—Anakin.

El nombrado se volvió para encontrar a su maestro observándolo con una pequeña sonrisa, Anakin le devolvió la sonrisa.

—Maestro—saludó Anakin con una inclinación de respeto, aunque lo hizo más por costumbre que otra cosa, hace mucho tiempo que ese respeto estaba de sobra.

Obi-Wan iba a decir algo, pero en ese momento llegaron el maestro Yoda y el maestro Windu, ambos inclinaron la cabeza con respeto.

—Maestro Skywalker—saludó Yoda— maestro Kenobi— añadió mirando a Obi-Wan—No esperaba que volvieras tan pronto, siento mucho lo sucedido con la senadora.

—Y yo maestro, pero no tenemos tiempo para lamentarnos, debemos actuar pronto, antes de que sea tarde—se apresuró a decir Anakin mirándolo a los ojos.

—Paciencia Anakin, aún tenemos que ocupar otros asuntos más urgentes—declaró el maestro Windu mirando sobre el hombro de Anakin.

Todos los presentes siguieron la mirada del jedi hasta donde se encontraban ambos hermanos, estos se encontraban hablando con Slandhar y con dos doncellas de Padme, desde ahí Anakin pudo apreciar la tristeza en el rostro de estas.

—No creo que sea bueno hablarlo ahora, no es el lugar ni el momento, ambos deben de estar cansados y devastados, creo que será mejor hablarlo luego con la mente más tranquila—sugirió Obi-Wan.

Anakin se lo agradeció con una mirada a espaldas de los demás antes de volverse hacia Windu.

—Obi-Wan tiene razón, Luke aún sigue débil y Leia luce devastada, jamás los había visto así, aunque sé que la familia no es algo que los jedi apreciemos en este momento me atrevería a decir que eso es lo que ellos necesitan—se atrevió a decir Anakin.

—Cuida lo que dices Skywalker, por más que sean hermanos el amor está prohibido entre los jedi, tú deberías saberlo, no me importa que sean niños, encárgate de que a Luke no se le meta en la cabeza la idea de amar a alguien, por esta vez le permitimos acompañarla pero que no se pase de listo, esta será la primera y última vez que se le permite, espero que te haya quedado muy en claro Anakin—le espetó Windu con una mirada severa provocando que el hombre se sintiera de nuevo como un padawan.

—Claro, se lo diré— le aseguró Anakin mirando a sus hijos pensativo.

En ese momento todos fueron hacia la entrada del Senado, salvo Luke quien se quedó rezagado, Leía se detuvo al ver que el chico no los seguía, tras intercambiar una mirada el chico se volteó y miró a su padre, quien asintió en silencio, este se lo agradeció con una mirada y fue con su hermana.

—Aún tenemos muchas cosas que discutir, pero este no es el lugar indicado, los espero en el Consejo dentro de un par horas cuando el sol se ponga, ni un minuto después—sentenció Windu dando por finalizada la conversación.

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En cuanto los maestros se fueron Anakin se despidió de su amigo y fue en busca de sus hijos, ambos se encontraban hablando en la antigua habitación de la senadora, las doncellas se apresuraban a acomodar las pertenencias de la chica en su respectivo lugar mientras que Slandhar los observaba desde la puerta semioculto en las sombras, al pasar junto a él Anakin se detuvo.

—¿En verdad crees que fue buena idea traerlos aquí?—preguntó el hombre en voz baja evitando llamar la atención de los chicos.

Anakin meditó su respuesta en silencio.

—No estoy seguro de que sea buena idea, pero sé que es lo correcto, ya lo has visto tú mismo, se necesitan el uno al otro.

Slandhar iba a replicar pero se lo pensó mejor e inclinó la cabeza con respeto dandose por vencido.

—Confiaré en tu palabra maestro, sólo espero que tengas razón y esto sea lo mejor para todos.

—También yo—murmuró Anakin mirando a los chicos—puedes irte, tomate libre el día, yo los cuidaré, te llamaré si necesito algo.

—Claro— asintió el hombre dandose vuelta para irse, antes de dar un par de pasos se detuvo—siento lo de la senadora, sé cuanto la aprecia.

"No tienes idea de cuanto"—murmuró Anakin para sí antes de entrar en la habitación.

Al verlo entrar amabas doncellas se detuvieron a saludarlo antes de continuar con su trabajo.

—Maestro—saludó Luke con una pequeña sonrisa.

Anakin le devolvió la sonrisa con cariño.

—Dentro de un rato tendré una reunión con el Consejo, en la cual se decidirá lo que sucederá a continuación.

No añadió más, no era necesario, además no podía hablar con las doncellas presentes.

—Estamos listos.

—Lo sé.

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Siento mucho la tardanza😓, tarde demasiado en actualizar, pero tengo una buena noticia, acabo de salir a vacaciones, así que tendré más tiempo para escribir😉😁

Espero que les haya gustado el cap, intentaré actualizar hoy o mañana.

Atte. Jikoga💕