veintisiete

Jo

      Harry no ha estado por aquí en todo el día.

      La casa ha estado bastante tranquila sin él aquí, y no estoy segura de si me gusta o no. De cualquier manera, no estaba pensando en llamarlo y preguntarle donde está porque, seamos sinceros, no le importa todo esto lo suficiente como para aparecer en primer lugar.

     "Supongo que estamos sólo tú y yo", suspiré, acariciando mi estómago.

      Y así empezó mi día sola.

      Terminé sentada en el sofá viendo Netflix en mi televisión todo el día, de vez en cuando tenía que levantarme para hacerme algunos bocadillos - que con el tiempo se convirtió en un juego.

      '¿Cuál es la combinación de merienda más loca que se me ocurre' así lo llamé.

      A decir verdad, todo es sólo diversión y juegos hasta que sientes como si fueras a vomitar por todo el suelo.

      Así es como el juego terminó.

      Por desgracia mi día de descanso llegó a su fin cuando oí el timbre de la puerta, seguido por una serie de golpes rápidos. Gimiendo, apenas murmuré un "ya voy" antes de que yo cojeara hacia mi puerta, balanceandola abierta.

      Me sorprendí al ver un gran ramo de flores mixtas '' con un globo rojo unido a los vástagos de una nota:

      Feliz Día de la Madre.

      “Sorpresa,” una voz familiar dijo, su cabeza saltando de detrás del ramo de flores.

      Sonreí, abriendo inmediatamente mis brazos para aceptar el regalo.

      “¡Gracias, Melinda!”

      “¿Por qué?” Me preguntó, una mirada curiosa en su cara.

      “Las flores...”

      “¡Oh! No son mías. Las encontré en el porche, así que decidí agarrarlas por ti. Quise decir "sorpresa" como en, "Estoy aquí para llevarte a tu ultrasonido! '" Le di una mirada de curiosidad, en busca de una tarjeta o algo dentro de las flores.

      Finalmente encontré una, abriendola rápidamente, mis ojos hambrientos sumergiéndose en las palabras en la página pequeña, algo endeble.

Feliz Día de la Madre.

Serás una gran madre.

- Harry

      Eso era todo lo que decía.

      Y eso fue todo lo que necesité para sonreír de nuevo y pensar; tal vez a él sí le importa después de todo, incluso si es solo un poco.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top