería volver.-

- ¡Bullshit!-

- ¡No tenía ni idea de que era un Demogorgon!-

- ¿Lo reconoces?-

- Dios, ¿qué importa? Vayámonos.- Salta Jade frotando sus brazos por encima de su suéter.

- ¡A mí me importa! ¡Pusiste al grupo en peligro! ¡Rompiste la ley!-

- Bueno, cállense.- Volvió a decir ella mientras que rodaba los ojos.

- ¡Al igual que ustedes!- Lucas y ella se miraron incrédulos.- ¡Le contaron todo a una extraña!- Dustin me apuntó con la linterna dejándome aturdida.

- ¿Una extraña?- Pregunto ofendida.

- ¿Qué yo le conté qué? ¿Por qué te atreves a acusarme de algo que ni siquiera he hecho?-

- Bueno, no es normal que dos personas que se conocen de hace unos días se agarren de las manos.- Ambas abrimos nuestras bocas levemente. Dustin se comportaba como un verdadero idiota cuando quería.

- Igualmente es lesbiana.- Añade Steve.

- ¡Steve!- Le grita ella pegándole un puñetazo.

- ¿Qué?- Puedo jurar que no quería sorprenderme por algo así, pero no lo pude evitar.
No fui la única que la estaba mirando. El moreno y el rizado se miraron sin saber bien que decir. Lucas parecía querer preguntar algo, pero no se animaba.

- ¿Lesbiana?-

- ¡No!-

- Pues claro que sí. Me lo contaste. llorando hace un año... y casi besabas a Rebeca Price.-

- ¡Cállate de una vez!- Vuelve a gritarle enfadada.- Esa ni siquiera es la cuestión de todo esto. Todos nos equivocamos alguna vez. Ni siquiera Max era tan desconocida cuando Lucas se lo contó. Y Dust, ocultarnos algo así hasta el día de hoy nos pudo haber matado y lo sabes. Listo, daos la mano, y continuemos.- Y sin ni siquiera esperarnos, siguió caminando apresurada.

[...]

- ¿Chicos?- Los llamo cuando diviso a dos coches viniendo a toda velocidad hasta nosotros.- ¡Cuidado!- Exclamo y todos se apartan a un lado para que los coches no nos atropellen.

El coche del oficial se paró frente a nosotros. Él nos miró y nos hizo un gesto con la mano para que subiésemos al auto. Todos le obedecimos de inmediato y nos subimos a este. Jade se sentó en la ventana y no tuve más que remedio que sentarme a su lado.
El coche aceleró muy rápido, causando que mi espalda se pegase al asiento. Hopper conduciría hasta la casa de Will. Y de ahí... No sé que más haremos. Supongo que al llegar allí trazaremos un plan.

Sin evitarlo miré a la pelinegra. Tenía los ojos vidriosos, a punto de llorar. Su mano agarraba su bonito cabello y miraba por la ventana. Se le veía realmente mal. Con algo de timidez apoyé mi mano izquierda en su hombro y ella por inercia me miró. Ante de decirle alguna palabra, miré a los chicos para asegurarme de que no estén atentos a nosotras, luego volví a dirigir mis ojos a ella.

- ¿Estás bien?-

Rápidamente me desvió la mirada y sonrió un poco sorbiendo su nariz. Suspiró y negó.

- ¿Qué pasa?-

- Solo estoy demasiado estresada. Todo esto es demasiado para alguien como yo. No soy una persona que se caracteriza especialmente por ser fuerte o algo así, ¿sabes? Soy muy sensible. Definitivamente estas situaciones tan tensas y que precisan de...- Me volvió a mirar y carcajeó con vergüenza.- Ahora soy yo la que te cuenta cosas.- Mis carcajadas fueron dulces y tenues para que nadie más que ella las escuchase.

Abrí la boca para hablar, pero ella simplemente se había vuelto a girar hacia la ventana. No le apetecía hablar ahora. En parte me dolió ese gesto, pero por otra parte entiendo que no quiera hacerlo. Además de que no está obligada.
Me di cuenta de que mis dedos estaban rozando los suyos. ¿Quizás me deje?
Con miedo, lo intenté. Ella lo aceptó. Ahora nuestras manos estaban más unidas, pero sin tomarse del todo para no levantar sospechas en el coche. Pero esto me valía. Ede, sonrió sin mirarme. 
¿Por qué sonrió? ¿Qué hay de bueno ahora mismo?

[...]

- No le creen, ¿cierto?- Dice Dustin de pie y apoyado en la mesa.

- Ya veremos.-

- ¿"Ya veremos"? ¡No podemos quedarnos quietos con esos bichos sueltos!- Replica Mike.

- Nos quedaremos aquí a esperar la ayuda.- Hopper se retiró, sin intenciones de discutir con un adolescente enfadado. Nos quedamos viéndole hacia donde iba. Las caras de todos (menos las de Jade, Dustin, Lucas y yo) entristecieron.

- ¿Qué ha pasado?- Pregunta Jade inocentemente.

- Aquellas cosas acabaron con Bob.- Dice Mike con sus manos unidas y mirando perdido al piso.- Está muerto.-

Ede entreabrió sus labios sin creerlo. Luego me miró. Le mostré un gesto de tristeza y me limité a gesticular un 'lo siento' con mis labios. Quizá ese Bob y ella se llevaban bien.

- ¿Por qué las personas bellas se van tan rápido?-

Todos los allí presentes no contestamos. 
No porque la ignorásemos, sino porque no teníamos idea de qué decirle. Ni si quiera yo lo sabía. Y la verdad, me encantaría poder contestarle con coherencia. Pero es casi imposible ante preguntas con múltiples opiniones de por medio.

Mike de repente se levanta de su asiento, aún con sus semblante triste. Caminó hasta el salón y de la pequeña mesa, tomó entre sus manos un cubo azul. Lo observó durante unos minutos, dandole vuelta y suspirando mientras lo hacía.

- ¿Sabían que Bob fue el fundador del Club de Audiovisuales?- Él se giró hacia nosotros.- Hizo una petición a la escuela para empezarlo. Recaudó fondo para los equipos.- Hizo una leve pausa y caminó lento hasta nosotros.- El señor Clarke lo aprendió todo de él. Es asombroso, ¿no?- Algunos contestaron con un vago sí.- No podemos dejarlo morir en vano.-

- ¿Qué quieres hacer, Mike? El jefe tiene razón. No podemos detener a los Demo-dogs solos.- Dice Dustin.

- ¿Demo-dogs?- Pregunto yo rodando los ojos.

- Perros, Demogorgon. Los juntas y suenan genial.- Explica mientras hace gestos con sus manos.- Es una palabra compuesta. Un juego de palabras con...-

- Vale.- Le callo yo.

- Si tan solo fuera Dart, bueno. Pero es que ahora es un ejercito entero.- La pelinegra se puso recta en sus silla mirándonos.

- Exacto.-

- Su ejercito.- Habla Mike de repente aún con la mirada perdida en el suelo.

- ¿Qué?-

- A lo mejor parándolo a él pararemos a su ejercito.-

[...]

- El Mindflyer.- Dustin abrió por la mitad del enorme libro.- Un monstruo de otra dimensión. Tan antiguo que ni siquiera se sabe su auténtico origen. Esclaviza a razas de otras dimensiones apoderándose de su cerebro gracias a sus poderes psiónicos.- Explica mirándonos a todos.

- Dios, nada de esto es real. Es un juego infantil.-

- No, es un manual. Y no es para niños.- Defiende Jade a Dustin.- A menos que  sepa algo que nosotros nos sepamos, esta es la mejor metáfora...-

- Analogía.-

- ¿Analogía? ¿Eso es lo que te preocupa?- Pregunta molesta.- Bien. Una analogía para comprender que mierda es esto.

- Vale, ese Mindflayer... ¿qué es lo que quiere?-

- Conquistarnos, básicamente.- Contesta el rizado.- Cree que es la raza suprema. Ve a otras razas, como nosotros, como inferiores. Quiere conquistar otras dimensiones.-

- Se trata de destrucción del mundo tal y como lo conocemos.-

- Entonces, si esto es un cerebro que lo controla todo, y lo matamos...- La hermana de Mike agarró el libro entre sus manos.

- Matamos todo lo que controla.- Finaliza Mike.

- Ganamos.-

- En teoría.- Interrumpe Jade.

[...]

Narradora

- Oigan.- Nos llama Dustin a Lucas y a Jade.- Siento mucho lo de Dart. Supongo que era mi amigo. Me equivocaba.- Decía mientras rebuscaba en la basura.- Rompí la ley, así que si quieres que tu novia ocupe mi puesto en el grupo, lo entiendo.- Dice mirándola a ella ahora.

- No es mi novia.- Se defiende.

- Os vi daros la mano en el bus.-

- Tan solo tenía miedo.- Dice tratando de evadir las miradas de sus amigos.

- Puede, pero lo sentí.- Dustin no estaba feliz por saber como la chica que le gustaba y otra que también le había gustado en su momento, se gustaban mutuamente.

- ¿Sentir qué?- Pregunta el moreno ahora.

- La electricidad.- Nada más acabar su frase, decidió levantarse y marcharse del lugar

Lucas observó a su amiga. Ella estaba confundida, sin entender lo que había querido decir Henderson. Ambos se levantaron del suelo y simplemente caminaron en silencio hasta el cobertizo de los Byers junto a los demás. Sinclair comenzó a pensar en lo que dijo su amigo. Quizá si tenía razón, pensó el moreno, pero, ¿Max? No, claro que no. Si a él le gusta la pelirroja. No podía ser que fuese lesbiana. Y menos que le guste su amiga.

Ahora debían de sacar cada cachivache de allí y cubrirlo todo hasta dejarlo irreconocible para que el Mindflyer no sepa donde están a causa de Will. Tardaron al menos una hora y media en sacarlo todo, más otra hora arreglándolo todo. Y por fin, interrogarían a Will. Mike rogó por quedarse con el jefe, Joyce, Jonathan y el pequeño. Mientras los demás volvieron al hogar de los Byers.

- Estoy cansada.- Se queja Jade sentándose en la silla del comedor.- ¿Qué hora es?-

- Las doce y diez.-

- Esto lo hacemos por Will.- Le replica Dustin.

- Ah, fíjate que pensé que era por...-

- ¿En este grupo siempre se están peleando?- Pregunta la pelirroja cruzada de brazos en su silla.

Y de nuevo se hizo el silencio. 
Max pensó en si había dicho algo malo que los había hecho incomodar. Pero pensando en su oración se fijó en que no había soltado ninguna grosería o parecido.
Se sintió mal. Quizás se habían callado porque no la soportan y de verdad que la quieren fuera del grupo, tal y como Mike quiere. 

Hopper entró precipitado por la puerta, junto con Joyce y Jonathan. Arrancó una hoja de un cuaderno para empezar a escribir puntos y rayas en este.

- Está hablando, pero no lo hace con palabras.- Dice mientras escribía.

- ¿Qué es eso?- Pregunta el joven Harrington.

- Código morse.- Hablan todos a la vez.

- Aquí.- Leen todos de nuevo a la vez la hoja de Hopper.

- Will sigue ahí dentro. Está hablando con nosotros.-

[...]

- Cierren portal.- Lee Jade agarrando el cartón entre sus manos. La chica miró con semblante asustado a sus amigos. ¿Cómo se suponía que cerrarían un portal ellos solos?

El teléfono de la casa sonó. Aunque tan solo fuese el típico ring de un teléfono, en estas circunstancias era como una bomba de destrucción masiva o también un timbre que avisaba la hora del almuerzo para los Demo-dogs. 
Jade corrió hasta el aparato para descolgarlo y colgarlo de nuevo. Este volvió a sonar y Nancy pareció tomárselo de otro modo, pues lo agarró y jaló de este hasta arrancarlo de la pared para después lanzarlo contra el piso.

- ¿Creen que lo habrá oído?- Pregunta Dustin.

- Solo es un teléfono. Podría estar en cualquier sitio, ¿no?-

Justo en ese instante, los rugidos se oyeron. Los jóvenes fueron hacia la ventana.

- Eso no mola.- Dice preocupado el rizado.

Los adultos vinieron de nuevo. Ahora Will estaba en los brazos de su hermano Jonathan. Jim tenía consigo un fusil y una escopeta en sus manos. Cerró la puerta tras él y miró a Jonathan cuando el menor ya no estaba en sus brazos. Nancy se puso delante de Byers y agarró el rifle del policía. Ahora todos miraban con un ambiente tenso y peligroso hacia la puerta.
Lucas tenía su resortera, Mike una copa, Jade su navaja y Steve su bate con clavos. Max, por su parte, tenía la mano de Jade. Ambas manos entrelazadas por el miedo, dándose la seguridad que piensan que tienen solo por agarrarse de nuevo de las manos.

Rugidos se escuchaban alrededor de la casa. Jadeos de sustos. Más tensión en el ambiente.
Empezaron a sonar extraños rugidos de dolor de parte de las criaturas, hasta que al fin ya nada hacía función de banda sonora. Todo se había calmado en cierta parte.
Un Demo-dog muerto entró disparado rompiendo la ventana. Y cuando Hopper fue a checar si de verdad estaba muerto, alguien parecía intentar entrar en la casa. El pestillo del picaporte se desbloqueó. Se deslizó demasiado suave para ser de un monstruo.
La puerta se abrió. 
El rostro de una niña bastante reconocible. Era la mejor amiga de Jade. Era El. 

Mike se atrevió a dar un paso. Habían enormes lágrimas en sus ojos y un gigantesco nudo en la garganta que hacía que sus labios se entreabrieran.
El miró al pelinegro y sonrió sincera. Tenía a su alma gemela de nuevo con ella. Ni su infernal dolor de cabeza que estaba teniendo ahora mismo iba a impedir que su corazón latiese alegre y excitado de ver a tantas caras conocidas.
Miró detrás de él. Jade estaba completamente paralizada. Ni si quiera agarraba la mano de la pelirroja. Eleven dejó escapar una pequeña lagrima al verla a ella. La única chica con la que mejor se llevaba también estaba ahí. Su otra alma gemela. La hermana y mejor amiga que más quiere.

Estaban todos allí. De nuevo.

---

shipeo elmax oop-

-deli