Tierra- 199999 (Mcu).

- ¿y bien? -pregunto Wade con impaciencia, al estar de vuelta en su departamento, aun medio destruido por las anteriores batallas, pero al menos la habitación seguía siendo lo suficientemente intima.

-no me preguntes, no lo sé-

-claro que si lo sabes, baby-lo abrazo por la espalda, volviendo a meter sus manos bajo su ropa, con sus palmas abarcando gran parte del pecho del castaño-linda ropa-lo halago, en especial por que era lo suficientemente holgada para poder maniobrar bajo esta-Dime, ¿tú crees que dure mucho puesta? -

Sonrió mientras comenzaba a besar sus labios, casi como suaves caricias, al final mordiendo su labio inferior.

-Eres una tentación-murmuro, chupando el cuello del menor con delicadeza, sonriendo ante el temblor del cuerpo del otro, un poco más fuerte que los anteriores.

Peter no dijo nada, pues no sabía cómo responder ante las palabras de Wade, además de que comenzaba a tener problemas con su respiración, demasiado concentrado en las caricias que su cuerpo recibía como para reaccionar.

-Mi arañita no ha dicho que no-celebró Deadpool, acercándose a su cuello, dejando besos para luego chupar débilmente, sin resistirse antes de hacer una marca cerca de su hombro-Toda tu piel es hermosa -

-W... Wade-lo llamo Peter, girando el rostro hacia el mercenario, mirando lo que hacía, para después terminar girándose para quedar frente a frente, titubeando un poco antes de decidirse por tentar el pecho de Wade.

Las caricias eran suaves, pero firmes, queriendo conocer más del cuerpo del otro, sentir su piel. Levanto la mirada con lentitud, con sus ojos chocolate topándose con los avellana de Deadpool.

El mayor le tomo del cuello para atraerlo y besarlo, volviéndolo desesperado e intenso, lamiendo la lengua del castaño mientras siente como se aferra a él, con un beso tan torpe y apasionado que los llenaba de placenteras corrientes por todo el cuerpo.

El mercenario apretó sus puños sobre la ropa del menor, consciente de que no podía ser un animal, al menos no en un tiempo. Bajo lentamente el ritmo, para que así pudiera seguirlo, comenzando a quitar su sudadera, con sus manos colocándose en su abdomen.

Peter se estremeció apenas sintió las frías manos del mercenario contra su cálida piel, comenzando a jadear cuando ya no le alcanzo el aire, respirando agitado apenas Wade se separó un poco, dejándolo recuperar el aliento, pero sin perder tiempo para continuar besando su cuello, atrayéndolo de la cintura hasta llevarlo a la cama, donde tomo asiento, apretando los glúteos del castaño contra él para que se sentara sobre sus piernas.

- ¿necesitas ayuda? -le pregunto el mercenario al mirarlo tan concentrado en él-si quieres desvestirme, solo hazlo-le susurro, sonriendo al ver que ese simple gesto había provocado que el castaño se volviera a estremecer.

Se detuvo a ver sus expresiones, a escuchar sus gemidos mientras que Peter acercaba sus manos de forma lenta hacia él, como si aun dudara, apenas si levantando un poco la sudadera del mercenario mientras se subía sobre él, atragantándose con su propia saliva cuando tuvo su torso desnudo, apenas si dándose cuenta cuando termino de quitarle la prenda.

-pervertido, ya sé que estas viendo-le dijo Wade en cuanto noto como había desviado la vista hacia su entrepierna-soy tuyo, baby boy, saca tu paleta, te doy permiso de comerla-

-ya no digas esas cosas...-le pidió el chico, haciendo uso de toda su fuerza de voluntad para no desviar la mirada-no voy a comerme nada...-dijo con cierta convicción-...no sé hacerlo-murmuro, sin resistir más para bajar la mirada, con todo su esfuerzo echado por la borda al sonrojarse aun más, sin atreverse a continuar.

- ¿Qué dijiste, baby? -pregunto el mercenario, cambiando de lugar para poner a Peter debajo de su cuerpo, levantando más su playera, aun sin desvestirlo, lo que menos quería era asustarlo-no hacemos nada malo... y se siente muy bien ¿o no es así? -su erección dolía, pero no podía desesperarse.

Comenzó a dejar besos húmedos en su vientre, subiendo lentamente por uno de sus costados hasta llegar a su pezón, chupando con suavidad, relajándolo.

Supo que estaba funcionando cuando Peter termino por abrazarlo, deseando que continuara en su pecho, sin oponerse cuando Wade subió más su playera para quitársela, cambiando de pezón, subiendo un poco la intensidad, mordiéndolo y jalando con levemente.

-Wade...-

- ¿te gusta? –

-Si...-respondió en un suspiro, dando un pequeño salto cuando la boca del otro comenzó a bajar, deteniéndose en su ombligo, donde dio una pequeña mordida antes de volver a chupar, prestando atención a las reacciones del menor antes de bajar otro poco, presionando sus labios contra la tela del pantalón, donde el mini baby ya le esperaba despierto.

No tardo en comenzar a desabrocharle los pantalones, jalándolos con cierta urgencia, sin dejar de darle besos, todo con tal de seguir escuchando esos dulces gemidos que su novio empezaba a soltar sin tratar de evitarlo.

Su niño ya empezaba a buscar más contacto, lo supo desde el momento en que con esa extraordinaria fuerza que ocultaba tras sus delgados brazos, lo hizo acercarse más a él, exigiendo sus labios.

-baby boy...que así me excita y me la paras más...-se quejó, pues eso no lo estaba ayudando, comenzando a jalar sus propios pantalones mientras pensaba que hacerle al castaño para que grite que no sea tomarlo de forma salvaje.

Una sonrisa se dibujó en sus labios cuando noto como el cuerpo del castaño comenzó a retorcerse apenas presiono con fuerza su miembro por sobre la tela.

-Wa... ahh ¡ahh! Cielos... Mmahh-exclamo Peter, apretando sus parpados ante la forma que Wade lo había tomado, comenzando a gimotear.

-mi baby, pídeme que lo libere y obedeceré al instante, solo pídelo, que te saque de tu tortura-le ofreció el mercenario, lamiendo sus labios con antojo al solo pensar en metérselo a la boca, acercando más su rostro al de Peter, apenas si rozando su oreja para susurrar de forma sensual- ¿quieres que lo saque? -Comenzó a dejar pequeños besos, lamiendo encima de la tela de principio a fin, mordiendo suavemente toda su dura erección.

-Mmahh si...-

- ¿sí? –pregunto de nuevo el mercenario, sonriendo al verlo asentir frenéticamente-Como ordene mi baby-bajo de un tirón su bóxer, comenzando a besar la punta, jugando con él sin ningún tipo de pudor.

Peter termino por morder su mano vuelta un puño, mientras que con la otra cubría su cara.

-Aaahh... Aghh... Wade... Mmm-a cada gemido mordía más fuerte su mano, temblando aun más, en esos momentos ya estaba en un punto que no podía controlarse a si mismo.

Para Wade, sus temblores eran tan dulces, su voz tan sensual y caliente, provocándolo a más. Beso la punta de su miembro para luego engullir todo por completo y empezar a masturbarlo con su boca. Sus labios apretaban con fuerza, repitiéndolo con cierta malicia al descubrir como los gemidos de Peter se volvían más agudos.

Su nombre no dejaba de sonar en la habitación, la misma donde lo había hecho suyo por primera vez, un recuero que parecía tan lejano y casi como un sueño, no se comparaba en nada en ver ese cuerpo retorcerse, sin saber donde poner las manos o que hacer con su cuerpo general, con esas adorables mejillas rosadas que quería morder y chupar.

Lo ataco sin piedad, apretándolo más cuando a su boca llegaron las primeras gotas preseminales, sabiendo estaba cerca, que no podría resistirse por más que lo intentara, por lo que el mercenario embistió su propia boca sin detenerse, sosteniéndolo con fuerza de la cadera para que no se moviera.

- ¡Wade! -ya no pudo avisarle, dejándose venir con un fuerte estremecimiento, que hiso que sintiera como si la enorme presión que había sentido en su interior por fin explotaba, tratando de respirar de nuevo, completamente agitado.

- ¿Te ha gustado? -le pregunto Wade en un susurro, dejando lamidas por su vientre y pecho, tomando uno de sus pezones para mordisquearlo otro poco.

-ni siquiera deberías preguntarlo- le respondió, aun con la respiración entre cortada, para luego sonreír-pero... si me gustó mucho-

-y a mi me gusto aun más baby...-le aseguro el mercenario, levantándose para quitarle su peso de encima, mirando su entrepierna aun con su ropa interior puesta-no quiero llevarte al límite, aun eres un baby chiquito, pero si me ayudas con tu mano me encantaría-

Eso era justo lo que tanto había soñado ver en su baby, como por más que su carita decía que estaba siendo un pervertido, tenía en su mirada ese brillo de travesura, como si estuviera ansioso por hacerlo.

-creo que... puedo con eso, yo... Solo quiero que tú también lo disfrutes, tal como yo lo hice-trato de sonreír-realmente no forzarías demasiado mis limites-

- ¿Me estás diciendo que lo harías con tu boca? ¡oh! Uno de mis tantos sueños contigo hecho realidad, ahora sí podría llorar-dramatizo, celebrando con un candente beso, donde degusto los labios de Peter antes de separarse un poco, sonriendo- ¿quieres sacarlo tú? ¿o yo te presento a la que será tu paleta favorita? -

-No-se negó Peter, empujando a Wade de los hombros para poderse subir sobre él-si voy a hacerlo, será como yo quiera-le advirtió. Sabía que no era un experto en el tema, pero en verdad quería descubrirlo por su cuenta.

-Grrr baby, que atrevido-le dijo el mercenario, acostándose en la cama por completo, dejando sus manos tras su nuca-Puedes empezar con tus manos y acariciarlo, luego con tu boca usando tu lengua y labios, menos tus dientes a menos que te guste lo rudo, que, si es de ti, hasta latigazos me encantaría recibir-le propuso, en verdad emocionado por lo que haría Peter.

El castaño ya no respondió, ya sin levantar la mirada, solo mirando la tela sobre aquel bulto, acercando lentamente su mano, tratando de comenzar, con unas caricias bastante tímidas, a decir verdad.

Wade sonrió, al sentir un cosquilleo cuando la tela comenzó a bajar, dejando al descubierto su miembro, donde dos curiosas manos ya tomaban su erección, apretando sus labios cuando sintió un estimulante masaje en su punta, soltando un audible gemido cuando Peter presiono con más fuerza.

Eso pareció animar al castaño, quien se quedó un momento admirando la grande hombría de su novio antes de acercar lentamente su rostro, aun dudoso, tardando un poco en por fin decidir hacerlo. Saco su lengua para comenzar a lamerlo, apenas si una probada a su punta antes de volverlo su primer objetivo.

La textura era suave y se sentía caliente y palpitante, algo que pareció hacerse más notorio conforme más lo metía a su boca, con sus labios comenzando a rodearlo lentamente mientras sus manos se apoyaban a las piernas de Wade.

En ningún momento dejo de ser observado, con cada movimiento siendo seguido por el mercenario ¿quién le había enseñado a jugar? Era adorable como se esforzaba y como eso le funcionaba, haciéndole sacar un gruñido de placer.
-Ohh baby boy...-su boca era tan caliente, que tuvo que cerrar los ojos para sentir más-Mmm si... Más Pet-

No había parado de sentir corrientes por todo el cuerpo, provocados al ver la inocencia con que lo hace, Wade sabía que era un pedófilo sin remedio, pero lo peor era que no se arrepentía.

Comenzó a temblar un poco más, terminando por aferrarse al cabello de Peter al necesitar más de esa adorable boca que lo tenía por completo rodeado, volviéndolo loco con esa sensual tortura, dónde sus dulces labios le apretaban y aprisionaban, teniendo que controlarse para no comenzar a embestir su boca también.

Eso comenzaba a gustarle a Peter, que jamás había sentido esa clase de poder sobre alguien, como el era quien podía hacer que gimiera más fuerte o se estremeciera, hacer que exclamara su nombre, estaba ansioso por aprender a controlar bien ese poder, que fuera él (y no Parker) quien hiciera gritar a su Wade de placer.