⋆˚☆˖°

—¿Ustedes también terminaron? —Pregunto Guila acercándose a ellos, viendo como Kaida se levantaba con dificultad por sus cortes.

—Por lo visto no. —El desconocido se lamía las uñas con un sonrojo en su rostro y a medida que se chupaba cada dedo, cuernos y cola le crecían como si fuera un darekiano, cosa que hacía enfadar a Kaida que sujetaba su brazo sangrante.

—Ni siquiera soporto el calentamiento.

—Deshacerse de los ocho pecados capitales no es más que una misión alterna. El verdadero enemigo requiere más precaución, es más grande.

—¡Oye! ¡Capitana! Creo que todos los residentes ya evacuaron. —Al bajar su mirada vio a Meliodas y a Ban tirados en el suelo mientras Kaida estaba llena de cortes, mirándolo a él con preocupación.

—¡King, cuidado! —Pero su grito no sirvió de nada al ser atacado por Guila al momento en que lo vio.

—¡Maldita sea! —Grito al momento de que las explosiones le llegaron a él y explotaron. Kaida tuvo que cerrar sus ojos por el polvo. —No, no era cierto. —La lanza de King se había separado en cuchillas que lo cubrieron.

Jericó se lanzó a él con su espada golpeando unas cuantas y creando un espacio para poder atacarlo, pero King volvió a chastifol a su forma original golpeándola y haciéndola chocar con el suelo. Guila lo iba a atacar, sin embargo, King chasqueo sus dedos volviendo a las cuchillas y atacando a la caballero.

—Bien damas, estoy listo para pelear, así que, qué tal sí, ¿y eso? —Ambas estaban en el suelo totalmente heridas. —¿Con eso tuvieron?

—¡Espera, King! —Kaida extendió sus alas para volar hacia él, su levitación no le funcionaba desde que fueron atacados. —¡No te distraigas! —Al llegar a él lo envolvió en sus alas sintiendo las garra del desconocido atravesar su espalda.

—¡Capitana! —Sus ojos se abrieron sorprendidos.

El encapuchado soltó una fuerte carcajada con sus garras nuevamente llenas de la sangre de Kaida. —¡Así que tu debilidad son tus camaradas! —La miro con un brillo en sus ojos, pasando su lengua por su garra, haciendo que alas se desprendieran de su espalda, sorprendiendo a King. —¡Así que los atacaré a ellos! —Con su mirada psicópata se lanzó directamente a Ban y Meliodas, pero Kaida apareció frente a él sacando su cola y alejándolo lo suficiente de todos, estrellándolo en una colina.

—¡No los metas en esto! —Su mirada brillo y sus colmillos crecieron con humo saliendo de su boca.

—¡Bien hecho, Kaida! —Al girar al cerdito, noto a Elizabeth en su lomo, asustándola.

—Demonios... —Maldijo por lo bajo mirando los cuerpos de Ban y Meliodas en el suelo, pero un puño se estrelló con su mejilla estrellándola con una casa, sangre salió de su boca. —¡Saquen a Ban y a Meliodas de aquí!

—¡A la orden, señora! —Agarro sus ropas con su boca y los llevo arrastrados mientras Elizabeth la miraba preocupada.

—King. —El nombrado la miro angustiado notando como el tipo se acercaba a ella y ella se sostenía de los escombros para levantarse. —Aléjate y no te metas. —Con su brazo limpió la sangre de su comisura bocal.

—Pero...

—Encárgate de ellas. —De un salto se lanzó sobre el hombre al mismo tiempo que él lo hacía, siendo ella la que los alejo a ambos del hada que miro a su dirección angustiado.

El mismo pensamiento de Hawk cuando Kaida le ordeno que se llevara a Meliodas y a Ban llego a su cabeza. Si ella estaba teniendo problemas con aquel hombre desconocido, ¿entonces qué oportunidad tendría él?

[...]

En el aire el enmascarado le dio un puño estrellándola con la colina del torneo, interrumpiendo la conversación de Diana y Howser mientras un anciano estaba en la mitad, por suerte Diana se logró correr con el anciano a tiempo para no ser aplastados.

—¿Qué fue eso? —Se preguntó Howser intentando mirar por el humo que se levantó, sus ojos se expandieron al ver el débil cuerpo de Kaida sobre la piedra con sangre chorreando de todo su cuerpo y un ojo cerrado mientras el otro luchaba por mantenerse abierto. —¿K-Kaida?

—¡Mamá! —Diana grito asustada al ver el deplorable estado de su capitana queriendo acercarse a ella después de que el anciano saliera corriendo. 

—N-no te acerques. —Diana se quedó en su lugar viendo como se levantaba con dificultad. —No quiero que te haga daño...

—Me impresiona tu resistencia. —El encapuchado camino hacia ella con una sonrisa y su larga lengua saliendo de su boca, saboreando la sangre que veía salir del cuerpo de Kaida.

—¡¿Quién eres tú y que le hiciste a mi mamá?! —Diana se lanzó a atacarlo.

—¡No, Diana aléjate de él! —Con todas sus fuerzas se teletransporto frente a ella, recibiendo el ataque del enmascarado, viendo las garras negras atravesar su cuerpo. —¿Estás bien... cariño...?

—M-mamá... —Lágrimas comenzaron a salir de sus ojos y sangre salpico en su cara y ropa cuando las garras salieron de su cuerpo.

—Vete de aquí, por favor... —Una lágrima solitaria salió de su ojo. —Huye mientras puedas...

—¡No lo haré! ¡No te dejaré sola! —Grito con lágrimas en sus mejillas.

—Entonces yo me desharé de ti. —El castaño le dio una patada a Diana mandándola por la grieta en el suelo, solo escuchándose su grito.

—¡Diana! —Gritaron Howser y Kaida al mismo tiempo.

⋆˚☆˖°