Él
Un nuevo día, ayer no pude dormir bien por mi celo, apenas cerraba mis ojos veía a Jungkook, dispuesto a mí, con su cálida sonrisa, llamándome.
Cuando me levanté y me dirigí a mi computadora vi que no había nadie, rápidamente puse todas las cámaras en la pantalla, era imposible que no esté. Tomé mis pastillas, me bañé en neutralizador y salí rápidamente a buscarlo.
No entré a clases, estuve todo el día viéndolo desde la ventana, podía ver perfectamente como estaba concentrado en sus deberes, como sonreía ligeramente de la nada, me gustaría saber que cosas pasan por su cabeza, me gustaría saber si piensa en mí.
— Hoy te ves hermoso, cada día te ves más hermoso — dije sonriendo de solo mirarlo
Todo el día era perfecto, acá nadie se fijaba en los demás, nadie se daba cuenta de que miraba a Jungkook a lo lejos.
Era un día hermoso, pero este se arruinó cuando vi como ese mismo chico que pude observar en otra ocasión. Vi como se acercó a Jungkook, no pude evitar borrar la sonrisa que tenía desde la mañana, la sonrisa que pensé que tendría hasta el final del día.
Sin pensarlo me acerqué, Jungkook estaba en la cafetería, a su lado Jimin y al frente suyo ese alfa.
— Jungkook, quería pedirte un favor... bueno no exactamente un favor, si no invitarte a un lugar —
— ¿A-a mí? — preguntó con las mejillas sonrojadas
" No le muestres esa cara a él, esa expresión solo debería ser mía " pensé mientras apretaba mis puños, quería romper todo a mi paso
— Sí, el sábado tengo una fiesta, el cumpleaños de un amigo — dijo ese chico sonriendo, sin dejar de ver a Jungkook
— Yo-o estoy oc... —
— Claro que sí, ambos estaremos ahí, solo dinos en dónde y la hora — interrumpió Jimin a Jungkook
— Perfecto, entonces los veo, será a las diez, en mi casa... espero verte Jungkook — dijo guiñándole el ojo para irse
— Yo-o... —
No estaba feliz, tenía ganas de golpear algo con desesperación, desde hace mucho esa sensación se había ido, pero volvió junto a ese sujeto.
— Jungkook es mío... — dije sin dejar de ver a Jungkook aún sonrojado — quita esa expresión de tu rostro maldita sea — dije poniéndome de pie para irme al baño, necesitaba mojarme el rostro
Mientras me lavaba las manos pensaba en como enseñarle a ese sujeto que Jungkook es mío, no debía dejar huellas, solo una pequeña advertencia para que se deje de acercar a él.
La salida llegó, y no podía evitar ver como ambos se daban miradas a lo lejos, eso solo hizo que me moleste más.
— ¿Quieren que los lleve? — preguntó ese sujeto mostrando unas llaves de auto — hace poco me lo compré y quisiera poder llevarlos — dijo acercándose a Jungkook
— Yo-o... —
— ¡Nos encantaría! — exclamó Jimin — me encantaría mucho, yo no puedo, tengo que ir a un lugar importante, pero puedes llevar a Jungkook, él está muy cansado como para caminar hasta su casa — dijo empujando a Jungkook, haciendo que se acerque más a ese idiota
Yo solo miraba a otro lado, miraba ese auto deportivo color naranja, se veía muy lindo, en serio, era bello, pero lamentablemente es de ese idiota.
Esperé un rato, ellos se fueron y de inmediato salí, me subí a un taxi, los seguí con la mirada, viendo como al final se demoraron en salir del auto, yo también lo hice, no quería que me vean.
Al final Jungkook salió con una gran sonrisa, pero no quise prestarle importancia a eso, solo le dije al taxista que siga a ese auto naranja. Necesitaba saber en donde vivía él.
Su casa era lujosa, se veía que tenía dinero, pero eso no me importa, no bajé del auto, solo hice que volviera a mi casa, aún no era momento de darle su advertencia, al menos ya tengo lo que quiero, su dirección.
Cuando llegué a mi casa de inmediato corrí a mi computadora, me había perdido muchas horas de verlo, al parecer estaba estudiando, estaba con unos libros en su mano, estaba tan sereno, pero de pronto eso acabó, se escuchó un toque en la puerta, de inmediato pasé a la cámara de la entrada, era Jimin. Vi como pasó y de inmediato jaló a Jungkook a su cuarto, se veía muy feliz, aunque su felicidad en realidad no vale nada, yo solo quiero ver a Jungkook.
— ¿Y?, cuéntame que pasó, dime todo lo que pasó con Hoseok —
— Na-nada... — dijo Jungkook nervioso
— Oh, vamos. Dime — le insistió
— Él dijo solo que quería verme el sábado y yo le dije que estaría ahí y que esperaba bailar con él.... —
— ¡AHHH! —
— ¡AHHH! —
Ambos empezaron a gritar y saltar en la cama, se veían muy felices, pero solo podía pensar en como deshacerme de ese tal Hoseok, pensando en cuando lo haría, es una amenaza, me está robando a Jungkook, lo aleja de mí.
— Oye... — escuché la voz de Jimin que llamó mi atención — hoy me pareció ver a Taehyung en la universidad —
— No fue, creo... hace un rato toqué su puerta, nadie contestó — dijo Jungkook preocupado
" Le importo, yo lo sé, sé que él siente lo mismo que yo " pensé sin poder evitar sonreír
— Que raro, seguro está escondiendo algún cuerpo — dijo Jimin riéndose de manera exagerada
— No digas esas cosas de él —
— Pero si eso parece, tiene ojeras, da miedo —
— Yo también las tengo — dijo Jungkook señalando sus supuestas ojeras
Él no las tenía, era perfecto, yo las tenía por ver su perfección sin descanso.
— Como digas, Jungkook... bueno, mejor me voy, recuerda que el viernes debemos ir de compras —
— Yo tengo ropa —
— Es muy largo todo, necesitas ropa provocativa — dijo Jimin poniendo ambas manos en sus caderas — vamos a hacer que Hoseok te mire sin descanso —
— No-o quiero eso —
— Ay, me había olvidado de tu mente blanca — dijo riéndose — bueno, yo la pondré algo negra el viernes, nos vemos —
Me gustaría ver a Jungkook con ropa provocativa, pero solo para mí, para nadie más que para mí. No para él.
(Cuatro días después)
No me gustaba la cercanía con ese sujeto, cada vez era más difícil aguantar mi ira, ya había roto cinco vasos y diez platos en mi casa.
Hoy era viernes, Jungkook y Jimin saldrían de compras, y yo iría con ellos.
No hablaba mucho con Jungkook, se había vuelto complicado porque le dejaban muchos deberes, siempre se quedaba hasta tarde, lo sé porque yo me quedaba viéndolo, siempre.
— Llevarás este — dijo Jimin dándole un polo que le llegaba hasta más arriba del ombligo
— No me gusta, prefiero el polo a rayas —
— No, es muy largo —
— Pero... —
— Debes de estar lindo para mañana, para él —
" Para él no, Jungkook es mío " pensé mientras los veía fijamente, a ambos, pensando en si también debería de deshacerme de Jimin
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