der Epilog
Taehyung decide, por centésima vez, que despertar no es su acción favorita. Podría cambiar de opinión... podría hacerlo solo porque despertar con los brazos de Hoseok rodeándole lo hace mil veces mejor. Él aceptaría las mañanas con gusto. Puede sentir cómo es apresado con un poco más de fuerza y, curiosamente, eso le hace feliz. Saber que está aquí, en el lugar correcto, es grandioso. A sus espaldas Hoseok murmura algo cercano a lo ininteligible, lo sería por completo si es que Taehyung no estuviera atento.
—Buenos días para ti también —responde. Sonríe cuando la nariz de Hoseok le hace cosquillas en el cuello—. ¿No tienes que trabajar?
—Sí, acabas de hacer que lo recuerde —admite, casi a regañadientes. A Taehyung le parece gracioso pues, hace un tiempo, era él quien quería evadir sus responsabilidades. Pero aquí está Hoseok, con pocos ánimos para el trabajo.
—¿Es necesario que vayas? —Siendo cauteloso, pregunta. No quiere ser un culpable, pero es que cinco minutos más no eran suficientes al lado de su... novio.
—Sí, por favor, no me tientes. —Apenas dice eso, Taehyung se remueve entre sus brazos para girarse y encararle. Hoseok suelta una risa corta—. Ahí está, me miras como si quisieras decir "quédate".
—Yo no estoy haciendo nada —refunfuña, empezando a sentarse. Hoseok le admira sin una pizca de disimulo—. Además, tengo clases más tarde.
—Yo debería estar alistándome ahora.
—Y sigues aquí, sin embargo. ¿Debería echarte? —Taehyung bromea, sonriendo divertido por su juego—. Incluso si no quiero.
Aún echado, Hoseok abraza la cintura contraria. Taehyung se sobresalta un poco, pero suspira rendido cuando encuentra el tacto agradable. Sentado y apoyado en el respaldar, puede ver cómo Hoseok sigue con los ojos cerrados, su brazo estirado por la especie de abrazo. Es una buena vista. No debe distraerse, sino pensar. ¿Debería ser un novio responsable y mandar a Hoseok al trabajo? o ¿Debería ser un novio rebelde y pedirle que se quede para mimarse a gusto? Elección difícil.
—Sé lo que estás pensando. —La voz de Hoseok le saca de su mente—. "¿Y si dejamos nuestros deberes solo por hoy?"
—Uh, cerca. —Tono suave, en respuesta—. Fue más: "¿Y si somos irresponsables juntos solo por hoy?".
Hoseok parece meditarlo, su entrecejo fruncido lo hace claro. Tararea un poco mientras piensa y Taehyung le da una leve punzada en el abdomen con su dedo, animándole a decidirse.
—Es nuestro primer día de novios, ¿no? —agrega para convencer. Está a punto de hacer 'mirada de cachorro'.
—Dalo por hecho. —Hoseok por fin responde, riendo bajo—. Uh, tal vez mi papá se enoje. Llamaré primero.
—Solo si se puede, tampoco quiero parecer engreído. Entenderé si no puedes quedarte —aclara, sintiéndose arrepentido por su petición. Podía soportar un tiempo despegado de Hoseok, cielos. No era mimoso... Bien, lo era, pero podía controlarlo.
Cerca de una hora más tarde, luego de que Hoseok haya hecho las llamadas necesarias y ambos hayan tomado un baño refrescante, se encuentran en la cocina. La música de fondo (elegida por Taehyung) es relajante. A su manera, ambos intentan preparar algo bueno. Esto vendría a ser un desayuno-almuerzo, considerando que han tardado un poco más de lo planeado. Son casi la una de la tarde, pero nada puede estar mejor.
—Ahora... debo buscar un nuevo departamento, uno más económico. —Taehyung murmura después de un momento. Cuando Hoseok le mira un poco aturdido, decide continuar—. Te dije hace unos meses que había renunciado a mi trabajo anterior, pero que aún tenía la oportunidad de volver. Voy a dejarlo oficialmente, así que ya no podré pagar este lugar: ajustaría mis cuentas.
—¿Por qué? —Hoseok pregunta, hay sorpresa y confusión en su voz.
Taehyung sabe a lo que se refiere. Entendiéndole, decide hablar. —No iba a trabajar ahí más tiempo, ya lo había decidido. Y ahora que estamos juntos... la decisión tiene más peso.
—Si tú quisieras seguir en el trabajo, no habría problema —comenta, verificando si las verduras siguen en cocción. Sus palabras, aunque sinceras, solo causan ligera diversión en Taehyung.
—No mientas. Te habrías puesto, al menos, un poco celoso incluso si no es la gran cosa —refuta, riendo leve—. Eres un humano.
—Sí... —admite, casi tartamudeando. Taehyung suspira, acercándose para mirarle a los ojos.
—Está planeado desde antes, no te sientas como la causa —aclara, voz calma y cariñosa—. No iba a trabajar ahí mucho tiempo, ya sabes. Además, Youngjae también dejó el trabajo porque consiguió un mejor empleo.
Hoseok asiente, esta vez él toma la iniciativa y se acerca para besar la sien de Taehyung. Ha estado teniendo este tipo de gestos cariñosos desde la noche anterior. Sí, es lo cierto.
—El único problema es que tendré que recortar mis gastos. Jum. —Apenado, dice. Sonríe nostálgico al ver su cocina—. Solo estuve unos meses aquí, pero siento que lo voy a extrañar.
El agua hirviendo y provocando burbujas es lo que se oye, Hoseok observa cómo se cocinan los fideos instantáneos. Él está pensando en algo, claramente. Parece tímido cuando ha llegado a algún punto, listo para tomar la decisión. Sin poder evitarlo, sonríe: buenos sentimientos revueltos. Ha imaginado ciertas cosas y le han resultado realmente buenas. Un cosquilleo suave en sus manos le insta a dar caricias al cabello de su novio por unos segundos.
—No me estás diciendo algo. —Taehyung ríe al término de sus palabras, todavía extrañado—. Lo veo en tu rostro.
—Sí, hay algo que tengo en mente —confiesa, removiendo los fideos de nuevo en un instinto de ocultar sus nervios.
—¿Me dices? —Curioso, por totalidad, pregunta. La mirada que le dedica Hoseok solo le hace sonreír nervioso. Incluso cuando siente que conoce a este hombre desde hace mucho, hay momentos en donde simplemente no puede dar ciencia cierta de lo que piensa. Está bien, aún le falta conocer a Hoseok. No le molesta la idea, de hecho, le parece estupenda. Adora los detalles en la otra persona... su persona especial.
Hoseok asiente cuando ha pasado un minuto. Apaga la cocina cuando el ramen parece estar listo. Sus orejas están un poco rojas y Taehyung se sorprende. ¿Será que...?
—¿Qué tal si te mudas conmigo? —Entonces por fin Hoseok da su propuesta (si es que lo era), sintiéndose un poco o demasiado tímido.
Taehyung logra ponerse nervioso, casi soltando el plato que lleva en manos. Con cuidado lo deja sobre el mesón de la cocina y, luego, se enfoca en Hoseok. ¿Qué se supone que deba decir?
—¿En serio? —Decide preguntar. Todo se siente muy hogareño justo ahora y, por un momento, él piensa en más días así. En su imaginación es...
—En serio. —Hoseok repite, pero lo hace como afirmación—. Puedes mudarte conmigo, te ayudaría a recortar gastos.
—¿No es muy pronto? —Hay sorpresa en su voz, pero no mentiría: quiere esto. Lo quiere.
—Ni siquiera yo estoy seguro —responde, soltando una risa nerviosa sin querer—. Tendrías una habitación, eso sí. Te estoy ofreciendo la habitación libre que hay.
—¿Como un roomie? —Intenta bromear, aunque no es muy convincente.
—Eso sería. —Hoseok le da la razón. Luce jovial y relajado mientras habla apoyado en el mesón. Su sonrisa nerviosa le delata—. Puede ser una buena opción para ti, te ayudará con los gastos.
Taehyung lo piensa por un momento. Sabe bien que, aunque no compartirán la misma cama, pasarán juntos más tiempo de lo que tenían en mente. La sola idea le hace sonreír sin que lo note. Tal vez no sería fácil en ocasiones, pero esta razón parece tan banal ahora mismo. Sabe que no debe precipitarse, y aun con eso...
—Sí, pero debes dejarme pagar al menos una parte. Ayudaré con los deberes también —demanda, dando una respuesta casi tácita. Se posiciona delante de su novio, frente a frente. En un instante está apoyándose en el otro—. Seré un buen roomie, ¿queda claro?
—Lo tengo claro. —Se rinde, casi a nada de levantar los brazos en señal de ello—. Te ayudaré cuando tengas que llevar tus cosas.
Taehyung asiente lento con la cabeza, poniendo sus manos en los hombros de Hoseok para masajear suave. Suspirando bajito, le da un beso esquimal también. El amor es tan impredecible.
—¿Me dejarías decorar el departamento? —pregunta Taehyung, solo un rato después—. Prometo hacerlo bien.
—Confío en ti. Le darías estilo.
Una risa se oye, claramente es Taehyung. —¿Qué hay de tu oficina? Seguro también necesita decoración, soy bueno en ello.
Esta vez la risa es de Hoseok, que, más enamorado que rendido, acepta sin siquiera decirlo en voz alta. Él rodea a Taehyung con sus brazos, atrayéndolo más antes de susurrar: "Te quiero".
La expresión conmovida en el rostro de Taehyung es digna de ser apreciada. El beso suave que le da en respuesta es como para memorizar y guardar en los mejores recuerdos que tiene. El cómo desea poder pasar más días así es todo lo que necesita para saber que quiere llevar a Taehyung en el corazón. Pero eso último es otra historia.
El hecho es que ellos se quieren. Es un hecho que no se discute.
❒
¡ G r a c i a s !
Sé que es un poco corto, pero así lo tenía en mente (medio simple). Es una conversación que me pareció necesaria entre Hoseok y Tae. Nos leemos. Cuídense <3
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top