Super Buu flotaba en el cielo, el viento jugueteando con su capa mientras la luz del sol resaltaba su nueva apariencia tras haber ayudado a Vegeta a alcanzar el Super Saiyan 3. Mientras disfrutaba de la brisa fresca, la voz ilusoria de Ramiro, la manifestación de su subconsciente, resonó en su mente.

Ramiro Ilusorio: ¿Te sientes mejor después de ayudar a Vegeta a alcanzar el Super Saiyan 3?

Super Buu contempló la pregunta por un momento antes de responder.

Super Buu: Sí, de alguna manera me siento mejor. Es extraño, pero ayudar a alguien a desbloquear su potencial me ha dado una sensación de satisfacción.

Ramiro Ilusorio: (sonríe) La redención y el cambio son parte de la naturaleza humana. Aunque no eres exactamente humano, tus acciones pueden tener un impacto significativo.

Super Buu reflexionó sobre esas palabras mientras continuaba flotando en el aire. Había experimentado una transformación, no solo en términos de poder, sino también en su percepción de sí mismo y de los demás.

Super Buu: No estoy seguro de cómo manejar todas estas emociones. Pero, al menos por ahora, me siento... diferente.

Ramiro Ilusorio: (serio) La diferencia y el cambio son inevitables. Lo importante es cómo eliges utilizar ese cambio.

Super Buu asintió, procesando las palabras sabias de su ilusión. Aunque su naturaleza era la de un ser poderoso y temible, algo dentro de él parecía haberse transformado. Se estaba dando cuenta de que, a pesar de su pasado oscuro, tenía la capacidad de influir en el curso de las cosas de una manera positiva.

Super Buu: (para sí mismo) Tal vez haya más en la vida que solo destrucción y caos. Quizás pueda encontrar un propósito diferente para mi existencia.

El ilusorio Ramiro observó silenciosamente a Super Buu mientras este continuaba flotando en el cielo, contemplando su futuro incierto pero sintiendo la chispa de un cambio dentro de sí mismo. La historia de Super Buu, aunque marcada por la oscuridad, parecía estar tomando un rumbo inesperado hacia la luz.

 renaceruis, con su presencia imponente y serena, apareció frente a Super Buu, quien estaba sumido en sus pensamientos. Saludó a Buu con una leve inclinación de cabeza y notó de inmediato que algo preocupaba al poderoso ser.

Renaceruis: Pareces estar muy distraído en tus pensamientos, Buu. ¿Sucede algo que quieras compartir?

Super Buu, sin dudar, expresó sus inquietudes.

Super Buu: Me siento cada día menos humano, menos como yo solía ser... incluso menos como un Ramiro. No estoy seguro de cómo lidiar con todo esto.

Renaceruis, con comprensión en sus ojos, se acercó a Buu.

Renaceruis: La experiencia de morir y renacer puede ser abrumadora. Muchos, después de pasar por algo así, encuentran dificultades para recordar quiénes eran. Algunos lo recuerdan, pero se sienten desconectados. Sin embargo, quiero que sepas que siempre serás Ramiro en tu esencia, sin importar cuánto cambies.

Super Buu asintió, agradecido por las palabras reconfortantes del Renaceruis. Pero entonces, el dios le propuso algo más.

Renaceruis: Entiendo que este proceso puede ser desafiante. Pero, ¿qué te parecería conocer a alguien más que ha pasado por situaciones similares? Alguien que podría entender lo que estás experimentando.

Super Buu, intrigado por la idea, no mostró resistencia.

Super Buu: ¿Un posible amigo?

Renaceruis: Exacto. Creo que podría ser beneficioso para ambos. Te presentaré a este amigo en el momento adecuado.

Super Buu aceptó la propuesta del Renaceruis, sintiéndose un poco más esperanzado ante la idea de tener a alguien con quien compartir sus experiencias únicas. El Renaceruis sonrió, reconociendo el cambio sutil en la perspectiva de Buu.

Renaceruis: Recuerda, Buu, el cambio es inevitable, pero lo que haces con ese cambio es lo que realmente importa.

Antes de despedirse, el Renaceruis señaló algo urgente.

Renaceruis: Por cierto, Buu, mientras estábamos hablando, ha surgido un problema en el Infierno. Alguien ha aparecido y está causando estragos. Deberías ir y ocuparte de ello.

Super Buu, recordando a Janemba, pensó en la posibilidad de que fuera él. Agradeció al Renaceruis y, usando la técnica de teletransportación que aprendió de Nishi y Shin, se despidió.

Super Buu: Estaré ansioso por conocer a ese amigo y también resolver este problema en el Infierno.

Con esas palabras, Super Buu se teletransportó al Infierno, dejando al Renaceruis con la certeza de que Buu estaba dispuesto a enfrentar cualquier desafío que se presentara.

Super Buu emergió en el Infierno, listo para enfrentar al caos que se avecinaba. Antes de que pudiera tomar una postura defensiva, fue recibido por un ataque sorpresa. Janemba, la entidad caótica, apareció gruñendo y sonriendo con malicia, sin emitir una sola palabra.

Janemba, sin previo aviso, lanzó un ataque directo hacia Buu, pero este último, con una agilidad sorprendente, esquivó el golpe y contraatacó con brutalidad. Un puñetazo certero impactó en el costado de Janemba, quien retrocedió momentáneamente antes de volver a cargar contra Buu.

La batalla en el Infierno se desató con furia. Buu y Janemba intercambiaron golpes, moviéndose con una velocidad y destreza sobrenaturales. La esencia caótica de Janemba chocaba con la maleabilidad y la astucia de Super Buu, creando un enfrentamiento visualmente espectacular.

Janemba, aunque no pronunciaba palabra alguna, mostraba una expresión de disfrute con cada ataque. Buu, por su parte, estaba concentrado y decidido a poner fin a la amenaza que representaba Janemba en el Infierno.

El choque de poderes y técnicas era impresionante. Janemba desataba ondas de energía distorsionada, mientras que Buu utilizaba su elasticidad y habilidades aprendidas de Cell para contrarrestar los ataques. La lucha llevaba consigo la intensidad única del Infierno, un lugar donde las reglas de la realidad eran aún más flexibles.

Entre cada intercambio de golpes, Buu intentaba comunicarse con Janemba, preguntándole sobre sus intenciones o si había alguna razón específica detrás de su aparición en el Infierno. Sin embargo, Janemba seguía en silencio, concentrado únicamente en el caos y la destrucción.

La batalla continuó, llevándolos a paisajes distorsionados y escenarios surrealistas del Infierno. En un momento, Janemba desató una ráfaga de energía pura, pero Buu, canalizando sus nuevas habilidades, logró absorber parte de esa energía, aumentando su propia fuerza en el proceso.

La confrontación entre Buu y Janemba alcanzó su punto álgido cuando ambos, con todo su poder, lanzaron simultáneamente ataques devastadores. La energía chocó, creando una explosión que resonó por todo el Infierno.

Cuando la humareda se disipó, Buu se mantenía de pie, visiblemente agotado pero triunfante. Janemba, por otro lado, se desvanecía, su forma distorsionada deshaciéndose en fragmentos de caos.

Super Buu, aún en su nueva forma adquirida después de absorber a Cell, observó con cautela. La amenaza de Janemba había sido neutralizada, pero las palabras del Renaceruis resonaron en su mente, recordándole que siempre habría desafíos por enfrentar.

Buu se quedó en el Infierno por un momento, reflexionando sobre la batalla y las palabras del dios. Luego, usando la teletransportación, regresó al Templo de Kami, listo para continuar su camino y esperando, con cierta anticipación, el encuentro con el misterioso amigo que el Renaceruis le había prometido.

La lucha entre Super Buu y Janemba continuó, ambos contendientes mostrando sus técnicas más poderosas y habilidades únicas. El Infierno se convirtió en el escenario de un enfrentamiento épico, donde las energías caóticas y los poderes sobrenaturales se entrelazaban en una danza caótica.

Janemba, a pesar de su aparente falta de comunicación verbal, demostró ser un adversario formidable. Su capacidad para distorsionar la realidad y desencadenar ondas de energía caótica mantenía a Buu alerta. Por otro lado, Super Buu aprovechó sus nuevas habilidades adquiridas tras absorber a Cell, incorporando técnicas y estrategias mejoradas a su repertorio.

Los dos combatientes se movían con una velocidad impresionante, esquivando y contraatacando con destreza. Buu extendía su masa corporal de manera elástica para evadir los ataques de Janemba, mientras que este último respondía con embestidas de energía distorsionada que desafiaban la realidad misma.

En un momento de la batalla, Janemba desató una serie de portales dimensionales, tratando de atrapar a Buu en una realidad alterna. Sin embargo, Buu, con su aguda inteligencia y experiencia, logró usar estos portales a su favor, apareciendo y desapareciendo estratégicamente para contrarrestar los ataques de Janemba.

La confrontación llevó a ambos luchadores a niveles sobrenaturales, donde las leyes de la física parecían no aplicarse. Los colores destellantes y las explosiones de energía iluminaban el paisaje infernal mientras Buu y Janemba continuaban su encarnizada batalla.

Super Buu, a pesar de enfrentarse a un enemigo tan caótico como Janemba, mantenía una calma aparente. Sus tácticas mejoradas, aprendidas de la fusión con Cell, le permitían no solo defenderse sino también contraatacar de manera más efectiva. Janemba, aunque mostraba una expresión de pura malevolencia, no lograba romper la concentración de Buu.

La batalla llegó a un punto crítico cuando ambos, simultáneamente, liberaron ráfagas de energía descomunal. El Infierno tembló ante la magnitud de sus poderes chocando. La explosión resultante creó una onda expansiva que sacudió todo el reino infernal.

Cuando la humareda se disipó, Buu y Janemba permanecieron en posición de combate, mirándose fijamente. Ambos estaban exhaustos, pero ninguna de las dos partes estaba dispuesta a ceder terreno. La confrontación continuaba, y el Infierno resonaba con la furia de dos entidades que buscaban afirmar su supremacía.

En medio del caos y la destrucción, Super Buu y Janemba se prepararon para la siguiente ronda de su encarnizado enfrentamiento, sin dar señales de debilidad y decididos a demostrar quién era el verdadero soberano del Infierno.

Janemba, con una astucia demoníaca, materializó un pequeño mazo y, utilizando sus habilidades de distorsión dimensional, transformó la herramienta en una espada afilada conocida como la Espada Dimensional. Buu, perceptivo ante el peligro, reconoció la amenaza que representaba esa arma y procedió con cautela.

La Espada Dimensional emitía una extraña energía oscura, y cada movimiento de Janemba parecía sincronizarse con la naturaleza caótica de su espada. Buu, consciente de la potencia devastadora de tal arma, se mantuvo alerta y adoptó una postura defensiva mientras evaluaba la mejor manera de contrarrestar.

Janemba, con su espada en mano, se abalanzó hacia Buu con velocidad sobrenatural. Cada tajo del arma generaba distorsiones en el espacio a su alrededor, complicando la predicción de los movimientos para el astuto Buu. Con movimientos elásticos y evasivos, Buu lograba esquivar la mayoría de los ataques, pero la Espada Dimensional demostró ser una amenaza seria.

Buu, aprovechando su capacidad de estirar y contraer su masa corporal, intentó atrapar la espada de Janemba en su propia masa para neutralizar el peligro. Sin embargo, la Espada Dimensional atravesó la sustancia de Buu como si no estuviera allí, mostrando la naturaleza dimensional de la amenaza.

La batalla se intensificó mientras Janemba combinaba sus rápidos movimientos con cortes precisos de su espada. Buu, adaptándose rápidamente a las tácticas de su oponente, usaba su flexibilidad y regeneración para minimizar los daños causados por la Espada Dimensional. A pesar de sus esfuerzos, Buu no podía subestimar la habilidad de Janemba para manipular la realidad misma.

En un momento de oportunidad, Buu logró atrapar la Espada Dimensional con su masa corporal, neutralizando temporalmente el peligro. Sin embargo, Janemba, en un acto sorprendente, desapareció y reapareció detrás de Buu, recuperando su espada y lanzando un ataque sorpresa.

La Espada Dimensional cortó a través de la masa de Buu, causando un daño considerable. A pesar de su regeneración rápida, Buu comprendió que no podía subestimar la amenaza de Janemba y su espada. La batalla se volvía cada vez más desafiante, y Buu necesitaba encontrar una estrategia para superar la destreza de su formidable oponente.

espero que les haya gustado 

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meme creado por mi invitado especial LuimonGrx y Luimon13

contexto desde que subi el la primera historia que se conoce de mi cuenta osea super buu no tenia muchos comentarios como tal y eso medio cambio tanto gracias a la hsitoria de metal sonic y con la de vegeta y veo entre los comentarios un luimnoxgr pidiendo que yo siguera con la histoia y creanme eso me subio mucho las ganas de escribir asi que te digo muchas gracias LuimonGrx por eso y por todos estos 3 años como conocidos de internet

ahora si hasta la proxima gente