Narra Matteo

Yo : « Hola chicas, me gustaría hablar con la chica delivery a solas por favor. »

Yam : « ¿La chica delivery? »

Luna : « Soy yo, es una larga historia, es por nuestro encuentro. »

Jim : « ¡Ay son tan lindos! »

Lo que dijo Jim me hizo sonrojar.

Nina : « Vamos chicas, dejémosles solos. »

Jim, Yam y Nina se fueron.

Yo : « ¿Son nuevas amigas tuyas? »

Luna : « Si, vinieron a felicitarme y nos conocimos así. »

Yo : « Me alegra por ti. »

Tenía que hablar con ella.

Yo y Luna : « Por cierto, quería hablarte. »

Nos reíamos. Estaba tan conectado con esa chica.

Luna : « Dime tú primero, te escucho. »

Yo : « Es a propósito de lo que pasó en la pista hace rato. »

Luna : « Quería hablarte de la misma cosa. »

Yo : « Jaja veo que estamos muy bien conectados. »

Luna : « Bueno, sabiendo lo que pasó, es difícil hablar de otra cosa... »

Yo : « Tienes razón. Luna, quería decirte que... »

Me interrumpió.

Luna : « ¡No! Primero tengo que contestarte. »

Yo : « ¿Contestarme? Pero si no dije nada... »

Luna : « Claro que sí, en la pista cuando hablaste por el micrófono, cortaste con Ambar y dijiste que me querías. ¿Lo recuerdas? »

¡Dios mío, ya le había dicho en la pista y lo recordaba!

Yo : « Claro que lo recuerdo pero no tal vez no sientes lo mismo... »

Luna : « Siento lo mismo que tú, yo también te quiero Matteo. Sé que es raro porque nos conocemos sólo por dos días pero parece que te conozco desde siempre. »

Yo : « ¡Siento exactamente lo mismo que tú! »

Estaba en un sueño hecho realidad, la chica delivery me quería y tenía los mismos sentimientos que yo.

Yo : « Parece que te conozco de verdad desde que me fije en tus hermosos ojos verdes. »

Luna : « Lo mismo para mí con tus ojos avellanas. »

Me miraba con admiración, sus ojos decían Te quiero sin que su boca tuviera que hacerlo.

Luna : « Ya que ambos nos queremos y que compartimos los mismos sentimientos... eso quiere decir que... »

La interrumpí besándola porque moría por darle un beso. Quería sentir las mismas mariposas que sentía hace rato. Nos separábamos algunos minutos después y terminé su frase.

Yo : « ¡Eso quiere decir que eres mi novia chica delivery! Así que, ¿aceptas ir a una cita improvisada ahorita? »

Una enorme sonrisa se aferró a su rostro. Una sonrisa que me encogía el corazón.

Luna : « Con mucho gusto, ¡acepto! »

¡La amaba!

Narra Luna

Matteo : « Hola chicas, me gustaría hablar con la chica delivery a solas por favor. »

Yam : « ¿La chica delivery? »

Yo : « Soy yo, es una larga historia, es por nuestro encuentro. »

Jim : « ¡Ay son tan lindos! »

Estaba roja como un tomate.

Nina : « Vamos chicas, dejémosles solos. »

Jim, Yam y Nina se fueron.

Matteo : « ¿Son nuevas amigas tuyas? »

Yo : « Si, vinieron a felicitarme y nos conocimos así. »

Matteo : « Me alegra por ti. »

Tenía que hablarle de lo que pasó en la pista.

Yo y Matteo : « Por cierto, quería hablarte. »

Nos reíamos, ambos estábamos conectados.

Yo : « Dime tú primero, te escucho. »

Matteo : « Es a propósito de lo que pasó en la pista hace rato. »

¡Era mi día de suerte!

Yo : « Quería hablarte de la misma cosa. »

Matteo : « Jaja veo que estamos muy bien conectados. »

Yo : « Bueno, sabiendo lo que pasó, es difícil hablar de otra cosa... »

Matteo : « Tienes razón. Luna, quería decirte que... »

Yo : « ¡No! Primero tengo que contestarte. »

Matteo : « ¿Contestarme? Pero si no dije nada... »

¿Lo había olvidado? Quizás porque no lo pensaba realmente... Sin embargo, parecía sincero así que no renuncié y seguí hablando.

Yo : « Claro que sí, en la pista cuando hablaste por el micrófono, cortaste con Ambar y dijiste que me querías. ¿Lo recuerdas? »

Matteo : « Claro que lo recuerdo pero no tal vez no sientes lo mismo... »

Yo : « Siento lo mismo que tú, yo también te quiero Matteo. Sé que es raro porque nos conocemos sólo por dos días pero parece que te conozco desde siempre. »

Matteo : « ¡Siento exactamente lo mismo que tú! Parece que te conozco de verdad desde que me fije en tus hermosos ojos verdes. »

Me quería también y sentía lo mismo que yo. También parecía que lo conociera de todo, como si estábamos conectados.

Yo : « Lo mismo para mí con tus ojos avellanas. »

Luego, lo miré a los ojos con admiración antes de hablar de nuevo.

Yo : « Ya que ambos nos queremos y que compartimos los mismos sentimientos... eso quiere decir que... »

Me interrumpió besándome, ¡maravilloso! Quería quedarme en sus brazos y amarlo siempre.

Matteo : « ¡Eso quiere decir que eres mi novia chica delivery! Así que, ¿aceptas ir a una cita improvisada ahorita? »

Me miró con sus hermosos ojos tan llenos de felicidad.

Yo : « Con mucho gusto, ¡acepto! »

¡Lo amaba!

Me llevó de nuevo a la playa, nos sentamos en la arena para conocernos más. Nos enteramos que ambos escribiéramos canciones. Me enseño su canción Nada Ni Nadie y le enseñé la mía Música En Ti. Luego, fuimos a bañarnos y nos molestábamos como niños para divertirnos. Memorias me vinieron a la mente, algo de mi pasado. Veía a una niña jugando en esta misma playa con un niño. Era como si estuviera viviendo el mismo momento. Después de haberme enterrado en la arena, Matteo me llevó al agua para ver el atardecer. Lo miré pero noté que Matteo estaba un poco triste.

Yo : « ¿Qué pasó? ¿Te sientes bien? »

Matteo : « Si estoy bien, ¿porqué me preguntes eso? »

Yo : « Lo veo en tus ojos, dime que te pasa. »

Matteo : Está bien. Miraba al sol así porque me hace pensar a Sol. »

Yo : « No entiendo. ¿Quién es Sol? »

Matteo : « Una chica que murió en un incendio con sus padres. Tenía tres años. Nos divertíamos mucho en esta playa y la extraño. »

Yo : « Así que eso es la razón por la cual hay un dolor en tus ojos. »

Matteo : « ¿Ves ese dolor? »

Yo : « Claro que la veo, puedo ver lo que sientes sólo mirándote en los ojos. »

Matteo : « Haces lo mismo que Sol. Sabes leer mi mente como lo hacía Sol. »

Yo : « Espero que no te moleste. No sé como lo hago. »

Matteo : « No me molesta para nada. La conexión que tenemos es mágica pero ¿no eres celosa de Sol? ¿Ni un poquito? »

Yo : « Raramente no, me hace mal verte sufrir y quiero aliviar ese dolor. ¿Qué puedo hacer? »

Matteo : « No podemos hacer nada pero me enteré que su cuerpo nunca fue encontrado en el incendio entonces, tal vez, aún está viva. »

Yo : « Quizás si. Puedo ayudarte a encontarla. »

Matteo : « ¿Harías eso para mí? »

Yo : « ¡Obvio que sí! Lo haremos juntos. »

Matteo : « Gracias, eres divina. »

Debería haber sido celosa de esa Sol pero raramente no lo era. Me hacía mal verlo sufrir y lo único que quería era su felicidad.

Matteo : « Y tú también sufriste Luna, ¿verdad? También lo veo en tus ojos, algo que te asusta. »

Yo : « No es fácil de explicar porque no recuerdo nada... Pero es por mi pasado... »

Matteo : « Si no quieres hablar de eso, está todo bien. »

Tenía que contarle, confió en mí y ahora me tocaba a mí.

Yo : « Soy... soy adoptada, no conozco a mis padres biológicos y no recuerdo nada de nada de mi vida antes. Pero desde que llegué aquí, tengo un montón de recuerdos raros que vienen a mi mente. »

Matteo : « No debe ser facil, lo siento, sufriste muchísimo. Es frustrante no recordar nada. »

Yo : « Es por eso que no me gusta hablar de eso. »

Matteo : « Lo entiendo. ¿Pensaste a investigar sobre tu pasado? »

Yo : « Tal vez un día pero no quiero lastimar a mis padres adoptivos, los amo mucho. »

Matteo : « No te preocupes, te puedo ayudar también. »

Yo : « Gracias, te quiero. »

Matteo : « Yo también te quiero. »

Miramos el final del atardecer y volvimos a casa.

Narra Matteo

Para la cita, la había traído de nuevo a mi lugar favorito. Nos sentamos en la playa. Le enseñé mi canción Nada Ni Nadie y me enseñó su canción Música En Ti. Luna es muy buena. Luego nos bañamos y jugamos como niños en la arena. Me recordaba los momentos que vivía con Sol. Enterré Luna en la arena para divertirme y la llevé de nuevo en el agua cuando vi el atardecer. Pensaba en ella, tenía que hacerlo, pobre, quizás estaba en algún lugar, sola, sin sus padres.

Luna : « ¿Qué pasó? ¿Te sientes bien? »

Yo : « Si estoy bien, ¿porqué me preguntes eso? »

Luna : « Lo veo en tus ojos, dime que te pasa. »

No sabía si debía contarle pero mi corazón me decía que le dijera.

Yo : Está bien. Miraba al sol así porque me hace pensar a Sol. »

Luna : « No entiendo. ¿Quién es Sol? »

Iba a contarle un poco pero no iba a decirle que la amaba porque podría ponerse celosa.

Yo : « Una chica que murió en un incendio con sus padres. Tenía tres años. Nos divertíamos mucho en esta playa y la extraño. »

¡Ups! Había hablado de más y ahora seguro estará celosa.

Luna : « Así que eso es la razón por la cual hay un dolor en tus ojos. »

Yo : « ¿Ves ese dolor? »

Luna : « Claro que la veo, puedo ver lo que sientes sólo mirándote en los ojos. »

No era celosa y encima hacía lo mismo que Sol.

Yo : « Haces lo mismo que Sol. Sabes leer mi mente como lo hacía Sol. »

Luna : « Espero que no te moleste. No sé como lo hago. »

Yo : « No me molesta para nada. La conexión que tenemos es mágica pero ¿no eres celosa de Sol? ¿Ni un poquito? »

Luna : « Raramente no, me hace mal verte sufrir y quiero aliviar ese dolor. ¿Qué puedo hacer? »

Wow, no era celosa para nada y lo único que quería era hacerme feliz, incluso estaba lista para ayudarme.

Yo : « No podemos hacer nada pero me enteré que su cuerpo nunca fue encontrado en el incendio entonces, tal vez, aún está viva. »

Luna : « Quizás si. Puedo ayudarte a encontrarla. »

Yo : « ¿Harías eso para mí? »

Luna : « ¡Obvio que sí! Lo haremos juntos. »

Yo : « Gracias, eres divina. »

Ella era maravillosa, sólo quería hacerme feliz y eso era una prueba de amor. Amaba a Luna y quería saber lo que le hacía sufrir tanto también.

Yo : « Y tú también sufriste Luna, ¿verdad? También lo veo en tus ojos, algo que te asusta. »

Luna : « No es fácil de explicar porque no recuerdo nada... Pero es por mi pasado... »

Lo decía temblando, no quería forzarla.

Yo : « Si no quieres hablar de eso, está todo bien. »

Luna : « Soy... soy adoptada, no conozco a mis padres biológicos y no recuerdo nada de nada de mi vida antes. Pero desde que llegué aquí, tengo un montón de recuerdos raros que vienen a mi mente. »

Ay no pobrecita, ella era tan divina y vivió una desgracia.

Yo : « No debe ser fácil, lo siento, sufriste muchísimo. Es frustrante no recordar nada. »

Luna : « Es por eso que no me gusta hablar de eso. »

Me hizo mal verla sufrir, quería ayudarle.

Yo : « Lo entiendo. ¿Pensaste a investigar sobre tu pasado? »

Luna : « Tal vez un día pero no quiero lastimar a mis padres adoptivos, los amo mucho. »

Yo : « No te preocupes, te puedo ayudar también. »

Luna : « Gracias, te quiero. »

Yo : « Yo también te quiero. »

Cuando el sol se fue, volvimos a casa.

La pareja Lutteo
¿Qué pasará después?
Espero que les gustó.
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