Mierda, mierda, mierda multiplicada por un millón. Tres canciones de amor con Rubio, al carajito el mundo, ya no quiero vivir. Tragarme tierra plis

- No es posible, Rubio y yo en lo único en lo que nos entendemos es en que nos odiamos

     Aclare mientras vía a Rubio caer derrotado sobre su silla

- Del odio al amor hay un paso

     Comentó Kaito coqueto, no voy a mentir, me dolió un poco. Jamás ni en un millón de años luz yo amaría a Rubio, Es más comenzaba a creer que me gustaba Kaito

- Todo es tu culpa

      Espante mirándolo el se giro molesto

- Perdón pequeña, flipas tu si crees que es mi culpa

     Me respondió separándose de la mesa, y comenzando a caminar a la salida, a No. Rubio no me iba a dejar con la palabra en la boca

     Lo seguí bastante molesta y pude ver como entraba a un salón, intente abrirlo pero no sirvió, estaba cerrado con llave

     Mierda de Rubio con las hormonas alteradas, no me quedó de más que regresar con Kaito en el aula

- Y quien escribirá las canciones?

     Preguntó el tierno osito de peluche nada más entrar

- No se, Rubio es un imbécil, dudo que sepa lo que es el amor

      Respondí en un bufido, el acaricio mi cabello, me trata como si fuera un animal pero aún así me hace sentir avergonzada y satisfecha, mierda

- Si supieras

- Si me dijeras

      Contesté rápido. No, definitivamente Rubio no me agradaba, pero por alguna razón todo lo relacionado con el me daba mucha curiosidad

- Eso no te lo debería contar yo

- No te hagas el interesante. Pasamos por esa etapa hace rato

     El volvió a sonrier y soltó mi cabello

- Estuvo enamorado hace unos años, pero fue una total decepción

- Cuéntame más

      Rouge pero la campana sonó, jope, yo quería hablar más con Kaito, el me sonrió por última vez para caminar hacia su asiento. Que bien, ya vuelvo a estar al lado de rubio

    Por que no para de mirarme? Que demonios tengo en la cara? Este hombre me va a volver loca. Es por mucho la persona que más he odiado en mi vida

     Empecé a mirarlo.y a escribir algo en mi libreta

        Las notas serían cotidianas entre Rubio y yo
 
      «¿Qué miras?»
 
    El la leyó con una sonrisa y luego escribió en mi libreta

     « A ti, Pequeña»
 
      Joder como me molestaba que me llamará así. Choque mi mano con mi frente y luego tomé el lápiz, esto no se quedaría así

      « Rubio, para de llamarme pequeña»

      « Cuando pares de llamarme Rubio»
 
     Respondió rapidísimo. Lo pense, ¿En serio lo pensé? Pensé en dejar de llamarlo Rubio, decir su nombre, por alguna razón siento que es perder una guerra

     «Jamas»

     « Pues jamás escucharas de mis dulces labios otra cosa para referirme a ti que no se Pequeña»

       Siguió escribiendo en mi libreta, no pude evitar contener la risa, me parto con este idiota

      « Dulces labios»

     Repetí y el siguió mi juego

      «¿Quieres probarlos.......de nuevo»

      « No gracias hacerlo sería como besar a todas las chicas del insti»

     Contesté rápidamente. La incomodidad se fue, ahora sólo nos pasábamos papelitos con cualquier tontería. Lo admito, hasta fue divertido, cuando Rubio se lo proponía no era tan desagradable

     « Tienes razón»
 
     Me contestó y me guiño un ojo, este es imbécil. Los cuarenta y cinco minutos más cortos de la historia pasaron y luego otros más, en realidad me pasé todo el día ofendiendo por noticias de papel a Rubio,  era divertido

- Nos vamos?

     Preguntó haciéndose el caballero comiendo mi mochila, mi no me engañas Kagaminas

- Oki

     Respondí lo ma infantil que mi absurdo cerebro me hizo ver en ese momento

- Oki?

    Preguntó con una sonrisa socarrona, yo corrí mis ojos en lo que esperábamos a Kaito

- Cállate Le.....L.....Len

- Que?

     Antes de que tuviera tiempo a contestarle llegó Heladis y nos fuimos los tres juntos. Gracias Kaito, ahor aque había escuchado comos urna su nombre de mis labios, jamás lo repetiría. Sonaba tan bien, que asta dude por un segundo que me gustaba

       Reintero Grcias Kaito

- Oigan chicos, Bruno ayer se quedó encantado con esta preciosura

     Dije acomodando su codo en mi cabeza, obvio que me enoje con este estúpido

- Que no me llames pequeña

      Grité enfadada, él comenzo a reir con su sonrisa de retrasado mental, ya se ma hacía costumbre verlo así. No lo conocía mucho, pero con lo que llevó con el apostaría a que es un pervertido obsesionado y malcriado

- Oye imbécil, quiero tomar algo

        Aclare después de un tiempo caminando, Heladis y el me entendieron puesto a que fuimos al pequeño bar, que descubrí que se llama Crypton

     Bruno me saludó cálido. Llámeme loca pero este hombre me cae indebidamente bien. Por alguna razón me siento cómoda con el, y no, estoy segura de que no me gusta

- Bienvenida Miku

      Dijo sin una gota de de formalidad cuando me vio, preparo una cerveza, un helado y un vino

- Bueno chicos como les fue hoy?

     Preguntó cuando cada quien había tomado su pedido, él ya sabía lo que queríamos y no se lo ha íbamos dicho, lo que digo, este hombre es la hostia

- Rubio no me deja en paz

       Lo señale por delante de Kaito, ya que el estaba sentado en el medio entre los dos

- Len

     Señaló su nombre Bruno, pero estoy segura que de una forma pícara. El mencionado sólo corrió la vista hacia otro lado, y como de costumbre le dio un sorbo a su cerveza

- Ella me tienta

      Completó y yo otra vez me enfade. Rubio lo único que provoca en mi es rabia, comprobado

- Yo?

     Pregunté restante, Kaito se hecho para atrás

- Si, tu, si no fueras tan............tú. Olvidalo, nunca había conocido una mujer como tú

       Soltó el baso para mirarme, me sentí pequeña ante la intensidad de su mirada

- Lo se, soy tan atractiva

      Más amas terminar de hacer el comentario comenzó a reír como tonto. Un tic nervioso apareció en mi ojo, no seas mal pensada Miku, no está diciendo que no eres atractiva

- Pequeña eres el ser menos atractivo del planeta. Hasta una hormiga me pone más cachondo que tú

     Hay, este no sabe quién es Hatsune Miku, pero lo descubrirá, yo me encargo

- Eres un incencible Rubio

    Fue lo último que dije antes de salir por la puerta de ese lugar. He de admitir que me siento cómoda ahí, pero si esta Rubio me estreso. Cerré la puerta de un tirón y camine hacia el exterior, me senté en la acera esperando a que Kaito saliera, como lo hizo ayer

     Ayer..........Fue tan.......Ayer, supongo que tal vez me atrae un poco Kaito. Y no pensar que lo deje llegar a mi casa, para nada, no iba a permitir que Kaito viera ese desastre

     Sentí otro portazo y me gire con esperanza pero todas se desvaneció al ver el rostro furioso de Rubio

- Genial

     Susurré, mientras lo veía caminar rápido y molesto hacia mi me levanté, O bueno eso intente, porque acá, señor dulzura me tomo del brazo y me jaló con fuerza hacia arriba

- Oye, que te pasa?

     No dijo nada, sólo tomo mi mano bruscamente, sigo amablemente y comenzó a caminar

- Donde vives?

      Fue lo único que pregunto, yo sólo señale con mi dedo medio la dirección mientras tragaba saliva

     A este que le dio?

    Como sea uno de sus ataques de bipolaridad, no aguanto

- Me vas a decir que pasa?

      Pregunté casi llegando a mi casa, Rubio se giro con una sonrisa pícara

    Lo sabía, Es un  bipolar pervertido de mierda

- Resivi una pequeña charla de parte de mis camaradas por tu culpa

      Comentó mientras soltaba mi
mano

- Mi culpa

     Al fin se digna a responder y eso es lo que dice, este es tonto, oficial

- Mira pequeña.......

    Comencé a asustarse, puso su brazo sobre mi cabeza y acerco su rostro al mío, yo sólo aguante mi talla lo más fuerte posible rezando porque no me besara. Una maldita y atractiva sonrisa ladina asomó en su rostro

- Que?

     Pregunté cuando recupere el aliento. Si acorta estos diez centímetros que nos separan me muero

- Bruno se enfadó conmigo por ofenderte, y desde que me siento a tu lado no tengo mucho tiempo para ligar

    A mi que me importa, allá tú con tu Sica

- Y eso que conmigo?

- Tendrás que aguantar que me quede a dormir hoy en tu casa

       Al fin se separó, gracias a di..... Espera que dijo?

- No de coña comparto unas mismas cuatro paredes contigo

     Lo ataque mientras el tomaba mis cosas

- Lo haces en la escuela

- Eso es otra cosa, y esto......es otra cosa

    Respondí exaltada y avergonzada. Me flipa lo guay que se cree este

- Ya te dije sólo te estoy informando

    Se giro brevemente y comenzó a juguetear con un llavero de Doraemon.........Espera, ese es mi llavero?

- Como?

- Como se ve que un hombre nunca te ha quitado toda esa ropa que tienes de más

     Eso no viene al tema

- Soy experto pequeña, si te dijera mis trucos, ya no sería un mago de primera

     Sólo me quedó buscar, en cima de retrasado y pervertido, ahora añadimos a su lista de defectos ladrón, Rubio cada día eres más atractivo

       Comencé a caminar detrás de él, Es increíble que él sea el que este dirigiendo cuando vamos a mi casa

     De pronto frenó en seco y yo sabía que habíamos llegado

- Nos equivocamos

     Se dio media vuelta quedando frente a mi pero yo rápidamente tomé sus hombros y volví a jirarlo

- Para nada, estamos en el lugar correcto

     No me sorprende su sorpresa, valga la redundancia. Es que mi casa era un pequeño departamento en el segundo piso de un edificio viejo y casi que abandonado, en una de las calles más peligrosas de la ciudad con un basurero al lado. Todo un paraíso

- Vives aquí?

      Preguntó mientras.subía las escaleras, yo todavía lo guiaba por los hombros

- Pensé que había quedado claro

     Lo hice girar con un movimiento y yo estábamos frente al departamento 3

- Abre

      Me escucho y sin una palabra más depósito la llave en el pomo, ahora ambos estábamos dentro

       Solté mis zapatos en la puerta y corrí al refrigerador a por agua. Rubio sólo se quedó examinado mi casa, estoy segura de que lo hacia casi tanto como conmigo

- Perdona mi estado de chock, pero como entraste a Shadows?

      Sus primeras palabras desde que entró, estoy tan orgullosa

     Pero aquí es cuando paró el tiempo para pensar. El botón de cuidado se ha activado. Ósea, le cuento que mi madre es una mujer de la limpieza en la escuela de su padre, seguro que no se reiria

    No te engañes Miku

- Mi madre trabaja ahí

- Y donde está?

       Decidió no indagar más en el tema y no reirse, demasiado maduro para Kagamine Len, que está pasando?

- Trabajando

      Respondí con un nudo en la garganta, aunque no se dio cuenta, nadie lo hace

- Por que? Ya es tarde

- Eres demasiado curioso

    Le aclare fingiendo una sonrisa, el levanto una ceja

- El dinero no nos da para sustentados sin muchos trabajos, hay días en los que no duerme en casa

      Le expliqué juguetear con el pomo, sin atreverme a mirarlo a los ojos

- Hoy tendrás mi compañía pequeña

     Otra de sus estúpidas y bien formadas sonrisas logró subiré el ánimo

- Ni en broma te quedas a dormir aquí

- Pruebme

      Comentó mientras se lanzaba al sofá. Digamos que la sala y la cocina eran una misma habitación

     Le lancé el pomo y el lo tomo, apuesto a que practica algún deporte

- Gracias por preocuparte por mi sed pequeña

     Yo sólo bufete con enfadó, el me sonrió y luego vecino hasta dejarme sin nada. Tomé el recipiente vacío y fui a la llave del agua para llenarlo nuevamente. En todas esas acciones perdí a Len de vista

- Que hay ahí?

       Preguntó apuntando a mi habitación y yo solté el pomo que estaba llenando y corrí hacia él

-Dormirás en el sofá

     Le advertí mientras me ponía delante de la puerta protegiendo mi intimidad

- Si juegas así, yo también lo haré

- No es un juego

      Le aclare, definitivamente Kagamine Len no entrará a mi cuarto

- Bien

     En un rápido movimiento me cargo de espaldas, todo mí peso estaba en su hombro derecho y mi hermoso trasero estaba al lado de su cara......peligro

      Abrió la puerta y entró a mi santuario, me lanzo sobre la cama pero cuando intente pararme llevo mis dos manos a mi cabeza, que fuerte era, pues con una sola mano podía con toda la fuerza de las dos mías. Metió una de sus piernas entre las mías mientras que con la otra se apoyaba en el suelo

- Que haces idiota?

     Preguntó con un hilo de voz, pero ignorando mi comentario con su mano libre comenzó a dibujar piruetas y caricias en mi rostro

     Su tacto es tan, refrescante pero a la vez asfixiante, creo que yo también soy bipolar. No se si es su experiencia o mi falta de cariño, pero me encantó que lo hiciera

      Regresa Miku

- Eres hermosa Pequeña

       Fue lo último que me dijo para besarme. No otra vez, este idiota se cree que puede hacer lo que quiera conmigo

     ..........

- Por que yo no aparezco?- Pregunto molesta Rin

- Porque no ha llegado el momento- Respondí obvia

- Vamos Sora, hazme aparecer- Sacó más su labio inferior, era tierna

- Lo voy a pensar para el próximo capítulo

- Bien- Proceso mis palabras- Espera que?

- Nos vemos la próxima semana en la sección «al final ignoramos a Rin»

- Soraaaaa