Una historia del pasado - 16 años

Habían tomado tantas fotografías que comenzaba a fastidiarse. Algunas con sus compañeros de clase, no pudo faltar la foto con sus mejores amigos, Liu Qingge que parecía fastidiado de toda la atención que estaba recibiendo y todos los números de las chicas de otros salones que al fin habían tenido el valor de acercarse a él, y Shang QingHua que presumía a sus dos hijas pequeñas como si fueran sus trofeos después de graduarse de la secundaria (y... al parecer para Shang QingHua así era), las fotos con sus padres, algunos de sus profesores y muchos colegas de sus padres que estaban relacionados con la academia... y, por supuesto, las fotografías con su novio.

Shen Yuan estaba cansado después de tener que sonreír tantas veces para las fotografías y tener que fingir que se sentía cómodo al tratar con tantas personas que lo habían visto desde que era un bebé, que incluso habían recibido informes con vómito de bebé (sin mencionar las veces en las que Lan Qiren fue su niñero y terminó como un desastre) o lo habían visto desnudo cuando por alguna razón sus padres lo cambiaban en el salón de clases. Así que aprovechó la oportunidad para escapar con su novio y esconderse en la azotea de la academia. Se encontraban recostados en la azotea, Shen Yuan se había quitado la chaqueta de su uniforme, Luo Binghe solo estaba a su lado, mirando a Shen Yuan a su lado.

- Así que... A-Yuan irá a la universidad - suspiro por fin el Alfa a su lado - supongo que... A-Yuan estará muy ocupado ¿cierto?

- Tenemos unos meses antes de eso - sonrió - deberíamos aprovechar y salir... quizás... podría convencer a mis padres para que me dejen ir a un viaje contigo por un fin de semana.

- No creo que al maestro Shen le agrade la idea - sonrió Luo Binghe.

- Sí... yo tampoco creo que le guste la idea - rió Shen Yuan - pero... creo que puedo convencerlo... ha dicho que mientras no lo vuelva abuelo antes de los 40 y me cuide no le importa tanto mi vida sexual.

Luo Binghe sonrió un poco mientras Shen Yuan reía abiertamente. Estaban recostados uno al lado del otro, Luo Binghe se giró hacía Shen Yuan y rodeó su cintura con uno de sus brazos, Shen Yuan tomo la mano de su novio que descansaba sobre su abdomen, cerca de su ombligo, Shen Yuan rió un poco. No habían hablado sobre el tema de los bebés desde el día en que Luo Binghe lo mencionó algunos meses atrás, Shen Yuan nunca había dado una respuesta a aquella propuesta. La verdad... no estaba preparado para tener un cachorro.

- ¿Qué ocurrirá ahora que A-Yuan se va? - preguntó Luo Binghe mientras su mano libre jugaba con el cabello de su novio.

- Quizás... nos veremos menos - sonrió Shen Yuan acurrucándose un poco al lado de Luo Binghe - pero aun podemos hablar todos los días. Te llamaré y enviaré mensajes... trataré de enviarte fotos también. Lo prometo.

- A-Yuan...

- Nada va a cambiar, Binghe - susurro besando la punta de la nariz de su novio.

- A-Yuan no estará aquí.

- Prometo llamarte tanto que quizás te canses de mi. - Luo Binghe sonrió, volvió a besar las mejillas de su novio.

- Nunca me cansaría de A-Yuan.

Se acurruco en el pecho de Shen Yuan, a veces pensaba que su novio era como un niño pequeño, acaricio su rizado cabello, enredando algunos mechones entre sus dedos. Sabía que Luo Binghe estaba asustado, tenía miedo por la separación que sufrirían a partir de ese momento, también estaba asustado, Binghe era tan apuesto y carismático que cualquiera se enamoraría de él. Beso la frente de Luo Binghe en silencio.

- Después que Binghe y yo terminemos la universidad... me casaré con Binghe...

- ¿En verdad A-Yuan quiere casarse conmigo? - preguntó con ojos brillantes, Shen Yuan juró que su novio se veía como un cachorrito en ese momento.

- Claro que quiero - sonrió un poco - seré muy feliz si estoy al lado de Binghe.

Luo Binghe sonrió emocionado, abrazó con fuerza a Shen Yuan y beso sus labios varias veces, Shen Yuan correspondió, cerrando los ojos y disfrutando del contacto. Se sentía realmente bien estando en aquel lugar, alejado de todos con su novio, solo ellos dos. O eso... hasta que la puerta se la azotea se volvió a abrir y la voz de Shen Jiu los hizo saltar de su lugar.

*

Presente - 36 semanas

Desde que era un niño su madre siempre le había dicho que traer a un hijo al mundo era como una patada en la entrepierna con una bola de boliche repetidas veces, sus padres no eran el tipo de padre que le ocultarían algo relacionado con el sexo, mucho menos con lo que era ser padres, no eran del tipo que les diría que ser padres había sido lo mejor que les había sucedido o que los hijos eran lo más hermoso del mundo... sus padres eran de los que le diría a la cara que el parto había sido lo más doloroso que había pasado en su vida y que los desvelos por cuidar de un recién nacido con cólicos toda la noche junto con las tareas como estudiantes de último año y tratar con la universidad mientras cuidaba con un molesto mocoso que se la pasaba dibujando en la parte trasera de sus libretas, sobre los inconvenientes de tener que llevar a un bebé a las clases en la universidad porque no habían encontrado una niñera. Ni siquiera su padre le iba a mentir en ese aspecto.

La charla que había tenido con sus padres había sido un trauma... por suerte no lo vivió solo y Shang QingHua tuvo que sufrir a su lado. Sin mencionar la segunda charla que recibió después de la primera vez que tuvo relaciones sexuales cuando era un adolescente. En todo momento solo había una advertencia por parte de Shen Jiu: "no se atrevan a hacerme abuelo antes de los 40 o voy a castrar a sus novios con un cuchillo de mantequilla"... bueno... Shang QingHua lo había convertido en "abuelo" mucho antes de lo esperado y él solo se adelanto por unos pocos meses... y hasta donde sabía Mo Bei nunca fue castrado. Shen Yuan simplemente nunca pensó que se sentiría preparado para el momento en que se convirtiera en padre, él sabía que nunca estaría preparado. Quizás por eso había esperado hasta graduarse y que ambos tuvieran un trabajo medianamente estable para pensar en tener un cachorro.

¡Pero el dolor que sentía en ese momento simplemente le confirmaba que no estaba preparado para tener un hijo! ¿¡Cómo diablos sus padres quisieron tener otro!? ¡Masoquistas! ¡Sus padres realmente eran masoquistas!

- Bebé... A-Bao... sabes que realmente tu bába y yo estábamos muy felices por tenerte ¿verdad? tu bába y yo te esperamos muy felices pero... ¿por qué tuviste que ser una patada en la entrepierna y decidir que querías nacer en medio de una tormenta?

Casualmente, sabía que tanto él como Binghe habían nacido cuando llovía... ¡pero una cosa era una pequeña lluvia insignificante y otra muy diferente era nacer en medio de una tormenta cuando las calles estaban cerradas y a penas se podían escuchar sus gritos por los truenos! Las luces parpadeaban en todo el edificio y podía escuchar a las enfermeras correr de un lado al otro. Al parecer incluso en generador de emergencia estaba fallando y comenzaban a pensar en trasladar a algunos pacientes a otros hospitales.

- ¿Dónde mierda está el maldito doctor? - gruño Shen Yuan.

- A-Yuan... uh... el doctor dijo que a-aun necesitas esperar un poco antes de...

- Me pregunto como mi padre no asesinó a un doctor cuando yo iba a nacer - gruño en voz baja.

Luo Binghe también se lo estaba preguntando. Yue Qingyuan se lo había preguntado en su tiempo... pero quizás por algo había fotos del día de su nacimiento donde su padre Alfa tenía vendajes en su mano, Shen Jiu había apretado tanto la mano de Yue QingYuan que quizás había roto uno o dos huesos de su mano. O quien sabe... sus padres nunca le habían explicado nada sobre eso y ni siquiera era doctor para entender cuánta fuerza debía poner para romper la mano de otra persona... por su parte, Luo Binghe comenzaba a pensar que su mano terminaría rota antes que su hijo naciera.

- Ugh... quisiera que mis padres estuvieran aquí.

- No creo que puedan llegar a tiempo con la tormenta, A-Yuan.

Soltó un suspiro, era verdad... quería a sus padres cerca, pero era imposible que ellos llegarán a tiempo, joder... Solo tratar de llegar significaba poner sus vidas en riesgo. Pensar que realmente había metido a tantas personas en problemas en solo unos pocos meses. No podía seguir siendo de esa forma.

*

ZhuZhi Lang caminaba de un lado al otro nervioso. Había tratado de contactar con su tío para que no apareciera en el hospital pero las líneas estaban caídas gracias a la tormenta... si conocía a Tian Lang sabía que aquello quizás tendría el efecto contrario y quizás era mejor que no contestara.

- ¿Por qué pareces tan preocupado ZhuZhi?

La voz cerca de su oído le provocó un escalofrío por todo el cuerpo, el joven dio un salto y se giró para ver a su tío de pie detrás de él ¿en qué momento había llegado? era la menor de sus preocupaciones.

- ¡Usted no puede estar aquí! - exclamó.

- ¿Qué? ¿En verdad crees que iba a perderme el nacimiento de mi nieto? No soy tan cruel... aunque no pude comprar flores al joven Shen o un regalo para mi nieto... bueno, supongo que será después.

- No lo entiende... esa persona está aquí. Es su hospital.

- Creo que eres tu quien no lo entiende, ZhuZhi - rió Tian Lang caminando por el pasillo, alejándose de su sobrino - ya que... después de todo, espero encontrarme con esa persona.

No sabía lo que su tío estaba planeando, pero sabía que era mejor no dejarlo solo en esos momentos. Había una sola cosa que Tian Lang buscaba en su vida, buscaba vengarse de la persona que le había arrebatado aquella vida que tuvo la oportunidad de vivir junto a la mujer que amaba. Sabía dónde se encontraba el hombre que buscaba.

Había demasiado caos en esos momentos como para que alguien se diera cuenta de lo que estaba sucediendo, entre algunas emergencias que llegaban, personas que buscaban algún tipo de refugio y algunos otros que eran trasladados a otros hospitales, las luces fallaban en algunos pasillos por dar prioridad a otras áreas del hospital. El lugar era un caos.

Llegó a la habitación que buscaba, el hombre anciano recostado en una cama mirando la pared a su lado, un monitor que mostraba sus signos vitales que llenaba el silencio de la habitación junto al sonido de un ventilador y el ruido de la lluvia chocar contra la ventana. Veinte años atrás ese sujeto había sido uno de los más poderosos e intimidantes que había conocido... ahora solo era un anciano indefenso a punto de morir... pero... ¿acaso él no lo era también?

- Ha pasado un tiempo, viejo maestro - saludo Tian Lang, el hombre en la habitación no se sorprendió, no se giró - veo que... no ha cambiado mucho.

- ¿Qué es lo que haces aquí? - preguntó quitando la mascara de oxigeno de su rostro, tosiendo un poco - Creí que tenías en claro lo que sucedería si volvía a ver tu cara.

- Creo que me malinterpreta - el sonido del seguro del arma fue lo que hizo que el anciano se girará para verlo - hace mucho que no tengo nada que perder.

- ¿Nada? ¿No está tu hijo aquí mismo?

- Ese hijo mio... puede cuidarse a sí mismo y cuidar del joven Shen. Además... hay una persona mucho más aterradora que cuida de ellos. ¿Qué importancia tiene un hijo al que nunca conocí? 

*

El llanto de un bebé llenó la habitación del hospital. 

Shen Yuan respiraba agitado, solo quería dormir. Había sido quizás la peor experiencia de su vida, con las luces que parecían querer irse en cualquier momento, la lluvia torrencial y los truenos fuera del lugar. 

Pero olvidó todo cuando tuvo por primera vez a su cachorro en sus brazos. Olvidó el dolor que había pasado y el miedo mientras veía al pequeño y rosado cachorro que ahora se encontraba en sus brazos. Lo acercó a su rostro para sentir su aroma. No podía evitar sonreír como tonto al mismo tiempo que lloraba. 

- A-Yuan, mira ¿no es perfecto? - preguntó Luo Binghe mientras besaba a su esposo - A-Yuan. 

- Sí... es perfecto - sonrió Shen Yuan - lo es. 

No podía esperar que sus padres conocieran a su hijo, ya podía imaginar a su padres consintiendo a su hijo. 

Estaba distraído con sus pensamientos cuando una alarma comenzó a sonar, las luces se apagaron. Luo Binghe se acercó a la enfermera que en esos momentos se encontraba arreglando algunas cosas en la habitación. 

- Disculpe ¿qué ocurre? 

- No estoy segura, quizás es otra falla a causa de la tormenta. Voy a preguntar. 

Antes que pudiera salir de la habitación, entró otra enfermera que parecía un poco alterada, Shen Yuan miró extrañado a las dos enfermeras que murmuraban entre ellas, escuchó algo sobre un código plata. 

- ¿Qué es... un código plata? - preguntó Shen Yuan, las enfermeras parecieron sobresaltarse - ¿qué está sucediendo realmente? 

- No es... nada de lo que deba preocuparse, señor Shen. Por seguridad, es mejor que no abandone la habitación, con permiso.

Shen Yuan miró extrañado a ambas enfermeras. Trató de recordar los códigos de emergencia de los hospitales que había visto en los dramas médicos. Quizás simplemente estaba demasiado cansado como para recordar, quizás era algo relacionado con la tormenta.

- Binghe... ¿crees que las líneas hayan sido restablecidas? - preguntó Shen Yuan en voz baja. 

- ¿Quieres que intente llamar a casa de tus padres? 

- mn - asintió Shen Yuan - Quiero que sepan que todo salió bien. Sabes como es bàba, aunque lo niegue, se preocupa mucho.  

No lo dudaba. Pero no sabía qué tan seguros se encontraban en el hospital con una tormenta como la que estaba fuera... especialmente cuando habían alertado sobre un arma de fuego en el hospital. 

Luo Binghe había pasado mucho tiempo en hospitales cuando era niño por la salud de su madre, solo una vez había escuchado que alguien decía codigo plata, no tardó en enterarse que eso significaba que alguien había entrado con un arma de fuego al hospital, por lo que supo después mientras hablaba con algunas enfermeras, había sido un hombre que entró para tratar de asesinar a otro, por suerte lo detuvieron antes que pudiera cumplir con su objetivo. El protocolo normal de una situación como esa no era muy diferente de Grey's Anatomy... excepto por Cristina y Meredith buscando a Derek por todo el hospital para decirle del embarazo... el hospital entraba en un cierre total, nadie podía moverse del área donde se encontraba, si la situación empeoraba quizás comenzarían a evacuar a los pacientes de áreas cercanas. Esperaba que no fuera así. 

Trato de llamar a sus suegros, estaba seguro que ellos estarían preocupados. 

*

La tormenta se calmaba poco a poco, las líneas habían vuelto a funcionar y había luz de nuevo. Las primeras noticias que llegaron a sus teléfonos fue sobre un tiroteo en el hospital, la llamada de Luo Binghe entró casi de inmediato después de eso para dar la noticia que Shen Yuan y el bebé estaban bien. 

- ¿Saben sobre el tiroteo? - preguntó Shen Jiu.

- Yo sí - respondió Luo Binghe, era claro, Shen Yuan no lo sabía y quizás era mejor no mencionarlo, era mejor hablar de eso después - A-Yuan quiere hablar con ustedes. 

Acto seguido, Luo Binghe paso el teléfono a su esposo y activó la video llamada. Por un momento, olvidaron el secuestro, el tiroteo, la mansión Qiu y todos los problemas, simplemente se centraron en conocer a su nieto. No sería hasta después de varias horas que se enterarian de lo que había sucedido en el hospital. Pero para ese momento, no era importante.   

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Hallo! ¿Hay alguien ahí? 

Sí, les dije que no me había olvidado de este fic. Creo que lo he dicho antes, nos acercamos al final... ya tenía mucho de esto escrito aunque posiblemente haya olvidado muchas cosas o las vaya a confundir con otras cosas, realmente quiero darle fin a este fic que fue literalmente el primero que escribí y del que actualmente hay muchas cosas que desearía cambiar o agregar a la historia, calculo que a lo máximo terminará en el capítulo 45 más uno o dos especiales más de Avión. 

Gracias a las personas que aún siguen leyendo xD siento la larga espera... y espero que no me tarde otra década en sacar esto. Hasta la otra!