Era el día de la cita, Jungkook estaba buscando en su guardarropa algo con lo que se viera bien. el chico rubio se había alojado en su mente para no salir y sin duda había tenido un enamoramiento a primera vista y estuvo ansioso que llegara el mensaje del chico para que poder salir con él.

Por otro lado, Jimin se enredó entre sus cobijas, Lisa y Hwasa intentaron sacarlo de su cama sin mucho éxito.

—Listo ya envié el mensaje al chico lindo —dijo Hwasa que tenía el teléfono de Jimin—.

—ya les dije que no iré —dijo Jimin enredándose entre las cobijas—

—¡oye! —dijo lisa— yo fui la que pagué todo así que vas a ir

—¡yo no les dije que me compraran una cita, eso fue tan vergonzoso!

—Pero fue el único chico al que si volteaste a ver en todo ese evento —dijo Hwasa— incluso tu expresión tristes cambio a una neutral y analizante

—Bueno es que...Es que...

—Es que nada —contestaron al mismo tiempo sus dos amigas— nosotras te vimos

—Vamos Jimin, yo jamás desaprovecharía la oportunidad de salir con alguien así de guapo — Lisa le dio unas palmaditas haciendo que Jimin se destapara y se sentara en su cama—.

—Ya he salido con chico guapos y déjame decirte que todos son unos completos idiotas, infieles y egocéntricos que solo te dan un amor plástico—contesto muy enojado—.

—bueno es solo que has tenido mala suerte, no creo que todos sean así solo que... bueno, pero con este chico solo va a ser una cita y ni siquiera lo conoces así que no habría ningún problema, solo ve además ya le dijimos que te viera en el parque así que dejarlo plantado ahí seria de muy mala educación

Jimin hizo un puchero y lo pensó para después pararse e ir a su guardarropa del cual saco un pantalón negro y una playera blanca que le quedaba un poco grande.

—entonces... ¿vas a ir? —pregunto Lisa observando como Jimin entraba a baño y ponía en agua tibia su regadera—.

—¿tú que crees? espérenme en la sala

Jungkook estaba sentado en el pasto tapado por la sombra de un árbol, miraba su teléfono chequeando su Instagram y cada cinco segundos volteando a ver la hora hasta que sintió la presencia de alguien volteando a ver al frente viendo al chico de cabello rubio que estaba esperando

—Hola —Jimin le extendió la mano— disculpa por llegar un poco tarde

Jungkook se sorprendió por la hermosa voz de Jimin, era dulce y relajante. Tomo la mano de Jimin y se levanto

—No hay problema, mucho gusto mi nombre es Jeon Jungkook y seré tu cita por hoy y... —Jungkook saco una hoja que era las reglas de ese evento— toma

—no yo recuerdo todo, a mí me dieron una el día del evento

—bueno y ¿Qué quieres hacer?

—No lo sé... —Jimin hablaba como con enojo, pero las muecas y que pareciera estaba pensando hacían que contrariamente se viera lindo—

—¿te parece si te llevo a comer?

—cómo sea me da igual —dijo Jimin para comenzar a caminar y Jungkook detrás de el—

Jungkook saco toda su amabilidad con Jimin, pero este se veía desinteresado e incluso molesto, llegaron a un lindo lugar donde vendían helados y se podía comer al aire libre.

—umh... y bueno ¿Cómo te llamas?

—¿eso importa?

—eh... —Jungkook se empezó a poner nervioso, Jimin puso su cabeza en la mesa—.

—soy Park Jimin

Lisa y Hwasa estaban observando de incógnita y se daban golpes mentales al ver la actitud de su amigo—.

Un mesero paso con un zumo energético de frutas, pero se veía con una consistencia asquerosa, Jimin y Jungkook hicieron una expresión de asco y al ver que coincidieron en eso se sonrieron y fue cuando Jimin se levantó y por fin comenzó una platica

—Así que juegas beisbol ¿Qué posición eres?

—Soy el pitcher ¿sabes de beisbol?

—un poco, a mi padre le gusta

Llegaron con sus helados y siguieron su plática donde salían coincidencias entre ambos haciéndose cada vez más fluido tener su plática.

—Y ¿por qué compraste una cita conmigo, debió de ser bastante pagar esa cantidad por una cita con chico totalmente extraño?

—El dinero no es problema, es más, ni siquiera lo pagué yo y en cuanto a comprar una cita contigo no lo hice yo si no... bueno es que yo ya te había visto momentos antes y se malentendió con las personas que me compraron la cita contigo.

—que directo —dijo Jungkook dando una sonrisa, pero nervioso— si recuerdo que te vi momentos antes, estabas observando toda la escuela ¿no?

—¿Cómo sabes?

—Bueno es que —Jungkook comenzó a jugar con la cucharita que le habían dado en el helado— puede ser que me pareció interesante tu acción y te seguí un rato

—¡¿me estabas siguiendo?!

—sí pero solo porque me pareció interesante que te miraras todo como si nunca lo hubieras visto

—suenas como un total acosador —Jimin quiso estar serio, pero río— bien te perdono porque la verdad si estaba distraído, ni siquiera me di cuenta de tu presencia.

Jungkook pago y se fueron de ahí, Jimin que al principio no quería ir y estaba tan desinteresado por su tristeza ahora estaba caminando con Jungkook y parecía no poder dejar de hablar ya que ambos mantenían su plática y cada que Jimin hablaba era escuchado con total atención por Jungkook.

—¿no te estoy aburriendo?

—no para nada, me parece interesante que me hables sobre tu pez dorado que por alguna razón me abstuve a preguntar por qué le pusiste canelita

—¿en serio estabas escuchando lo que decía?

—claro, tienes una voz muy bonita ¿Quién no lo haría?

Jimin se sorprendió, las personas con las que había tenido citas nunca le prestaban atención y les interesaban más hablar sobre ellos y lo que tenían, no podía ser que un extraño que apenas conocía lo estaba comenzando a flechar

—cuidado con el perro —dijo Jungkook tomándolo de la mano y jalándolo de su lado, un can estaba corriendo y los paso— ¿no lo viste?

—¡que susto! no lo vi, gracias.

siguieron caminando y ninguno sintió que seguían agarrados de las manos porque volteaban a ver si el can volvía o ya se había ido y vieron pasar a un señor corriendo con una correa lo que más seguro era el dueño del animal. Con brusquedad un chico jalo del brazo a Jimin volviéndolo a la realidad

—¡QUIEN TE CREES PARA SALIR CON OTRO CHICO! —dijo un chico que Jimin conocía—

—Suéltame tu y yo ya no somos nada, me lastimas Seong-wu

Jungkook quito el agarre del chico y le dio un gran empujón seguido de un puñetazo en la cara que lo dejo en el suelo.

—idiota descarado... —dijo mirándolo en el suelo para tomar a Jungkook del brazo— y pensar que me sentía miserable por ti

las personas estaban comenzando a amontonarse para poder ver que estaba pasando, pero Jimin jalo a Jungkook para que se fueran de ahí y pararon hasta llegar a una calle diferente, Jungkook se limitó a no preguntar. Jimin miro su reloj de mano y vio que ya eran las siete la cual era la hora límite de la cita con Jungkook.

—disculpa por lo que acaba de pasar, supongo que ya te querrás ir por todas las molestias que has pasado conmigo además ya es la hora límite que te dieron los del evento

—¿quieres que me vaya?

—NO, no quise que entendieras eso es que yo creo que ahora debes de estar como que molesto

—para nada —Jungkook le sonrió y paso una persona vendiendo algodones de azúcar al cual se acercó a comprar uno que tenía forma de flor— toma para que estés aún más dulce

Jimin lo tomo con la cara roja por el comentario del chico y siguieron caminando un rato más hasta llegar a un lugar donde se pudieran sentar.

—Creí que ibas a ser el típico chico patán —comento de la nada Jimin mientras todas las luces se encendían para alumbrar haciendo que Jungkook volteara a verlo—.

—¿A qué viene ese comentario? ¿me tenías en expectativas?

—claro —dijo Jimin directamente para después taparse con el algodón de azúcar medio rostro y susurrar— si todos los chicos se comportaran como fuiste no me importaría salir siempre —Jungkook logro escucharlo y volteo al piso sonriendo—.

—Quisieras...—dijeron los dos al mismo tiempo—

—habla tu primero —Jungkook le cedió la palabra—.

—¿quisieras... ser mi amigo y salir otra vez? —dijo tímido ya que eso era muy extraño y explicado mal a una persona que apenas había conocido, pero ambos sentían como si se conocieran de toda la vida solo ese día—.

—claro

Hwasa y Lisa medio que miraron ya que Lisa se distraía con todo y se fueron para ya no molestar desde las sombras.

Pasaron seis meses donde ambos comenzaron a salir como cualquier amistad y después de tanto tiempo donde se conocieron mejor e incluso se presentaron entre sus familias como mejores amigos y el padre de Jimin, un hombre empresario y duro que apenas y supo que Jungkook jugaba beisbol fue muy aprobante con él, hasta entonces Jimin estaba viendo un partido de beisbol pero no cualquiera si no el de su ahora novio ¿Quién diría que el amor puede llegar de las formas más extrañas? incluyendo los lugares.

—hijo déjame decirte que eres un increíble pitcher —dijo el padre de Jimin—.

—gracias señor Park —contesto Jungkook con una perfecta sonrisa, Jimin lo abrazo y le dio un beso en los labios—

—¿Cuál señor Park? ya te dije que si me puedes llamar suegro

—¿nos vamos? —pregunto Jimin, Jungkook le jugó los cachetes para después salir del lugar—.

ESPERO LES GUSTE ESTA HISTORIA, RECUERDEN QUE NADA DE ODIO A LAS PERSONAS REALES QUE SALEN AQUI, SIN MAS QUE DECIR LES MANDO MUCHOS BESITOS Y CUALQUIER ERROR AVISARMELO.