PROMEDIO DE PALABRAS: 3000+
ADVERTENCIAS: Tristeza, mención de enfermedad terminal, muerte, amigos molestos, mención de uso indebido de alcohol, bromas pesadas ¡Leanlo hasta el final!
ESCRITO POR: PomeloVillano
N/A: -

#PomeloAmaASteve
#TeamCapipaleta
#FelizCumpleViejoLesbiano
#TardePeroSeguro

~•~

El comienzo del mes de Julio marcaba un año más para Steve.
No, no se debía a la celebración de su natalicio, sino a algo un poco mas profundo.

Sarah Rogers fue siempre su más grande apoyo, su fiel amiga y su mayor cómplice. Era su madre pero eso no quitaba que Steve viera en ella alguien en quien confiar plenamente, a quien recurrir por consejos y en quien sentirse a salvo cuando todos los monstruos atacaban su cabeza. Siendo sólo ellos dos, siempre fueron muy unidos.

El último año de secundaria fue un rotundo infierno; Al ser diagnosticada con una etapa terminal de cáncer, Steve decidió enfocarse en cuidar de Sarah y dejar de lado sus estudios. Por supuesto, ella no estuvo de acuerdo en lo absoluto.

"Termina la secundaria, es más importante que estés en esa escuela a que estés merodeando por los pasillos de este hospital."

Steve quería complacer aquel deseo de su madre de ser un buen estudiante, por lo que se enfocó -como pudo- en cumplir con aquello que debía.
Ese año escolar llegó y se fue sin que él prestara demasiada atención a lo que pasaba a su alrededor.
Para su cumpleaños número 18, la noticia de la muerte de su madre fue devastadora.
Su mejor amigo fue su único hombro dónde llorar.

Luego de la graduación, Bucky logró convencer a Steve de ir a la universidad. Quizá el cambio de ambiente y enfocarse en estudiar lo ayudarían a superar poco a poco la partida de Sarah.

~•~

La universidad fue, en efecto, un cambio de ambiente ideal para sanar; Entre grupos de estudio, noches en vela acumulando conocimiento, tardes enteras en la biblioteca, Steve fue adoptando un ritmo que no le dejaban tiempo o lugar para otras preocupaciones. Con una agenda repleta era más sencillo mantenerse ocupado.
Así, fue armando poco a poco un colorido grupo de amigos con los cuales pasaba tiempo dentro y fuera de clases.
Y así, conoció a t/n.

Steve era el típico que clamaba no tener un tipo, que veía más allá de las apariencias o rasgos llamativos pero, definitivamente, su tipo eran las chicas inteligentes.
No, no inteligencia a la capacidad de recopilar datos en orden repetitivo.
No, no inteligencia al aprender de memoria un libro de texto.
No, no inteligente por ser simplemente académica.

-Inteligente, ya sabes. Que sabe como resolver cualquier tipo de problema, que puede sacar siempre lo mejor de lo que está completamente perdido, autodidacta, divertida y veloz para los chistes.- Dijo Steve.
Bucky arqueo una ceja.
-Sólo te pregunté si hay algún problema si invito a t/n y Nat a estudiar, pero tu respuesta me dice otra cosa...- Una sonrisa pícara se formó en el rostro del castaño.
Steve rodó los ojos.
-Como sea.- Dijo antes de regresar a su habitación a pensar en por qué dijo lo que dijo.

~•~

El plan estaba tomando forma; Bucky comentó en el grupo de estudios -sin Steve de testigo- que estaba planeando una fiesta sorpresa para el cumpleaños de Steve. Todos estuvieron de acuerdo en aportar desde bebidas hasta la decoración.
Al llegar el día, Bucky esperó a que Steve saliera del departamento que compartían y llamó a su tropa para que lo ayuden a poner todo en orden, decorar y dejar el lugar en condiciones para la fiesta.
Nat, Sharon, Clint, Sam, Tony y Scott llegaron a los pocos minutos. T/n trabajaba ese día e iría a la fiesta luego de su turno, por lo que envió con Nat y Sharon dos bandejas de muffins salados y una bandeja de muffins dulces.

Tras limpiar la acumulación de casi seis meses suciedad en el departamento, colgar algunas guirnaldas y globos, armar una amplia mesa para los bocadillos, y llenar la tina con hielo para las bebidas, todo estaba listo. Tony había comprado varios pasteles, entre ellos uno con dos muñecos Ken besándose: uno rubio y uno castaño.

-Sólo digo que no tiene nada de malo que ustedes salgan, hacen una linda pareja.- Bromeó Tony.
-Stark, si estás celoso, sólo debes decirlo.- Dijo Bucky.
Tony rodó los ojos.
-A Ginnie no le va a gustar que me acuses de esa manera... o se reirá, quien sabe.- Dijo mientras le enviaba una foto del pastel a su novia.
-Recuerdame, ¿Por qué llamas "Ginnie" a Pepper?- Cuestionó Nat.
-Es un chiste entre nosotros, ella me dice Annie por Anthony y yo le digo Ginnie por Virginia.- Dijo Tony sonriendo.

El teléfono de Bucky sonó indicando que Steve estaba llegando.

-Ok, todos en posición, capitán correcto está en el elevador.- Dijo Bucky.

Rápidamente todos se dispersaron y comenzaron a esconderse. Bucky apagó las luces y se ocultó también.

Steve abrió la puerta y encendió la luz. Sus ojos se abrieron de par en par ante el grito de sus amigos.

-¡Sorpresa!- Dijeron al unísono.
Steve se quedó en la puerta sin decir una palabra. Lentamente retrocedió, cerró la puerta y corrió hacía las escaleras de emergencia.
Todos en el departamento se quedaron sin saber qué decir.

-O le gustó mucho y fue a llorar de la emoción o simplemente se fue...- Dijo Scott rompiendo con el incómodo silencio.

Algunos minutos después, unos suaves golpes en la puerta sacaron a Bucky de su torbellino de pensamientos. Al abrir, una sonriente y alegre t/n estaba ahí.
-Hey, perdón por llegar tarde...- Dijo. Al notar el rostro de preocupación de Bucky, t/n fruncio el ceño. -¿Todo en orden?- Cuestionó.
-Pasa y te cuento.- Dijo Bucky haciéndose a un lado.

~•~

El siguiente año fue más fácil planear todo; Bucky decidió no hacer nada extravagante ya que el fracaso del año anterior le había dejado un sabor amargo. El grupo estuvo de acuerdo en mantener todo más simple para no abrumar a Steve. T/n, por su parte, lamentó no poder ser parte ese año ya que pasaría unos dias con su familia por el nacimiento de su sobrina.

Pero los planes de Bucky se vieron frustrados una vez mas.
Steve decidió que no quería lidiar con absolutamente nadie, por lo que pasó esos días en el departamento de su madre en Brooklyn; Rodeado de todos esos recuerdos sintió un alivio inmenso en su ser y algo de culpa a la vez.
Una vez más prefirió encerrarse en si mismo durante esas fechas en lugar de compartir un buen momento con sus amigos.

Al regresar se topó con t/n quien también regresaba de pasar unos días lejos, casualmente, en Brooklyn. Ella le contó sobre la llegada de su sobrina y la tediosa reunión familiar de la que fue parte la pobre bebé.

-Mis padres estan enamorados de Helena tanto como yo...- Dijo t/n sonriendo.
La cálida sonrisa en ella hizo suspirar a Steve.

Algunas risas y sonrisas después, Steve estaba listo para enfrentar a un muy enojado Bucky quien lo perdonó casi de inmediato.

~•~

El tercer año fue sin duda el peor.

Todo parecía marchar según lo planeado; Bucky, una vez más, organizó todo en el grupo de chat de sus amigos, dividió las tareas para hacer todo más sencillo, mantuvo todo en secreto y en perfecto orden... pero Steve pudo notar que algo ocurría.
Un día antes de su cumpleaños, Steve esperó a que Bucky saliera del departamento y entró en la habitación del castaño. Buscó por todos lados hasta que, bajo la cama, entre medio de muchas otras cosas halló las bolsas con la decoración para la fiesta. Al principio pensó que eran las mismas de los años anteriores, pero estas se veían sospechosamente nuevas.

Por un momento su instinto le gritaba que debía simplemente dejar que sus amigos hagan la bendita fiesta, pasar un buen momento, despejarse y, por una vez, divertirse.
Pero, ¿Cómo podría divertirse? Esa fecha dejó de ser motivo para celebrar. Había tanto en su cabeza que le fue difícil encontrar una respuesta certera, por lo que recurrió a la única persona en la cual confiaba plenamente y sabía que le daría un punto de vista mejor.

Envió un mensaje de texto a t/n con la esperanza de que lo iluminara un poco.

"¿Qué harías si sabes que alguien, a quien aprecias mucho, está por hacer algo que a otra persona no le gustará? ¿Intervendrias?"

Su respuesta fue simple; "Haz lo que dicte tu instinto... claro, si estás sobrio."

Su instinto, por desgracia, gritaba que huyera una vez más. Pero, a su vez, también decía que era momento de dejar en claro que las fiestas de cumpleaños no sólo no le gustaban sino que el hecho de que se esforzaran en vano le daba un atroz dolor de cabeza. El sólo pensar en el tiempo y dinero que invertirán en algo que él no disfrutaba, de algún modo, le molestaba.

Su instinto comenzó a gritar una vez más, pero de un modo algo irracional. Tomó las bolsas y acomodó el resto del desorden para que Bucky no notara su ausencia.

~

Bucky se despertó con el insistente sonar de su teléfono. Algo molesto observó la hora. Al ver que eran las tres de la madrugada, resopló aún más molesto.
Tomó su teléfono y atendió.

-A menos que sea para decirme que soy el ser más irresistible del planeta y que quieres tener hijos hermosos conmigo, no hay excusa para despertarme a esta hora.- Bromeó en un intento por olvidar la hora.
Un lento suspiro se escuchó del otro lado de la linea.
-Si dijera eso Sharon se molestaría conmigo y además estaría mintiendo...- Dijo t/n en tono calmado. -Pero no es para lo que llamé... Deberías venir al parque del campus.- Agregó.
Bucky fruncio el ceño mientras se sentaba en su cama.
-¿Por qué?- Cuestionó el castaño.
-Solo ven y verás.- Dijo t/n antes de colgar.

Con pesar, Bucky se vistió y despertó a Sharon para decirle que volvería en un rato. La rubia sólo respondió que no mate a nadie y continuó durmiendo.

Al llegar al parque del campus, llamó su atención el grupo de personas reunidos allí. Era extraño por un lado por la hora, pero no tanto por ser cuatro de Julio.
Bucky se abrió pasó entre la pequeña multitud hasta que se topó con t/n.

-Me sacaste de la cama, ¿Qué sucede?- Cuestionó.
T/n sólo señaló hacia el centro del parque.

Un por demás ebrio Steve, estaba junto a una enorme fogata.
Los ojos de Bucky se abrieron de par en par al notar que lo que estaba quemando eran las decoraciones para su fiesta sorpresa.
Steve lanzó la última bolsa al fuego, cuando notó la mirada de horror de su mejor amigo y de t/n. Levantó sus brazos en alto y exclamó alegremente.
-¡Feliz cuatro de Julio, perras!- Dijo al momento en el que la policía del campus lo tacleaba al suelo.

~•~

~4 de Junio, cuarto intento~

Bucky reunió al grupo de amigos con un plan en mente;
Él y t/n habían hablado al respecto y llegaron a la conclusión de que era casi imposible organizar una fiesta de cumpleaños para Steve, ya que encontraba la manera de huir.

-Yo opino que deberíamos dejarlo en paz.- Dijo t/n antes de dar un sorbo a su cerveza.
Bucky frunció el ceño.
-Eres una ternura, pero no. No pienso darme por vencido hasta que ese tarado celebre su cumpleaños.- Agregó el castaño.
-Si, además él no sabe de lo que se pierde. Todos los regalos que le compré fueron fantásticos.- Dijo Scott.
Natasha sacudió la cabeza.
-t/n tiene razón, deberíamos hacer a un lado la idea de hacerle esa estúpida fiesta. Él no quiere, no podemos obligarlo...- Señaló la pelirroja.
Al oír aquellas palabras, una sonrisa pícara se formó en el rostro de Bucky.
-¡No, no lo vamos a obligar, James!- Dijo Natasha.

Entonces, una idea surgió.
-Bien, no lo vamos a obligar, pero... ¿Qué tal si, de algún modo, lo convencemos?- Cuestionó el castaño.
-¿Cómo piensas convencerlo?- Cuestionó Natasha.
El castaño sonrió.
-Hartandolo.- Dijo Bucky.
-Si, pero ¿Cómo?- Cuestionó Tony.
Bucky se encogió de hombros un momento.
-No lo sé, tu eres listo y ella es malvada. Piensen ustedes en algo.- Dijo señalando a Natasha y a Tony.

Nat rodó los ojos mientras que Tony rió.
-¿Qué tal una semana de bromas?- Cuestionó.
Bucky asintió.
-Explicate.- Dijo el castaño.
-Una semana antes de su cumpleaños, le haremos bromas para que olvide por completo esa fecha.- Señaló Tony.
Natasha asintió.
-De hecho puede funcionar. Las bromas deberían ser fuera del departamento para que él no quiera estar lejos o quiera refugiarse en otro lado.- Dijo la pelirroja.
Bucky asintió.
-Eso suena genial.- Dijo frotando ambas manos. -Bien, ¿Quién comienza?- Cuestionó.
T/n se puso de pie.
-Yo no puedo ser parte de eso. Steve es demasiado bueno como para que le haga alguna maldad. No cuenten conmigo para las bromas.- Dijo en tono serio.

Todos la observaron y rieron en complicidad. T/n fruncio el ceño confundida.
-¿Ahora que?- Cuestionó t/n.
Bucky posó sus manos en los hombros de ella.
-Quizá tu no lo dices en voz alta, pero se nota que te gusta Steve.- T/n rodó los ojos.
-¿Y qué con eso? Tu no me gustas y tampoco sería parte de un complot de bromas en tu contra.- Señaló ella.
Bucky soltó una risa sin humor.
-Ouch. Aún tenía la esperanza de que gustaras un poco de mi.- Aseguró él.
T/n rodó los ojos una vez mas.
-Como sea, avisen si necesitan algo que no involucre maltratar a nuestro querido Steve.- Dijo mientras se dirigía a la puerta.

~•~

El plan marchaba de maravilla. A una semana del cumpleaños, Bucky, Nat, Tony, Scott, Clint y Sam, habían jugado un sin fin de bromas a Steve; Desde colgar su mochila en el mástil del campus hasta cubrirlo con pegamento y glitter, las bromas estaban dando el resultado deseado: Steve estaba olvidando poco a poco que su cumpleaños se acercaba.
T/n por su parte sentía una pena inmensa por aquello que sus amigos le hacían a Steve, por lo que se ofreció a darle refugio en caso de que lo necesitara. Steve accedió sin dudarlo.

~•~

El día del cumpleaños había llegado. Una vez más, todos se organizaron para hacer una fiesta pero con un plan de respaldo en caso de que Steve intentara huir; Mientras que Bucky, Nat, Tony y Sharon estarían en el departamento, Sam, Clint y Scott estarían en las escaleras de emergencia en caso de que Steve escapara.

En efecto, al abrir la puerta y encontrarse con aquella "fiesta", Steve huyó hacía las escaleras de emergencia donde fue atrapado por sus amigos. Bucky y Tony ayudaron a desvestirlo y llevarlo fuera del edificio.
A modo de última broma, lo desnudaron, le pusieron un moño y lo dejaron en la puerta del departamento de t/n.

Tres fuertes golpes en la puerta sacaron a t/n de su concentración. Al acercarse a la puerta pudo oír apresurados pasos alejándose. T/n abrió y se encontró con un maniatado, amordazado y muy desnudo Steve.
Los ojos de Steve se abrieron en horror al ver que ella lo observaba.

T/n se inclinó y le quitó el calcetín que tenía en la boca.
-Tranquilo, no es el primer trasero que veo.- Dijo ella comenzando a deshacer las ataduras.
Steve rió.
-Aún así, esto es vergonzoso... ¡voy a matar a todos!- Dijo sacando una risa de t/n. -No te rías, no es divertido.- Agregó Steve.
-Si que lo es, estás desnudo y en mi puerta. ¡Mi deseo de cumpleaños se hizo realidad!- Dijo ella.
Steve abrió los ojos de  par en par.
-¿D-de-deseo de cumpleaños?- Balbuceo Steve.
T/n asintió mientras terminaba de liberar al rubio de sus ataduras.
Rápidamente ambos se pusieron de pie y entraron al departamento. Una risa se escapó de ella al notar que cubría el moño.
-Debo admitir que es mejor de lo que había imaginado...- Agregó t/n.
El rostro de Steve se ruborizo por completo.

-Quizá, algún día, recuerdes esto y sea una agradable anecdota.- Dijo t/n.
Steve sacudió la cabeza.
-Quizá, pero de momento está siendo la peor de mis pesadillas; estoy desnudo, en mi cumpleaños frente a la chica que me gusta...- Steve cubrió su boca con su mano ante su propia confesión.

Una amplia sonrisa se formó en el rostro de t/n.
-Pues, para mi está siendo como un sueño hecho realidad; estás en mi departamento, desnudo, el día de mi cumpleaños... Y eres el chico que me gusta.- Aseguró t/n.

Steve frunció el ceño.
-¿Es tu cumpleaños? ¿Por qué jamás dijiste nada?- Cuestionó algo curioso.
T/n se encogió de hombros.
-Nunca me gustó celebrar mi cumpleaños... pero los últimos años hice un esfuerzo por ayudar a organizar esas fiestas porque quería que Bucky dejara de molestarte, pero no lo logré.- Admitió.
Steve rodó los ojos. Pero luego, recordó las palabras que ella había pronunciado.
-Espera, ¿dijiste que yo te gusto?- Cuestionó casi escandalizado.
Una carcajada se escapó de t/n, para luego asentir.
-Creí que lo había hecho obvio; armé un grupo de estudios para pasar tiempo contigo, te horneo muffins casi cada semana, y siempre te envío emojis de corazón... o quizá no estaba siendo tan obvia.- Dijo ella.

Steve rió ante aquellas palabras.
-Yo creí que lo estaba haciendo obvio... tarjetas para San Valentín, Navidad y miles de mensajes de texto hasta cualquier hora...- Señaló él.
Ambos se observaron y rieron.
-Ok, ninguno fue del todo obvio.- Admitió ella.
Steve asintió.

T/n se acercó a Steve y sonrió.
-Feliz cumpleaños, Steve.- Dijo aún sonriendo.
-Feliz cumpleaños t/n.- Respondió Steve. Una amplia sonrisa se formó en su rostro.
-Sé que esto es algo incómodo, pero...- Steve se inclinó y dio un corto beso en los labios de t/n.
Ella, por su parte, sonrió ante el gesto.
-Y sé que esto será incómodo para ambos, pero... ¿Te gustaría ir a tomar algo algún día?- Cuestionó ella.
Steve asintió.
-Creí que jamás me lo pedirías.- Agregó Steve.
Una leve risa se escapó de ella.

-¿Qué dices si busco algo de ropa para ti y vamos a comer el pastel que Stark compró para tu fiesta?- Propuso ella.
Steve arrugó la nariz ante la idea de la fiesta para luego asentir.
-Sólo con una condición.- Dijo él.
-Lo que tu quieras.- Respondió ella.
-Que me ayudes a vengarme de todos los que me desnudaron e hicieron esas crueles bromas...- Agregó Steve.
-Cuenta conmigo.- Dijo t/n sonriendo.

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N/A: Como ya saben, estoy corrigiendo algunas partes del libro hasta que se me ocurra algo nuevo ♡