Cada flor de cerezo me recuerda a ti.

A tu sonrisa cada mañana, tus labios de un color similar a la flor que ahora miro caer de lo alto del árbol.

Recuerdo cómo nos amábamos. Ahora odio estar separados.

Cada primavera me recuerda a ti.

Recuerdo tus zapatos blancos con flores dibujadas, amabas las flores. 

Yo te amaba a ti.

Te extraño.

Sé que no es tu culpa el no estar aquí; sé que debo dejarte ir para que seas feliz donde sea que estés ahora y así poder seguir con mi vida pero es difícil.

Estoy mirando ese árbol de cerezo que tanto te gustaba con esos zapatos que pintaste  colgados en una de esas ramas. Los colgué para que puedas sentir las flores en tus pies cada que caiga uno dentro de él.

Esas flores me recuerdan a ti.

Un 16 de abril te fuiste. Te hundiste en el agua con tus sueños y esperanzas colgando de ese lazo amarillo que rodeaba tu cabello húmedo por la desesperación mezclada con el agua fría de ese día.

Las flores en mis manos me recuerdan que estarás en mi mente de ahora en adelante como aquella primavera que te conocí y que ese día en el que te fuiste quedará colgados en esos zapatos viejos.

Vendré cada primavera a verte aquí en este árbol porque lamentablemente no sé dónde estás físicamente.

En que parte de ese lugar profundo estarás? No lo sé pero lo que sé es que podré sentirte al ver las flores caer en un día de primavera.

Att: Park Jimin.

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16 de abril del 2014 (Corea): El hundimiento del Ferry Sewol 

att: Palmora