Cap. 88 - Prioridades

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Audiolibro disponible en YouTube:

https://youtu.be/JacnW76Zzf0

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B1: - Comandante. Un gran número de objetivos se acerca a nuestra posición. -

En el interior del hangar principal del destructor imperial, los droides habían montado un improvisado puesto de mando para garantizar las seguridad de las operaciones hasta que los dos batallones orgánicos cumpliesen con su acometido. Una bastión formado en su mayoría por droides B1 y B2, los cuales mantenían a raya a las fuerzas imperiales en los pasillos aledaños al hangar. 

TR-1: - ¿Qué sucede? -

B1: - Los sensores indican que un gran número de objetivos se acerca a apoyar a los enemigos desde el interior del acorazado. Se dirigen hacia aquí usando el pasillo secundario de la nave. -

TR-1: - Eso es extraño. Se supone que todas las fuerzas enemigas ya estaban localizadas. -

B1: - Al parecer, este grupo no se había mostrado antes y... Un momento... Esto es extraño. -

TR-1: - ¿Qué ocurre? -

B1: - El nuevo grupo se detuvo a una distancia considerable del los imperiales confirmados... Algunos incluso están dando media vuelta. -

TR-1: - Unidad B-76384... ¿De donde provino esa nueva fuerza desconocida? - Preguntó algo preocupado. 

B1: - Todo parece indicar que provienen del complejo de prisiones. -

Lo que pasó a continuación hubiese sido imposible de creer para cualquiera que estuviese viendo. El droide táctico se dió media vuelta y se fue lo más rápido que su cuerpo metálico le permitía, dejando completamente sus funciones atrás. 

B1: - ¿Comandante? ¿¡A dónde va!? -

TR-1: - Esos no son imperiales. A TODAS LAS UNIDADES MECÁNICAS.... ACTIVANDO PROTOCOLOS GUARDIAN UNO. MÁXIMA PRIORIDAD: GARANTIZAR LA VIDA DE LOS CIVILES. COMANDO DE MÁXIMA PRIORIDAD. UNIDADES PALADÍN Y FIFI, CONMIGO. -

Ante la orden, absolutamente todos los droides que no estaban en combate se activaron y se dispusieron a avanzar hacia la posición del comandante droide táctico, el cual tomaba el pasillo asegurado que lo llevaría directamente hacia la zona de conflicto en cuestión.  El general Ícaro fue muy preciso en su programación, siendo siempre la máxima prioridad de cada unidad droide priorizas la vida de los orgánicos, y con su rápida capacidad de procesamiento, TR-1 entendió que este nuevo grupo no se trataba de refuerzos enemigos. 

Sin embargo, la situación era crítica en ese sector del acorazado. Los imperiales entraron en pánico al ver una fuerza enemiga aparecer a sus espaldas, pues ahora no tenía la más mínima posibilidad de escapar. Aun así, no existe fiera más peligrosa que aquella que está arrinconada. 

Carentes de sentido común y victimas del pánico, los stormtrooper avanzaron hacia la retaguardia, donde muchos vieron la debilidad de los supuestos nuevos combatientes, pero la verdad, era que estos era meros prisioneros, agotados y cansados por la falta de sueño, agua y comida. Algunos portaban blasters, pero muy pocos sabían realmente como usarlos. 

Al no ser guerreros y no tener un corazón preparado para la guerra, muchos prisioneros huyeron cuando vieron a los imperiales acabar con la vida de aquellos que tenían justo al frente. Como bien era sabido, Howlhell tomaba prisioneros tanto a culpables como inocentes, siendo estos últimos la mayoría. De los más de mil presentes, solo treinta de ellos eran rebeldes o malhechores. Los únicos capaces de usar un blaster correctamente, siendo ese misterioso clon el que hacía lo posible por mantener la maltrecha resistencia en los corredores del Acorazado Imperial. 

La batalla se volvió sangrienta y brutal. Los prisioneros hacían lo imposible por mantenerse firmes ante las fuerzas imperiales, que ponían sumo esfuerzo para recuperar posiciones. Los bláster cada vez estaban más cerca los unos de los otros, y los cuerpos amontonados de los civiles caídos, muertos por el fuego enemigo, hacían de la retirada algo sumamente difícil.

Aún así, eso no era lo que destino tenía preparado para ellos. El pavor volvió a los rostros de los prisioneros cuando vieron una lluvia de bláster rojos atacar desde la retaguardia enemiga, abatiendo a todos aquellos stormtroopers que estaban al descubierto. Alguno de los prisioneros se alegraron de esto, estos se preocuparon ante la posible nueva fuerza que entraba en combate, dudando si serían aliados o enemigos. Pero el clon al mando... sintió terror ante lo que veían sus ojos. 

El manto blanco de armaduras imperiales cayó ante el poderío separatista. Como una marcha fúnebre, al final del corredor se rebelaba una imagen que causaba terror a todos aquellos que alguna vez pisaron el campo de batalla durante las guerras clon.  

Una formación de cuatro columnas de droidecas avanzaban haca los prisioneros liberados, siendo Paladín y Fifi aquellas que iban al frente. A sus espaldas, varias columnas de droides B1 y B2 que se acercaban lentamente. 

Los prisioneros estaban muy tensos, al menos aquellos que alguna vez ni vivieron bajo el manto Separatista pues, si lo pensamos fríamente, la Alianza Separatista eran los libertadores de la Galaxia para aquellos que vivían en los mundos bajo su jurisdicción. Después de todo, en la guerra solo existen puntos de vista, no buenos ni malos. 

Algunos mantenían los rifles en alto, pero al ver que los droides no se mostraban como una amenaza no tuvieron más remedio que relajarse un poco. Todos menos el clon que estaba a la cabeza, cuyo pasado no le permitía disipar su tensión ante los que una vez fueron sus enemigos jurados. Entonces, la figura de un droide táctico pasó al frente de las formaciones de droides. 

TR-1: - Este crucero imperial está siendo atacado la Alianza Separatista. Por favor, entreguen sus armas y acompáñenos hacia una zona segura. -

Clon: - La Alianza Separatista fue destruida hace siete años. Lo que dices no tiene sentido. -

TR-1: - Entiendo sus palabras, clon. Pero los ideales no mueren. En cambio, agradecería que no apuntaras con tu blaster a mi rostro. Yo ya no soy tu enemigo. -

El clon lo pensó bastante. Independientemente que abrir fuego sería una idea que rosaría la estupidez, no sería capaz de proteger a los que estaban a sus espaldas. Sin más remedio, el clon tuvo que rendirse, pensando que ahora simplemente sería tomado como prisioneros , pero lo que sucedería a continuación rompería todos los prejuicios que este tenía. 

TR-1: - Muy bien. A todas las unidades. Escoltad a los refugiados a los transportes y llevadlos de regreso a la nave nodriza. Informad al general y solicitar raciones alimenticias y suplementos médicos para los evacuados. -

B1: - Comandante. Son demasiados. Los transportes tendrán que dar varios viajes mientras están expuestos al fuego antiaéreo enemigo. -

La unidad B1 tenía razón. Hasta que el grupo de Li Mu no se hiciera con el control del puesto de mando, las torretas anticazas del Destructor Imperial seguirían operativas. Si bien las cuatro naves de transportes C-9979 serían capaces de transportar a la mayoría de civiles, aún sería necesario movilizar al menos varias docenas de prisioneros. Los transportes serían capaces de regresar a la Munificent, pero hacerlos volver comprometería las operaciones. No podían arriegarse a que sufriesen daño, pues debían retirarse si algo salían mal. Pero como bien Ryloth les enseñó, la presencia de civiles en la zona de guerra nunca era nada bueno. ¿Qué debería hacer?

Clon: - Nosotros podemos ayudar. - La voz del clon llamó la atención de comandante droide. 

TR-1: - Lo escucho. -

Clon: - Alguno de nosotros somos cazarrecompensas. Nuestras naves habían sido decomisadas, y seguro están en el hangar secundario. Podremos ayudar con la evacuación. -

La idea en si no era mala, pero confiar en alguien que apenas conoces no es, en ningún sentido, algo lógico. Aún así, las opciones a su disposición no eran muchas.

TR-1: Muy bien. Pelotón 11, venid conmigo al hangar secundario y recuperad las naves confiscadas. El resto, regresad al hangar principal y mantened posiciones hasta nuevo aviso Si alguno intenta escapar... Elimínenlo. -

La última palabra sacudió a los prisioneros hasta la médula. Puede que el droides se mostrasen como aliados, pero debían evitar a toda costa que algún mercenario escapase y rebelase información al enemigo. La mentalidad fría del droide táctica no cometería un error tan básico como ese. Después de todo, los mercenarios y cazarrecompensas no son reconocidos exactamente por su honor y lealtad. 

TR-1: - No me sorprende ver a un clon como prisionero. No es el primero que conozco. ¿Cuál su identificación, soldado? -

Clon: - CT-7462. - 

Como era de esperarse, el clon respondió con su número de identificación que se le fue impuesto en Kamino. TR-1 era un droide, así que de esta forma sería más fácil que lo entendiese su computadora llena de códigos y cálculos. Aún así, el droide lo miró al rostro, no complacido con su respuesta. 

TR-1: - Le pregunté por su identificación.... No por su código. -

Eso definitivamente no se lo esperaba. ¿Un droide táctico interesado en saber el nombre de un clon? Es era algo que el clon jamás pensaría ver en su vida.

Clon: - Capitán Foxley, del 104th Batallón de ataque - Dijo aún sorprendido. 

TR-1: - Muy bien. Capitán, al parecer usted es que tomó el mando de los prisioneros durante la revuelta. -

Foxley: - No se haga ideas equivocadas. Solo hice lo necesario para salir con vida de allí. No soy un guerrero... ya no. -

TR-1: - Yo no he mencionada nada al respecto. - 

La respuesta del droides fue una sacudida para el clon. Al parecer, el droide le había tendido una trampa en la que cayó completamente. Y tenía razón. El droide táctico nunca le mencionó nada al respecto de ser un soldado y su deber... Esa fue una respuesta que Foxley dió por su propia voluntad... Tal vez aún había algo allí adentro después de todo. 

TR-1: - Cuando esto termine, le recomiendo hablar con el general. Él podrá darle una respuesta mejor al porvenir que yo. De momento, enfóquese en salir de aquí y llevar a la mayor cantidad de civiles que pueda. -

Foxley: - Bueno... Haré lo que pueda. -

El grupo finalmente llegó al hangar secundario, donde las fuerzas droides habían asegurado el perímetro alrededor de la zona hace apenas unos minutos. Los cientos de prisioneros fueron distribuidos de forma eficiente en las diferentes naves de los cazarrecompensas, aunque algunas de estas no se veían muy segura que digamos. Sobre todo por su antigüedad y falta de mantenimiento. Pero era todo lo que tenían. Y finalmente, TR-1 y Foxley llegaron a la nave del clon junto a un pequeño grupo de refugiados.

TR-1: - Asi que... ¿Esta es tu nave? - Preguntó algo preocupado.

Foxley: - Oye... Puede que le falte algo de pintura, pero puede volar sin problemas. -

TR-1: - Eso espero... ¿Cómo la llamas? -

Foxley: - A mi me gusta llamarla... El Espíritu. - 

Ante sus ojos se encontraba un carguero VCX-100, fabricado por la Corporación de Ingeniería Coreliana, aunque se veía claramente que portaba algunas modificaciones. No era una nave pequeña, contando con una longitud de 43.9 metros y un envergadura de 34.2 metros. Además de una altura de 14.5 metros. Suficiente para transportar a una buena cantidad de pasajeros. El modelo, aunque algo antiguo, contaba con una hipermotor de clase 2 y varias armas para defenderse, así que no podía ser tomado a la ligera. 

TR-1: - Capitán, ya sabe que hacer. No se desvíe de la ruta y no intente nada estúpido. -

Las palabras del droide eran más una amenaza que una advertencia. Al interior de la nave ingresaron varias unidades B1 y B2, las cuales se encargarían que ningún piloto intentase algo que pusiera en riego la operación. Estaban dispuesto a ejecutar a quien sea necesario para garantizar la seguridad de ese pequeño intento de rebelión. 

Foxley: - Ya me lo dejó en claro... Y no me llame capitán. Hace mucho que no uso ese rango. -

El droide simplemente se le quedó mirando, como si intentase decirle algo sin el uso de palabras. Para el clon esa escena era muy extraña e incómoda, y no entendía del todo que estaba pasando. 

TR-1: - Buena suerte... Capitán... No vemos en la nave. -

Y así, el droide táctico se dió la vuelta y se dispuso a regresar a sus funciones al hangar principal, dejando al clon algo malhumorado por el hecho de que no hiciera caso... ¿O acaso TR-1 quería decirle algo más?

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