10. RAZONES PARA NO ACERCARME A PETER PARKER.
Tierra- Reverse.
Wade caminaba con lentitud dentro del edificio donde vivía, pero estaba pasando algo muy extraño.
Las luces estaban por completo apagadas y se escuchaban murmullos en los pasillos, al parecer todos estaban fuera de sus apartamentos.
La mayoría de ellos eran de algunas suposiciones del por qué el corte de luz.
Con un poco de desconfianza, cubrió más su rostro con el gorro de su sudadera, sosteniendo fuertemente entre sus manos un dispositivo circular que había tenido la precaución de llevar consigo.
Era un inductor de imágenes holográficas que le permitía cambiar su forma física cuando el quisiera. No solía usarlo mucho, pero había decidido cargarlo desde que había crecido la posibilidad de que volviera a cruzarse con el chico universitario que tenía de vecino.
Quería alejarse de él, pero por alguna razón, le preocupaba mucho la imagen que ese chico pudiera tener de él y no quería que pensara que era grosero.
Sin embargo, no se lo encontró por el pasillo, llego a suponer que tal vez ya estaba dormido, aunque lo dudaba, como universitario, era posible que quemarse las pestañas fuera parte de su rutina diaría, pero no entendía por que los demás estaban despiertos también como para preocuparse por que se haya ido la luz.
Casi suspiro de alivio al verse tan cerca de su apartamento, girándose momentáneamente para asegurarse que el chico no estuviera fuera, sin embargo, al volver a dirigir su vista al frente, solo sintió como alguien chocaba con su pecho, derribándolo debido a que Deadpool casi iba corriendo a su departamento, nervioso al pasar frente la puerta de Peter.
-¡L....Lo siento! ¿estás bien?-le pregunto al chico al reconocerlo en el suelo a pesar de la poca luz que había.
~¡Tu cara, idiota! ¡tu cara!~
Lleno de pánico, Wade activo el inductor de imágenes, justo antes de que Peter levantara la vista apenas se puso de pie.
-tranquilo, estoy bien, no debí salir así...-parecía nervioso, pero Wade apenas lo noto al estarlo aún más, solo atinando a negar cuando el castaño le pregunto si sabía algo de la falta de luz.
-tal vez fue por la explosión-murmuro el chico, recordando la batalla de hace unos minutos.
-es lo que he oído-
- ¿cómo? -pregunto el chico con sorpresa y miedo, haciendo que la boca del mercenario se tensara al no esperar esa reacción.
<Lo vas a arruinar, mejor no hables>
-s..sí bueno, es lo que he escuchado, del accidente... con el generador...-la voz de Wade cada vez se escuchaba menos, bajando un poco la mirada, sin notar el aire que Peter dejo salir, estando más aliviado.
Por un momento llego a temer que sospechara algo de su doble vida.
Se quedaron en silencio por algunos segundos, pues el mercenario no sabía cómo terminar la conversación, o en su defecto, continuarla.
Tal vez se viera diferente y pudiera considerársele incluso atractivo. Tenía un corto cabello rubio oscuro y podría incluso decirse que aquella débil cicatriz por su labio lo hacía ver más sexy.
Pero él sabía que esa no era su verdadera apariencia, su verdadero rostro. Y se sentía igual de incomodo que si estuviera mostrando su rostro lleno de cicatrices, salvo por que esa vez no había miradas de asco.
<Dile que es muy sexy>
~No, no, dile que es lindo~
<Róbale un beso, total, están en lo oscurito, podrías hasta meter mano>
- Parece que no volverá pronto la luz, será mejor que vaya a comprar un par de velas, debía comprarlas desde hace mucho pero siempre terminaba posponiéndolo-agrego el castaño, resolviendo el problema del contrario al despedirse-nos vemos después Wade.
<¿Salir?>
~¿a estas horas? Podrían asaltarlo, secuestrarlo o... ¡peor aún! ¡VIOLARLO!~
-te acompaño-le dijo el mercenario casi de inmediato, llenándose de miedo al solo contemplar aquellas posibilidades que sus voces le habían metido en la cabeza.
-¿en serio?-le pregunto el chico al verlo caminar a su lado.
-sí, yo... no tengo nada que hacer y...-
-vale, y esta oscuro y es muy peligroso para un niño salir-lo interrumpió Peter, sabiendo a donde se dirigía.
-no, bueno si, pero no quise decir eso...exactamente-
~Ya metiste la pata~
<Te lo dije>
-¿entonces si me estás diciendo niño?-
-¡no! No, lo siento, acabo de gritar-las mejillas del mercenario terminaron por encenderse, en verdad apenado por no poder controlar lo que salía de su boca, levantando la mirada al oir el más hermoso sonido que había escuchado en su vida, esa suave risa que salía de la boca del chico, tan encantadora.
-eres muy gracioso, Wade-Peter no había logrado aguantarse la risa al verlo actuar así, tal vez estaba siendo un poco malo con él al hablarle de ese modo.
~Esa risa...~
<¡Bien hecho, Wade!>
~¡Eres el mejor!~
-¿Ah?-fue todo lo que pudo decir el mercenario ante lo que decían sus voces. Por una vez... por primera vez, de hecho, no le insultaban o molestaban, sino que le animaban.
-si, en serio, eres muy gracioso-le respondió el castaño al creer que le había preguntado a él.
-gracias, tú... tu sonrisa tiene un lindo tú, digo q..que tú t..tienes una linda sonrisa-se corrigió de inmediato, casi queriendo que se lo tragara la tierra ¿Por qué no podía hablar como la gente normal? ¡Parecía un retrasado!
-gracias-le dijo Peter, regalándole una sonrisa ante aquel halago, mirándolo un poco extrañado por el mismo.
Caminaron en silencio un par de pasos, acercándose cada vez más a la tienda, con el mercenario apenas si atreviéndose a levantar la vista del suelo para mirarlo.
No quería que el chico volteara al mismo tiempo que él y que pareciera un tarado ante las idioteces que haría al tratar de disimular su interés.
~Pregúntale algo, no te quedes callado~
<¡Yo tengo una! Pregúntale ¿tienes novia? ¿novio? ¿pareja? ¿no? Entonces ¿quieres ser mi novio?>
-y... ¿Qué tal... ahh... la escuela?-
-¿Mmm? ¡oh si! Muy bien, un poco pesado debido al final de semestre-
-¿Y el Daily bugle?-
-¿Cómo?-
-ahí trabajas ¿no?-le pregunto Wade, dándose cuenta muy tarde que eso era algo que el chico aún no le contaba-es que... tu nombre sale en las fotos y ahí me enteré por qué ¿Qué otro Peter Parker puede haber? Y supuse eras tú... ahí me enteré-repitió al haberse quedado sin argumentos, realmente nervioso.
-si, bueno soy yo, aunque... solo escucha esto-le pidió Peter mientras trataba de no reír, aclarando su garganta antes de tratar de imitar a Jameson-mi jefe esta como "basura, basura ¡mega basura! ¡Quiero fotos de ese delincuente de mallas rojas! ¡quiero al hombre araña plasmado como un criminal! Pruebas de la amenaza de ese insecto a la ciudad de Nueva York"-
El mercenario contuvo una risa, solo sonriendo al escuchar al adolescente al tratar de imitar al cascarrabias dueño del noticiero, no resistiendo cuando el chico también se empezó a reír, llenando las calles semivacías con ella.
En un determinado momento, Peter incluso se recargo en el hombro de Wade, sosteniendo su estomago al estar muriendo de risa-a que me ha salido genial-
~¡No respiro!~
<Alerta de contacto físico ¡Alerta te digo!>
-¿en serio dice eso?-quiso decir el mercenario al encontrarse sin más palabras con que continuar. Había sido algo breve pero su cara ardiendo en rojo no parecía opinar lo mismo.
-si y no parece estar dispuesto a cambiar de opinión por más que le llevo fotos del hombre araña salvando el día-añadió el chico, quedándose un momento en silencio al suspirar, realmente sin saber qué hacer para que Jameson dejara de dar esa mala imagen de él-
-bueno... le guste o no, Spiderman es un héroe, así que no deberías estresarte-le propuso Wade a un bajo volumen, en parte por la timidez y en parte por el enojo.
Spiderman ERA un GRAN HEROE, quien creyera lo contrario debía ser un gran idiota.
-Tienes razón-acepto el chico, aunque no muy convencido.
~¿Conoce a spidey?~
<¿Querrá hacer un trio con él?>
~¿Son amigos?~
<¿y si su novio es spiderman?>
Wade tenia las mismas dudas de sus voces, pero se abstuvo de hacerlas, no quería convertir eso en una plática de Spiderman, aún tenía sentimientos encontrados con él.
-suena a que es mucho trabajo, eso de estudiar y trabajar para Jona Jameson...-
-tal vez...pero soy Peter Parker ¡puedo hacer lo que sea!-
-excepto mirar a ambos lados de la calle antes de cruzar-le dijo el mercenario para tomarlo de la mano al ver el semáforo en verde y como un camión comenzaba su avance-los señalamientos sirven de algo, niño-
-lo siento-dijo el chico, un poco apenado-hey, me dijiste niño de nuevo-
-ehh si... si, lo siento, Peter-también se disculpo de inmediato, pues no quería incomodarlo o hacerlo creer que solo lo veía como un niño cuando era claro que no lo era... aunque actuara un poco como tal.
-esto no funciona si tomas mi mano para cruzar la calle-el castaño trataba de no reírse, pues aun no lo soltaba, mirándolo entrar en pánico casi de inmediato, notando el rojo que se apoderaba de sus mejillas.
-l...lo siento-
-tu eres lindo-le dijo Peter, aunque con esa mirada que decía haber encontrado un secreto, pero que aun no sabía de lo que se trataba-semáforo en rojo ¿ya puedo avanzar?-
-uhmm...si-Wade no sabía cómo responder, sonrojándose aun más de ser posible.
~Tranquilo, que este ni siquiera es tu verdadero rostro~
<Si, pero no creyó que alguien le dijera eso a él>
Siguió al chico en completo silencio, aun tratando de digerirlo, entrando a la tienda y abriendo la puerta para el casi de forma mecánica, observándole comprar las velas, aunque sus ojos solo captaban sus manos.
Era como si de pronto todo se hubiera puesto en su contra.
De regreso a su edificio, Peter fue el que intento entablar una conversación, pero al intentar saber algo más de él, el mercenario terminaba por desviar la conversación, algo que a veces a sus voces les parecía abrupto e incluso grosero, volviendo a insultarlo.
-bueno, Wade... ehh buena charla y gracias por acompañarme, buenas noches-se despidió el chico, con Wade solo asintiendo mientras le veía cerrar su puerta, tardando un par de segundos en caminar a la suya para abrirla e introducirse dentro de su departamento, aún a oscuras, desactivando el proyector holográfico.
-no puedo acercarme más a él-murmuro en voz baja.
~¿¡Que!? ¿¡Por qué!?~
<Todo iba perfecto hasta que tú lo arruinaste>
Peter era perfecto en todo sentido, listo, responsable, divertido, en verdad había sentido algo maravilloso ante su risa y su contacto, el pasar ese tiempo con él, pero no podía.
-se merece algo mejor-termino respondiéndole a sus voces.
Todas las cualidades del chico eran perfectos argumentos para mantenerse alejado de su vida. De ahora en adelante, no podía acercarse más a él.
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