En toda la tarde y noche estuvo recostado en la cama. No comió mucho y tenía miedo de morir...
Dentro de su cuarto, el "veneno" de la araña empezó a hacer efecto causándole los efectos secundarios.

Wasabi estaba intentando dormir en su cama, abrazo sus piernas adolorido. Su rostro estaba rojizo; su cuerpo estaba sudado... era cómo si tuviera fiebre lo cual le alteraba bastante.
Se quitó el colchón angustiado, tenía calor aunque el clima estaba frío.
—agh... no funciona... —se levanto con dificultad y fue al baño.
Abrió la llave de agua fría y se desvistió la ropa para luego meterse a la regadera.
Sabía que le dio fiebre, ¿pero cómo?
Pasaron unos minutos y salió de la regadera algo aliviado.
Se puso solamente sus boxers y volvió a la cama.
—espero estar mejor mañana...—penso preocupado.

A la mañana siguiente, Wasabi despertó con bastante dificultad ya que le dolía la cabeza y no soportaba la luz solar.
No quiso ir a la universidad, el pensó que al parecer si... se enfermo.
Pero claro, ¿cómo se habrá enfermado? ¿se habrá enfermado por la picadura?
Se quedó todo el día en la cama, tomo medicamentos y se hizo una sopa para combatir con la "enfermedad".
No sabía lo que la araña le hizo, por ahora...
—uff... espero que esto no empeore. —dijo.
se cubrió con el colchón y se dispuso a ver k-dramas en la TV, hasta que...
El universitario se rasco la cabeza y por alguna razón...su mano quedó pegada.
—¿Eh? —al intentar quitar su mano de su cabello, le empezó a doler—aay...—entonces quiso tratar de quitársela de otra manera.
Intento todo lo que pudo, pero no funcionaba; hasta que de un jalón...

Paso lo inesperado...

—¿Por qué siento frío en la cabeza? —dijo hasta que vio su cabello pegado a la mano.
Pego un gran grito, tanto que asusto a sus vecinos al oírlo.
Se levantó desesperado y empezó a maldecir montones de veces.
—¡Maldición, maldición, maldición! —maldijo.
Fue al baño a checarse y quitar todo el cabello que había arrancando.
Abrió la llave del lavabo para quitarse el cabello. Lo cual fue complicado en quitar su cabello de su mano. Hasta que lo logro, lo cual al parecer el cabello estaba...¿pegajoso?
—¿Pero qué? —dijo confundido y sorprendido. Suspiro triste mirándose al espejo por lo que había sucedido.
Ahora estaba calvo de un lado; se quejo entristecido, no podía creer lo que había pasado...
Se había arrancando su propio cabello, ahora tendría que cortarse su cabello en lo absoluto.
Cómo no tenía una afeitadora se cortó el cabello con un rastrillo y crema de afeitar. Quedándose completamente calvo.
Al terminar de raptarse el cabello se sentó en el suelo entristecido.

"Ahora los demás se van a burlar de mi"

Pensó entristecido; se levantó sin ganas y volvió a la cama a ver la TV.
Pasaron unas horas, el pelinegro con rastas seguía viendo la televisión muy desanimado...
Pero, No sabía las consecuencias que vendría en el futuro...
Bebió su Coca-Cola concentrado a su k-drama.

"가야 해요. 좀비 종말이 점점 더 심해지고 음식을 사러 가야 해요. 움직이지 마세요."
"Debo irme, el apocalipsis zombie está empeorando y tengo que ir por comida. no te muevas."

"가지마 영수! 거리는 매우 위험하고 널 잃고 싶지 않아 ... 정말 사랑해."
"¡no vayas Young soo! está muy peligroso las calles y no quiero perderte... te amo mucho."

Eso decía en la TV...
Dio un suspiro al ver aquella escena en la TV—aay... —pestañeo tan concentrado. No podía desviar su mirada a la televisión ahora, estaba tan interesante el capítulo número 14 de "Romance in the zombie apocalypse".
Wasabi miraba su k-drama favorito, ¿estaría solo por siempre?

En la noche, el hombre seguía viendo la TV, no había hecho nada en todo el día.
Había pedido pizza, pues para... Alegrar su corazón.
Le llego una notificación a su celular, por lo cual lo agarro y miro los mensajes.
—ah... es Fred. —se dijo a si mismo.
Entro a su WhatsApp y entro a la conversación de Fred. 

Wasabi y Fred dejaron sus celulares. El ojiazul siguió jugando videojuegos mientras que el oji-marron miraba la TV.
Al día siguiente, Wasabi decidió no ir a la universidad, pero si fue a Lucky cat café. Pensaba que ahí estaban sus amigos almorzando.
Fue allá caminando con una chamarra de frío y un gorro negro con orejas de gato, ya que... era el único gorro que tenía. Cuando llego al lugar entro con algo de pena.
Justamente miro a sus amigos comiendo y se acerco a ellos.
—hola chicos. —saludo el pelinegro con rastas.
—hola Wasabi, ¿qué pasó? No fuiste ayer ni hoy a la universidad.—pregunto preocupada la latina.
—¿estás bien amigo? Nos preocupamos por ti. —pregunto Hiro.
—no, tuve ciertos problemas. Me enferme y me cortaron al el cabello. —mintio un poco el moreno.
—ohh, ahora se explica porque estás... con ese gorro. —se burló la asiática— pero, ¿Cómo te enfermaste? Eso es imposible, tú nunca te enfermas. —exploto su chicle.
—ya lo sé...—suspiro el hombre.
—¿No has comido nada caducado? —pregunto la pelinegra.
—no, siempre reviso su caducidad —se negó.
—¿y cómo te cuidaste solo? —cuestiono la oji-verde.
—remedios casero cómo bañarme con agua fría y comer sopa. —respondio el universitario afromericano.
Se oyó la voz de mujer conocida para los grandes héroes, era la tía Cass pasando con una malteada en sus manos— permiso, ¡voy pasando! —se dirigió hacia un cliente, pero... de un momento se tropezó y la malteada fue cayendo...
en un momento de cámara lenta, Wasabi fue hacia allá y atrapó la malteada sin derramar ninguna gota.

Todos quedaron sorprendidos, mirando hacia el afroamericano.
—wow Wasabi, gracias por haber atrapado la malteada. —agradecio la mujer castaña.
—¡¿vieron eso!? ¡eso fue increíble! —Fred exclamo con entusiasmo.
Wasabi se quedó procesando lo que acabo de hacer, jamás había pensado que podría atrapar objetos a una velocidad así.
Intento olvidar de lo ocurrido, y siguió platicando con sus amigos.

A las 5 PM, los amigos de Hiro se fueron a sus respectivos hogares.
En el caso de Wasabi caminaba pensativo hacia su casa; paso por una carretera jurando que el semáforo estaba en verde.
Mientras que un auto pasaba a toda velocidad, dirigiéndose hacia el universitario.
Pero el sentio como si algo le advertía.
Giro su cabeza hacia la carretera y miro el auto yendo hacia el velozmente.
Entonces salto en el aire esquivando al auto.
Se sentío como en cámara lenta, y aterrizó de forma épica.
Sorprendiendo a todos y hasta el mismo...
—¿pero qué? —penso impactado.
Empezó a paniquearse y decidió huir hacia su casa. Corrió y corrió, sin mirar atrás.
Llegó a su casa y entro de un golpe con la respiración agitada.
Trato de calmarse, se sentó en el suelo dando un gran suspiro.
¿Cómo logro esquivar el auto? Casi lo habían atropellado... Y quizás casi lo había matado.
—¿Qué me está pasando? —se pregunto asustado.

Hasta aquí se terminó el capítulo 2, quizás haya a tardar en escribir el capítulo 3 por obvias razones. xd
Y también les quería mostrar una imagen de cómo se vería Wasabi sin su cabello largo(?

Así para que les de una idea xd, ¡nos veremos en el siguiente capítulo! Bye! 💓💓