¿Y si hablamos un poquito sobre la alabanza hacia Dios?

Primero, ¿Qué es la alabanza?

Según el diccionario dice que es un elogio, aclamación, enaltecimiento, honor, loor, glorificación.

En otras palabras, es la acción de glorificar a Dios y bendecirlo en agradecimiento por los favores y maravillas a nuestras vidas.

La alabanza es un recurso más para acercarnos a Dios.

Entonces, ¿Por qué alabar?

Primero, debemos entender que la alabanza surge de un corazón agradecido y libre; libre de las cadenas de esclavitud al pecado

1. Cristo es digno de ser alabado. Apocalipsis 5.12 (puedes tomar tu Biblia y leer)

2. Dios es glorificado en ella.
Salmos 22.23
Salmos 50.23

2. La biblia nos exhorta a alabarle.
Salmos 148 (capítulo bastante conocido)

Más que exhortación, debe ser un agradecimiento por lo bueno que el a sido con nosotros.

Alabele porque él es Dios y lo merece.

La alabanza hace huir al espíritu inmundo.

1 Samuel 16. 14-17 y 23.

¿Recordamos la historia de Saúl?

Su única ayuda cuando el espíritu lo atormentaba era que David tocara para el.

Y es que la alabanza nos libera de malos pensamientos o sentimientos no agradables a Dios.

La alabanza hace que nuestros enemigos se consuman entre ellos.
2 Crónicas 20. 18

Y luego, el versículo 22 es impactante.  (Lee todo este capítulo.  Es hermoso)

El versículo 18 dice que todos se humillaron ante Dios. Sabían que debían creerle solo a el. Y luego en el 22, sucede lo increíble. Salieron victoriosos de sus enemigos, teniendo como única arma el cantar alabanzas.

En ese momento Josafat reconoció que:

Versículo 6 - Dios es grande y Señor del cielo y tiene domino sobre todos.

La alabanza nos lleva a confiar en el Señor.

También reconoce que todo lo que habían pasado y hasta donde habían llegado, había sido por la mano poderosa de Dios.

La alabanza es una manera muy íntima y personal de expresar tu agradecimiento a Dios y exaltar su poderoso nombre.

Esto es un punto vulnerable que nos hace sensibles ante la presencia de Dios.

Nuestro corazón y mente deben esta concentrados en la alabanza.

Pero ojo, no es solo cantar por cantar. El valor de la alabanza debe estar por encima de nuestras emociones.

Así que no te de pena poner el sonido a todo volumen en tu casa para adorar al Señor.

Hacelo, quien sabe, tal vez uno de tus vecinos se convierta a Cristo.

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Mis hermosas chicas, bendiciones de lo alto.

Si han pasado a entonar cantos especiales en las Iglesias a las que van, ¿Recuerdan cuál fue su primer especial?

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