Treinta y uno.

Tae estaba sentado en la cama con su teléfono mientras yo estaba frente al escritorio, maquillándome. Yuto y yo teníamos una entrevista en un programa, el cual saldría luego del estreno del vídeo.

Ya había desayunado junto a Woon y Tae, la noche anterior vimos una película pero me dormí aunque él no se aprovechó de esto, durmió en el sillón, sería así mientras estuviésemos aquí.

Me estaba arreglando por mi cuenta, a veces me gustaba hacerlo yo, aún si tuviera estilistas y maquilladoras.

–La chica del staff... ya no trabaja con nosotros –habló y yo lo miré a través del espejo–, la pusieron en otra área.

–¿Tú hiciste que la cambiaran?

No creía que él hubiese contado lo que pasó a nadie.

–No, fue casualidad. –Parecía algo avergonzado al decir todo aquello.

Terminé de aplicar el labial y me levanté de la silla para mirarlo.

–Si se entera Bang o los chicos te matan, es novata y puede que no le importe decirlo ya que besó a una superestrella –sonreí falsamente– el sueño de su vida.

–Por lo mismo es novata, está empezando en esto, no puede destruir su carrera por eso. No creo que lo diga, también tiene un contrato de confidencialidad.

–¿Lo del beso también entra en eso? –Inquirí, a propósito.

–Pensé que me habías perdonado. –Reclamó.

Tomé una de las almohadas y lo golpeé, haciendo que quedara acostado en la cama, cubriendo su cara mientras chillaba.

–¿Es que como se te ocurre besarla donde cualquiera pudo verlos? –le di otro almohadazo y Tae se volvió a quejar aún tapándose con los brazos– ¿Eres tarado o qué?

–¡Yoonie! ¡No me mates! –Solté una carcajada a causa de sus gritos dramáticos.

–Si eres tarado. –Volví a alzar la almohada para pegarle de nuevo, pero me la quitó de un solo movimiento haciendo que perdiera el equilibrio y cayera sobre él.

Quedé con los brazos extendidos a los lados de su cabeza, su cabello estaba todo desordenado y fue como si hubiese quedado en un trance al estar tan cerca. Sentí sus manos en mi espalda, sus ojos brillaban sin despegarse de los míos pero luego bajaron a mis labios.

Unos toques en la puerta, me hicieron volver a la realidad y caer en cuenta de que era lo que estaba haciendo. Me quité de encima de Tae inmediatamente, poniéndome de pie al mismo tiempo que él se sentaba de nuevo. Acomodé mi cabello en un gesto nervioso, y le di una última mirada antes de ir hasta la puerta, él tenía una sonrisa en su rostro. Y yo me reproché mentalmente por lo que estuvo a punto de pasar de no ser por Woon. Que incómodo.

Woon me informó que ya debíamos irnos, recogí mis cosas y los tres salimos hacia el estacionamiento, Tae y yo actuábamos como si nada y era mejor así.

Algunas personas se encontraban fuera del hotel aunque había mucha seguridad, se emocionaron cuando vieron las camionetas salir y sonreí deseando poder saludarlos de cerca a todos.






El set de grabación era muy lindo y grande, eran tres conductores, dos hombres y una mujer. Yuto estuvo solo con ellos primero y luego entré yo, me recibieron de forma muy amable. Charlamos entre bromas y a causa de su amabilidad al decir que mi japonés no era malo, no me dio tanta vergüenza hablarlo, aunque algunas cosas las decía en coreano porque olvidaba las palabras. Me hicieron algunas preguntas, también hablamos de como fue trabajar juntos.

–Yuto quiso tener un detalle contigo –habló la mujer y yo me sorprendí mirando al chico quien sonrió algo apenado– tráiganlo, por favor. –Pidió. Uno de los productores entró con una gran caja y un moño verde arriba, lo dejó en la mesa delante de mi.

–Puedes abrirlo, Sky. –Dijo, otro de los conductores.

Abrí la caja, encontrándome con un hoodie negro con el logo del tour de Yuto, en rojo, lo saqué mostrándolo a la cámara y me di cuenta que en la caja habían un montón de dulces y chucherías japoneses, obviamente. Había hecho lo mismo que yo el día anterior, yo también tuve un detalle con él aunque no me esperaba obtener algo de vuelta.

–Muchas gracias, Yuto –sonreí– me lo pondré ahora mismo. –Dije emocionada, y ellos rieron a causa de esto. Me puse de pie, poniéndome el hoodie. Di la vuelta, dando una vista completa de la prenda, en cuanto noté que una de las cámaras me enfocaba.

El programa duró unos minutos más hasta que nos despedimos, nos tomamos fotos los conductores, Yuto y yo.

La caja con mis dulces la llevaba una persona de producción para entregársela a Woon pero yo lo detuve, pidiendo que me la diera y que no se molestara. Llegué con Woon y Tae, le di la caja a éste, quien alzó una ceja confundido.

–¿No tienes problema en llevarla, no? –Sonreí con inocencia. Woon se echó a reír divertido, pero dejó que él la llevara.

Taehyung quién estuvo serio todo el rato, no puso objeción y comenzó a caminar delante de nosotros con la caja en brazos.

Con ciertas actitudes que él tenía a veces, me confundía, llegaba a pensar que le atacaban los celos pero viendo sus acciones anteriores lo descartaba.










Estaba en la casa de los chicos, quienes estaban grabando un episodio de Run BTS!, yo estaba junto al equipo, detrás de cámara, y no había parado de reír viéndolos. Hace unos días que habíamos llegado a Corea, el resto de nuestra estadía en Japón di un par de entrevistas más, Tae y yo fuimos de compras y de resto nos mantuvimos en el hotel. Ahora que estábamos aquí, nos concentrábamos en nuestros asuntos.

El director indicó que harían una pausa para comer. Todos comenzaron a gritar que se morían de hambre, a excepción de Yoongi que decía que tenía sueño.

Busqué mi teléfono y me conseguí con un mensaje de Woon diciendo que ya había sido publicado el vídeo de Yuto, había pasado veinte minutos del mensaje. No dudé entrar en YouTube para verlo, salí hasta el jardín sentándome en una de las sillas junto a la piscina. El trabajo de edición fue increíble, todo quedó muy bien.

Dudé en si pulsar en los comentarios, pero lo hice de todas formas, aunque me arrepentí de inmediato aún así no pude parar de leer. Habían muchos elogios hacia Yuto y hacia mi, pero también ataques directamente para mí; criticando mi imagen, mi baile y lo que más resaltaba era el hecho de que hablaban sobre si Tae estaría feliz o no con mi trabajo. Se estaban centrando en que si fue apropiado que yo trabajara con otro artista –hombre– de la manera en que lo hice. Me parecía absurdo, y la mayoría de las personas que hacían los malos comentarios eran coreanos.

No sólo tenía que soportar el machismo en la industria, sino que la sociedad en sí lo era, y mucho, las mujeres del medio siempre eran desprestigiadas por su trabajo o por cualquier cosa que hacían, a diferencia de los hombres. En este tiempo yo he sido la que ha recibido muchas más críticas que Taehyung y no era justo, además me parecía muy hipócrita de parte de esas personas.

Ni siquiera noté que las lágrimas ya estaban presentes en mis mejillas, cuando sentí la presencia de alguien a mi lado. Era Jungkook, quien me miraba con mucha preocupación.

–¿Qué pasa, noona?

–¿Taehyung hizo algo? –Ese fue Yoongi, venía caminando hacia nosotros, no pasé por alto su tono de voz severo, como si esperara mi respuesta afirmativa para ir a golpearlo.

–Nada de eso –sorbí por la nariz, secándome las lágrimas aunque ya no tenía caso si ya me habían visto– ¿Saben que fui a Japón, no?

–Si, que Tae viajó a verte también –comentó, Yoongi– por cierto, ¿cómo fue que lo perdonaste?

–Me abrazó por las rodillas, luego me inmovilizó en el suelo hasta que soltó todo lo que tenía para decirme y volvió a pedir disculpas.

–¿En serio? –Jungkook parecía muy sorprendido al igual que Yoongi.

–Ese chico si que es peculiar.

–No es la primera vez que hace algo así. –Me encogí de hombros.

–Bueno... ¿y que es lo que pasó? ¿Por qué llorabas? –Jungkook, preguntó con cautela.

–Yo trabajé en el vídeo de otro artista y acaba de salir, pero las críticas hacia mí no dejan de llover, de como me veo, de que fue inapropiado que trabajara con otro hombre porque tengo novio y muchas cosas más. –Suspiré, jugando con mi teléfono.

–Yoonie, las críticas siempre van a existir y te aseguro que la mayoría de esas personas no tienen ni la mitad del talento que tú tienes. –Dijo, Yoongi.

–Y con respecto a si fue inapropiado, no lo he visto pero no creo que haya sido así –agregó, Jungkook– como dice hyung, las personas siempre van a hablar y siempre les va a parecer que algo es incorrecto pero es sólo su percepción, no debes preocuparte por eso. –Agradecí que intentaran animarme.

–¿Podemos ver? –Cuestionó, Yoongi.

Asentí dudosa.

Desbloqueé mi teléfono y se lo di a Jungkook quien estaba a mi lado, Yoongi se situó detrás de él para ver. Al cabo de unos minutos el vídeo fue repetido al menos cinco veces porque los chicos fueron saliendo y se interesaron por lo que estábamos haciendo, no dejaron de halagarme mientras lo veían, me sentí algo avergonzada. Tae se dio cuenta que yo no estaba muy animada porque me echaba vistazos de vez en cuando.

Luego de un rato ellos fueron entrando a la casa sin dejar de decirme lo bien que me veía en el vídeo y lo bien que había bailado, lo cual les agradecí. Tae se quedó conmigo y yo me mantuve en silencio, abrazando una de mis piernas y apoyando el mentón en mi rodilla.

–El vídeo es genial –comentó–, tu y Yuto se ven bien.

Lo miré, y sonreí desganada.

–Mucha gente está ofendida por ti, ya que eres mi novio. –Bufé.

–No les prestes atención.

–A ti tampoco te agradó, ¿no lo recuerdas?

–En ese momento no pensé las cosas bien ¿si? Hiciste un excelente trabajo, no hay nada de inapropiado en el vídeo en realidad, y si hay personas que piensan así entonces que se vayan a la m... –Lo interrumpí al abrazarlo repentinamente, apoyando mi cabeza contra su pecho, él comenzó a acariciarme el cabello– no pienses en eso porque no hiciste nada malo, ellos son los que están mal.

–Gracias. –Murmuré, algo conmovida, por lo que mi voz se quebró a causa de las nuevas lágrimas. Tae se dio cuenta y me abrazó fuerte.












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^^

Espero les haya gustado, gracias por leer💜

Recuerden que tengo una nueva historia de Yoongi (Reformed) Pasen a darle amorsh💕

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