Siempre supo cómo hacerlo sentir bien, como dibujar en ese rostro una hermosa y sarcástica sonrisa, pero ahora, todos sus trucos parecían no tener ningún efecto en él y se frustró, estaba tan desesperado por devolverle el buen ánimo a Ángelo que hizo hasta lo imposible para obtener su objetivo, sin embargo, nada de lo que hacía cambiaba la cara larga de ese muchacho y es que tampoco sabía que lo llevó hasta ese punto, cuando le preguntó, un "nada" fue su respuesta.

Suspiro y se sentó a su lado, viendo el techo, observando de reojo como el italiano se abrazaba a sus rodillas y escondía su rostro, en algún punto, aquel sentimiento le contagió y por un momento pensó en asesinar a quien quiera que fuese el causante de la tristeza de su amado, pero al no saber su identidad, solo podía hacer planes vacíos.

—Ángelo — le llamó, esos ojitos rojos a causa de llanto le miraron con pena, no dijo nada más, solo abrió los brazos y sintió como se abalanzaba en su dirección escondiendo su rostro en su pecho, perdiendo sus manos en sus ropas, apretándolas y deshaciéndose en un llanto desgarrador que le partió el alma.

Y entonces lo comprendió, lo único que necesitaba era un abrazo, uno de esos que te llenan, que te reconfortan el alma y le dan fuerzas a tu espíritu, de esos que acarician tu mente y te dicen de manera silenciosa que todo está bien sin importar que tan hondo sea el pozo en el que has caído, ese que te levanta hasta la más pequeña de las células de tu ser y te hace ver que, por más oscura que sea la noche el sol sale de nuevo.

Se quedó ahí, escuchando los sollozos que poco a poco iban cesando de aquella boca, se quedó ahí, aspirando el perfume a frutos de su cabello, sintiendo su camisa ser empapada por aquellas lagrimas amargas que poco a poco mermaban de aquellos ojos y se hacían nada entre las telas blancas que cubrían el pálido pecho de aquel que ahora solo lo abraza.

Se quedó ahí, sintiendo como su pecho subía y bajaba a un ritmo considerable gracias a la exaltación de aquel sentimiento, se quedó ahí, rodeando con sus brazos ese cuerpo que le pedía a gritos un poco de consuelo con un par de palabras que resonaban en su mente como la petición que estaría dispuesto a cumplir una y otra y otra vez sin cansarse: solo abrázame. 

😴🦀
Este salió un poco triste. 

Para:Vhope533, Espero que te haya gustado, linda

Dan R