#DE PALABRAS: 2900+
ADVERTENCIAS: Violencia doméstica (leve pero gráfica), mención de divorcio, infidelidad, maldiciones, datos nerd sobre algunas cosas. ¡Leanlo hasta el final!
ESCRITO POR: PomeloVillano
N/A: Lo único que sé de medicina lo aprendí de E.R y Doctor House.

~•~

El tiempo se detuvo lentamente; En cada impacto parecía como si todo se volviera mas estático y quieto hasta detenerse por completo y lo único que se movía era esa oscura figura.
-¿Cuándo vas a aprender?- Espetó él. -Parece que a las de tu tipo les gusta empujar a uno hasta su límite...- Agregó antes de propinar otra patada.
Una tan certera y calculada que dejó a t/n tosiendo el poco aire que aún le quedaba. Y rogando con desespero por algo más del tan necesario oxígeno que su cuerpo pedía.
En el suelo de su cocina, de costado, observando los pies de él, t/n sintió el peso de su orgullo aplastar su vida poco a poco.
-¿Las de mi TIPO?- Dijo ella. Soltó una risa sin humor, algo ahogada. -¿Te refieres a personas que saben que eres un imbécil?- Cuestionó.
Trevor se inclinó y propinó un puñetazo en el rostro de t/n.
-Tu no sabes cuando cerrar la maldita boca, ¿Cierto? Bien, veamos que tanto puedes hablar...- Las palabras de él fueron interrumpidas por un lento sollozo fuera de la cocina.

T/n elevó la cabeza levemente y observó hacia la puerta, donde su hija observaba el panorama.
-¿Qué carajos hace aquí? ¡Tendría que estar con el imbécil de su padre!- Exclamó Trevor antes de salir de la cocina a toda prisa.
Al oír la puerta de entrada cerrarse con fuerza, un suspiro de alivio se escapó de ella. Con algo de dificultad y sintiendo el dolor apoderarse de su cuerpo, t/n se puso de pie y se acercó hasta su hija. Rodeó a la pequeña con sus temblorosos brazos y sonrió levemente.
-Tranquila, cariño...- Dijo ella en el tono más calmado que logró manejar.
-¿Estás bien, mamá?- La voz de Selene sonaba temerosa.
T/n tragó con fuerza.
-Mamá está bien, pero necesita que le hagas un favor.- Dijo en tono calmado.
T/n se apartó levemente y observó a su hija con detenimiento. La pequeña asintió.
-Ve a tu habitación, cambiate de ropa y guarda tu pijama en tu mochila.- Dijo ella. Selene asintió enérgicamente. -Ponte tus tennis favoritos y una chaqueta, ¿Si?- Agregó.
La pequeña asintió antes de dirigirse hasta su habitación.
T/n entró en la cocina una vez más y tomó su teléfono; Tras buscar en los contactos, marcó el número de la única persona en quien confiaba que podría cuidar a su hija a esa hora.
T/n observó el suelo un momento y suspiró lentamente al ver manchas de sangre en éste.
-Eso será difícil de limpiar.- Murmuró.

-¿Hola?- Dijo la voz del otro lado.
T/n suspiró aliviada.
-Hola, perdón por llamar a ésta hora... necesito dejar a Selene contigo.- Dijo ella en tono calmado.
-Claro, linda, no hay problema.- Aseguró. -¿Está todo bien?- Cuestionó.
T/n exhalo con calma.
-Si, sólo... necesito que la cuides algunas horas.- Dijo t/n.
-¿Segura que está todo bien? Suenas agitada.- Señaló la voz del otro lado.
-Si, estoy bien, sólo fue una mala noche... y no puedo llevarla conmigo.- Dijo t/n.
-Bien, entonces las espero.- Dijo antes colgar.
T/n limpio la pantalla de su teléfono y lo guardó en el bolsillo de su pantalón antes de acercarse al lavamanos y limpiar de su rostro los restos de sangre. Con algo de calma acomodó su ropa y su cabello.
Tras buscar su bolso, llaves y chaqueta, esperó por su hija. Al verla salir de su habitación, sonrió levemente.
-¿Todo listo?- Cuestionó ella.
La pequeña asintió enérgicamente antes de acercarse hasta t/n y sujetar su mano.
-¿A dónde vamos?- Cuestionó ella.
-A casa de la abuela.- Dijo t/n antes de salir de la casa y cerrar la puerta.
Tras asegurar a Selene en el asiento trasero, t/n se acomodó con lentitud en el lado del conductor y puso el auto en marcha.

~

T/n detuvo su vehículo lentamente frente a la casa de su ex-suegra. Observó por el retrovisor a su hija y sonrió levemente.
-¿A qué hora vendrás por mi?- Cuestionó Selene.
-Aun no lo sé, pero cuando lo sepa llamaré a la abuela y le diré, ¿Si?- Dijo ella en tono animado.
Selene asintió enérgicamente antes de desabrochar el cinturón de seguridad que la mantenía segura en el asiento. T/n bajó lentamente y cerró con suavidad antes de ir a abrir la puerta del lado de su hija. Al bajar, la pequeña sonrió al ver a su abuela esperar por ellas en la puerta.
Los ojos de su ex-suegra se abrieron de par en par al notar el moreton que comenzaba a cubrir el párpado inferior del ojo izquierdo de t/n, al igual que el pronunciado corte en el labio superior y su nariz algo inflamada. Sacudió levemente la cabeza y suspiró.
-Selene, cariño, ve a mi habitación y esperame ahí, ¿Si?- Dijo ella en tono calmado. -Hice muchas galletas para ti, el frasco está sobre la mesa de noche.- Aseguró.
Selene asintió enérgicamente; Elevó la mirada y observó a su madre a la espera de su aprobación. T/n sólo asintió.
-Ve, cariño, yo voy a saludar a la abuela.- Dijo ella.
T/n se inclinó con algo de dificultad y posó un beso en cada mejilla de su hija. Observó a Selene entrar en la casa y esperó a que cerrara la puerta.

-Dios mío, niña, ¡Mira lo que te hizo ese salvaje!- Ella tomó el rostro de t/n con suavidad entre sus manos y lo inspeccionó con detenimiento.
T/n posó sus manos sobre las ajenas y suspiró.
-Lo sé... pero no es momento para esto.- Dijo t/n en tono calmado. -Necesito que cuides de ella. Debo ir a emergencias y que me revisen... estoy segura de que está vez algo se rompió ahí dentro.- Agregó.
Su ex-suegra cerró los ojos y asintió.
-¿Podrás conducir hasta el hospital?- Cuestionó.
T/n asintió levemente.
-Si, podré llegar al hospital... Prometo llamar cuando llegue.- Aseguró ella.
Ella dejó ir el rostro de t/n.
-Ve. Por favor, prometeme que ese animal no se acercará más a ustedes...- Dijo en tono serio.
T/n asintió.
-Lo prometo.- Aseguró.

~

T/n siempre odió los hospitales, más aún el área de emergencias; Personas polulando los pasillos, doctores y enfermeros corriendo de un lado al otro, con un área de espera casi siempre repleta y una recepcionista que debe hacer malabares para que los que esperan no pierdan la calma en lo que encuentran un espacio para atenderlos...
Un lento suspiro se escapó de  ella al encontrar un asiento libre para llenar la forma. Después de todo, sólo sería un chequeo para confirmar que todo estuviera en orden.
Su teléfono vibró por quinta vez desde que entró en el hospital pero prefirió ignorarlo; Después de todo, Trevor no merecía que lo atendiera para oír sus patéticas excusas y disculpas luego de lo que había hecho.
Ya no.

Tras llenar la forma y entregarla a la recepcionista, t/n inhalo con calma; La presión en su costado era cada vez más grande y difícil de soportar, haciendo que sus exhalos salieran en forma de una molesta tos.
Varios minutos de espera después, su nombre fue llamado; Tras dirigirse al consultorio de la doctora, observó la expresión de desaprobación que ésta portaba.
-¿Qué sucedió?- Cuestionó ella en tono calmado.
T/n tragó con fuerza antes de responder.
-Tuve una pelea con mi novio y...- Sus palabras fueron interrumpidas ante aquella molesta tos.
T/n posó una mano en su lado derecho y presionó al sentir un fuerte dolor invadirla; Jadeando con desespero por aire, comenzó a sentir como todo daba vueltas. La voz de la doctora empezó a alejarse hasta que, simplemente, desapareció al igual que todo a su alrededor.

~•~

Un lento bipeo fue lo primero que los oídos de t/n captaron al regresar poco a poco a la consciencia; Un gruñido se escapó de ella al sentir el peso de lo que pareció haber sido una muy mala noche de sueño.
Con lentitud, comenzó a reconocer las sensaciones; Sus labios algo entumecidos, boca seca, garganta algo rasposa, un leve frío metálico en la fosa cubital del brazo izquierdo, párpados pesados, su mano derecha tibia. Tras abrir los ojos lentamente, parpadeo algunas veces en busca de reconocer su alrededor. Al ver su mano derecha ser sujetada con firmeza y una cabeza rubia descansar a un lado, un lento suspiro se escapó de ella.
Lentamente, dio un suave apretón a aquella mano lo cual despertó a su portador de inmediato; Aquel par de ojos enrojecidos por un mal descanso, desbordaron de inmediato de lágrimas.

-Hey.- Dijo t/n con algo de dificultad.
Un suspiro de alivio se escapó de Steve al oírla.
-Hey.- Dijo él.
-¿Qué... que haces aquí?- Cuestionó t/n.
-Al parecer aún soy tu contacto de emergencia.- Dijo él.
T/n cerró los ojos un momento.
-Lo lamento.- Se lamentó ella.
Steve negó con la cabeza.
-Soy yo quien lo lamenta... tardé un poco en llegar y cuando llegué estabas en la sala de operación.- Dijo el rubio en tono calmado.
T/n fruncio el ceño ante aquellas palabras.
-¿Operación?- Cuestionó algo confundida.
Steve asintió.
-La doctora dice que llegaste a emergencias y que, al parecer, sufriste de un lento sangrado interno causado por un fuerte golpe.- Aseguró él.
-¿Cuánto tiempo llevo aquí?- Cuestionó ella algo preocupada.
Steve tragó con fuerza antes de responder.
-Dos días.- Admitió él.
-¿Significa que llevas dos días aquí?- Cuestionó t/n.
Steve asintió levemente.
-Lo siento.- Dijo ella.
-¿Por qué?- Cuestionó él.
-Por hacerte perder tu tiempo...- La voz de t/n sonaba cargada de tristeza.
Steve suspiró lentamente.
-T/n, sabes perfectamente que, sin importar la hora, el día o el lugar, si se trata de ti o de nuestra hija, yo no dudare ni un segundo en ir hasta donde sea.- Aseguró. -Yo siempre, SIEMPRE, estaré a una llamada de distancia. Sin importar nada ni nadie.- Agregó.

T/n asintió levemente. Lágrimas comenzaban a invadir sus ojos.
-Lo sé... pero no debería ser así.- Dijo ella.
-¿Por qué no?- Cuestionó él.
-Porque ya no estamos juntos y porque...- Steve la interrumpió.
-Que el estar divorciados no te haga creer que no eres una de las personas más importantes para mi.- Aseguró él. -Tu, sin lugar a duda, eres el más grande de los amores de mi vida y nada lo va a cambiar.- Dijo él en tono calmado. -Lo que pasó no cambia lo que siento ni quien eres para mi.- Agregó.
Steve tomó la mano de t/n y posó un corto beso en sus nudillos.
Un momento de silencio se apoderó de ellos.
-Esto no debería ser así.- Murmuró Steve.
T/n fruncio levemente el ceño.
-¿A qué te refieres?- Cuestionó ella.
-Tu no deberías estar aquí... ¿Qué sucedió?- Cuestionó el rubio.

Un lento suspiro se escapó de ella.
-N-no quiero hablar de eso.- Dijo t/n casi en un susurro.
Steve asintió levemente.
-Bien... ¿De qué quieres hablar?- Cuestionó él.
T/n fruncio levemente los labios.
-¿Cuántas lunas tiene nuestro sistema solar?- Cuestionó t/n.
Un pequeña sonrisa se formó en el rostro de Steve.
-Nuestro sistema solar tiene, hasta ahora, un total de 182 lunas;- Steve aclaró levemente la garganta y continuó. -La mayoría giran alrededor de grandes planetas y las restantes orbitan planetas enanos como Plutón que cuenta con cinco lunas: Caronte, Nix, Hidra, Kerberos y Estigia, o Eris con sólo una luna...- La voz cargada de calma hizo que, por un momento, t/n olvidara porque estaban ahí.
Casi sin pensarlo, sujetó la mano de Steve con fuerza mientras él hablaba.
-...Nuestra luna, con un diámetro ecuatorial de 3476 km, es el quinto satélite más grande del sistema solar, mientras que en cuanto al tamaño proporcional respecto a su planeta es el satélite más grande: un cuarto del diámetro de la Tierra y 1/81 de su masa. Después de Ío, es el segundo satélite más denso.- Dijo él.
-El término griego Selene, nombre de la diosa mitológica asociada a la luna, es utilizado en varios idiomas para expresar determinados conceptos relacionados con la luna, como «selenografía», término usado para decir cartografía lunar, «selenita», el gentilicio de los supuestos habitantes del satélite y «selenio», el elemento químico.- Dijo t/n.
Una amplia sonrisa se apoderó de él. Aquel marcado entusiasmo que despedía Steve ante datos sobre su tema favorito, era difícil de ignorar.

~•~

T/n apoyó su cabeza en su almohada y suspiró aliviada al sentir la calidez de su propia cama por primera vez en días; Tras una semana recuperándose bajo el riguroso cuidado del personal médico y el ojo vigilante de su ex-esposo, pudo regresar a su hogar.
Aún le era algo difícil caminar sin soporte, respirar profundamente sin sentir una leve presión en su costado, sentarse y ponerse de pie rápidamente y la cicatriz en su abdomen daba comezon en ocasiones.
T/n sonrió ampliamente mientras su hija se acomodaba a su lado en la cama.
-Te extrañe mucho, ¿Sabes?- Cuestionó ella.
Selene acomodó su cabeza suavemente sobre el hombro de su madre y suspiró.
-Yo también te extrañe mucho.- Aseguró ella.
-¿Te divertiste en casa de la abuela?- Dijo t/n. Sus dedos acomodaban lentamente el cabello de su hija.
-Si, mucho.- Aseguró la pequeña. -Ayudé a la abuela a preparar galletas para papá.- Agregó.
-Eso es genial, cariño.- Dijo t/n antes de depositar varios besos en la suave cabellera de Selene.
-La abuela Sarah dijo que papá se quedará con nosotras, ¿Es cierto?- Cuestionó ella.

T/n suspiró lentamente antes de asentir.
-Si, cariño, él se quedará con nosotras algunos días para ayudar a mamá.- Admitió.
-¿Puede quedarse más tiempo que algunos días?- Cuestionó la pequeña.
T/n fruncio levemente los labios.
-Eso tendrás que preguntárselo a él.- Dijo t/n en tono calmado.
-Y la respuesta es si.- La voz de Steve captó la atención de ambas. -Me quedaré hasta que tu madre se recupere.- Aseguró él.
Un grito de alegría llenó la habitación, seguido de las risas de t/n y Steve.
Un suspiro de alivio se escapó de t/n.

~•~

Un jadeo desesperado se escapó de t/n al despertar. Sudor frío la cubría y tibias lágrimas recorrían sus mejillas; Tras un mes de aquel lúgubre día, cada intento por dormir por las noches se veía frustrado por terribles pesadillas.
Si bien desde que regresó a su hogar contaba con que su ex-esposo estaba sólo a metros de ella, la idea de que el cambiar cerraduras y que Trevor se haya largado de la cuidad, no la hacían sentir segura en ese único lugar en el cual nadie podía ayudarla.
Sin dudarlo, salió de su cama a toda prisa y de su habitación; A paso lento pero seguro se dirigió hasta la habitación donde Steve dormía.
Al pararse frente a la puerta, respiró lentamente en un intento por mantener la calma. Tras algunos segundos, dio tres golpes a la puerta, seguidos de otros tres y luego varios hasta que ésta se abrió revelando a un sorprendido Steve.

T/n entró en la habitación, rodeó los hombros de Steve con sus brazos y hundió su rostro en el pecho de él.
-Lo siento.- Dijo ella entre sollozos.
Steve rodeó a t/n con sus brazos y suspiró.
-¿Por qué?- Cuestionó él.
-Siempre me hiciste sentir a salvo y yo te fallé...- Dijo ella. -Te fallé siendo infiel, te fallé al no rogar que te quedaras y te fallé cada día que no pedí perdón por haberte lastimado... porque eso es lo que debía hacer, pedir perdón hasta que eso significara algo y no una palabra vacía que no sirve de nada si no remedias lo que has hecho mal...- Agregó de manera apresurada entre sollozos.
Steve liberó de su abrazo a t/n y tomó el rostro de ella entre sus manos.
-Tranquila, respira con calma.- Dijo él mientras secaba las lágrimas que recorrían las mejillas de ella. -¿Qué sucede?- Cuestionó aún algo confundido.
-Sé que no merezco que tu estés aquí, pero por favor... no me dejes...- Dijo t/n, susurrando las últimas palabras.

Steve tragó con fuerza al oír aquellas palabras; Si bien habían pasado varios años desde que tomaron caminos separados, sus sentimientos por t/n seguían intactos.
-No pienso ir a ninguna parte.- Aseguró él. -Hay una niña de seis años, a quien amo con el alma, a la que le prometí quedarme hasta que su madre se recuperara y planeo cumplir con eso... supongo que eso incluye sanar su corazón y el mío también.- Agregó.
T/n suspiró lentamente.
-Perdón por haber creído que ya no te necesitaba... siempre, SIEMPRE, te voy a necesitar para que estés a mi lado, para que me cuides, para que me ames como yo te amo a ti.- Dijo ella. -Por ti existe alguien que sueña con ser astronauta y vivir en el satélite natural que inspiró su nombre.- Agregó.
Una leve risa se escapó de Steve.
-Por ti sé diferenciar un buen amor de uno malo y juro que necesito recordar el primero para olvidar que el último existió.- Dijo t/n.
-Por ti sé que no existe otro lugar en el que me gustaría estar... ni nadie más a quien amar además de a una futura astronauta y a quien la trajo a este mundo.- Dijo Steve antes de posar un beso en los labios de ella.

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N/A: El siguiente será un two shot y debo advertir que la temática es un poquito oscura en la segunda parte...