Se adentró en el ascensor para subir al piso donde vivía Aisha. Se acomodó mejor su bolso en su hombro y marcó el piso donde vivía la chica, pero un : ¡Alto! proveniente de una persona conocida la condujo a pausarlo.

El pelinegro tenía el pelo pegado en la frente gracias a su piel mojada por el sudor. Se quitó los audífonos que llevaba y entrando en el ascensor saludó a Jisoo.

—Nos volvemos a encontrar —comentó Jin. Aprovechó el momento para sacar su botella de agua y beber un poco de esta.

—¿Vives aquí? —dijo en un tono cansado. No quería volverse a encontrar con él.

—Si y antes de que me preguntes fui a hacer ejercicio —marcó los músculos de sus brazos.

Jisoo suspiró cansada, se le había olvidado las mañas del depredador.

—No has cambiado nada —murmuró.

—Tú tampoco. Sigues siendo igual de amargada.

—¿Amargada yo? —echó su cabeza hacia atrás—. Lamento no haberte dejado ver mi lado divertido.

—Tienes tiempo de dejarme verlo —sugirió—. Vivo solo en mi apartamento —guiñó un ojo.

—No gracias.

Las puertas del ascensor se abrieron y Jisoo salió despidiendo con la mano a Jin sin mirar atrás.

—Tal vez otro día.

...

Sus manos se calentaban gracias a un café casero que le había brindado la víctima del vampiro.

Ambas estaban sentadas cerca de la ventana y la brisa que entraba a través de esta les movía el cabello.

—¿Quien estaba contigo en el camerino antes de que te desmayaras?

Aisha jugueteaba con sus dedos nerviosa y constantemente se metía un pelo detrás de su oreja.

—Si se lo digo me promete que no se lo dirá a nadie —susurró.

—Lo juro —dio su palabra.

—Hace tiempo he estado hablando con un chico por internet —ríe— y esa noche quedamos en el casino. Le dije que entrara por la ventana de mi camerino, yo se la iba a tener abierta.

—¿Por qué no se vieron aquí en tu casa o en otro lugar?

—Entiéndame hablaba con él, pero no lo conocía. No voy a traer a alguien que no conozco a mi casa y no tengo tiempo para llevarlo a otro lugar.

—Vale, continúa —encendió la grabadora de voz.

—Al estar ahí con él me sorprendí mucho, era mucho más guapo que en las fotos que me enviaba —mojó sus labios—. Él intentó besarme y lo acepté. Nos empezamos a acariciar un poco, pero él se encariñó mucho con mi cuello —se lo tocó— hasta me sentí que me lo mordió. Fue entonces cuando llamaron a la puerta, le dije que parara, pero no quiso y me mordió aún más fuerte, después de eso no recuerdo más nada.

—Gracias por el dato —apagó la grabadora— ¿Me podrías dar una foto del chico? Es para que la policía lo busque.

—Por supuesto —buscó en su celular una foto y se la enseñó.

Abrió los ojos asombrada, frente a ella tenía a su novio Dimitri, el que había estado buscando y que encontraron muerto.

noviembre del 2021

Seúl , Corea del Sur

Calló al suelo desilusionada, destrozada, no era para menos, le habían dado la noticia de que su novio, el que estaba como loca buscando había muerto.

—Tienes que saber algo más —volvió a decir Soojin—. No se llama Dimitri. No se porque, pero a nosotros también nos mintió con su identidad.

Ella no tenía ganas de hablar, la noticia había sido un golpe bajo para ella. Después de eso, los siguientes días no comía, no dormía, no hablaba y se resumía a estar acostada en su cama debajo de las sábanas.

Su madre y su hermana se preocupaban por ella. En ningún momento les dio la oportunidad de explicarles cómo se sentía, tal vez si lo hubiese hecho las cosas hubiesen sido mejor para ella.

—¡Jisoo! ¡Jisoo! —llamaba desesperada Miyeon , su hermana, pero no recibía respuesta—. ¿Hasta cuando vas a estar ahí acostada? Mamá está muy preocupada por ti y yo también, te necesitamos.

Se limitó a morder sus labios y a encogerse más en su cama, continuaba llorando, sin apetito y sin ganas de hablar. Fueron unos meses duros para ella.

—Hola —contestó Miyeon— ¡Qué! —dijo sorprendida— No puede ser ¿Enserio?

Miyeon había recibido una llamada de una editorial con una propuesta para publicar su cómic. Andaba muy emocionada por ello.

Su mamá que recién llegaba con bolsas de los mandados en mano fue asustada por la castaña, ya que la abrazó por detrás y le gritó en el oído.

—¡Publicarán mi cómic en físico! —soltó la noticia y la mamá alegremente la abrazó.

—¡Estoy muy orgullosa de ti! —la besó en la frente.

Jisoo las miraba con la cabeza apoyada en la pared y cruzada de brazos hasta que su mamá la vio y fue hasta ella.

—Al fin estás aquí hijita —la abrazó fuertemente dándole ese hombro para llorar que tanto necesitaba—. Tu hermana y yo estamos aquí para que te sientas mejor, no lo olvides.

Fueron días, semanas, años para que Jisoo volviera a ser la misma de siempre. El golpe había sido muy duro para ella, pero de alguna forma pudo continuar su vida.

2023

Las Vegas , Estados Unidos

Al tener en sus manos esa imagen de su novio y darle la certeza de que seguía con vida sus emociones volvieron a derribarse y millones de historias tras esa farsa muerte comenzaron a trazarse en su cabeza.

¿Quién eres Dimitri, perdón, quién eres Kim Taehyung?