Edades de los personajes

Peter: 19 años

Wanda: 22 años

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-Tengo curiosiadad, Peter Parker. ¿Por Qué no pedir ayuda a Stephen Strange en lugar de a mi?.-Preguntó Wanda.-Hubiera pensado que él sería tu hechizero favorito para algo como esto.

A ella le gustaba Spider-Man muy bien, pero fue Strange quien había ido juntos al espacio y luchado contra Thanos en Titán.

-Me preocupaba que no me escuchara.-Dijo Peter.-Él es muy responsable en no usar sus poderes para fines agoístas y aunque estoy pidiendo esto para mi tia  y mis amigos y no para mi, tenía miedo de que las vidas de Ned y MJ se arruinar y no ingresaran a una buena universidad, era lo suficiente importante como para usar un deletrear así para.

-¿Y yo quisiera?.-Wanda preguntó claramente, sin juzgar, sino completamente tratando de entender por qué él habia acudido a ella.

-Eso espero.-Dijo Peter. Desvio la mirada brebemente.-Pensé que estarías más abierta a reescribir la realidad y hacer que todos olvidaran mi identidad.... ya sabes, como lo que hiciste en Westview y todo.

Wanda cerró los ojos y asintió con la cabeza. Había pasado sufuciente tiempo para que perder la vida que había creado para sí misma dentro del maleficio no fuera una herida tan abierta como antes como antes, pero aún sentía una punzada de dolor en el corazón.

-Ya veo. Asumes que como use mis poderes para tratar de encontrar la felicidad que Thanos me robó, estaría más dispuesta a usarlos para ayudarte a ti y a tus amigos a lidiar con las consecuencias del truco final de Mysterio.-Le dijo ella.

Peter se estremeció como si lo hubieran golpeado y ella se dio cuenta de que tenía miedo de haberla ofendido.

-Yo.... sólo pensé que, ya sabes, no era mi intención....-Contesto él nervioso.

-Relajete Peter.-Dijo Wanda suavemente, levantando la mano para evitar más intentos de disculpa.-No estoy molesta contigo. Ni siquiera estoy en desacuerdo. Tomaste la decisión correcta cuando viniste a mí. No sé qué podría haber hecho Strange si hubieras acudido a él en su lugar, pero estoy dispuesta a ayudarte. Puedo hacer que todos olviden que eres Spider-Man y tus amigos podran vivir sus vidas en paz y entrar en las universidades que se merecen.

-¿En serió?.-Dijo Peter rápidamente. Sus hombros se hundieron de alivió.-¡Muchas gracias, Wanda!.

-No me des las gracias todavía.-Le dijo ella sacudiendo la cabeza.-Dije que estaba dispuesta a ayudarte. Pero no gratis. Probablemente estés siendo agoísta de alguna manera, yo también seré egoísta. Si hago esto por ti, te vas a ir, para darme algo a cambio.

-Vaya.-Él se humedeció los labios, claramente nervioso.-Bueno, estoy feliz de hacer lo que pueda. Sin embargo, no tengo mucho dinero, así que es posible que deba pagarte en cuotas con el tiempo, si te parece bien.

-No estoy interesada en el dinero, Peter.-Dijo Wanda con seriedad.-Hay algo más que quiero que me des en su lugar.

Él la miró expectante, esperando su explicación.

-Realmente, solo hay una cosa en el mundo que quiero. Quiero recuperar a mis hijos. Y tu me los vas a dar.-Le dijo Wanda, mientras una sonrisa se formaba en sus labios.

-Yo..... pero..... ¿como?.-Peter estaba tropezando con sus propias palabras mientras trataba de entender lo que ella estaba preguntando.-¿Como se supone que voy a ayudar con eso? No tengo poderes mágicos ni nada por el estilo.

-No, por supuesto que no.-Dijo Wanda pacientemente.-Me vas a dar hijos de froma natural.

Peter jadeó en voz alta cuando finalmente entendió su significado.

-¿Quieres decir que quieres que te deje embarazada?.-Pregunto Peter.

-Sí, eso es exactamente lo que quiero.-Ella sonrió, feliz de que ahora estuvieran en la misma página.-Vas a embarazarme y a cambió, lanzare el hechizo que pediste y haré que todos olviden que eres Spider-Man. Ambos obtendremos lo que queremos. Es un trato justo, ¿no lo crees?.

Wanda esperaba que Peter se tomara un tiempo para pensar en la propuesta que le había hecho. Pero nisiquiera tuvo que esperar más de veinte segundos antes de que una mirada determinada apareciera en el rostro de Peter y él asintió.

-Es un trato.-Dijo él.

Parecía más confiado y seguro en su decisión que Wanda esperaba que lo hiciera. Sin embargo, eso no era algo malo. Estaba pensando principalmente en la alegría de tener a sus hijos de vuelta y menos en el acto físico que los crearía, pero cuanto más confiado estubiera Peter, más fácil sería.

-Me alegro de que podamos ayudarnos mutuamente, Peter.-Dijo Wanda. Por primera vez desde que su vida en Westview se vino abajo, Wanda sintió que su ánimo comenzaba a elevarse.

-Ahora creo que tenemos trabajo que hacer.

.....

-Puedes hacerlo cuando te sientas cómodo, Peter.-Dijo Wanda.-Mi cuerpo está listo para ti.

-Si.-Le dijo Peter.-Puedo sentir eso.

Humor. Eso era bueno. Le preocupaba que pudiera estar nervioso por lo que estaban a punto de hacer, pero él joven se estaba adaptando rápidamente. Fue una agradable sorpresa.

-Estoy segura de que puedes.-Le dijo ella con una sonrisa.

¿Cuánto tiempo había pasado desde la última vez que se rió así, realmente se rió? En muchos sentidos se sentía como si hubiera dejado de vivir desde el final de su vida en Westview. Se escondió y estudió el Darkhold, buscándolo en busca de alguna forma de ver a sus hijos de nuevo.

Las posivilidades habían comenzado a tomar forma a medida que se adentraba en el libro y antes de que Peter Parker la buscara, había estado considerando seriamente implementar algunas de las opciones más drásticas que había descubierto. Una vocecita dentro de Wanda había hablado insistentemente para advertirle que no siguiera ese camino más profundo, pero su anhelo por los niños que amaba y la vida que había tenido hacia que esa voz se debilitara cada día que pasaba.

Pero luego habia aparecido Peter y en él había visto otro camino por el que podría andar. Ella no necesitaba el Darkhold, Peter podía darle lo que nesecitaba de forma natural. No era necesario que la Bruja Escarlata recuperara a sus hijos de ninguna manera, porque estaba de rodillas, esperando que Peter le metiera la polla y se pusiera a trabajae en su crianza. No fue una sorpresa que pudiera sentir excitación. Esto era más que sexo para ella. Peter estaba a punto de hacer sus sueños realidad y su excitación física no podía compararse con la emoción que sentía por dentro.

Según su acuerdo, Peter la follaría y terminaría dentro de ella por primera vez, sellando su acuerdo y demostrando su compromiso con ella. Una vez hubiera tomado la primera de lo que sin duda serían muchas cargas del semen de Peter dentro de ella, Wanda cumpliría su parte del trato y realizaría el hechizo que haría que el mundo olvidara que él era Spider-Man. No le molestaba que ella daría todo lo que quería después de una solo sesión juntos y que no tendría ninguna garantía de que hubiera funcionado. Ella confiaba en que Peter sería tan bueno como su palabra y continuaría fóllandola hasta que ella hubiera sido criada.

De hecho, parecía bastante feliz de hacer su parte. Obviamente él habóa accedido a su trato lo suficiente rápido y ella habia visto la emoción en sus ojos mientras se desvestía frente a él. Wanda realmente había estado tan concentrada en querer quedar embarazada que no había pensado mucho en lo que la condujo a eso. Tal vez el hecho de que Billy y Tommy no hubieran acudido a ella de esa forma tuviera algo que con eso.

Pero ella habia visto donde estaba la mente de Peter y una vez que se unió a ella para desnudarse, su cabeza también comenzó a moverse es esa dirección. Por alguna razón ella no había estado preparada para que su pene fuera tan grueso como parecía a sus ojos. Ella no tenía una gran experiencía sexual de la que partir por ningún tramo de la imaginación, pero Peter era sin duda el hombre mejor dotado con el que jamás se había metido en la cama. Los deseos largamente olvidados comenzaron a resurgir dentro de ella cuando se puso de rodillas y manos para él y los abrazó.

Ella movió un poco sus caderas para excitarlo, pero fue ella quien sintió que su deseo crecía cuando los dedos de Peter abandonaron sus labios exteriores y fueron reemplazados por la cabeza de si polla. La frotó contra ella y Wanda gimió libremente. Había pasado la mayor parte de su vida reprimiendo sus deseos fisicos, por diversas razones, pero ahora les daba la bienvenida. Quería la polla de Peter Parker dentro de ella, no, ¡la necesitaba dentro de ella!.

Justo cuando había abierto la boca ya sea para rogar, exigir, animar, amenazar o todo lo anterior, Peter empujo hacia adelante. Al igual que todo lo demás que habia hecho desde que vino aqui a visitarla hoy, Peter la sorprendió ahora al darle una penetración que fue cualquier cosa menos suave. Él empujo lo que tenía que ser casi la mitad de su polla dentro de ella en un movimiento constante hacia adelante y lo que salía de la boca abierta de Wanda fue un jadeó de sorpresa por la sensación. Había estado bastante segura solo por la mirada relativamente breve que le dio de que el pene de Peter sería lo más grande que jamás habia tomado, pero aún así se sentía más grande de lo que esperaba de alguna manera.

Esta era una enorme polla y Peter había sido bastante contundente acerca de cómo la empujó dentro de ella. Para Wanda, que no solo nunca habia tomado nada tan grande sino que tampoco habia tomado nada durante más tiempo del que podía recordar, debería haberle causado una cantidad considerable de incomodidad, si no un dolor absoluto. Pera tal no fue el caso en absoluto. A pesar de haber sido rellenada por la polla más grande que jamás había tomado, Wanda no sintió dolor ni incomodidad. Ella solo sintió emoción y no solo la emoción de saber que había comenzado el proceso que lo llevaría a bombear su semen dentro de su útero desprotegido.

Eso estaba allí, por supuesto, pero eso no era todo lo que era. También había una necesidad física que ni siquiera Wanda se había dado cuenta de que existía, o al menos no había comprendido el poder que tenía sobre ella. Su relación con Visión siempre había sido más emociones y palabras que sobre todo el lado más físico del amor, pero incluso eso no explicaba por completo la sensación en su vientre cuando Peter sacó parte de su polla fuera de ella, solo para golpearla, sus caderas hacia adelante una vez más y empujar aún más profundamente dentro de ella de lo que habia ido antes. No le preguntó si así lo quería o no y no se detuvo para ver como estaba. Él simplemente sostuvo sus caderas y penetró más profundamente en ella ya sea que ella estuviera lista para eso o no.

Cualesquieran que hayan sido sus espectativas y cualquiera que sean las creencias que haya tenido sobre su propía vida sexual y sus preferencias, Peter estaba destrozándolo todo. En la mente de Wanda, el sexo siempre había sido lento y suave. A menudo, Wanda estaba arriba, pero cualquiera que fuera la posición en la que se encontraba, ella y su amante se tomaban su tiempo para saborear su conexión mientras hacían el amor. Eso era lo que siempre había hecho y estaba segura de que también era lo que ella prefería. Pero Peter reescribió su comprención de sí misma y sus propios deseos con cada gran empujón que le daba. Si hubiera tenido razón en algo de eso, no habría encontrado nada agradable en la polla de Peter empujando hasta el fondo dentro de ella y el sonido de sus caderas chocando con sus nalgas no habría hecho nada por ella.

Tal no fue el caso en absoluto. Wanda no estaba simplemente tolerando las embestidas bruscas de Peter tan increiblemente dentro de ella. A ella le encantó. Él la folló con tanta fuerza que su cuerpo siguió balanceándose hacia adelante y hacia atrás y la cama se estremecio y gimió violentamente debajo de ella y no pasó mucho tiempo antes de que Wanda se sumara activamente a ese temblor empujando sus caderas y su trasero hacia atrás para encontrar sus embestidas, haciendo todo lo que pudiera para generar aún más velocidad e impacto y meterlo más adentro de ella, si eso era posible.

De su garganta salían sonidos que nunca había hecho y que ni siquiera sabía que podía hacer. Ni siquiera sonaban como los gritos de un humano en sus oídos y eso parecía apropiado. No se sentía como un ser humano en este momenti. Se sentía como un animal, una perra siendo reclamada por su dueño. No habia nada amoroso en la forma en que Peter la follaba, ni ella quería que lo hubiera. Esta fue una crianza cruda, aspera y sucia y Wanda no habría cambiado nada.

Peter la estaba mostrando un lado del sexo que no podía haber sido más diferente de sus experiencias previas y con cada rápido empujón dentro de ella, la cambió para siempre. En un nivel instintivo, sabía que nada sería igual después de esto. Nunca podría volver a ser la misma persona que había sido antes de quitarse la ropa, ponerse en cuatro y ofrecer su cuerpo a Peter Parker. Él no solo la estaba follando o imcluso criándola. Él la estaba reclamando, reclamando la propiedad de su cuerpo y aunque nunca la había usado así, Wanda sabía que un apareamiento como este no iba a terminar solo por que él terminó dentro de ella y salió de ella. Este poderoso joven estaba dejando su marca permanente en ella y no se desvanecería sin importar cuántas veces la follara.

Todo llegó a ser tanto que el cuerpo de Wanda luchó por mantenerse al día. Sus brazos habían estado temblando incluso cuando estaba recibiendo sus embestidas puramente y se tensaron aún más una vez que comenzó a empujar hacia atrás para encontrarse con él. Eventualmente, ya no pudieron sostenerla y ella gritó cuando perdió el equilibrio y terminó cayendo hacia adelante, de modo que sus codos quedaron plantados en la cama y su rostro tocó la sábana. El claro ejemplo de cuánto le estaba sacando físicamente su cogida no obligó a Peter a detenerse o reducir la velocidad. De hecho, comenzó a follarla aún más fuerte después de eso y su mano comenzó a golpear su trasero, que sobresalía en el aire en la posición modificada en la que había caído.

Wanda gruño tanto por las embestidas profundas como por las nalgadas firmes, que probablemente dejarían su marca en su cuerpo de una manera mucho más literal en la forma de huella de su mano en sus palidas nalgas. Pero aún así, ella no quería que él retrocediera. Esto era muy diferente a cualquier experiencía sexual que hubiera tenido y cuanto más la empujaba, mayor era la emoción que la llenaba. Wanda podía sentir que se caía, podía decir que para cuando terminara con ella, ella sería adicta a esto. Continuaría persiguiendo este sentimiento por el resto de su vida y mientras Peter estuviera dispuesto a dárselo, no había ninguna razón para que ella buscara en otra parte.

Dudaba que cualquier otro hombre pudiera usarla así de todos modos. Se necesitaría un hombre excelente para hacer que la Bruja Escarlata gritara como una perra y gimiera como una puta, pero Peter Parker, el sorprendente Spider-Man, estaba más que a la altura de la tarea. Era ironico que él le hubiera pedido que hicera que todos los demás ólvidaran quién era él realmente, pero incluso si el resto del mundo nunca vio este lado del amigable vecino Spider-Man, Wanda sabía que su exposición al lado del dominante de Peter era solo el comienzo. El pensamiento le dio alegría.

Lo que le trajo aún más alegría fue escucharlo gruñir, sentir sus manos apretar su trasero con fuerza y darse cuenta de que estaba terminando y cerrando el trato. Él estalló dentro de ella, llenando su coño con más semen del que jamás había tomado y Wanda jadeó y gimió contra la sábana contra la que estaba presionada su cabeza. Sus sueños se estaban haciendo realidad y eso hizo que todo su cuerpo temblara de  pies a cabeza. Pero su potente esperma siendo disparado dentro de ella no fue la única causa de sus llantos. Él la habia hecho pasar por el polvo más duro de su vida con diferencía y al final llegó un clímax que fue igualmente poderoso. Ya sabía que haría cualquier cosa que Peter le pidiera, siempre y cuando siguiera brindándole el placer que le habia presentado y sentir la intensidad del orgasmo al final solo lo reforzaba. Ella era suya ahor, no había lugar para el debate.

Su cuerpo se dejó caer sobre la cama después de que Peter salió de ella y gimió incoherentemente contra la sábana. Probablemente habia permanecido en esa posición durante bastante tiempo si Peter no hubiera hablado.

-Cumplí con mi parte de nuestro trato.-Dijo Peter, justo antes de darle una fuerte nalgada que la hizo gritar.-Tengo la sensación de que te gustaría que también llenara tus otros dos agujeros de inmediato y estaré feliz de hacerlo. Pero primero, tienes un hechizo que lanzar.

Era cierto. El hechizo. Su orgasmo habia sido tan increíble que se había olvidado por completo de sus otras responsabilidades por un momento. Era bueno que lo tuviera allí para guiarla. Desafortunadamente, no podía lanzar el hechizo desde la cama, así que tuvo que obligar a su cuerpo a moverse. Se arrastró fuera de la cama y dio unos pasos temblorosos, dándose suficiente espacio y suficiente distancía del hombre que acababa de cambiar su mundo para que ella se concentrara en cambiar el mundo, o al menos su conocimiento de quién era él realmente, para ella y todos los demás.

Wanda se concentró en hacer realidad los deseos de Peter. No fue algo fácil de hacer, incluso para ella, pero no habría hecho su propuesta si no hubiera sabido que podía hacerlo. Ella sonrío hacia el final, sintiendo que las cosas cambiaban cuando su hechizo hizo su trabajo.

-Y bien, ¿Funciono?.-Le preguntó Peter.

-Si.-Le contestó Wanda.-Nadie recuerda que Peter Parker es Spider-Man.

-Entonces puedo terminar de hacerte mia.-Le dijo Peter.-Ponte de rodillas, Wanda.

La dinamica entre ambos era irreconocible en comparación con cómo habían sido cuando él se acercó a ella por primera vez. Nunca hubiera esperado que Peter hiciera una demanda como esa antes, e incluso si lo hubiera hecho se habría reído en su cara o lo habría reprendido por pensar que podía darle órdenes. Pero él no era exactamente quién ella había pensado que era y ella ya no era la misma persona que había sido antes. La cogida dura, el increible orgasmo y la idea de ser criada por él habian hecho que Wanda estuviera demasiado dispuesta a seguir cualquier dirección que él le diera. Ella se arrodilló sin discutir, colocó las manos en su regazó y esperó a que él la usara como deseara.

Peter no la dejo esperando mucho tiempo. Su mano izquierda llegó a la parte superior de su cabeza y su derecha agarró su pene y comenzó a frotar la punta a través de sus labios. Wanda abedientemente separó sus labios, entendiendo lo que él quería y dándoselo. Peter tomó rápidamente lo que le ofrecía. Se deslizó dentro de su boca abierta y comenzó a follarla, siguiendo el mismo patrón que tenía cuando la tomó en la cama empujando su polla profundamente desde la entrada inicial.

El ritmo rápido que impuso desde el principio no fue una gran sorpresa para Wanda esta vez. Habiendo sentido ya lo que él podía hacer y conociendo sus preferencias, ella había estado esperando que él le follara la boca con rudeza y deseando que lo hiciera. Ella había hecho unas cuantas mamadas en su vida, pero nadie le había follado la boca como lo hacia Peter ahora. Él tenía ambas manos sobre su cabeza ahora, atrayéndola y manteniéndola en su lugar, sin darle más remedio que aceptar su polla hasta el fondo de su garganta. Wanda se amordazó muchas veces durante su primer facefuck y no pasó de que su cara quedaba manchada con su propía saliva.

Sus aracadas nunca hicieron dudar a Peter y llegados a este punto, se habría sentido decepcionada si lo hubiera hecho. Los gustos de Wanda habían cambiado por completo en el transcurso de una cagida. Anteriormente, la idea de tener un amante tirando de su garganta y rebotando sus bolas en su barbilla habría hecho que Wanda arrugara la nariz con disgusto. Ahora, ella vivía para esto. Peter haciéndola amordazar con su polla era la musica más dulce para sus oídos. Ella era era suya ahora y no se arrepentía, excepto por el hecho de que no podía ver su rostro desordenado y manchado de saliva mientras él usaba su boca por primera vez(la primera de muchas).

Una polla tan poderosa como la de Peter, había sido hecha para complacer y adorar por una mujer igual de poderosa y que mejor que la Bruja Escarlata para el trabajo. Al meno ese fue el pensamiento de Wanda mientras el semen de Peter llenaba su garganta. Se lo había ganado y se lo iba a quedar todo y solo para ella.

Fin.

Nuevo one shot, espero les guste.

Sin más me despido, hasta la próxima.