Si Mystoria les dijera que se había enamorado de un fantasma, ¿le creerían? O ¿lo tomarían como un loco?, quizá algunos pudieran decir que era verdad y otros tantos que se había vuelto un loco de remate y que quizá debería de estar recluido en un manicomio o algo parecido a eso, pero la verdad es que era real, lo que sentía por ese fantasma y también el fantasma era real, nunca creyó en ellos, eran solo... fantasías, como la de los libros en aquella biblioteca a la que tanto le gustaba que ir.

Estaba, como todos los días, sentado en el suelo de su habitación dentro de la casona donde vivía, leyendo, como siempre, estaba concentrado, pasando sus ojos de una línea a otra como un loco, alguien aparecía detrás de él, en silencio, como si supiera que la acción que Mystoria hacía era de suma importancia, sus ojitos rojos se posaron en las líneas que leía:

— Todas las miradas se posaron en el fuego...

Se puso a su lado, sentado, igual que Mystoria, al parecer no había advertido su presencia, era lo bueno de ser un espíritu, si no quería nadie le notaba, sonrió cuando reconoció las líneas de aquel libro, cuando podía tocar las cosas, amaba ese libro, sus relatos y la forma que estaba descrito cada capítulo.

— ¿Demonia? — preguntó muy cerca del oído de Mystoria.

Pego un grito y un salto, aventó lejos el pobre libro y casi le avienta otro libro que estaba cerca, bueno... en realidad se lo lanzo pero seamos sinceros, esa acción no le hizo nada, se comenzó a reír como nunca ante la mirada de enojo del otro.

— ¡¿Acaso me quieres matar de un susto?!

—No, pero es lo que hago, cariño, además, ese librazo me dolió — se hizo el ofendido y antes de que pudiese decirle algo más, desapareció.

Solo pudo negar con la cabeza, ya debería de estar acostumbrado a eso, aun así, cuando lo volviera a ver, le diría lo que estaba guardando desde hace mucho tiempo, quizá y Ecarlete ya sospechaba de ello pero vamos, es mejor que Mystoria admitiera lo que sentía por él, aunque nuestro fantasma pelirrojo ya se lo había dicho, pero eso no es lo importante, lo que en realidad nos interesa es que Mystoria le diga lo que su corazón siente, aunque suene extraño y loco. 

🦂❄

Estos dos son un desastre. 

por cierto, el libro que estaba leyendo Mys, se llama DEMONIA, es de Bernardo Esquinca. 

Para:  Jcarolinadiaz12345

Dan R .