POV Nicolás.

Nos encontrábamos en mi habitación, yo estaba recostado en la cama, al igual que Charlie, por otro lado, Pablo se encontraba en la silla de mi escritorio, observando mi computadora, debo admitir que estoy demasiado nervioso, siempre me pongo así cuando alguien ajeno a mi utiliza mis cosas, no sé qué fue la última mierda que busqué o que es lo que tengo escrito.

—¡Nicolás! —gritó Pablo asustado. —¿Qué mierda es esto?

Me sobresalté inmediatamente sin importarme el dolor que sentiría al apoyar mi brazo herido en la cama para impulsarme. Me puse de pie y mi corazón ya latía muy rápido.

—¿Qué encontraste? —preguntó Charlie aun recostado. —¿Nudes?

—¡No! —Pablo gritó y entonces supe que las cosas aquí iban a ponerse muy mal. —Es él, él asesino a tu hermana.

Cuando llegué hasta Pablo, él ya había hablado y yo no supe que hacer más que lanzar un golpe en dirección a su cara, pero lo esquivo.

—No es verdad, ¿Qué dices? —pregunté asustado.

—¡No mientas! Sé que mataste a Susana y a Rubén, sé de todas tus víctimas, por Dios, Kenia era tu amiga, imbécil.

Negué con la cabeza, miré a mi computadora y ahí estaban mi notas, donde relata lo que había hecho, como lo había hecho y que había sentido mientras lo hacía.

Metí mi mano en mi bolsillo y ahí estaba mi navaja, no tuve más remedio que sacarla y usarla para defenderme, por ningún motivo iré a prisión.

—Por Dios, ¿Me vas a matar también?

—Lo siento —dije y apuñalé a Pablo en el cuello, tal como lo había hecho con Ariana, su sangre salió disparada en mi dirección y pude saborear ese peculiar sabor metálico. —Pero no iré a la cárcel.

***

Abrí los ojos sin saber dónde me encontraba, puta madre, todo había sido una maldita pesadilla, Pablo si se encontraba sentado en mi escritorio, pero estaba viendo una serie, Charlie también se encontraba aquí, pero al igual que yo, estaba despertándose.

—¿Estás bien? —preguntó sonriéndome.

Yo negué con la cabeza rápidamente, su mirada ahora expresaba confusión y preocupación, no puedo creer que haya soñado eso, ¿en serio es algo que tendría que hacer? Supongo que sí, porque por más que quiera a Pablo, por más que casi sea un hermano para mí, no podría con la idea de que podría denunciarme y yo terminaría en la cárcel.

Es mi mejor amigo, pero dudo que quisiera solapar a un maldito asesino, estoy seguro que no lo haría, y mucho menos Charlie, sabiendo que maté a su hermana.

—Hey, ¿Estás bien?

—Me duele el brazo —fue lo único que dije, Pablo nos volteó a ver y comenzó a reírse.

—¿Interrumpí un beso? —él se quitó sus audífonos y ambos negamos inmediatamente. —Por favor, no me digan que fracasé con mi ship, yo creí que ya se querían y por eso tendrían una cita.

La puerta de mi habitación se abrió antes de que Charlie o yo pudiera responder algo, era mi hermana, ella me miro con una sonrisa.

—¿Adivina quién vino a verte? —preguntó ella.

—Es Danna —dijo Pablo levantándose de la silla y caminando hasta la cama.

Mi hermana negó y pude verlo asomándose un poco, oh por Dios, creí que ya no lo vería jamás, ya que ni familiares somos.

—¿Fernando? —preguntó Charlie confundido.

Fer saltó enfrente de mi hermana como si quisiese hacer una entrada triunfal, pero fallando en el intento.

—Soy yo, ¿Me extrañaron?

—¿Por qué volviste? —fue lo primero que se me ocurrió preguntar, pues si mal no recuerdo apenas fue ayer o anteayer que se fue porque no quería morir.

—Fue mi abuela, ella me obligó a venir a verte, acuérdate que nuestras abues son amigas y van a su club nudista, ella supo lo que paso contigo y aquí estoy, por favor, no te emociones tanto.

Me reí poniéndome de pie, caminé hasta él, y sin saber cómo reaccionar él abrió los brazos y entonces lo supe, me acerque y nos abrazamos, se sintió como un cálido abrazo de hermanos debo admitirlo.

—No quiero que te pase algo por venir a verme —dije algo preocupado.

—Descuida, no voy en tu clase, así que estoy a salvo, por cierto, hice un poco de investigación, yo sé que nadie me lo pidió, pero tenía que hacerlo, comencé a sospechar de Juan, ese chico que estaba en el hospital acompañando a tu novio.

—No somos novios —dijo Charlie un poco apenado.

—Como sea, verán, de regreso a casa estaba escuchando la radio, si, bastante raro en la actualidad, pero ahí estaban hablando de la película scream, ¿La han visto? —todos asentimos y Fer prosiguió a hablar. —En esa película, en la primera el asesino es herido falsamente para desviar las sospechas de él, Juan es el asesino, ahora vayan y confróntenlo, solo no olviden llevar chaleco antibalas que escuché que ahora usan armas de fuego.

No lo sé, creo que ahora apoyo más a Pablo pensando que el asesino es Hugo, porque la teoría de Fer aunque tiene buenos fundamentos, no tenemos ni una razón para sospechar de él, además fue atacado, y su herida no se veía falsa, era real.

—No lo creo —dije pensativo.

—La única forma de saberlo es tenderle una trampa, una vez que muerda el anzuelo lo descubrimos.

—¿Qué insinúas, Fernando?

—Que usemos a Pablo de carnada, que salga a caminar al bosque y que nosotros le sigamos el paso de cerca, solo para ver que podría pasar.

Pablo negó rápidamente, y mi hermana asintió.

—No pueden hacer que Pablo sea carnada —dijo ella.

—Exacto, no quiero ser carnada.

—Yo seré la carnada, soy de los más interesados en saber quién es el asesino, así que yo lo haré, solo prométanme que pase lo que pase, ese idiota irá a prisión.