Huir o enfrentarlo - Genesis 39.21

¿Has leído esta parte de la historia de José, donde la esposa de Potifar lo buscaba cada día?

Ya José había sufrido mucho por haber sido vendido por sus hermanos. ¿Te imaginas cómo sentía?
Solo piensa, ¿cómo te sentirías si tú familia o tu propios hermanos te vendieran o trataran de deshacerse de ti?
Horrible, ¿cierto?

Pues imagínate, era probable que José aún estuviera dolido por lo que habían hecho sus hermanos. Y luego, cuando fue comprado por Potifar, esta mujer llega y quiere metérsele hasta por los ojos, hablando cada día a el para que estuvieran juntos.
Esta mujer ni siquiera sentía un poquito de afecto por el pobre de José, lo de esta mujer era puro deseo carnal. Ella sólo quería acostarse con el y ya.

Pero claro, José era listo, inteligente y lo único que quería era agradarle a Dios, así que siempre decía no a la tentación.

Pero,
¿Te imaginas el tormento que sufría José cada día por esta mujer?
Solo piensa en eso.
Imagínate que alguien te acose o persiga cada día. No tomemos esto a la ligera y pongámonos en la situación de José.
¿Te imaginas que tan agobiado pudo sentirse José por tener a estar mujer detrás de él cada día insinuándose?
¿Te imaginas?
Imagina como fueron los días de José.

No sabemos cuánto tiempo fue, pero ¿te imaginas cada día a estar mujer buscándolo?

¿Sabes qué?

A veces no es necesario hacernos los fuertes ante las tentaciones.

Todo sabio ve el mal y se aparta antes de ser consumido.

José trabajo duro ante esta mujer y todo por agradarle a quien le habla hecho tanto bien. Y por esa misma razón el prefirió huir de ahí.

Imagínate que mujer más insistente que hasta le quitó la ropa. Que tan desesperada estaba. ¡que tan llena de pecado carnal y mundano estaba!

Cuando esta mujer trató de hacerlo pecar y le quitó la ropa, el huyó. No por cobarde o débil, sino por inteligente.
¿Te imaginas si se hubiese quedado?
¿Y si el se hubiera quedado para tratar de explicar las cosas, crees que le hubieran creído viéndolo así?
¿Qué otras cosas hubiera inventado esa mujer aparte de todas las que dijo?

La decisión de José fue la correcta. Y al final vemos que si tuvo respaldo por Dios.

Tu podrás decir: pero la Biblia dice que nos sujetamos a Dios y que el diablo huirá de nosotros.
Si, cierto.
Pero, ¿acaso José no estaba sometido?
Pues claro que si.

Y que el huyera no quería decir que el huía del diablo o que el diablo hubiera ganado.
A veces tenemos que ser suficientemente inteligentes para irnos antes que las cosas se pongan peores.

Cuando su amo lo echó a la cárcel, ¿no crees que el trató de explicar la verdad?
Aparentemente el diablo había ganado, y la mujer de había salido con la suya, por haber sido, ¿que? ¿Rechazada?

¡era una injusticia lo que estaban haciendo con José! Si el no había hecho nada.

Sabes,
A veces habrán injusticias en nuestras vidas, pero igual a como paso en la vida de José, Dios tendrá propósitos buenos detrás de ellas.

Si lees el versículo 21 de Génesis 39 nos damos cuenta como Dios estaba con José. Y de esa misma manera, así Dios estará con nosotros siempre y cuando vivamos sometidos a él.

Solo debemos hacer lo que hizo José; guardarnos íntegramente para Dios.

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