[Tono: la entonación, el tono y la modulación de una composición que expresa el significado, el sentimiento o la actitud de la música]

Historia original: https://archiveofourown.org/works/1877970/chapters/4045119

Todos los derechos a su autor original (blackkat) y a Kishimoto, dueño de Naruto.

"¡Airi, céntrate! Puede que no sea un experto en kenjutsu, ¡pero incluso yo puedo darme cuenta cuando te estás volviendo descuidado! ¡Yuriko, deja de desanimarte a la mitad y sigue adelante! ¡No lo dudes! Kenshin, ¿eres un shinobi o un alhelí? ¡Deja de soñar despierto, entra allí y ayuda a tus compañeros de equipo!"

Gaara recuerda, aunque vagamente, un momento en que el volumen predeterminado de Fū no estaba configurado en 'rugido'. Cuando llegó por primera vez, arrastrada a Uzushio solo un poco a regañadientes por el mismo Naruto, había sido brillante y de espíritu libre y cautelosamente entusiasta, pero aún así... manejable. Principalmente.

(Con toda honestidad, se había tomado la libertad de Uzushio como un pez en el agua. Gaara opina que ella se lo había tomado demasiado bien. Después de todo, ella y Naruto se llevan como una casa en llamas, con destrucción masiva, muchos transeúntes traumatizados e igualdad de oportunidades para una muerte insoportable o gloria eterna.

Todavía no se les permite ir a misiones juntos, nunca más volverán a cometer ese error)

Entonces Naruto había presentado a Fū a su equipo genin, y 'manejable' se había ido por la ventana veinte segundos después de las presentaciones del equipo. Fū se ha adaptado, un año completo después de abrir la boca para saludar a sus pequeños chorros y ser ahogada instantáneamente por tres niños de once años muy exuberantes y extremadamente habladores. Ahora, en lugar de burbujear, brama.

La genin kunoichi de Gaara, Aki, gira junto a él, con la experta en kenjutsu de Fū, Airi, pisándole los talones. Ambas chicas están escupiendo maldiciones, y mientras Airi se lanza con su largo tachi pintado de negro, Aki se aparta del camino, casi rodando hacia las piernas de Gaara antes de que se aleje lo suficiente como para saltar a un lugar seguro. Gaara, bien acostumbrado a la determinación de su alumna en una pelea, simplemente pone los ojos en blanco, se pone de pie y dice un poco más alto que su volumen normal: "Aki, mira a tu alrededor"

"¡Lo siento, sensei!" ella responde, aunque su sonrisa es completamente impenitente mientras se precipita hacia las altas rocas que se elevan a su izquierda.

Los genin restantes de Fū se enfrentan a los estudiantes masculinos de Gaara, ambas parejas presentan una demostración decente de trabajo en equipo, y Gaara se siente lo suficientemente seguro como para dar un paso atrás por el momento, acomodándose junto a un trozo de madera retorcida a la orilla de la arena. Fū se une a él después de un segundo, arrojándose a la arena y cruzando las piernas. Ella sonríe, brillante y cálida, y Gaara la mira durante varios latidos del corazón antes de apartar la cara.

"Lo están haciendo bien", dice, y hay una especie de dulce satisfacción en su voz "Yo... Cuando Naruto me dijo que iba a ser un sensei jounin, tengo que admitir que pensé que se había vuelto loco. Bueno, más loco de lo normal. Pero lo están haciendo bien. Eso es genial, ¿no crees?"

Fū es una jinchuuriki al igual que Gaara. Sus pasados ​​son similares, sus cargas son las mismas. Nunca, nunca antes de venir aquí, antes de conocer a Naruto, Gaara habría pensado que eso podría decirse de alguien con algo de verdad. Pero ahora, ahora no puede imaginarse tener que prescindir de él. No puedo imaginar tener que volver a ser como era antes, la vida que llevaba entonces.

"Naruto es... siempre sorprendente", admite después de un segundo "Pero por lo general esta en lo correcto"

Ella se ríe, leyendo entre líneas el 'Siento lo mismo' que Gaara no dice "Sí", acepta, levantando la cara hacia el viento del mar y respirando profundamente el aire salado "Es un bastardo loco y tramposo, pero es por eso que lo amamos" Hay una pausa, y luego resopla y se recuesta contra el tronco, estirando las piernas frente a ella y cruzando los brazos sobre el pecho "Maldita sea, pero no puedo esperar hasta que salgamos. Seis días es demasiado tiempo. Naruto probablemente se esté divirtiendo mucho pateando el nido de avispas de Konoha"

En privado, Gaara está de acuerdo y tiene que preguntarse cuánto de Konoha quedará en pie cuando lleguen.

"¡OI, KENSHIN, MANTÉN TUS OJOS FUERA DE LA MARIPOSA Y PONLOS EN  TU ADVERSARIO! ¡CONCENTRATE, MALDITA SEA!"

Gaara se permite la más leve de las sonrisas cuando Fū se pone de pie de un salto, furiosa, y se dirige hacia sus genin, quienes se ponen pálidos como si un huracán furioso se abalanzara sobre ellos en lugar de una pequeña kunoichi. Incluso el equipo de Gaara está retrocediendo poco a poco, y con mucho gusto los deja a merced de Fū, dándose la vuelta para mirar hacia el océano mientras se desliza por la orilla. La marea está subiendo, y más allá, justo dentro de los límites de la barrera del perímetro de Uzushio, un par de botes de pesca están siendo custodiados por uno de los equipos de chuunin. A pesar de la fuerza de los sellos que protegen la ciudad, nadie se arriesga con el barco Kiri todavía dando vueltas.

Hay un destello en el cielo, un brillo luminiscente, y lo que parece una pompa de jabón desciende hacia la playa, rompiéndose varios metros sobre la arena y revelando a Utakata. El hombre aterriza limpiamente, apenas moviendo la arena debajo de él, y luego camina hacia Gaara. Su habitual expresión serena se torna sombría, completamente inusual, y Gaara frunce el ceño mientras se pone de pie.

"Utakata," dice expectante.

Utakata inclina la cabeza y luego saca un pergamino con un mensaje de la manga de su yukata "El halcón que le enviaste a Naruto ha regresado", responde "Pensé que era mejor notificarte de inmediato"

Con los ojos entrecerrados por la sospecha, Gaara acepta la misiva y la desenrolla, para nada reconfortado al ver la caligrafía nítida y precisa de Haku en lugar de los garabatos distraídos de Naruto. Las palabras tampoco son un consuelo, lo que hace que su ceño se profundice y sus dedos se aprieten sobre el papel. Esto... podría ser muy malo de hecho.

"Naruto envió a Haku de regreso", dice rotundamente, cuando se da cuenta de que Utakata todavía lo está observando de cerca. El solo es sólo implícito, pero mordaz sin embargo "Llegará al sello de transporte en la frontera antes de las diez, y pide que estemos listos para pasarlo" Un vistazo rápido al sol muestra que ya era hora—el entrenamiento ha tomado más tiempo de lo que esperaba. O tal vez no, dada la participación de Fū. Ella es... una distracción.

Pero esto, Naruto, en Konoha, frente a Danzo, sin apoyo, es aún peor.

Gaara tiene un gran respeto por la fuerza de Naruto. Naruto aún no tiene diecinueve años y ha reconstruido toda una Aldea Oculta, obtuvo un título por el que la mayoría de los ninjas trabajan toda su vida pero nunca alcanzan, ganó aliados en cuatro de los shinobi más poderosos del mundo, forjó lazos con el hermano pequeño del Raikage y la mejor kunoichi y el Sannin Orochimaru, recordó a un pueblo disperso y dominó su propio poder no despreciable. Independientemente de su vida pasada, independientemente de sus recuerdos, lo que ya ha hecho en su corta existencia es más que digno de elogio.

Pero Naruto también es un tonto cuando se enfrenta a las amenazas a las personas que le importan, y Konoha, a pesar de todas sus fallas, mantiene a todos aquellos con los que creció Naruto, luchando junto a ellos durante los primeros doce años de su vida. Él se preocupa por ellos, y eso lo hará imprudente.

Danzo es un enemigo peligroso. Si Naruto no es muy, muy cuidadoso, lo matará.

El delicado papel se rasga bajo sus dedos flexionados, y Gaara toma una respiración lenta y cuidadosa, sintiendo su arena moverse inquietamente a su alrededor. Tan pronto como está seguro de su control, mira hacia arriba para encontrarse con la mirada de Utakata y asiente una vez "Fū es mejor con los sellos, después de Naruto", dice "La traeré ¿Escoltarías a nuestros equipos de regreso al pueblo?"

"Por supuesto" Utakata asiente con la cabeza en respuesta, luego se aleja, con gracia y destreza en el suelo irregular, hacia donde Fū está dirigiendo los ejercicios. Ella le sonríe mientras él inclina la cabeza para hablar con ella, luego saluda con la mano alegremente y se aleja dando brincos, de vuelta hacia Gaara.

"¿Puedes abrir la conexión?" pregunta Gaara, incluso mientras llama a su arena y deja que se arremoline y se endurezca bajo sus pies.

Fū olfatea, levantando la nariz en el aire como si estuviera ofendida, aunque Gaara puede ver la sonrisa que esconde "¿Estás bromeando? He estado atrapado en el pueblo durante los últimos tres meses, gracias a vosotros y esos maníacos que corren por el continente. Tengo tanto chakra extra en este momento que me sorprende que no me salga por los oídos, y Chōmei está súper inquieto. Podemos hacerlo"

Gaara no cuestiona su convicción, porque se parece mucho a Naruto en ese sentido, o más bien, es una mezcla desconcertante de Naruto y él mismo, energía y alegría ilimitadas, pero atenuada por un borde hastiado en sus interacciones con los demás y la crueldad de un alma completamente acostumbrada a estar sola contra la humanidad.

"Naruto quiere que evitemos a Akatsuki por ahora", es todo lo que dice "Cualquier pelea en la que entremos con ellos debe ser en nuestros propios términos"

Fū hace una mueca y se deja caer para sentarse con las piernas cruzadas junto a los pies de Gaara en el disco en movimiento "Yo también estuve allí para esa conferencia", le recuerda, pasándose los dedos por su brillante cabello verde "De Naruto y de Roushi"

Roushi había estado... infeliz al enterarse del destino de Han, sufrió pocas semanas antes de que Naruto y Haku llegaran a buscarlo. Han y Yagura son, hasta el momento, los únicos jinchuuriki que Akatsuki ha logrado llevar, gracias a las advertencias de Orochimaru y al conocimiento de Kabuto de sus movimientos, pero la organización aún está muy lejos de rendirse. Continuaron buscando, y aunque los jinchuurikis de Uzushio todavía toman misiones, siguen actuando como los ninjas normales que Uzushio les permite ser, son cautelosos. Ninguno de ellos busca la muerte. No así, no cuando finalmente han encontrado un lugar al que llamar hogar sin dudarlo.

Aunque podría ser mucho peor. Gaara, Haku y Naruto habían ido juntos en busca de Fū y la encontraron huyendo de uno de los pares de Akatsuki. Kakuzu y Hidan, Gaara recuerda que se llamaban. Contra tres furiosos jinchuuriki con bastante control y un sobreprotector usuario de Hyoton, habían durado treinta minutos, si acaso. Claramente, su inmortalidad estaba sobrevalorada.

El shinobi observa a las personas saludar mientras pasan, y Fū les devuelve el saludo alegremente, luego se apoya en sus manos y sonríe, observando la ciudad a medida que pasa debajo de ellos. Bajo el sol del mediodía, las tejas rojas y las calles doradas que parecen brillar, la piedra blanca de los edificios es un contraste cálido y brillante. Hay gente por todas partes, civiles con túnicas brillantes y shinobi mezclados dentro y alrededor de ellos, cada uno luciendo una diadema con la espiral de Uzushio. El aire del solsticio de verano es cálido, una brisa del océano es suficiente para evitar que sea sofocante, y el olor de la comida cocinada se eleva desde los puestos de comida y las casas. Gaara lo mira todo, lo asimila y se siente... contento.

Esto es hogar.

El Centro Administrativo se elevo ante ellos, el edificio más alto de Uzushio aparte de las torres de vigilancia en la pared, y Gaara los guía hacia abajo, su disco de arena se deposita en el suelo y luego se dispersa, deslizándose de nuevo en su calabaza. Fū salta con un ágil estiramiento e inmediatamente se dirige hacia el sello oscuro dibujado en el centro del patio mientras Gaara lo sigue a una distancia prudente. El sello es increíblemente complejo, el trabajo de Naruto se desarrolló a lo largo de dos vidas. También es grande, diez pies de ancho, con cada centímetro detallado. Se necesita tanto chakra solo para activarlo que solo un jinchuuriki puede usarlo y sobrevivir.

Pero Uzushio, a diferencia de cualquier otra nación, tiene un exceso de jinchuuriki y no siente la necesidad de limitarse a los límites de los demás.

Dejando escapar un suspiro lento, Fū cierra los ojos y llama a su chakra, dejando que llene el aire como el zumbido de las alas de las libélulas al anochecer. Un kunai se desliza por la palma de su mano, de un color rojo intenso que brota detrás de él, y golpea con una mano el borde exterior del sello, enviando una luz brillante sobre las líneas hasta que todo el conjunto es luminiscente. Gaara entrecierra los ojos, tratando de ver a través del resplandor, y logra distinguir una figura en medio de él. Apenas un segundo después, Haku sale del sello a grandes zancadas, con el cabello recogido en una coleta alta y el rostro definido en líneas decididamente neutras, aunque hay un brillo de algo parecido a la frustración impotente en sus ojos.

Gaara conoce muy bien el sentimiento, en lo que respecta a Naruto.

"Gaara", dice Haku cortésmente "Me gustaría que se notara que esta no fue mi idea"

A su pesar, Gaara resopla. Realmente no lo había pensado así.

Una pequeña y renuente sonrisa tira de la boca de Haku mientras parte de la tensión se alivia de su cuerpo. Desvía su atención y le ofrece a Fū un asentimiento cortés y una mano para ayudarla a ponerse de pie. Ella lo ignora con una burla, enderezándose y cepillando su falda con altivez.

"Es bueno verte de una pieza, Frosty", dice con una sonrisa "Fue agradable y cálido sin ti aquí para bajar la temperatura, ya sabes. Tan tostado que Kiri decidió aprovecharlo y hacernos una visita"

Haku pone los ojos en blanco, aunque solo sea débilmente "Fū", responde, sufriendo, y luego mira a Gaara "¿Supongo que la nave Kiri todavía está presente?"

"Sí" Gaara cruza los brazos sobre el pecho, luchando contra el ceño fruncido "Los shinobi a bordo no han hecho ningún movimiento hasta el momento, ni siquiera han intentado romper la barrera. Si estuviera inclinado a dudar de la afirmación de Utakata, casi estaría convencido de que el antiguo Kiri ninja estaba equivocado"

Pero claro, Utakata es inteligente y observador y, lo que es más importante, Kiri lo entrenó y Gaara confía en él "Tienes permiso para tomar un equipo diplomático para enfrentarlos", le informa a Haku, sabiendo muy bien que cualquier equipo que Haku reúna probablemente estará mucho menos orientado hacia la diplomacia y más hacia una demostración de fuerza "La gente está... inquieta. Lo mejor sería movilizarse lo antes posible"

La boca de Haku se tensa ante eso, su descontento con la situación es claro "Tenía la esperanza", dice con una ligereza engañosa, incluso mientras revisa sus bolsas de senbon, "que Terumi Mei probaría estar cortada de una tela diferente a la de Yagura, especialmente sin la influencia de Tobi. Que decepcionante"

Gaara considera recordarle que no tienen idea de los motivos de Kiri aquí. Pero Haku está enojado por tener que dejar a Naruto solo para enfrentar a un enemigo peligroso en una aldea extranjera, no es que Gaara esté mucho más feliz, y es probable que las palabras caigan en oídos sordos. Como Gaara no es de los que desperdician palabras que podrían estar mejor gastadas en otro lado, simplemente inclina la cabeza, concediendo el punto.

"¿Todavía tienes suficiente chakra para ser parte del equipo?" Haku le pregunta a Fū, estudiándola de cerca en busca de rastros de agotamiento de chakra.

La niña resopla y pone los ojos en blanco ante la insinuación de su agotamiento, aunque su sonrisa está al borde de la sed de sangre "¿Por quién me tomas, Frosty? Intenta dejarme atrás"

Haku asiente, la satisfacción asentándose justo debajo de su amable y plácida máscara, la misma que todos en Uzushio han aprendido durante mucho tiempo a no tomar al pie de la letra. Haku es educado, cuidadoso y compasivo hasta que planta una aguja de hielo en la garganta del enemigo y, a veces, incluso después de eso. No regala nada a menos que tenga que hacerlo, se mueve como un fantasma y nunca busca la gloria en una pelea. Gaara está... desconfiado de él, aunque solo sea vagamente, porque después de la forma en que fue criado, Haku solo tiene el concepto más abstracto de aldea. Naruto es su hogar, y solo Naruto. Él es leal a todos ellos, a cada persona en Uzushio, pero aunque Naruto nunca jamás se lo pedirá, Naruto es por quien mataría.

Y esto, proteger la aldea, mantener a salvo a la gente de Uzushio, esto es para Naruto.

Gaara entiende el sentimiento por completo.

Danzo es un maldito bastardo paranoico.

Naruto maldice por lo bajo, aplastándose contra el tronco de un árbol, en lo profundo de las sombras, mientras un escuadrón completo de Root shinobi pasaba corriendo. Veinte pistas falsas, treinta intentos de desorientación para llevarlo a la conclusión equivocada, dos docenas de guardias en una pequeña e inocua estación de investigación a una legua de las afueras de Konoha, pero los esquivó a todos. Lo hizo, y los archivos que necesitaba, la prueba de que Danzo ha tenido tratos con todos, desde Hanzō hasta Orochimaru y el líder en la sombra de Akatsuki, están guardados de forma segura en uno de los sellos de Naruto. Años de experimentación, docenas de shinobis acondicionados para servir a Danzo solos, oscuras misiones desde asesinatos hasta recuperaciones: todo está aquí.

También es un completo bastardo, al menos. Meticuloso en su mantenimiento de registros, y es un alivio la forma en que pocas cosas han sido. Naruto había tenido miedo de que no hubiera registros, que solo hubiera unos pocos archivos oscuros que no significaran mucho, a pesar de toda la insistencia de Orochimaru en lo contrario. Pero Danzo cree que es el mayor defensor de la aldea, cree que está haciendo lo correcto, lo mejor en lo que respecta a Konoha y, a pesar de que opera en la sombra, hay una parte de él, la parte que veía a Sarutobi como un rival, que ha intentado durante años ser nombrado Hokage, que insiste en que es un héroe.

Está todo documentado. Desde el principio, todas las misiones y hazañas de Root, incluso su intento de asesinato en Sandaime y el intento de maniobrar a Ame en una guerra contra Iwa.

Hasta los tratos de Danzo con Kiri, información sobre las fuerzas y defensas de Uzushio a cambio de su destrucción.

Enferma a Naruto, hace que su estómago se sienta como si estuviera lleno de insectos venenosos, arrastrándose y doliendo. Tanta muerte, tantas vidas arruinadas, ¿y para qué? ¿Por qué ? ¿Para mantener fuerte a Konoha? Pero siempre ha sido el pueblo shinobi más fuerte, nunca ha perdido una guerra o incluso una batalla importante. ¿Para mantener a la gente a salvo? Pero, ¿Cuántos de los propios ciudadanos de Konoha habría sacrificado Danzo en nombre de eso? ¿Habría estado satisfecho y contento de gobernar una aldea vacía?

Rechinando los dientes y manteniendo un dominio absoluto sobre el enojado chakra rojo que quiere escapar de él, Naruto se arriesga a echar un vistazo rápido a su entorno y sale disparado de su escondite, moviéndose tan rápido como puede mientras mantiene cierto nivel de sigilo. Entró en la base sin ser detectado, logró reunir todos los archivos que necesitaba y dejó copias que desaparecerán en unas pocas horas en su lugar, pero al salir fue descubierto. Un guardia fuera de la rotación habitual, un momento de atención donde no debería haber sido, y todo su cuidado había sido en vano.

Pero eso no importa. Él no va a ser atrapado. No ahora. No así, cuando está tan cerca de finalmente ganar.

Él es el dios de la tormenta de Uzushio, ha tenido dos vidas para desarrollar sus habilidades y perfeccionar su poder. Si quisiera, Naruto tiene pocas dudas de que podría entrar desnudo en la casa de Danzo y matarlo, así como así. No importa con cuántos guardias Root se rodee el hombre, Naruto es rápido y fuerte y tiene tanta ira y rabia embotellada que sería fácil.

Pero eso no es justicia, eso es venganza. Lo que Naruto quiere es justicia. Quiere que la gente sepa quién destruyó su aldea y por qué. Quiere que miren a Danzo y vean las caras de cientos de civiles, cientos de shinobis asesinados por un solo hombre. Un hombre y su búsqueda de poder, para sí mismo, independientemente de cómo haya afirmado que es para Konoha. Inocentes muertos en sus manos, gente retorcida, rota y despedazada por sus objetivos enfermizos. Naruto quiere que todos lo sepan.

Después de eso, Tsunade puede matar a Danzo. Después de eso, a Naruto no le importará. Una pérdida de vida, piensa con algo de pesar, porque Danzo podría haber sido genial, pero eso... no es suficiente.

Hay algunas líneas que no se pueden cruzar, y Danzo las ha cruzado todas, una y otra vez.

No importa cuánta misericordia haya en él, este hombre Naruto no lo puede perdonar.

Hay un grito detrás de él, una alerta, y Naruto maldice por lo bajo, volteándose en medio de un salto para atrapar un kunai apuntado a su espalda y luego devolverlo con interés. Uno de sus perseguidores cae, pero Naruto no descansa en sus laureles, empuñando un puñado de senbon y lanzándose entre los dos restantes. Las largas agujas atraviesan limpiamente la carne, sin siquiera sacar sangre cuando los dos shinobi caen inconscientes como si sus hilos hubieran sido cortados, y Naruto salta, moviéndose entre los árboles nuevamente. Puede sentir más de ellos a su alrededor, el zumbido que distrae de sus sellos silenciadores como múltiples rebabas contra su piel, pero aún no lo han visto, no lo han encontrado y...

Una mano en la oscuridad, agarrándolo por el hombro y haciéndolo girar antes de que pueda reaccionar. Naruto choca contra el tronco de un árbol lo suficientemente fuerte como para hacer que le castañeteen los dientes, y ya se está lanzando para llevar a un senbon a los delicados órganos vitales cuando su atacante agarra sus muñecas con ambas manos y fuerza sus dedos para abrirlos, inmovilizándolo corporalmente con su mayor altura y peso. Con un gruñido, Naruto está a punto de recuperar su chakra, independientemente de cómo se haya abstenido de usarlo, porque el agua y el viento no son comunes en Konoha, y será demasiado fácil para las personas armar el rompecabezas con él como solución. Comienza a arrojar pistas como esa, cuando se da cuenta de quién lo está reteniendo, y su corazón da un vuelco.

Sasuke, sus ojos oscuros aún más oscuros en las sombras, todo su rostro es una máscara de furia pálida mientras gruñe y golpea a Naruto contra el grueso tronco. Otra sacudida discordante y el cabello rubio cae en cascada desde debajo de la capucha que lo oculta y cae alrededor de la cara de Naruto, sin dejar dudas de que Sasuke se dará cuenta de que es Youko si aún no lo ha hecho, y todo este día puede morir ya, Naruto ha terminado con eso-

"Una razón", gruñe Sasuke, y tal vez sea la imaginación de Naruto, pero cree que puede ver chispas de electricidad alrededor de los dedos de Sasuke donde están agarrando sus muñecas "Dame una buena razón por la que no debería llamarlos y dejar que te lleven, maldito espía"

El aliento de Naruto se queda atrapado en su garganta. Así no es como él quería que esto fuera. Esta no es la situación que imaginó cuando pensó en Sasuke descubriendo su identidad. Pero no hay elección. No va a lastimar a Sasuke, no puede, no puede, son amigos o lo fueron alguna vez, Sasuke lo ha estado buscando, y para Naruto eso significa algo, no lo lastimará para escapar, pero tampoco puede arriesgarse a que Sasuke cumpla su amenaza y llame a Root.

"Está bien", dice uniformemente, aunque su voz sale ronca y áspera "Está bien. Tú ganas. Sólo déjame ¿vale?"

Los ojos de Sasuke se estrechan, pero suelta la mano izquierda de Naruto. Lentamente, asegurándose de que ninguno de sus movimientos pueda interpretarse como una amenaza, Naruto se lleva la mano a los ojos y torpemente se quita los lentes de contacto de colores, parpadeando para alejar la rareza de tenerlos afuera mientras los deja caer sin cuidado. Ya no importan.

Un respiro, y mira a Sasuke, quien está absolutamente congelado, con la mirada fija en su rostro. Otro, y él engancha un dedo en la parte superior de su máscara y la baja lentamente, revelando seis marcas de bigotes afilados que nadie más en el mundo se jacta.

Sasuke se ahoga con el aliento, pero sus ojos brillan con algo así como una salvaje y peligrosa satisfacción. El agarre en la muñeca de Naruto se aprieta casi hasta los moretones, luego se afloja. Él hace un sonido, algo agudo, doloroso y eufórico, todo a la vez y luego se lanza hacia adelante. Naruto retrocede, esperando un puñetazo, un cabezazo, una bola de fuego en la cara, cualquier cosa, porque Sasuke lo ha estado buscando apenas por siete años, y seguramente, seguramente esto es algo por lo que debe estar furioso.

Lo que obtiene son labios sobre los suyos, lengua y dientes y calor y deseo, un beso tan fuerte que si fuera más fuerte uno de ellos estaría sangrando. Es deseo y satisfacción y furia y te extrañé, dónde estabas, por qué me dejaste  todo envuelto y enredado hasta que Naruto tiene que aceptarlos a todos a la vez, no puede separarlo en términos simples.

Sasuke me está besando, piensa Naruto aturdido, incluso cuando sus rodillas se debilitan, incluso cuando Sasuke lo inmoviliza contra el árbol y junta sus labios en un tobogán caliente sin aliento y toma, y ​​Naruto se inclina hacia él y le da. Incluso mientras agarra los hombros de Sasuke y tira de él más cerca, y realmente, nunca había pensado en esto antes, nunca pensó en hacer esto con nadie, incluso cuando solía estar obsesionado con Sakura y las citas.

Pero él quiere, y eso es más sorprendente que nada. Quiere a Sasuke. Lo desea tanto que es como una banda de hierro alrededor de sus pulmones, como algo ardiendo en su pecho. Como acero, seda y relámpagos que abruman sus sentidos a la vez hasta que no queda nada a su alrededor más que el olor de las lluvias primaverales y el más leve indicio de ozono, nada más que la boca de Sasuke ardiente y devastadora sobre la suya, sus cuerpos perfectamente alineados.

Él quiere y toma, como si no hubiera nada más de qué preocuparse en todo el mundo. Y Sasuke lo besa, lo besa como un hombre que se ahoga mientras sus manos se deslizan sobre cada centímetro de la piel de Naruto que puede alcanzar, renuncia a todo y lo toma a su vez porque así ha sido siempre entre ellos.

Naruto desliza sus dedos en el suave cabello de Sasuke, inclina su cabeza hasta que sus bocas encajan perfectamente, y simplemente el beso se suaviza, se relaja. Un roce de labios, un deslizamiento de lenguas que envía una pequeña chispa bailando por la columna de Naruto, y él abre ojos que no recuerda haber cerrado, exhala largo, tembloroso y lento mientras Sasuke se aleja a regañadientes. Él no va muy lejos, solo descansa sus frentes juntas y mira directamente a Naruto, ojos oscuros e insondables.

Pero solo por esta vez, con sus manos en el cabello de Sasuke y el sabor de los labios de Sasuke en los suyos, Naruto está bastante seguro de que puede leerlo de todos modos.

"Bastardo", resopla, y si sale sin aliento y un poco aturdido, cree que puede ser perdonado "Ya lo sabías"

Y Sasuke solo gruñe un "Hnm" agudo y descuidado, pero sus ojos están riendo y su boca está inclinada hacia arriba en las comisuras en una sonrisa que claramente es a expensas de Naruto.

La única opción, obviamente, es besarlo, y Naruto se inclina hacia adelante y hace exactamente eso.