Thanatos estaba organizando una serie de papeles que si bien, para alguien normal no tendría sentido, para él, eran de vital importancia, pues estaba al tanto de la expansión de múltiples colonias de reciente fundación, desde Tragen, Lustria, New Cadia, y otra serie de mundos de vital importancia para el dominio, mundos agrícolas, mundos forjas, mundos industriales, mundos urbanos, una interminable cantidad de planetas que necesitaban ser organizados y clasificados

Mundos colmenas eran vaciados, con entusiastas voluntarios que deseaban abandonar sus hogares para partir rápidamente hacia un nuevo mundo, Thanatos tuvo que firmar algunos papeles para impedir que las naves fueran abarrotadas más allá de su capacidad, y vigilar atentamente cada planeta colonizado, para evitar que haya una fuga innecesaria de recursos

Supervisar un centenar de mundos en pleno desarrollo traía sus propios retos, no podía dejarlos sin una ruta de suministros decentes, sin protección, sin una guarnición, debía considerar cuando y en qué momento deberían empezar a contribuir al imperio, sinceramente, esto era un trabajo que le gustaba, no había tantos problemas como gobernar todo subsector Telmariano, cien planetas que antiguamente se mataban entre sí y tenían un fuerte sentido de hermandad, comparados con los de ahora que tenían un pobre sentido de hermandad y un fuerte deseo de matarse entre sí

Debía mantener un puño de hierro con ellos si lo que desea es ver resultados positivos, volvió a inclinarse para observar detenidamente unos papeles cuando un sirviente entró a su oficina, el rostro preocupado del hombre, detrás un par de comerciantes independientes, con sus... exóticos uniformes, lo que le sorprendió más fue ver como entraba una Eldar, detrás de la Eldar una docena de guardias de su casa, con sus uniformes negros y rifles láser listos para atacar a la Eldar si fuera necesario

- Mi señor, hemos venido con noticias urgentes - se expreso uno de los comerciantes independientes tras arrodillarse

- Nos hemos encontrado naves de diseño Imperial en nuestro reciente viaje, hacia el norte de nuestra posición actual - aclaró el segundo, Thanatos miro a la Eldar esperando que dijera algo, pero se mantuvo callada

Al ver que no haría nada, Thanatos se reclinó, llevándose una mano al mentón, analizando la situación con cierto escepticismo, naves de diseño imperial, vale, tenía algo, pero con solo eso no podría deducir exactamente con quién estaba tratando, bien podrían ser fuerzas de la armada dispersas que fueron tragadas por la tormenta disforme que los arrojó a esta galaxia desconocida e inexplorada, bien podrían ser rebeldes, traidores, desertores o cultistas caóticos, bien podrían ser el imperio, o una parte de él, pero si fuera esta ultima opcion seria ser demasiado optimista, y Thanatos no era optimista, era pragmático

- Así que... ¿Cuántas de estas naves vieron? - pregunto Thanatos, los dos Rough Traider se miraron un momento

- Un grupo de Batalla completo - declaró el primer hombre 

- Vaya... - Thanatos sopesó sus opciones, que se veían reducidas, aun así seguían siendo demasiadas opciones a considerar - ¿Algún indicador de su origen?

- Oh sí, espere un momento su excelencia - el segundo hombre empezó a buscar algo, luego sacó una hoja de papel garabateada que dejó sobre la mesa - Alcance a dibujar el logo de una de sus naves - Thanatos tomó la hoja y observó

Un momento, solo un momento tomó darse cuenta de que se trataba, el león rugiente de los dominios Severianos, genial, lo único que les hacía falta eran rebeldes con una causa, se rasco la cabeza y miró a los comerciantes independientes

- ¿Saben si los descubrieron? ¿Los han seguido? - los dos hombres negaron, una vez más los ojos de Thanatos encontraron a la Eldar, luego miró a su sirviente - Encuentra y trae a los Almirantes y Lord General, de inmediato - ordenó, el hombre asintió  

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Thanatos miro a los miembros de la armada y guardia imperial, todos estaban discutiendo sobre la información recibida, algunos proponían atacar de inmediato, como si tuvieran idea de donde estaban, otros hablaban de evitarlos, y finalmente el grupo más razonable hablaba de contactar con ellos, pese a que su ultimo estatus conocido de los Severianos fuera el de rebeldes, seguían adorando al emperador, por lo que al menos tenían un punto en común

 Thanatos tenía una mejor forma, al menos en su mente era mejor, engañar a los severianos, y apuñalarles por la espalda, una táctica sencilla que a Thanatos le había funcionado antes, y esperaba que le siguiera funcionando, si en verdad eran los dominios severianos solo había dos rutas posibles, guerra o paz, la paz sería tratar de convivir con ellos, pero si descubren que sus capacidades estaban reducidas, era probable que los atacaran, sin duda también las diferencias entre el culto imperial podría ser un pretexto para atacar, dudaba que la paz fuera una opción viable

Luego estaba la guerra, para ganar debería usar una táctica superior en vez de simplemente lanzar hombres al enemigo, tenía ciudades colmena si, pero los Severianos también, y sus números eran más grandes que los suyos propios, con decir que controlaban un subsector completo, y las zonas alrededor de este, fácilmente podrían superar en número los mundos de su propio subsector

- ¿Cuales son sus órdenes? - preguntó uno de los lords Almirantes

- Por el momento, seremos buenos vecinos - Algunos oficiales se mostraron incómodos con esa decisión - Igual requiero al maestro del capítulo de la Voluntad del Emperador y los maestros del templo Asesinorum tan pronto como sea posible - ordeno

- ¿Por que necesita a los dos? - pregunto un coronel

- No le incumbe - contesto Thanatos

Los hombres se miraron un momento, se pusieron de pie y le dedicaron una pequeña reverencia hacia Thanatos, luego se retiraron saliendo en orden por la sala, él en cambio, decidió que debía ir a ver a su... inquilino en el sótano, necesitaba alguna ventaja frente a lo que estaba por venir sobre el