Sin Dazai una vez más, Atsushi se puso sus botas nuevas, camino un poco en la habitación – si son... muy suaves – dijo alegre. Tomo su mascara y volvió a salir por la escalera de emergencia, fue al casino una vez más, ya habían levantado todo, y la zona solo estaba resguardada pues las paredes habían quedado débiles por las explosiones, Atsushi fue a la oficina del director, allí, encontró una mochila, la noto sin dudarlo y fue al camerino. Abrió los cofres de ropa encontrando un pantalón y una camisa de su talla, lo tomo y guardo. En el suelo, busco el escondite de Bill. Rasco el piso y allí había un hueco con maquillaje, tela y, si, un par de pasadores, Atsushi sonrió. Guardo aquello en la mochila.

Fue hasta las fuentes del Bellagio, allí dejo los pasadores caer y miro al cielo – viviré por ti Bill, por los dos... descansa en paz. – Atsushi se fue de allí antes de ser visto, paseo un rato, a decir verdad, nunca había salido a conocer las vegas, llevaba algo del dinero que robo, comió una hamburguesa, su primer a hamburguesa, estaba completamente feliz, bebió leche y comió dulces.

Estaba realmente feliz.

Por su lado, Dazai estaba en el jardín botánico de Bellagio, se había encontrado allí con un agente de estados unidos. – los mafiosos fueron capturados, pero hubo uno que se escapo

- ¿Quién?

- Lo conocen como The King of Sheep, registros dicen que es japones

- Maldición – se quejó y suspiro – fue un placer trabajar con tu división

- Al contrario, gracias a ti logramos debatir una trata de niños

- ¿Qué paso con los niños?

- Rescatamos a 4, serán adoptados por familias protegidas por el mismo gobierno

- ¿sabes sus nombres?

- Harper, James, Fanny y Bill

- ¿tenían listas o algo así?

- Si, sabemos que eran 16 niños, había unos favoritos que intentamos buscar, pero aún falta que encontremos dos

- ¿sabes quiénes son?

- ¿Por qué tanto interés?

- Solo por si puedo ayudar

- Bien, uno de ellos era conocido como Bunny, y el otro como Atsushi.

- Ya veo... les daré información que necesiten si llego a encontrar algo

- Gracias.

Dazai salió de allí suspirante, ahora dudaba si hablar de Atsushi o no, pero Oda seguía sin contestarle y su preocupación comenzaba a avanzar.

El día siguió avanzando y Dazai llego a su habitación de hotel sin excito de comunicarse con Oda, y Ango mucho menos, Kunikida fue el único que logro explicarle que Ango ya no tardaba en salir.

En la habitación, vio a Atsushi con la máscara y la sabana puesta, estaba molesto, no por Atsushi, si no que la máscara le hizo recordar a The King of Sheep, entonces vio la mochila - ¿Dónde conseguiste eso?

- Mis cosas

- ¿tus cosas? ¿fuiste a lo que queda del casino?

- Umh

- Eso es peligroso Atsushi-kun

- Mis cosas...

- Entiendo, entiendo. – suspiro – Odasaku sigue sin contestarme...

- ¿Odasaku? ¿su esposo?

- No – sonrió – es... es algo así como mi papá, es un hombre maravilloso, si decides venir conmigo, Odasaku nos cuidara a ti y a mi

- ¿no sabe cuidarse Dazai-san?

- Que chistosito eres Atsushi-kun

Atsushi noto la molestia del mayor, solo lo ignoro, no era como si no estuviera acostumbrado a aquello. Atsushi volvió a dormir en el suelo aquella noche, y el castaño estaba seguro de que el menor lo acompañaría por la mañana al aeropuerto secreto de la agencia.

Al día siguiente, Dazai tuvo una gran desilusión al ver que Atsushi no estaba, la sabana estaba doblada y su mochila había desaparecido. Suspiro agobiado, ahora no podía decirles a los agentes estado unidenses, salió de la habitación con sus cosas, entro a un auto con el que llego el día anterior, ajusto sus espejos y condujo hasta la estación secreta, donde saludo a la entrada, y dejo el auto, en su caminar había algo extraño, fue entonces cuando noto algo raro, miro alrededor y la seguridad había fallado, al parecer pues todo estaba muy silencioso, aunque acababa de verlos a todos hace unos segundos.

Saco rápidamente un arma de fuego y apunto a sus espaldas para encontrarse con la máscara de tigre de Atsushi, por un segundo pensó que era una traición y no fue así.

Aquel chico se quitó la máscara dejando a Dazai ver aquellos ojos peculiares, eran bicolores de colores morado y dorado, y el cabello mal cortado, llevaba aquellas botas negras – Dazai-san... ¿puedo ir con usted? – pregunto el chico y Dazai sonrió

- hiciste todo eso porque no querías ser visto ¿verdad? – pregunto y el chico negó con su cabeza, Dazai se agacho levemente y acaricio la cabeza del pequeño – vamos a casa, Atsushi-kun.

Dazai tomo su mano, Atsushi lo siguió, intentaba ponerse su mascara, pero Dazai se la quito, entonces se abrazó de su cuerpo para tapar su rostro, Dazai solo comenzó a reír.

El viaje duro 5 horas en el privado de la agencia, Atsushi miraba curioso el vuelo, las nubes, el océano debajo de ellos y si, también era curioso con Jane. Dazai no dudo en tomarle una fotografía y enviarla a Oda – estoy seguro de que lo amara... ¿Por qué aun no contesta? – se quejó.

- Jane, ¿Qué es eso? – preguntaba Atsushi

- Eso, Atsushi, es una corriente de aire

- Jane ¿podemos caernos con eso?

- Me temo que no Atsushi, estamos a salvo

Dazai reía solo de verlo, sus ojos brillaban, miro su celular, había una fotografía de Chuuya – sus ojos brillan como los tuyos amor, igual a estrellas en el firmamento...

Por otro lado, Ango estaba llegando a Yokohama, llamo al presidente de inmediato para saber de Sakunosuke, pero este dijo que no sabían nada de él. Todo el equipo se movilizo tras el mensaje de Ango con la última ubicación de Oda.

Quien lo encontró primero fue Ango, sus gritos podían escucharse por fuera del edificio, las unidades paramédicas llegaron al lugar, pero no había nada que hacer, solo levantar un cadáver... - Osamu – dijo Ango tomando a Kunikida - ¿Dónde está mi pequeño?

- Dazai no debe tardar en llegar, probablemente en la noche, pero ira directo con su esposo...

- Mi pequeño ¿Cómo le diré esto?

- General Ango... estaremos para apoyarlo...

- Todo el equipo

Ango limpio sus lágrimas – Iré... a recibir a Osamu.

- Lo acompañare – pidió Kunikida

Una vez en Japón, Atsushi no dejo que nadie se acercaba, usaba su mascara y se ocultaba en las piernas de Dazai, el castaño se preocupó de ver a Ango serio al llegar – Ango... ¿Qué ocurre?

- Hablaremos en un rato, ¿ese niño?

- Atsushi-kun, yo... lo traje conmigo, lo rescate – menciono – Como... mi pequeño

Ango no pudo evitar comenzar a llorar - ¡Ango! – grito Dazai preocupado. Atsushi se le acerco, pero Kunikida lo tomo. Atsushi se asustó de ello, había sido separado de Dazai.

- Osamu... Oda... - decía entre sollozos el azabache

- No... - sus lágrimas se acumularon - ¿Qué le paso a Odasaku?

- Fue una oveja, el rey oveja – dijo Ango entre sollozos – el terror de la port mafia, la mano derecha del líder... El... Asesino a Oda

Dazai se quedó en seco, no emitió ningún sonido. No hasta que escucho el grito desgarrador de Atsushi alejándose de la gente, entonces reacciono. – De-Déjenlo – hablo, aunque si voz apenas salía. Trago saliva – A-Atsushi-kun – le llamo.

Atsushi corrió hacia él, lo abrazo y Dazai a él, Dazai siguió llorando, Ango lo abrazo y Atsushi pudo verlos a los dos, se unió en el abrazo sin decir nada más. Esa noche, Dazai le pidió a Ango cuidar de Atsushi, al parecer el menor había hecho conexión con el azabache, se quedó únicamente con Ango, los dos en el departamento.

Dazai fue a su hogar, allí vio a Chuuya – amor, ¿Qué sorpresa? No te esperaba y ¿ocurre algo?

- Chuuya... Hubo un accidente, y mi... Mi jefe murió

- Que terrible amor, - dijo para abrazarlo - ¿Qué paso? Habrá funeral ¿quieres ir?

- No... No lo sé, Chuuya... - lo abrazo con fuerza – no lo sé...

Dazai se quedó dormido entre los brazos de Chuuya aquella noche, y su esposo claro, no entendía por qué le había afectado tanto la muerte de su jefe, pues solo era su jefe.

Por otro lado, Atsushi acompañaba a Ango, el azabache estaba destrozado, no paraba de llorar y Atsushi se dedicaba a sostener su mano, sus lentes los había dejado de usar, no podía, y al final de la noche, el azabache se había dormido.

Atsushi miro el departamento, pudo ver la fotografía del azabache, un pelirrojo y Dazai – Imagino... que ese señor es Odasaku – dijo mirando la fotografía – se veían felices, una buena familia... - bajo su cabeza - ¿significa que ya no seré bien recibido?

La tragedia duro dos días, a mitad de semana, Ango y Atsushi estaban comiendo arroz, el azabache no tenía motivación para hacer mucho, pero la presencia del albino le ayudaba, no hablaban mucho entre ellos. – come todo tu arroz Atsushi

- S-si

- Ango

- ¿sí?

- ¿era una buena familia?

- Lo somos ¿Por qué?

- Dazai-san, dijo que, si quería unirme a una buena familia, pero... ustedes ya no son una familia ¿no?

Ango se sorprendió y le sonrió – somos una buena familia, y será mejor contigo aquí

- ¿está seguro?

- Absolutamente, te quiero a mi lado siempre – añadió tomando su mejilla cálidamente – por favor, nunca me dejes

- No, no lo hare

Dazai llego ese día, por la noche, su rostro no se veía tan sonriente, pero seguía intacto – Atsushi-kun, - le llamo y el albino lo miro – vamos a tu nuevo trabajo

- S-si

- Ango ¿vienes?

- Me quedare un rato, tengo un tiempo sin estar a solas en casa

Atsushi se sentó - ¿Qué haces? – le pregunto Dazai

- Le prometí quedarme a su lado siempre

Ambos mayores rieron y sonrieron, abrazaron a Atsushi, definitivamente el menor llego para levantarlos a ambos – iré en un rato – dijo Ango, - ve con Osamu

- S-si

En la base de la agencia, querían acercarse al menor, y este solamente no lo permitía, tenían problemas con el chico que no quería estar sin Dazai, corría por todo el lugar hasta que encontró a Dazai de nuevo, llego a abrazarlo – sé que estas asustado Atsushi-kun – dijo Dazai teniendo al menor oculto entre sus piernas y su saco – pero Kunikida-kun no es malo

- Solo quiero darle un baño a ese mocoso – se quejó el rubio

- Me ba-bañe la semana pasada que me trajeron – se quejó el albino

- Atsushi, tienes que bañarte a diario, Dazai no puede venir todo el tiempo a estar contigo

- Pero Da-Dazai-san...

- Esta bien Kunikida-kun, hablare con el

Kunikida se marchó, - hey pequeño, sabes que te necesito ¿verdad?

- S-si – dijo el albino – es que... Ku-Kunikida-san solo quiere quitarme la máscara y peinarme...

- Se que tu pasado estuvo lleno de cicatrices, Kunikida-kun sabe que muchos hombres te forzaron... Pero nosotros no estamos aquí para forzarte, mucho menos para tocarte o golpearte, confía en nosotros – dijo el castaño

- ¿Qué haría su esposo Dazai-san?

- ¿mi esposo? Bueno... mi esposo seguramente gritaría groserías a todos y vendría corriendo a mi – dijo sonriente – pero dime ¿Por qué preguntas por mi esposo?

- Qui-quiero ser como su esposo

- ¿Cómo mi esposo?

- S-sí, qui-quiero que alguien sonría al hablar de mi – dijo sonrojándose

- ¿eh?

- Es por eso... que confió en usted Dazai-san... porque... - dijo recordando la primera vez que el castaño hablo de su esposo – porque usted puede sonreír de verdad cuando habla de su esposo...

- Es así ¿quieres conocerlo?

- S-si quiero

- Bien, debes ser buen niño, bañarte a diario, comer y obedecer

- Si hago eso ¿podre conocerlo?

- Te llevare el siguiente fin de semana ¿bien?

- ¡Si!

Atsushi trago saliva y fue con Kunikida, el rubio lo esperaba y sonrió, fueron juntos al baño.

Dazai había ido a casa, Chuuya podía sentir la distancia entre ambos, no sabía que ocurría, pero sabía que algo grave había pasado con su esposo desde que su jefe murió. Chuuya se acercaba, pero Dazai lo rechazaba, y si lo aceptaba todo era simple.

En la mañana de la nueva semana, Chuuya decidió hacer el desayuno favorito de Dazai – amorcito

- Chuuya – le llamo y lo abrazo - ¿Qué preparaste?

- Tu favorito – sonrió – desayuna conmigo querido

- Si, claro – beso su cabeza – gracias, amor

Desayunaban juntos cuando el mayor lo miro – amor

- ¿sí?

- ¿quieres contarme que te pasa? – cuestiono.

Dazai quería contarle todo, quería compartir su pena, quería que Chuuya lo abrazara tan fuerte que lo hiciera olvidar todo, solo trago saliva, - no mi amor, estoy bien solo cansado, sin mi jefe hay mucho trabajo

- Comprendo...

Ese día, Dazai fue a ver a Atsushi, el pequeño platicaba con Lucy, una miembro del sistema operativo. Parecía que se había integrado bien, lo miraba desde lejos cuando llego Ango y el menor salto hacia el azabache, ambos parecían llevarlo bien juntos. – hiciste bien – hablo Fukuzawa a su espalda y asustándolo.

- Señor

- Si no hubieses traído a ese chico, tu y Ango estarían acabados – menciono – hiciste bien

- Gracias, señor

- Dazai

- ¿sí?

- Estoy pensando en dedicarte la investigación de Oda Sakunosuke, la investigación de The King of Sheep y el líder de la mafia

- Lo hare

- Pero, quiero saber si estarás bien con ello, estoy seguro de que serias el único en encontrarlos, pero temo que su vista se nuble por la venganza

- Jefe, le aseguro que estaré bien, cuidare de Atsushi-kun, será mi asistente y juntos destruiremos a la mafia

- Bien, entonces quedas a cargo de la investigación

- Será un honor darle honor a Odasaku, gracias, señor

Esa tarde, Dazai, Ango y Atsushi salieron a conocer la ciudad, Atsushi jugaba por los jardines y Ango sonreía de verlo – Ango

- ¿sí?

- Se me asigno la investigación de Odasaku

- ¿lo harás?

- Si, acepte.

Ango suspiro – no descuides a Atsushi, ni a tu esposo

- No lo hare, hare lo mejor de mi

- Tu esposo ¿Qué dice de todo esto?

- Está preocupado, pero... No puedo decirle la verdad

Tomo el hombro de Dazai – ¿se lo presentaras a tu esposo?

- ¿Atsushi-kun? – miro a Ango – por el momento no, si se lo llevo a Chuuya, Atsushi-kun podría hablar de más y presento que justo ahora, tú lo necesitas más...

- Gracias por eso, pero déjalo que lo conozca, que lo vea de vez en cuando

- Lo pensare Ango

Atsushi rodaba por el pasto, los mayores comenzaron a reír de verlo jugando. Terminaron yendo con él, compraron unos helados y crepas, para Atsushi fue el mejor día de su vida.

Por otro lado, Chuuya se encaminaba a las oficinas de su jefe, allí, con su mascara de The King of Sheep fue acompañado por Akutagawa, llegaron y se arrodillaron ante el jefe. Había dos personas más, una pelirroja alta y un hombre mayor de cabello canoso, Ozaki y Hirotsu. – levántate – dijo Mori sonriente – The King of Sheep tu lealtad incluso en tus peores momentos me han demostrado tanto. Frente a mis dos mayores consejeros y amigos. Es un gran placer para mi colocarte como mi mano derecha

- Sera todo un honor, boss

- Lleva el nombre de la Port Mafia a lo alto

- Si, boss

Tuvieron una pequeña fiesta de celebración - Akutagawa – le llamo Mori

- ¿si jefe?

- Quiero que aprendas todo de Chuuya, estoy seguro de que los dos están destinados a ser grandes

- Si jefe, hare todo de mi por ser parte de los mejores

- Eso quería escuchar, y ¿Qué tal con esa empresa que te heredaron?

- Parece que todo marcha bien, Hirotsu-san ha sido de gran ayuda a explicarme y ayudarme

- ¿es cierto?

- Jefe, Akutagawa tiene potencial de pasar como un ciudadano bueno para la sociedad y servir para el lavado de dinero, es perfecto

- No se diga más, Akutagawa, te quiero en las calles, en tu café y llevando una vida normal; con el sistema de máscaras es más sencillo ocultarse

- No olvide los guantes – sonrió Chuuya

- Los adoro chicos – dijo Mori alegre – La Port Mafia dominara todo Yokohama

La mafia seguía celebrando su gran estrategia iría en ascenso

3 años después, el cumpleaños de Atsushi se acercaba, estaba en el departamento con Ango – Ango... abu Ango – se quejo

- ¿Qué pasa pequeño?

- Quiero conocer a Chuuya ¿Qué más debo hacer? – se quejó aburrido – Ya soy cinta negra en karate, soy el mejor en clases de calistenia, tengo promedio de 10, se cocinar, limpiar, incluso me se los artículos básicos del derecho penal para discutirlos con él.

- Oh pequeño... Esa decisión es de tu papi

- No es mi papi – se quejó de nuevo

- Si no es así, yo no soy tu abuelo

Atsushi corrió frente a Ango para abrazarlo – jamás, eres el mejor abuelo de todos

- ¿y Oda?

- ¡ODASAKU ES EL SEGUNDO MEJOR ABUELO! – grito abrazándolo mas

Ango comenzó a reír, entonces el teléfono sonó. Atsushi se sentó a leer un libro, Ango se sorprendió de lo que escucho y miro a Atsushi. Colgó y suspiro – Atsushi... debemos hablar

- ¿Qué pasa abu Ango?

- Creo que hay una forma de ayudarte a tener a Chuuya

- Te escucho abu

Unos días después, el cumpleaños de Atsushi llego, todos celebraban alegres, la agencia amaba a Atsushi, era el miembro más pequeño y sin dudar el más consentido. Dazai miro al menor sonriente, no podía creer que ya habían pasado tres años - Dazai-san, Dazai-san – le llamo el menor

- Dime Atsushi-kun

- ¿Cuándo conoceré a su esposo?

- Cierto... han pasado tres años desde eso ¿no? – suspiro – lo siento Atsushi-kun, aun no logro cumplir mi promesa

- Dazai-san quiero ir a la escuela – dijo el albino ligeramente sonrojado pero decidido

- ¿escuela?

- S-si porque quiero ser el hijo de su esposo. Así como usted dijo hace tiempo

- Atsushi-kun que adorable, estoy seguro de que Chuuya te amara – acaricio su cabeza – bien, mañana dejaras las tutorías e iras a la escuela

- ¡Gra-Gracias!

La fiesta continúo molestando a Atsushi, el menor era tierno al final del día y todos adoraban jugar con él, por la noche, el castaño llevo al albino al departamento con Ango, este había pasado toda la mañana con el menor, entonces, el castaño lo miro – Ango... ¿Por qué empacas?

- Oh, si... Quería hablar contigo, pero, me sentía extraño

- ¿Qué ocurre?

- El gobierno me pidió ir a Tokio, parece que necesitan apoyo

- ¿te iras?

- Si, algo así, vendré cada que pueda

- ¿me dejaras solo con Atsushi-kun?

- Mi pequeño lo sabe

- ¿eh?

- Él dijo que si yo me iba... ¿Qué haría? Y le dije que podía ir a la escuela a distraerse

Dazai se sorprendió, sus lágrimas se acumularon – se ha vuelto un niño muy responsable

Ango limpio sus lágrimas – tranquilo Osamu, vendré a verlos cada que pueda, necesito esto, distraerme y no depender de Atsushi, preséntale a Chuuya, hazlo este año

- Te quiero Ango... Hare las cosas bien...

- Te quiero Osamu

Se abrazaron, Atsushi se había despertado, pero siguió haciéndose el dormido.

Al día siguiente en casa, Chuuya lo esperaba – Chuuya, amor

- ¿Dónde carajos estabas?

- ¿eh?

- No llegaste a dormir Osamu

- Tra-trabajaba

- ¡¿estas engañándome?!

- No, Chuuya jamás

- No es la primera vez que no llegas por la noche, hueles a otro. Dime la verdad Osamu Dazai

- Chuuya no

- Maldito...

La pelea continuo, Dazai no era cuidadoso con sus noches con Atsushi y menos con sus faltas en casa, Chuuya había comenzado a ser irracional y criticar todo, se sentía abandonado y peor aún, traicionado y Dazai no tenía como zafarse de sus sospechas.

Los días de trabajo eran igual, Atsushi daba aquella pisca de alegría que le hacía falta a la oficina, aunque también daba más trabajo cuando pedía ayuda con sus tareas. Dazai miraba al albino desde su oficina, Atsushi tenía un área cerca de su oficina, donde tenía hamaca y un futon, un escritorio y libros para sus estudios.

Dazai miro una fotografía en su celular donde aparecía Chuuya y suspiro – Espero que nuestros problemas se resuelvan pronto... – dijo mirando la fotografía de Chuuya y miro al albino – estoy seguro de que lo amaras... Tanto como él te ama sin siquiera conocerte... 

...

Y así queridos, queridas y querides, hemos terminado con el SPIN OFF de Mr&Mr Soukoku, dando entrada a los detalles mencionados que dieron de esta historia más de lo que desear e imaginar.

Espero lo disfrutaran mucho, la próxima semana les daré un par de extras de ambas historias.

¡Gracias por leer!