"Padre de la humanidad, protege la alma de estos tus hijos, así como ellos han entregado su vida y cuerpo para proteger tus dominios"
- Sacerdote desconocido 

La batalla se volvía más oscura a medida que las fuerzas enemigas avanzaban por los campos del planeta, y a medida que los cadáveres de la guardia imperial tapizaban la tierra, se perdía toda esperanza de mantener la línea 

Las corbetas skaven, reconvertidas en tanques de 300 metros, aplastaban búnkeres, bastiones, trincheras y tanques de la guardia imperial, muchos hombres optaban por la retirada, y encabezados por sus comisarios corrían a lugares más seguro, aunque esto durase poco

Los Tiranidos, pese a no saber que hacer contra tantos enemigos simultaneos, eran barridos en varios frentes, habían desplegado a sus biotitanes, que causaban estragos por las filas enemigas, el señor de la horda, empezaba a realizar masacres ahí donde fuera, buscando adquirir el genoma del kaudillo orko y añadirla a la colección de genomas tiranidos

El enfrentamiento entre estos dos, fue rápido, con el señor de la horda partido a la mitad y reducido a un montón de masa sanguinolenta, sin siquiera darle la oportunidad de combatir, buscando un desafío, la Bestia se lanzo al corazones del enjambre, seguido por su guardia de orkoz negros, devastando fila tras fila de engendros, llegando al corazón del enjambre, ante la reina, matándola, de tal forma que no tuvo oportunidad de dar su alarido psíquico, sin su reina, y sin engendros psíquicos, las hordas tiranidas se dieron al canibalismo desenfrenado

El kaudillo orko, sin razón aparente se retiro, hacia territorio orko, aparentemente para reponer fuerzas, dado que muchos de sus orkoz negros habían muerto, esta era la opción más probable, sin dos de sus enemigos, la batalla se convirtió en un enfrentamiento humano-skaven, dado que la mayoría de fortificaciones estaban destruidas, la moral por los suelos y su flota estaba destruida, la guardia imperial parecía a punto de quebrarse, hasta que llego una luz del cielo, oh más bien, decenas de capsulas de desembarco

El capitulo, la Voluntad del Emperador, encabezado por su maestro de capitulo, Rakirr, llegaba al rescate del planeta, acompañado de una legión titánica, fuerzas skitarii, y las fuerzas de vastagos tempestus, lideradas por la señora del dominio, Veronica, que acaba de dar a luz recientemente a una niña y pese a su condición encabezaba la lucha para defender el planeta

Las ratas, desesperaron al ver como eran atacados por dos frentes, sus fuerzas desmoralizadas, y con más deseos de salvar su vida que temer el castigo de su dios, huyeron en desbandada, aplastando bajo sus pies a sus propios lideres, subiendo por millares a sus destartaladas naves de guerra, y abandonando sus gigantescos tanques

Hubo resistencia, en especial de sus fuerzas de Elite, ratas que sobresalían más que sus compañeros más escuálidos ya que sobresalen una cabeza por encima de ellos, con unos cuellos gruesos y una constitución mucho más fuerte, llamados alimañas por la guardia, y armados con armas que licuaban de afuera hacia adentro a los desafortunados guardias, aunque esto no duro mucho cuando se desplegaron los nuevos tanques Stormhammer

Rescatados de la memoria del mechanicus, estos tanques aunque difíciles de producir, eran eficientes, y a diferencia de los blaneblades, su precio era asequible para el dominio, la limpieza del planeta se realizo rápidamente, aplastando y exterminando cualquier rastro xeno en el planeta, Acrópolis había resistido, no sin antes perder al 10% de su población

Liderando una dos grupos de batalla al completo, Verónica barrio con una docena de mundos skaven, usando el exterminatus a placer, y barriendo media docena de flotas skaven, que se dirigían en auxilio de sus mundos, cortando las alas de cualquier posible ofensiva próxima en un futuro cercano, aunque los problemas no acabaron

Verónica giro rápidamente su flota en dirección al Este, asegurando que la flota que quedaba en ese sector resguardara la frontera de posibles incursiones skaven, ella se dirigía hacia el frente de guerra separatista, sin saber siquiera, que su hija, estaba a punto de ser raptada