CAPÍTULO 19: UNA DUCHA FRÍA


No he podido evitarlo y he tenido que subir un capítulo extra jaja. La cosa se pone intensa,¡Las aventuras están a punto de comenzar! y las sorpresas....no os imagináis cuantas están a punto de venir. Espero que os guste este pequeño regalo de principio de vacaciones, espero vuestros preciosos comentarios^^

ADAM

Casi pierdo la poca de cordura cuando vi que ella no estaba por ningún lugar del apartamento. Le dije que no saliera, pero conociéndola y pensándolo bien, era algo normal que se pasara por las narices toda advertencia que le dijera.

Lo que sospechaba se confirmó por el testimonio de Daryl y Betty; los demonios la habían encontrado y querían llevársela para sus propios fines. Nadie sabía las razones por las que la buscaban; solamente su padre lo sabía y no nos había dicho nada por mucho que insistimos.

Quizás debía de hacerle una visita para saber más, aunque no podía hacer nada para leer su mente; solamente su ángel de la guarda podía y no sabía quién podía ser.

Además de que involucrar a otro ángel para un fin egoísta podía ser penalizado. Las leyes del reino de los ángeles me rompían las pelotas, pero no podía hacer nada ante mi naturaleza.

Pero Betty era más importante que cualquier ley del mundo humano o espiritual, por lo que debía de hablar con Daryl para planear nuestro siguiente movimiento. Era hora de hacerla dormir.

Betty seguía gritando desde que le dijimos que debíamos irnos de viaje por tiempo indefinido. No podíamos llevarnos a Colin por el momento porque sería exponerlo y poner a ambos en peligro. El plan era que yo solo me fuera con Betty a algún lugar que verificaran mis jefazos que era realmente seguro; esperaba que no tuviéramos que ir a "la morada", ¿Cómo iba a explicar que traía una humana al reino de los ángeles?, además que yo supiera aquel lugar nunca había pisado por otra cosa que no fuera ángeles o fantasmas.

- ¿¡Me podríais explicar qué demonios era eso con lo que me he topado!?-Gritaba Betty sin control mientras que Daryl y yo la mirábamos pacientemente a que descargara su ira. No pude evitar sonreír ligeramente.

-Tú misma lo dijiste; te topaste con un demonio.

Betty emitió un grito ahogado poniéndose completamente pálida. Sus nervios no amainaron precisamente por lo que me vi obligado a acercarme y tocar su frente.

-Duerme-Le ordené cayendo desplomada en mis brazos. Debíamos de hablar Daryl y yo y con Betty a nuestro alrededor con un ataque de histeria no iba a ayudar demasiado. La llevé a la cama ante la atenta mirada de Daryl que no me quitaba ojo de encima. No pude evitar gruñirle:

- ¿Acaso vas a seguirme a todos lados? ¿No tienes otra cosa mejor que hacer?

-Vigilo que no pongas un dedo sobre ella, eso es lo mejor que puedo hacer para evitar problemas mayores de los que ya tenemos-Dijo con los brazos cruzados en el umbral de la puerta del dormitorio de Betty.

-Me cae mejor tu hermano; tú eres un jodido grano en el culo.

-Que seamos gemelos no significa que compartamos los mismos valores y pensamientos-Dijo entornando los ojos molesto. No es que fuéramos compatibles, pero no iba a casarme con ese imbécil así que lo mejor era intentar que las cosas fueran lo más suaves posible.

Ambos caminamos hasta el comedor donde nos sentamos en compañía de Sugar. La tensión podía cortarse con un cuchillo y hacerte un sándwich con ello. Esperaba pacientemente que Daryl dijese algo, pero, por la mirada que me estaba echando, esperaba que comenzase yo.

-Bien, ¿Ahora que se supone que hacemos?

-Dime qué es lo que tienes pensado, intuyo que tienes una idea rondando por tu mente-Dijo.

-Bueno digamos que lo mejor que podemos hacer sería que tú te quedaras con Colin para protegerlo y yo me marcho con Betty a un lugar seguro verificado por nuestros jefazos. Allí permaneceremos hasta que averigüemos más sobre las razones que han llevado a los demonios a ir a por ella y para eso creo que debería de interrogar a su padre.

Daryl no parecía demasiado contento con mi plan, pero no teníamos opción y él mismo lo sabía.. Por mucho que se negase a ello solo podríamos conseguir que dieran con ella y que probablemente la mataran.

-Sé que no tenemos opción, pero hay algo que no me convence y eso es precisamente tú. Ya caíste una vez y dudo que no vuelvas a caer ante una mujer y eso precisamente es lo que menos necesitamos. No sabemos si el castigo sería tan benevolente convirtiéndote en ser humano, probablemente el castigo sería mucho peor que eso.

Suspiré ante el punto de vista de Daryl. Bien era cierto que esa mujer me atraía, pero no iba a arriesgarme porque tenía mucho que perder, como por ejemplo mi vida. Debía de mantenerme lo más alejado de ella posible y para ello lo mejor era no inmiscuirme mucho con ella en temas personales además de ser un borde de cuidado. Y por supuesto, evitar verla desnuda o en ropa interior. Sí, eso ayudaría mucho.

-Sé que mi expediente no es precisamente ejemplar pero no volveré a arriesgarme. Debo de llevármela a un lugar seguro y lo sabes bien.

-Lo único que sé es que el único lugar seguro que existe es "la morada" y ese lugar es un lugar sagrado, solo los fantasmas y los ángeles tienen acceso a ello, ¿Cómo vas a convencer a nuestros jefazos de que dejen pasar a una simple humana? Ten en cuenta que eso supondría una gran tentación para nosotros ya que en la morada no hay mujeres. Si la llevas allí, imagínate lo que podías provocar-Dijo Daryl llevándose las manos a la cabeza. Bien era cierto que podía provocar un cataclismo, pero muchos de esos ángeles por no decir la mayoría, tenían asignados a humanas así que se suponía que estarían acostumbrados. Tras mencionárselo a Daryl, se llevó la palma a la frente visiblemente molesto:

- ¿Acaso no estás atento cuando te hablan?¡Ya dijeron los jefazos que hace muchos años en "la morada" solamente viven los ángeles que no han sido asignados a nadie!

-Joder Daryl llevo mucho tiempo en la tierra, ni siquiera sé el jodido aspecto que tiene ahora "la morada".

Si seguíamos así probablemente nos arrancaríamos la cabeza antes de siquiera hacer las maletas. Era cierto que hacía muchos años que no pisaba ese lugar, en concreto 60 años. Admitía que tenía mis reservas para volver porque me sentía extranjero de mi propia tierra, pero debía de hacerlo porque era mi trabajo.

Daryl finalmente se levantó y me dijo resignado:

-Yo seré el que hable con nuestros superiores para pedir permiso porque si lo haces tú, dudo mucho que te lo den y esa humana no tiene la culpa de tu incompetencia. Hasta el momento, haz el favor de controlarla para que no se escape y guarda las apariencias para que su hermano no se vuelva loco viendo levitar las sillas de la cocina.

Le gruñí en respuesta a su comentario mandón y él se marchó dejándome solo. Sugar me miraba fijamente como si esperara que hablase con él y le prometiese que trataría bien a su dueña. Era extraño pero ese gato tenía algo que era realmente único, tan diferente de cualquier gato que hubiera visto. Su forma de mirar era ciertamente enigmática pero quizás me lo estaba imaginando todo.

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