(Una semana después)

Estaba en la universidad, Jungkook de nuevo había sido cambiado de horario, era mejor para mí que esté de nuevo en la mañana. No podía pasarme de mi trabajo a la universidad y luego seguirlo todo el día.

Me he intentado acercar al papá alfa de Jungkook, es inútil, cada noche lo escucho quejarse de mi presencia, sé que Jungkook también lo sabe, es por eso que he dejado de ir a cenar por las noches, porque soy un pobre chico que ha sido lastimado por los actos del señor Namjoon.

— Ay Jimin, no digas eso — vi a lo lejos a Jungkook reírse mientras salía con su amigo del salón, se veía hermoso, como siempre

Hace unos días empecé a escribir algunas cartas para él, hoy por fin decidí enviarle una de todas las cartas que el he escrito, pequeños versos llenos del amor que le tengo.

— Mira... — dijo Jungkook cuando abrió su casillero

— ¿De quién es eso? — preguntó Jimin quitándole mi carta, me da tanta rabia que se meta en donde no lo llaman, ¿Qué se cree? — querido Jungkook, la otra vez te vi, tenías un lindo polo azul, te veías hermoso, ni el azul del cielo se compara contigo, ni el mar, ni nada, nada iguala tu belleza, ni un hada — leyó lo que le escribí — vaya... al parecer tienes un admirador secreto, uno que está muy encantado contigo — dijo riéndose

— ¿Qué más dice Jimin? — preguntó Jungkook sonriendo timidamente

— Dice... ¿Th? —

— ¿Th? —

— Ajá, eso dice —

— Th... raro, es un interesante nombre — dijo Jungkook con las mejillas sonrojadas

Tomé una foto de su expresión, estaba escondido, nadie podía notar si tomaba fotos o no, así que podría tomar todas las que quisiera.

Dos mil trescientas quince son las fotos que tengo hasta ahora, pero no son suficientes, yo quiero más, quiero ver cada ángulo de él, quiero tomar y capturar cada expresión suya, en todo momento, incluso pestañear me da miedo.

(Nueve días después)

Al día siguiente fue igual, volví a dejar una carta en su casillero. Y al otro día y al otro, al otro, y no dejaba de enviarle, no había día en que no le dejara.

— Querido Jungkook, tus ojos son hermosos, tan hermosos que parecen no ser de este mundo, tus ojos reflejan lo dulce y amable que eres, tus ojos reflejan tu alma, lo más lindo de un ser humano — dijo Jungkook leyendo, tenía una sonrisa en su rostro

Yo sabía, sabía que él estaba enterado de que yo le enviaba esas cartas, sabía que él lo sentía y que pronto vendría a mí a decírmelo, que ambos seríamos felices después de eso.

— Deja de sonreír como bobo — dijo Jimin llegando — ¿Al menos sabes quién es?, ¿O cómo es? — preguntó y Jungkook solo negó sin borrar su sonrisa

— No sé quien puede ser pero... es lindo que se tome las molestias de enviarme esas lindas cartas cada día, en serio creo que quien las manda es alguien muy lindo y bueno, tiene un gran corazón —

— Creo que sé quien puede ser, no estoy seguro, solo es una idea que tengo — dijo él achinando su mirada

— ¿En serio? —

— Es que como que he escuchado frases similares en algún lado... —

— Puede ser una coinc... —

— ¡Hola! — exclamó ese chico de antes

Hoseok, Jung Hoseok de veintidós años, sus padres son inversionistas, no tiene hermanos, él siendo el único hijo.

Él es molesto, siempre para cerca de Jungkook, me fastidia eso, yo no puedo estar ahí ahora mismo, supuestamente debería estar en una prueba, pero no me importa eso, me importa el saber por qué ese alfa siempre está cerca de mí Jungkook.

— ¿Les parece si vamos a comer algo? — preguntó ese alfa sin dejar de sonreír — ustedes vayan buscando una mesa, yo ahorita voy —

Seguí a Jungkook y Jimin, quería escuchar lo que Jimin le decía a mi Jungkook.

— Se ve muy flechado por tí — le dijo riéndose

— Él es so-solo amable — dijo Jungkook tímido

Ambos se sentaron en sus mesas, yo estaba detrás de una columna, me era difícil escuchar muchas cosas, pero lograba escuchar aunque sea algo, pensé en que sería momento de aparecer, porque a esta hora terminan mis clases, es perfecto.

— Hola, Jungkook... Jimin — dije sentándome al lado de Jungkook

— Hola, ¿Tu prueba salió bien? — preguntó Jungkook con emoción

— Eso creo, el lunes nos darán los resultados — dije queriendo tocar su mano, pero de pronto alguien apareció

— Jungkook... hace mucho quería pedirlo, pero no sabía si era adecuado — dijo Hoseok al frente nuestro — espero no recibir ninguna negativa de tu parte — dijo sacando detrás de él un gran ramo de rosas — ¿Te gustaría salir conmigo mañana?, ¿Te gustaría tener una cita conmigo? —

No sabía como reaccionar, podía ver a Jimin saltar de emoción en su sitio, podía ver a Jungkook sonrojado, y yo, yo no sabía como reaccionar. Quería matarlo, pero eso no podía hacerlo, no acá, no con Jungkook viéndome.

Miré a ese alfa, viendo lo elegante que estaba vestido, viendo como tenía una impecable sonrisa.

— Sí quiero — dijo Jungkook haciendo que lo mire — qui-quiero salir contigo —

— Tengo que ir al baño... — dije poniéndome de pie rápidamente para salir de ahí

Fui al baño y me encerré, tenía que controlarme, no podía dejarme llevar por mis impulsos.

— Lo-lo voy a matar — dije intentando respirar con tranquilidad

Estuve un buen rato, pensando en qué haría para impedir esa cita, no podía pasar, era peligroso, Hoseok no podía quitarme lo que es mío, nadie puede.

Iba a salir del baño pero en ese preciso instante recibí un mensaje, saqué mi celular para ver de qué se trataba.

>> ¿Fuiste? << escribió ella

— Voy a acabar con todo aquel que intente quitarme lo que es mío — dije apagando mi celular, no le respondería — nadie puede alejarme de él — dije saliendo del baño

Estuve en mi clase, el profesor hablaba pero yo solo pensaba en una cosa, pensaba en las alternativas que tenía, y cual debería usar. Siempre tengo alternativas, más de una idea que usar, siempre me voy por la más fácil, en la que no tenga que usar la fuerza o algo así, una alternativa buena, sin daño.

— Alumnos terminó la clase, pueden irse — dijo el profesor saliendo

De inmediato agarré mis cosas, fui hasta la cafetería, esperando encontrar a Jungkook, pero no lo encontré ahí. Fui hasta la salida corriendo, viendo a lo lejos como Jungkook se iba con él, con Hoseok. Cuando los vi irse juntos supe que alternativa usar, esto no se solucionaría simplemente asustando a Hoseok, no, esto debía de ser a las malas, con daños, debía de desaparecer a Hoseok. Debía de borrarlo de la faz de la tierra, de ese modo no se metería en mi perfecto amor, con Jungkook.